Funciones de los mapas mentales
Claro que me hubiera venido bien ser hombre para tener derecho a gritar, igualque tú. —
De todas formas lo haces. ¿O es que no te has oído, bruja histérica? Te gustamandar y disponer, pero lo absurdo es que también quieres que te mantengan. —
¡Lárgate de esta casa! —
Claro que me voy. Ese siempre fue tu deseo, ¿verdad? ¿Por qué no lo dijiste antes? —
Porque te tenía miedo, pero ya no, ¿me oyes? —
Así que ése es tu plan. ¿Y desde cuándo? ¿Las feministas te lavaron el cerebro? ¿Tedijeron que debes estar en la onda de la liberación? Mira que si salgo por la puertaahora no me volverás a ver, te lo advierto... —
Ya no amenaces que me das lástima. Vete. Te estás tardando.Me volví de espaldas y seguí haciendo …ver más…
—
Sí. Acuérdate que te lo comenté. —
Nunca me dijiste nada. —
Lo hice, pero tú no sueles escucharme. Cuando hablo piensas en otras cosas y mecontestas a todo que sí.La ira me cegó. El organismo de los animales ante el enojo o el miedo deja de irrigarsangre al cerebro para tonificar los músculos y disponerse a huir o atacar. Algoparecido me ocurrió. —
Eres una estúpida. ¡Angustiar al niño diciéndole que sus padres posiblemente sedivorcien y suspenderle bruscamente la medicina...! No cabe duda que eres una real yreverenda estúpida. —
Y tú... un cobarde, puerco. Como marido dejas mucho que desear. —
¡Cállate infeliz! —
¡Nunca has madurado! ¡Te crees muy listo, pero la verdad es que eres un cobardeque se escuda en el trabajo para no cumplir como marido...!Tuve deseos de echarme sobre ella y matarla, pero la ira me paralizó. Detrás de mí estaba el ventanal de cristal filtrasol; me volví y lo golpeé fuertemente haciéndoloañicos, por lo que sufrí algunas cortadas con el vidrio. —
¿Para qué discutimos tanto por tener lo que tenemos? — reclamé —
. ¿Qué casotiene todo esto si tú estás planeando divorciarte? —
Caminé batiendo muebles,rompiendo floreros y estatuillas —
. Nos divorciaremos — bufé acercándome a ella —
,pero tarde o temprano me quedaré con el niño. Me iré de tu vida y me llevaré a Daan. —
¡Estás loco! — gritó —
. Vales más muerto que vivo. Desaparécete. Eres un malditopsicópa...No la dejé terminar.