Informe gerard imbert: el zoo visual. de la televisión espectacular a la televisión especular
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Tarea Académica 1 (TA1)Informe sobre la lectura de Gerard Imbert: El zoo visual. De la televisión espectacular a la televisión especular
Gerard Imbert es profesor (catedrático) de Comunicación Audiovisual en la Universidad Carlos III de Madrid; autor de varios libros entre ellos Los escenarios de la violencia. Conductas anómicas y orden social en la España actual (1992), El zoo visual. De la televisión espectacular a la televisión especular (2003), La tentación de suicidio. Representaciones de la violencia e imaginarios de muerte en la cultura de la posmodernidad (2004), y su más reciente obra El transformismo televisivo (2008).
Además, Imbert ha participado en la elaboración de artículos en revistas como C & E: Cultura y …ver más…
Esto pone a la realidad en el modo de especular y a la vez de espectacular, creando una hiperrealidad, es decir, exacerbándola.
En lo que concierne al tema de Entretenimiento y Diversión, Imbert argumenta que se ha caído en la “demagogia de la audiencia” (pág. 35) en donde se da al público lo que este demanda, provocando una situación de “enseñar divirtiendo” en el cual los contenidos se banalizan, convirtiendo la realidad en espectáculo. Esto, según el autor crea “un modelo comunicativo en el que importa más la forma (el modo de comunicar) que el fondo (el contenido mismo)” (pág. 39).
A este fenómeno, el autor denomina “Narcisismo del medio” (manera que tiene el medio de escenificarse a sí mismo), hablando cada vez menos del exterior y más de sí misma, dejando de lado, por parte del espectador, la relación cognoscitiva (aprender) para dar paso a una relación emotiva (sentir).
Este tipo de televisión (“Neotelevisión” como lo acuña U. Eco) se caracteriza principalmente por la polivalencia de formas (como lo es con los programas contenedores o talk shows), en donde no hay lugar para lo educativo. En vez de persuadir se trata de fascinar.
Finalmente, esta situación conlleva a una tendencia vouyeurista (de la cual el autor habla en el capítulo 4); ya no existen secretos. El autor incluso arguye que “se puede llegar a una cierta obscenidad” (pág. 108), se produce una “hipertrofia del ver” causada por la demanda del reconocimiento de lo individual. Con esto Imbert