Todos decían que no existía. Que solo era una historia que les contaban a los niños para que no jugaran de noche y se vayan a la cama a dormir temprano. Pero nada de esto era cierto para mí; algo dentro de mi me decía que esto no era solo una historia…algo debía existir parecido o lo que sea pero yo sabía que él era real. Pero ¿Quién le creería a una chica de 17 años, que estaba por terminar la secundaria en un par de meses, esto? ‘Deja esas tonterías Melanie, ese tal ‘‘Slender Man ’’ no existe’. ‘Mel, deja de leer esos creepypastas en internet, nada es real’. Tantas cosas que me decían, que estaba loca por creer en algo que solo era considerado una historia. Sinceramente, ya no me importaba lo que dijeran, porque yo sabía lo que …ver más…

Su rostro era como el boceto de un dibujo que no estaba terminado pero el mismo tenia bien marcado lo que tendría debajo un ser humano de su rostro. Tenía similitudes humanas ya que se le podía ver marcada la parte de la barbilla, los pómulos, donde estarían sus globos oculares y su cabeza tenía la forma como cualquier otra de un humano corriente. En ese momento comencé a acercarme a él lentamente sin bajar la mirada, mirándole al rostro todo el tiempo cuando Kevin apareció y dio un grito inesperado de terror. Slender Man parece que se enfado y saco unas cosas que salían de su espalda que al final eran tentáculos. Me tomo por sorpresa y los mismos me rodearon y levantaron mientras Kevin como un cobarde corría y gritaba por su vida. Luego me bajo, después los tentáculos hirieron a Kevin y se cayó. No lo pude ayudar porque en ese momento no sabía cómo reaccionar…sentía que mi cuerpo no podía mover ni un solo músculo. En vez de ayudarme, Kevin se levanto, salió corriendo y gritando. Fue raro pero el Slender Man no lo persiguió; en cambio se quedo mirándome y se acerco hacia mí, estuvo tan cerca que mis nervios se apoderaron de mí y me desmaye.

Me desperté y mi cabeza me daba vueltas, pero me encontraba en el mismo lugar en donde me había desmayado…sola y sin nadie…perdida y sin ayuda. Me levante y empecé a caminar hacia donde estaba nuestra tienda…todavía seguía ahí pero parecía que alguien hubiese entrado