No juzgues un libro por su portada
Muchas personas nos guiamos por los prejuicios o apariencias en cuanto al trato con otros. Que si parece cholo, que si se ve muy fresa, que parece que no rompe ni un plato, que parece malandro…
A mí me pasa muy seguido, yo juzgo y también soy juzgada. Me he topado con personas de las que pienso cosas como “esa chica se ve muy presumida, no me agrada”, pero por asares del destino termina siendo mi amiga. Y no, no hablo de Yadira, hablo de una ex compañera de la preparatoria.
También me ha pasado lo contrario, en el primer tetramestre de esta carrera, aquél día en el que todos nos presentamos, vi a una chica (de la cual no diré el nombre, pero sépase que ya no está en este grupo) que me pareció buena …ver más…
A veces me esmero por mantener esa imagen, pero no siempre lo logro. Recuerdo que una vez, en la preparatoria, me encontraba con mi grupito de amigos de ese entonces. La mayoría eran hombres, entonces uno de ellos le dijo una broma con doble sentido a otro, pero yo (habiendo entendido el chiste) hice un comentario al respecto. Gara, así le llamábamos al chico que hizo la broma, soltó una exclamación diciendo “¡Whuoooo! ¡Alicia entendió el chiste!” y todos los demás siguieron su escándalo. Y no, no exagero.
También puedo ser muy vengativa, a grados un tanto violentos. Recuerdo que cuando estaba en la primaria, un día, un compañero me hizo no sé qué cosa (realmente la olvidé), pero eso me molestó. Entonces a la hora de la salida me aseguré de salir primero y me quedé “platicando” en las escaleras con una amiga (que no sabía nada de lo que yo haría). Cuando vi que el niño venía (muy apurado, por cierto) bajando por las escaleras, casualmente hice mi pie hacia atrás y él tropezó, cayendo por los pocos escalones que quedaban, pero aunque no era mucha altura, él venía rápido y sí se dio un golpe algo fuerte. La culpabilidad apareció de inmediato y fui la primera en correr a ver cómo estaba, la verdad no esperaba que mi pequeño plan malévolo funcionara, pero eso ya es otra historia.
No estoy orgullosa de este tipo de cosas, pero admito que a veces es divertido que las personas no esperen cosas de ti,