Importancia de la ingenieria economica
1957
El trabajo crece hasta llenar el tiempo de que se dispone para su realización. Hay un proverbio que muestra el reconocimiento general de tal hecho: «El hombre más ocupado es el que tiene tiempo de sobra» El esfuerzo total que a un hombre ocupado le llevaría tres minutos, puede así dejar a otra persona postrada tras una jornada de dudas, angustias y esfuerzo Admitiendo que el trabajo (y sobre todo el trabajo burocrático) posee esta elasticidad en sus demandas de tiempo, es evidente que existe poca o ninguna relación entre el trabajo que hay que hacer y el tamaño del personal encargado al que pueda asignársele. La falta de una actividad real no entraña necesariamente ocio.