El papel de la iglesia en la edad media
Según los historiadores, la Edad Media comienza con la desaparición del Imperio Romano de Occidente en el año 476 de nuestra era y concluye con la caída del Imperio Romano de oriente a manos de los Turcos, otros la extienden hasta el descubrimiento de América en 1492. La caída del Imperio Romano de occidente no fue un hecho repentino, sino que resulto del lento desenlace de una cadena de acontecimientos, entre ellos la desestabilidad política y la constante influencia extranjera como la que ejerció por mucho tiempo el Cristianismo. Con advenimiento de la caída del Imperio, el poder político y territorial se fracciono en numerosos reinos por toda Europa, luego el anhelo político del pensamiento …ver más…
Una vez el Cristianismo se acomodo y creció por todo el suelo europeo, la iglesia se convirtió en una forma de organización ordenada y jerarquizada de la comunidad cristiana, organizada territorialmente según la división administrativa imperial. Revestida con cierta competencia administrativa y jurisdiccional (es decir con poder de organización administrativa en las diferentes provincias y metrópolis) además se les concede privilegios fiscales y patrimoniales. Todos estos beneficios contribuyeron a lo que se conoce como la institucionalización de la Iglesia. Pero a pesar de todos esos privilegios, la autonomía de la iglesia se vio limitada, principalmente por la confusión entre lo político y lo religioso, algo que caracterizo el Imperio Romano, por el estilo que le dio Constantino, al incorporar a la iglesia en las instituciones imperiales, de ahí que sus sucesores se autoproclamaran como monarcas con un poder divino y se atribuyeran un amplio poder en la organización de la misma Iglesia. Desde el comienzo quedo sentado un conflicto entre la Iglesia y el Imperio, cada uno intentaba sobreponerse al otro. Por su parte la Iglesia sintió la necesidad de fortalecer su organización, surgió entonces la institución del Papado, que se estructuraba como una monarquía que contaba con un Estado territorial propio.
El conflicto se agudizaba más cuando la Iglesia buscaba controlar moralmente a sus creyentes, que hacían