Pepa La Loba- Carlos G. Reigosa
3374 palabras
14 páginas
▪ EstructuraEsta novela empieza con una opinión y agradecimiento, el autor divide la historia en 12 capítulos con números naturales, separando cada uno con una hoja empezando en la otra con el numero y el nombre del capítulo, después separa de la misma forma una parte que se llama “seis años después” empezando la narración en la página siguiente, de ahí dejando un espacio como de un cuarto de la hoja siguiente para empezar con el “Epίlogo-Posdata” terminando con la narración. Ordenado de la siguiente manera:
Agradecimientos y algo más 1. El juicio 2. La prisión 3. El recuerdo 4. La huida 5. El hidalgo de Baltar 6. El párroco de Transmonte 7. El pazo de don Gaudencio 8. En el mesón de Cumial …ver más…
Un día llego un hombre alto y robusto ahí fue la primera sospecha de quien era su padre y mientras ella estaba en la paja con su perro estaba su mamá con el adentro de la casa y al tiempo después miro que aquel hombre iba saliendo de la casa abrochándose el pantalón y quitando a la niña de su paso como si fuera cualquier cosa, al entrar a la casa miro a su mamá en el piso llorando y la niña corrió a abrazarla. Nueve meses después su mamá muere en el parto y Pepa queda al cuidado de su tía, una mujer que no quería a nadie y era ruin e interesada que la puso a trabajar cuidando sus ovejas, y como siempre su tía fue aprovechada cuando miro que se le empezaban a enanchar las caderas y a crecer el busto quería sacarle provecho para que se hiciera amante de el dueño de una tienda en donde la había metido a trabajar y entonces fue cuando decidió escaparse. Consiguió trabajo en la casa-tienda de Tomás Maraño el hermano de Aurelio Maraño que con el paso del tiempo cuando ella tenía 17 años le propuso matrimonio para dejarle a alguien todo lo que tenía, le dijo que no se preocupara que las cosas seguirían igual como lo han estado siempre y ella acepto, su matrimonio fue por la mayoría de la gente chismosa mal visto por la diferencia de edades tan enorme entre ellos y fue entonces cuando Tomás le