Ensayo Filosófico De Lo Absurdo Y El Suicidio
Este divorcio entre el hombre y su vida, entre el actor y su decorado, es propiamente el sentimiento de lo absurdo. Todos los hombres sanos han pensado en su propio suicidio alguna vez. El Tema de este ensayo es precisamente esta relación entre el absurdo y el suicidio, la medida exacta en la que el suicidio es una solución a lo absurdo.
Es ésta última expresión quien puede dar pie para considerar a Albert Camus como un abogado del suicidio como solución. Pero cuando se lee el ensayo puede verse que su verdadera pasión es la vida y con ésta, su sentido, la búsqueda de la felicidad, ése lugar en donde el espíritu pueda respirar y reconciliarse con el mundo.
En otras partes de su ensayo "El mito de Sísifo" empieza a dejar leer su conclusión con respecto a su objetivo inicial: "A su manera, el suicidio resuelve el absurdo. Lo arrastra hasta la misma muerte. Pero ya sé que, para mantenerse, el absurdo no puede resolverse. Escapa al suicidio, en la medida en que es al mismo tiempo conciencia y rechazo de la muerte".
De esta manera, el suicidio como tal no es una solución, sino un modo de escapar del absurdo a través de la muerte; pero, en el fondo, no soluciona nada, porque cuando lo elimina, también elimina la vida, es decir, el ámbito en el cual se da el absurdo; por tanto, no soluciona el absurdo, sino que elimina la vida en la cual se vive el absurdo. O, mejor dicho, quita del camino a