Edipo Rey, Resumen, Personajes
Edipo Rey, Edipo en Colono, Antígona
Personajes en Edipo Rey
Edipo: Canoso, Rey de Tebas, llamado “El Salvador”, hijo de Layo, esposos e hijo de Yocasta.
Layo: Ex Rey de Tebas, asesinado por su hijo.
Yocasta: Madre y esposa de Edipo.
Sacerdote: Anciano
Creonte: Hermano de Yocasta y futuro Rey de Tebas
Mensajero de Corinto: El le entrego el niño al Rey de Corinto
Polibio: Rey de Corinto, padre adoptivo de Edipo.
Tiresias: Anciano ciego que dice ser adivino.
Edipo Rey
Un día mientras Edipo, el sacerdote y Creonte, hermano de Yocasta, hablaban de la muerte de Layo, ex rey de Tebas, Edipo ordena la búsqueda de los asesinos y los maldice con muerte y destierro. En la conversación Creonte …ver más…
No se atrevió a acompañar a su hermana cuando ésta desafió las órdenes de Creonte de no dar sepultura a Polínice, sin embargo, cuando Antígona es condenada a muerte, se confiesa su cómplice, pero su hermana la desmiente y le dice que debe vivir.
Antígona
Antígona, hija de Edipo y de Yocasta, hermana de Eteócles, Polínice e Ismene. Después de la muerte en exilio de su padre ciego, a quien no ha abandonado un solo instante, ella regresa a Tebas, donde trata de evitar la guerra entre sus dos hermanos Polínice y Eteócles. Polínice ha decidido reivindicar su derecho al trono de Tebas, iniciando una guerra contra la ciudad de su hermano, contra quien lanza su ejército de argivos. A cada uno de los siete príncipes que mandaban los soldados, había encomendado Polínice el asalto de una de las puertas de la ciudad. La que le correspondió a sí mismo estaba guardada por su propio hermano Eteócles, y en la lucha entre ambos se ensartaron con sus lanzas dándose simultánea muerte, siendo ésta la causa de que los argivos, perdido su caudillo, se dispersasen, huyendo durante la noche. En Tebas, muerto Eteócles, se alza en el trono Creonte, tío de los dos hermanos fallecidos quien, como héroe defensor de la ciudad, se le tributen honras fúnebres reales, y a Polínice, en castigo por su insurrección, ordena que se le deje insepulto, para que sea pasto de perros y de aves de rapiña, lo que, para los griegos, suponía un terrible sacrilegio, ya que al negar sepultura suponía la