Monografia "La Venganza De Nofret"
1166 palabras
5 páginas
INTRODUCCIONA partir de la lectura de la novela “La venganza de Nofret” (1944) de Agatha Christie realizaremos esta monografía. Llevaremos a cabo este trabajo a través de la tesis “La ambición del poder es más fuerte que el amor familiar”, y será abordado desde el punto de vista filosófico utilizando teorías de diferentes autores como Michel Foucault (1926- 1984) y Pierre Bourdieu (1930-2002). En el desarrollo de esta producción será necesario informar acerca de temas como el poder, el amor familiar y la ambición, que se relacionan directamente con nuestra tesis a defender. Desde la filosofía podemos encontrar que el concepto de ambición es el deseo ardiente de cosas que engrandecen ya sea interiores, como el saber, la fuerza de …ver más…
“…Decir que estamos en poder de Nofret! Esa, a pesar de ser vieja, piensa cosas rarísimas. Nosotras somos quienes tenemos a Nofret en nuestro poder…” (Pág. 67, Cap. VIII)
“Vete Henet. Solo una cosa quiero advertirte: que no deseamos más muertes en esta casa…” (Pág. 140, Cap. XVII)
El poder no se adquiere, el poder se ejerce en cualquier situación, o hecho, allí donde se establecen relaciones no igualitarias.
“Así está mejor, ahora ya todo está resuelto. Satipy, Kait y Reinsenb te llevaran a las habitaciones de las mujeres Nofret…” (Pág. 31, Cap. III)
Se construye a partir de relaciones básicas y no, como comúnmente se cree desde “arriba hacia abajo”
“Satipy y Kait están en lo justo. No hay hombres en la familia. Pero yo soy un hombre. Si no en años, lo soy por el corazón. Nofret se burla de mí, me trata como a un niño, mas yo le probare que no lo soy…” (Pág. 71, Cap. IX)
Las relaciones de poder son intencionales: “están atravesadas de parte a parte por un cálculo”; “no hay poder que se ejerza sin una serie de miras y objetivas”.
“Por esa misma razón debiera tomarte como participe en la propiedad de las fincas. Tu representas a tu padre en su ausencia, tu le sustituyes en las funciones sacerdotales, todo queda en tus manos... ¡Y no tienes nada de autoridad reconocida! Debes firmar un contrato con tu padre. Eres ya maduro y no está bien que te consideren un chiquillo…” (Pág. 22, Cap. II)
En tanto que