Fauna nociva
EFRAÍN MORA C.
INTRODUCCIÓN
Antes de iniciar el estudio de nuestra materia, son indispensables algunas someras observaciones relacionadas con el ser y su intelecto.
A través de los siglos el hombre se ha ido condicionando de acuerdo con las costumbres, vivencias y enseñanzas de cada época en general, y de acuerdo con cada grupo social en particular. Una vez que en nuestras mentes se van fijando experiencias o hechos, terminamos aceptándolos y muy difícilmente podemos hacer abstracción de lo que es la realidad, pues el concepto de existencia se va aferrando y trasmitiendo de generación en generación, a tal punto que no puede aceptarse fácil mente cualquier cambio de mentalidad, por más que se nos pretenda …ver más…
1. ORIGEN DEL HOMBRE
Debemos en este aparte referirnos a las teorías que sobre el particular se han tratado, dado que la criminología está intrínsecamente relacionada con la conducta del hombre; en consecuencia, mal podríamos hablar del comportamiento del ser humano sin previamente exponer lo relativo a su origen.
Por ello presentamos lo que los estudiosos de las dos corrientes han venido planteando hasta ahora sobre el origen del hombre, significando que el debate de los idealistas y los materialistas aún no se agota y que la discusión sobre este tema es de nunca acabar, debido al antagonismo de sus proposiciones filosóficas.
2. LA TEORÍA IDEALISTA
También hemos de reconocer honestamente nuestra crasa ignorancia en lo referido a esta teoría, por lo cual nos anticipamos a ofrecer nuestras disculpas por los yerros en que podamos incurrir.
La fuente consultada ha sido la Sagrada Biblia, de la Editorial Católica, S.A., donde, a partir de su página primera, aparece consigna do lo siguiente:
Al principio creó Dios los cielos y la tierra que estaba confusa y vacía y las tinieblas cubrían la haz del abismo, pero como el espíritu de Dios se cernía sobre la superficie de las aguas, Dios dijo: . . . Haya Luz, y hubo luz; y viendo que la luz era buena la separó de las tinieblas; a la luz la llamó día y a las tinieblas noche, y hubo tarde y mañana, quedando un poco cansado aquel día.
Al siguiente, ordenó que