1. IMPORTANCIA DE LOS RECURSOS ENERGETICOS PARA EL DESARROLLO:

El dinamismo de la economía mundial depende estrechamente de la energía, muy especialmente del petróleo. No es casualidad que el mayor período de crecimiento económico y demográfico de la historia de la humanidad haya coincidido precisamente con la consagración del petróleo como la fuente energética por excelencia.

Desde 1970, la población mundial ha crecido un 180 por ciento, la misma tasa a la que lo ha hecho la demanda de petróleo en ese mismo período! En la actualidad, los combustibles fósiles no sólo representan el 85 por ciento de la base energética mundial, sino que el petróleo -por sí solo- explica el 35 por ciento.
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En nuestra región, algunos países venden energía y otros la compran. A gran escala se puede decir que Chile compra energía y Ecuador vende. Paraguay compra pero vende un poco de energía eléctrica. Perú compra petróleo pero vende un poco de gas, Colombia también tiene algo de gas que le vende a Venezuela para pagar una porción del petróleo que le compra. Brasil siempre compró energía pero sostuvo una política de producción propia. Este país, en 1973, comenzó a desarrollar los biocombustibles y ha duplicado sus reservas de petróleo en los últimos tiempos pues se ha descubierto un gran yacimiento de petróleo ubicado en aguas profundas del Atlántico. Se cree que posee entre 5 y 8 mil millones de barriles de crudo. Este hallazgo le permitirá a Brasil seguir abasteciéndose pero, además, podrá ampliar su desarrollo industrial. Argentina antes se autoabastecía y exportaba algunas reservas; aunque actualmente le queda algo de gas y petróleo no le sobra nada, incluso tiene que comprar. Venezuela se encuentra entre los 10 primeros productores de petróleo del mundo, por lo que se considera un país clave para los mercados energéticos mundiales. Se estima que sus reservas de petróleo ascienden a los 77 mil millones de barriles de crudo. Respecto de la producción de gas natural, Venezuela posee las mayores reservas de la región, las que se estiman en 147 trillones de pies cúbicos (TPC). México posee también grandes reservas: 14 mil millones de