Descartes Criterio de verdad y primer principio
Esta redacción plantea la relación que Descartes establece entre la primera verdad absoluta e indudable (el primer principio del conocimiento: el “pienso, luego existo”) y el criterio de certeza que la sostiene (regla de evidencia, claridad y distinción): ¿Qué entiende Descartes por verdad? ¿Existe alguna verdad absoluta? ¿Qué es la certeza para Descartes? ¿Podemos tener certeza absoluta de las cosas que sabemos? A lo largo de esta redacción intentaremos contestar algunas de estas preguntas, siguiendo las teorías y el método de Descartes. Comenzaremos explicando el origen del proyecto filosófico de Descartes, para ello comentaremos brevemente el …ver más…
- La hipótesis del genio maligno: también conocida como “duda hiperbólica”, donde nos sugiere la existencia de un genio maligno, dotado de un poder superior que se dedicara a engañarnos haciéndonos creer como verdadero lo que no es. Con esta hipótesis se cuestiona no sólo todos los conocimientos, sino también la capacidad de conocer.
Es así como Descartes llega a su famoso: “Pienso, luego existo”. Se trata de una verdad tan evidente e inconmovible que ni siquiera los argumentos más extravagantes de los escépticos podrían poner en duda, puesto que si dudo, existo. Por este motivo Descartes va ha hacer de esta verdad la primera verdad o el primer principio de su filosofía. La duda metódica es una forma de aplicar la primera regla del método (solo es verdadero lo evidente, las ideas claras y distintas), pero de manera exagerada y radical, con el fin de asegurarnos absolutamente la verdad de los principios, que son los cimientos del edificio del saber (metáfora del edificio). Hay que tener en cuenta además que el uso de la duda por parte de Descartes no es el mismo que el que hicieron los escépticos del Renacimiento. Ellos dudaban por dudar y para demostrar la debilidad de la razón humana; Descartes, en cambio, aunque usa argumentos de duda parecidos a los suyos, duda para establecer una verdad indudable y para demostrar la fiabilidad de la razón. La duda no es por tanto, un