Láminas De Riego
Asimismo, que el agua no usada fuera destinada a usos alternativos, y que los s de oportunidad del agua, debidamente valorada, compensaran la menor producción.
El interés del regante es reponer el déficit hídrico en el suelo aprovechado por las raíces. La capacidad de retención de agua en este suelo radical permite que los cultivos consuman de una manera continua, en respuesta a la demanda atmosférica, el agua que los riegos aportan con cierta discontinuidad. Debido a que su valor es limitado, también hay que reconsiderar una valor máximo D de la dosis, o aportación por cada riego, en correspondencia con el agua disponible que el suelo puede almacenar. Para un campo de superficie S cuyo suelo se supone uniforme, con profundidad p y límites productivos determinados por sendas fracciones volumétricas θM (capacidad de retención eficaz) y θm (contenido mínimo para controlar el estrés hídrico), ese valor vendría dado por la expresión:
D=S.p . θM . θm
Algunas dificultades para determinar θM y θm están relacionados con los límites a la capacidad de transporte del sistema hidrodinámico de la planta. Lógicamente, si estos valores fueran expresados como porcentaje gravimétricos, habría de hacerse intervenir la densidad aparente Da del suelo. La masa de agua resultante sería:
D=S.p.Da . θM . θm 100
Haciendo referencia a S=1 Ha, y expresado p en (m) y Da en (kg m-3), se obtendría la dosis máxima en (m3 Ha-1). Admitiendo que