Monologo de marie curie
En 1903 me concedieron el Premio Nobel de Física por el descubrimiento de los elementos radiactivos, que compartimos con Becquerel. Sin embargo, esta gloria fue un "desastre"; muy reservados los dos, y devorados por la misma pasión; por la investigación, sufrimos al vernos apartados de ella y al ver nuestro laboratorio asaltado por gente inoportuna, ese modesto pabellón parisino fue invadido por los periodistas y los fotógrafos. Todos escribían y el correo cada vez era más voluminoso, del cual nos ocupábamos los domingos. Me convertí en la primera mujer que recibía este premio. En 1904 mi esposo Pierre fue nombrado profesor de física en la Universidad de París, y en 1905 miembro de la Academia Francesa. Un día muy triste para mí fue cuando Pierre falleció mientras cruzaba la calle Dauphine, atropellado por un carro de caballos el 19 de abril de 1906. A partir de ese momento, me ocupé de sus clases y continué mis propias investigaciones. En 1911 me otorgaron un segundo premio Nobel, el de Química, por sus investigaciones sobre el radio y sus compuestos. Fui nombrada directora del Instituto de Radio de París en 1914 y en mi honor se fundó el Instituto Curie. Sufrí una anemia perniciosa causada por las largas exposiciones a la radiación. Fallecí el 4 de julio de 1934 en la Alta Saboya. Después de mi muerte