Diaguitas-ubicacion-cultura-organizacion politica, social y economica-religion
Ubicación:
Los diaguitas habitaban los ceros y valles de lo que en la actualidad es el noroeste del territorio argentino, en las provincias de Jujuy, Salta, Tucumán, la Rioja, norte de San Juan, noroeste de Córdoba y el Norte chico de Chile.
Las características geográficas de la zona que habitaban los diaguitas corresponden a los Valles Transversales, formados por las cadenas montañosas que se desprenden de la Cordillera de los Andes interrumpiendo la planicie interior.
Organización política:
Carecieron de un gobierno único permanente. Sus caciques llegaban al poder por sucesión; "suceden los hijos a los padres y los hermanos, si no tienen hijos", lo que implicaría la existencia de una verdadera casta gobernante. Hubo un …ver más…
También trabajaban el oro, la plata y el cobre.
Era una cultura de agricultores sedentarios, poseedores de irrigación artificial, por medio de canales y con andenes de cultivo para sus productos principales: maíz, zapallo y porotos. Fueron criadores de llamas como sus hermanos de la zona andina, utilizaron a los animales como proveedores de lana para sus tejidos y también como carga. La recolección fue otra de sus actividades, especialmente del algarrobo y el chañar, que almacenaban en grandes cantidades; en mucha menor medida practicaron la caza.
No tenían tierra llana; hicieron entonces andenes en las laderas de las montañas, y, como casi no llovía, construyeron canales y acequias para el riego, tan eficaces que aún hoy se utilizan. Como todos los indios de América, no conocieron el arado, por ello sembraban haciendo pequeños hoyos.
Religión:
Los diaguitas adoraban al sol. Tenían sacerdotes especiales, "magos" o "hechiceros". Creían en la inmortalidad del alma aun cuando desdeñaban la antigüedad y la profundidad de esas mismas creencias.
Los sacerdotes eran también médicos. Cuando un diaguita se hallaba enfermo y próximo a morir, sus parientes lo velaban en medio de copiosas libaciones. Esto lo entendían como una defensa de las fuerzas malignas que le amenazaban. Las ceremonias del entierro duraban ocho días y luego se quemaba la casa para impedir su regreso. Como para ellos sólo existía