No voy a empezar estas palabras, que lejos están de querer ser un discurso, diciendo: Directivos, Docentes, Padres…etc., etc., etc. Porque en muchas oportunidades, escuché discursos en los actos y siendo alumno y también docente, no podía evitar distraerme y no prestar atención.
Por eso, quiero que hoy sea diferente. Quiero con estas palabras homejearlos a Ustedes Colegas…..Ustedes que día a día son maestros que no sólo enseñan, sino también orientan, contienen, apoyan, comprenden, estimulan…en fin, se dice que cada día se aprende algo nuevo, que durante toda nuestra vida se nos ha inculcado el deseo por avanzar, por descubrir nuevas cosas y por ampliar lo que somos y a dónde vamos; es una vida interesante la que llevamos como seres …ver más…

- De flores. Es que miro afuera y está todo tan vacío... Me gustaría poder viajar viendo flores durante todo el camino. ¿Verdad que sería bonito?
Pero las semillas caen encima del asfalto, las aplastan los coches, se las comen los pájaros... ¿Cree que sus semillas germinarán al lado del camino?
Seguro que sí, afirmó la anciana, aunque algunas se pierdan, otras acabarán en la zanja y, con el tiempo, brotarán.
- Pero...Tardarán en crecer, necesitan agua ...insistió el hombre.
- Yo hago lo que puedo hacer. ¡Ya vendrán los días de lluvia!
La anciana siguió con su trabajo ...Y el hombre bajó del colectivo para ir a trabajar, pensando que la anciana había perdido un poco la cabeza.
Unos meses después...Yendo al trabajo, el hombre, al mirar por la ventana, vio todo el camino lleno de flores...
¡Todo lo que veía era un colorido y florido paisaje!
Se acordó de la anciana a la que hacía días que no veía, entonces preguntó al conductor por la anciana de las semillas.
Pues, ya hace un mes que murió.

El hombre volvió a su asiento y siguió mirando el paisaje.

«Las flores han brotado, se dijo, pero ¿de que le ha servido su trabajo? No ha podido ver su obra».

De repente, oyó la risa de una niña pequeña que miraba entusiasmada las flores...¡Mirá, papá! ¡Mirá cuantas flores!

Realmente no hace falta explicar mucho el sentido de esta historia.

La anciana había hecho finalmente su trabajo, y dejo su herencia a todos los que la pudieran recibir, a todos los