Catedra
Pero la lectura teórica de la relación de estas cuestiones con la de lo posmoderno, es definidamente diferente. Y ello, en la medida en que tales autores muestran (como es habitual en quienes hablan desde un racionalismo …ver más…
2.Retomando el punto anterior, no es que exista cultura posmoderna como fruto de la mala enseñanza de filósofos y artistas posmodernistas. Pensar esto, es situarse en el peor de los espiritualismos, que pondría a la teoría en un lugar de constitución de opinión pública y de estilos colectivos de existencia que está a años luz de poseer (y no sólo en esta época de descrédito de lo intelectual). Nunca la teoría ha sido otra cosa que un fruto conceptualizado de tendencias culturales en acto en la sociedad. De modo que poco se ganaría con acallar las voces de los autores posmodernistas: la cultura posmoderna de lo visual, el universo cotidiano ?light?, no dependen en absoluto de ellos.
Por tanto es en el plano práctico-político, en el espacio colectivo de la construcción de opinión, donde debe trabajarse la cuestión. Pero asumiendo que no hay lugar para el simple voluntarismo. Las condiciones epocales dependen de factores estructurales no elegidos por los actores sociales. Por ello, es de advertir que la cultura posmoderna ha llegado para quedarse, nos gusten o no los valores que ella vehiculiza. Y aquellos que queremos reinstalar el peso de ciertos valores generales como la solidaridad o la autonomía decisional (me incluyo entre ellos), deberemos asumir que estos valores no son ?naturales? y no hallarán ninguna imaginada espontánea reinscripción. Deberán instalarse dentro del conflicto actual de las interpretaciones, y dentro de formatos que los hagan