LAS RUINAS DE NUMANCIA
María Isabel Molina
Capítulo I: SE PRESENTA UN SOLDADO
Se presenta Julio Cayo Julio Emiliano. Tiene casi 23 años y ya es centurión del ejército del Imperio Romano. Nos cuenta que es hijo de un doctor del ejército romano y que su mamá es de Grecia. Él es el hermano mayor y nació en Roma, su hermano en Bretaña y su hermana menor en Cártago. Cuando eran niños siempre les tocaba vivir como familia en distintas partes del Imperio Romano por la profesión de su padre.
Su padrino es Emiliano Escipión, gran General romano que conquistó Cártago para el Imperio Romano y él le dijo a su papá que Julio Cayo Julio Emiliano iba a ser soldado. Le decían de sobre nombre Emiliano por su padrino.
El papá de Julio Cayo Julio …ver más…

Era un momento muy importante, había comenzado el sitio de Numancia por los romanos e iba a durar 9 meses.
Capítulo VI: RETÓGENES
Los habitantes de Numancia seguían rodeados por el ejército romano al mando del General Escipión Emiliano quien además mandó a construir una muralla de cemento con torres para rodear y vigilar a Numancia y todos sus habitantes. El doctor papá de Julio era el mejor médico del ejército romano porque era muy trabajador y limpio.
De pronto, en un día que hacía mucho calor, los soldados romanos vieron como se escapaban de Numancia en una balsa por el río 2 hombres. Uno de ellos era nada menos que Retógenes, el jefe de los numantinos quien iría a otros pueblos de Hispania para conseguir ayuda y ganarle a los romanos.
Cuando el General Escipión Emiliano supo esta noticia, llamó a Julio Emiliano y a su padre y les pidió una misión: que Julio Emiliano como era joven fuera de espía tras los pasos de Retógenes para averiguar si éste conseguía o no ayuda de los otros pueblos para atacar a los romanos.
El papá de Julio no lo quería dejar ir a Julio Emiliano a esta misión porque era muy peligrosa, pero el General le dijo que había que hacerlo por Roma.
Capítulo VII: TRAS LAS HUELLAS DE RETÓGENES.
Muy temprano en la mañana salió Julio Emiliano disfrazado de un pobre hispano para que nadie lo reconociera que era romano y comenzó a seguir a Retógenes hasta que lo encontró.
Julio Emiliano comenzó a admirar a