- La
gestión educativa - Conceptos
- Tipos
o niveles de concreción de la gestión
educativa - Interrelaciones
- El
modelo de gestión educativa
estratégica - Conclusiones
- Bibliografía
La gestión
educativa
Introducción.
El termino Gestión proviene del
latín "gestio", y evoca la acción y la
consecuencia de realizar trámites con eficiencia y
prontitud, lo que hace posible la realización de una
operación, un asunto, un proyecto, un anhelo cualquiera,
etc. El término es distinto al de Administración,
que enfoca las ideas de dirigir, disponer, gobernar, organizar u
ordenar una determinada situación.
Figura 1: Exigencias del proceso
mundialista sobre las organizaciones
contemporáneas
Ya en materia, procesos como la
globalización han obligado a las so ciedades
contemporáneas a reali -zar cambios profundos en sus com
ponentes fundamentales, tal es el caso de la educación. En
este pun to, los sistemas educativos de va –rios países
han diseñado y desar – rollado proyectos de reforma sig
-nificativa tendientes a la formación integral y de
vanguardia de sus in- dividuos, y ello para enfrentar las
demandas actuales y futuras a las que están siendo
sometidos como resultado de aquel proceso mundialista.
Figura 2: La sinergia como fin
primero de la Gestión Educativa
Lo anterior significa que la
educación no es ajena al precedente fenómeno y, por
es ta razón, el sistema educativo nacional de los
países en desarrollo enfrenta importan- tes
desafíos para dar respuestas oportunas y pertinentes a las
nuevas necesidades de formación de los ciudadanos del
siglo XXI (1). Tales desafíos están siendo
solventados por las comunidades educativas mediante la
implementación de procesos modernos de
administración escolar, co mo la Gestión
educativa, principalmente la
estratégica.
Conceptos
Varios autores han tratado el
término de Gestión Educativa, la
que se caracteriza fundamentalmente por enfocar de manera amplia
las posibilidades reales de una institución, en el sentido
de resolver situaciones o el de alcanzar un propósito en
cuestión. Se afirma que esta gestión constituye la
acción principal de la administración y es un
eslabón intermedio entre la planificación y los
objetivos concretos que se pretenden alcanzar (2). He aquí
algunas definiciones al respecto:
– Son los trámites que se realizan
para la resolución de los asuntos o proyectos
educativos (3).
– Proceso mediante el cual se dirige,
conduce, orienta y administra una institución
educativa.
– Proceso orientado al fortalecimiento de
los Proyectos Educativos de las Instituciones, que
ayuda a mantener la autonomía institucional,en el marco de
las políticas públicas, y que
enriquece los procesos pedagógicos con el fin de responder
a las necesidades educativas locales o regionales
(4).
– Es la disposición y
organización de los recursos de un individuo o grupo para
obtener los resultados esperados (5).
– Es el arte de anticipar
participativamente el cambio con el propósito de crear
permanentemente estrategias que permitan garantizar el futuro
deseado o una forma de alinear los esfuerzos y recursos para
alcanzar un fin determinado (5).
– Es el conjunto de procesos, de toma de
decisiones y ejecución de acciones que permiten llevar a
cabo las prácticas pedagógicas, su ejecución
y evaluación (4).
– Es la gestión del entorno interno
de la entidad docente hacia el logro de sus objetivos
(7).
– Es el proceso de las acciones,
transacciones y decisiones que la organización o escuela
lleva acabo para alcanzar los objetivos propuestos
(8).
– Conjunto de acciones de
movilización de recursos orientadas a la
consecución de objetivos (9).
Figura 3: Concepto de
Gestión
Educativa, según UNESCO
Como extensión de este último
concepto, la movilización de recursos (personas, tiempo,
dinero, materiales, etc.), implica la planificación de
acciones, la distribución de tareas y responsabilidades,
dirigir, coordinar y evaluar procesos y dar a cono – cer los
resultados y, a la vez, incluye actuaciones relativas al
currículo, a la toma de decisiones en los órganos
de gobierno, a la resolución de conflictos y que, evi –
dentemente, son aspectos que no pueden quedar bajo la
responsabilidad exclusi -va del personal administrativo de un
centro escolar (9).
Por lo anterior, se infiere que cualquier
acción de gestión debe orientarse al por qué
y para qué de la actuación, lo que determina su
origen en una necesidad espe cífica, y, una vez
justificada, su articulación operativa, que exige la
determinación de personas idóneas para la tarea y
la caracterización de ámbitos y modalidades de
actuación.
Las funciones genéricas de
planificación, desarrollo, ejecución y control
delimi -tan la intervención del proceso de gestión,
el cual puede dirigirse a identificar nece sidades, determinar
objetivos, fijar tiempos, asignar tareas y responsabilidades, y a
estimar recursos necesarios y actuaciones de evaluación y
seguimiento (5).
Considerando lo precedente, se desprende la
noción de que la gestión escolar no se reduce a la
función del director, sino que intenta poner dicha
función en rela- ción con el trabajo colegiado del
personal y hacerla partícipe de las relaciones que se
establecen entre los diferentes actores de la comunidad
educativa.
En síntesis, y sabiendo que la
educación consume recursos, la Gestión Educativa se
conceptualiza como el "conjunto de operaciones y
actividades (proceso) en caminadas a la adquisición
y manejo de los recursos educativos". Este con – cepto
interrelaciona las situaciones físicas y humanas de las
organizaciones.
Importancia.
Los frutos positivos obtenidos por el
diseño e implementación de proyectos de reforma
so-
bre los sistemas educativos de muchos
países Latinoamericanos, como Chile, México, Cuba y
Costa Rica, han sido posibles gracias al proceso de
gestión en tal ámbito, el cual está
conformada por un conjunto de sub-procesos organizados que
permiten que una institución o una secretaría de
educación logren sus objetivos y metas de forma exitosa,
por lo que una buena gestión es la clave para que lo que
haga cada integrante de una institución tenga sentido y
pertenencia dentro de un proyecto que es de todos (1).
Figura 4: Realización total
de las tareas del centro con
la aplicación de la Gestión
Educativa..
La gestión educativa es un proceso
de fortalecimiento de los Proyectos
Educativos y de ayuda para el mantenimiento
de la autonomía institucional. En sí, la
importancia que tiene esta gestión para el mejoramiento
del sistema educativo de un país radica en el
fortalecimiento de las secretarías de educación y
de los es tablecimientos educativos; en sus instancias
administrativas y sistema pedagógico para generar cambios
y aportar un valor agregado en conocimientos y desarrollo de
competencias a los estudiantes (8).
Características.
Básicamente, esta gestión se
caracteriza por una visión-misión
amplia de las oportunidades reales de una organización
para resolver determinada situación o arribar a un fin
determinado (1). Este proceso es acción,
y, como com promete a toda la comunidad
educativa, es fundamental lograr que todos los ac tores
de esta tiren o remen hacia un mismo lado o rumbo para lograr lo
que se quiere, y mejorar permanentemente (1).
Los elementos que contiene la
Gestión Educativa Estratégica se reconocen como los
básicos para identificar, planear, organizar, ejecutar,
evaluar y dar seguimiento a un plan de intervención
institucional para su mejora (2).
Ámbitos de la gestión
educativa.
La Gestión ocurre en todos los
espacios o áreas componentes de la comunidad educativa
institucional, local, regional o nacio nal, y la misma pasa por
momentos de diagnóstico, planeación,
ejecución, segui -miento y evaluación que se nutren
entre sí y conducen a la obtención de los resul –
tados definidos por los equipos directivos (1). Fundamentalmente,
la gestión ocur -re en los establecimientos escolares que
es donde se desarrollan los procesos de enseñanza,
aprendizaje y convivencia entre los diferentes actores; es
también el lugar donde se materializan el Proyecto
Educativo Institucional (PEI o PEC), el cu- rrículo y el
plan de estudios, y se concretan la planeación curricular,
las activida -des pedagógicas, las evaluaciones y
autoevaluaciones y las relaciones con dife – rentes
interlocutores de la comunidad educativa y otras entidades
(1).
La Gestión Educativa, denominada
también Gestión de procesos, toma en cuenta
cómo la organización escolar desarrolla de manera
sistemática e intencional los sub-procesos institucionales
que, en sus diversas dimensiones, se implementan con el fin de
alcanzar resultados de calidad, tales como la gestión
curricular y peda gógica, el desarrollo de los procesos
regulares del establecimiento y el soporte ad- ministrativo de la
gestión de la enseñanza; y así mismo, la
forma en que se eviden cia la preocupación por el
mejoramiento continuo y la promoción de la búsqueda
de soluciones innovadoras a los problemas de gestión
(8).
Tipos o niveles
de concreción de la gestión
educativa
Ciertos autores apuntan que la
Gestión Educativa se compone de tres dimensio- nes o
ámbitos (10): pedagógica/didáctica,
administrativa y socio-humanística o co munitaria. El
principio base de este proceso es la participación
colectiva para lo grar involucrar, concientizar y por lo tanto
consensuar, y así alcanzar los resulta – dos planeados y
deseados. Viene al caso que las dimensiones o ámbitos son
en – tendidos como áreas de intervención de la
Gestión Educativa, y en donde se pue – den agrupar tareas
de naturaleza homogénea y comprenden lo curricular, lo
admi -nistrativo, el gobierno institucional, servicios y recursos
humanos.
Otros autores sostienen que la
Gestión Educativa en el ámbito institucional se
concretiza en cuatro niveles, dimensiones,
ámbitos, o áreas (4): área de gestión
directiva; área de gestión pedagógica y
académica; área de gestión de la comuni –
dad y área de gestión
administrativa/financiera.
Figura 5: Niveles de
concreción de la Gestión Educativa, y sus
tareas
a) La Gestión
Directiva. Con su misión orientadora y promotora del
mejoramiento esta gestión tiene como ámbito de
acción la institución educativa en su conjunto y
sus referentes concretos son: la gestión académica,
la gestión de comunidad, y la gestión
administrativa y financiera. La acción de esta
gestión se concreta en la or ganización,
diseño, desarrollo y evaluación de una cultura
escolar propia, en el marco de la política educativa
vigente. Con el liderazgo de su equipo de gestión, la
institución se orienta estratégicamente hacia el
cumplimiento de su misión y vi–sión
(4).
Este nivel de concreción tiene como
foco central ejercer el liderazgo, y cuidar que todas las
demás áreas de la institución se orienten a
cumplir con la misión y el lo – gro de la visión
institucional. Implica, así mismo, los estilos de
funcionamiento: or -ganigramas, distribución de la tarea,
división del trabajo, canales de comunicación
formal y el uso del tiempo y de los espacios (6). En
síntesis, constituye el soporte del resto de las
dimensiones, con vistas a articular su funcionamiento (3),
involucrando para ello los procesos orientados a facilitar la
coordinación e integración de los procesos
institucionales y la inclusión de la institución
educativa en los contex – tos locales, regionales, nacionales e
internacionales.
Figura 6: Modelo de gestión
Directiva
b) La Gestión
Pedagógica y Académica. Esta gestión es
eje esencial en el pro- ceso de formación de los
estudiantes, por lo que enfoca su acción en lograr que
estos aprendan y desarrollen las competencias necesarias para su
desempeño so cial, profesional y personal (6).
La misma se refiere a cómo el
establecimiento decide y organiza las acciones y recursos de
gestión, para asegurar la adecuación,
implementación y mejoramiento constante de la oferta
curricular; así mismo, contempla la implementación
de siste- mas y mecanismos que posibiliten la
programación, control y evaluación de la apli-
cación del currículo, asegurando la
apropiación y mejoramiento constante de segui miento y
evaluación de los procesos de
enseñanza-aprendizaje.
La dimensión
pedagógico-didáctica, o
pedagógico-académico, está referida espe-
cíficamente a las actividades propias de la
institución educativa que la diferencian de otras y que
son caracterizadas por los vínculos que los actores
construyen con el conocimiento y los modelos didácticos:
las modalidades de enseñanza, las teo -rías de la
enseñanza y del aprendizaje que subyacen a las
prácticas docentes, el valor y significado otorgado a los
saberes, los criterios de evaluación de los proce -sos y
resultados.
Básicamente, esta gestión
abarca ítems tales como (8):
– El diseño de la oferta
curricular.
– La implementación de la oferta
curricular y pedagógica, congruente con el
proyec
to educativo institucional.
– El apoyo a la gestión de los
procesos de enseñanza.
– El apoyo a la gestión de los
procesos de aprendizaje de los alumnos.
En la gestión pedagógica el
docente realiza los procesos de enseñanza; asume el
currículo y se relaciona con sus alumnos y los padres de
familia; además, pro – mueve el aprendizaje de los
estudiantes, de los docentes y de la comunidad educa tiva en su
conjunto, por medio de la creación de una comunidad de
aprendizaje donde se reconozca los establecimientos educativos
como un conjunto de perso – nas en interacción continua
que tienen la responsabilidad del mejoramiento perma nente de los
aprendizajes de los estudiantes, con el fin de formarlos
integralmente para ser miembros de una sociedad. Todo esto ayuda
a favorecer su calidad de vi da y prepararlos para su vida en el
mundo laboral (4).
La Gestión Académica de una
Institución Educativa se desarrolla en el marco del
diseño, el desarrollo y la evaluación del
currículo, y tiene como dinamizador princi – pal a la
comunidad académica, cuyos aportes en conocimientos,
experiencias, in -novaciones o investigaciones adelantadas por
parte de los diferentes agentes educativos contribuyen al
desarrollo y el mejoramiento de la institución para el
logro de las metas y los objetivos propuestos (4).
Figura 7: Modelo de Gestión
Pedagógico-Académico
Es responsabilidad de esta gestión
el diseño y actualización permanente de pla nes de
estudios; las estrategias de articulación entre grados,
niveles y áreas; las metodologías de
enseñanza; el desarrollo de los proyectos transversales;
los pro – cesos de investigación; el sistema de
evaluación de los estudiantes; la organiza – ción y
el clima del aula (4).
Por lo anterior, se deben de aprovechar las
oportunidades de mejoramiento, tales como la búsqueda
permanente de acuerdos pedagógicos entre los distintos
miem- bros de la comunidad educativa; facilitar el diálogo
entre grados, áreas y niveles; hacer un uso
pedagógico de los resultados de las pruebas externas e
internas; ve- lar por un manejo adecuado de los tiempos y
recursos destinados para el aprendi -zaje; y adecuar el
funcionamiento del sistema de evaluación (4).
La dimensión
Pedagógico-Curricular guarda relación con los fines
y objetivos es- pecíficos, o razón de ser, de una
institución educativa en la sociedad (3).
c) La gestión de la
Comunidad.
La participación y
cooperación de la comuni- dad educativa (familias,
miembros de la comunidad y las organizaciones comunita- rias),
constituyen un factor importante para lograr la calidad en la
enseñanza. Esta participación comunitaria en la
gestión educativa es concebida como un acto de
negociación entre los padres de familia y el director de
la escuela, con el fin de to – mar decisiones sobre las
diferentes necesidades que existen en la institución
(11).
La Gestión de la Comunidad
está referida al conjunto de actividades que promue ven la
participación de los diferentes actores en la toma de
decisiones y en las ac- tividades de cada centro (12), y apunta a
relaciones como (3): entre la sociedad y la institución
misma (entre la comunidad local y su escuela o colegio); con los
pa- dres del discente; y otros sectores comunitarios.
Tal gestión incluye áreas de
trabajo como la promoción de la participación de la
comunidad educativa, el diseño, ejecución y
evaluación de estrategias de prevén – ción,
y la provisión de las condiciones que permitan una sana
convivencia entre sus miembros en donde haya cabida a distintas
personas, independientemente de su procedencia, sexo, credo o
raza, a la vez que se den las acciones necesarias para su
permanencia en el sistema educativo (4).
La dimensión comunitaria comprende
las actividades sociales entre los actores institucionales, las
demandas, exigencias y problemas con relación al entorno
insti tucional (6). El ámbito en el que se desarrollan las
acciones de esta gestión vincu -la a todos los actores de
la comunidad, a la organización institucional con su
entor- no, para fortalecer el desarrollo de identidad y sentido
de pertenencia con la institu ción y su PEI. Y esto es
así, pues alumnos y padres manejan algunos tipos de co
-municación y conocimientos particulares, por lo que el
rendimiento mejora si se tienden puentes de dos vías entre
maestros y padres, a manera de que ambos in – tercambien las
culturas de la escuela y del establecimiento, pues solo
así podrán desplegar esfuerzos para lograr un
mejoramiento del sistema sociocultural empo – brecido e
ineficiente que caracteriza la escuela rural tradicional
típica. Una nueva cultura de la escuela emerge de las
interacciones de los actores involucrados.
Los referentes que enmarcan las acciones
hacia el mejoramiento de esta gestión son (6):
– Contexto de la
institución.
– El PEI (Proyecto Educativo
Institucional).
– Proyectos transversales.
– Manual de convivencia.
– Resultados de las evaluaciones internas y
externas.
Y las acciones de autoevaluación y
mejoramiento deben estar orientadas hacia la participación
de toda la comunidad educativa, la construcción y
establecimiento de acuerdos de convivencia, el trabajo en torno a
la formulación de proyectos de vida de cada uno de los
miembros de la comunidad educativa, la utilización
adecuada del tiempo libre y la formulación de propuestas
que enriquezcan las direcciones de grupo (6).
Figura 8: Modelo de Gestión
de la Comunidad
d) La Gestión
Administrativa y Financiera. Esta gestión es una pieza
fundamental para el mejoramiento porque se desarrolla en el marco
del diseño, la ejecución y la evaluación de
acciones que buscan dar soporte a la misión institucional
mediante el uso efectivo de los recursos, a través de
procesos y procedimientos susceptibles de mejoramiento
continúo.
Básicamente la dimensión
Administrativa/Financiera abarca (6,3):
– La planificación de las
estrategias.
– Los recursos humanos, financieros y
físicos necesarios, disponibles o no, con vistas a su
obtención, distribución, articulación y
optimización para la consecución de la
gestión de la institución educativa.
– El control de las acciones
propiciadas.
– El manejo de la
información.
– La normatividad (en los aspectos
académicos).
– Procesos y procedimientos (inventarios,
vitrina pedagógica, refrigerio, transporte, aseo y
vigilancia, mantenimiento preventivo y predictivo de plantas
físicas, traslados, reporte de todas las situaciones
administrativas, etc.).
– La prestación de los servicios
complementarios.
– Gestión de los recursos
didácticos en función de los procesos
pedagógicos.
– Sistemas normativos y
reglamentarios.
– Otros.
Las dimensiones Administrativa y Financiera
no se presentan desarticuladas en la práctica cotidiana de
una institución, sino paralelas. Así por ejemplo,
en la Ges – tión Administrativa se considera cómo
el establecimiento organiza y dirige los procesos regulares y
periódicos del mismo, implementando las decisiones,
acciones y recursos orientados al desarrollo de la acción
educativa diaria (8).
Lo anterior se refiere a la
utilización funcional de diversos tipos de recursos y
apoyos disponibles para desarrollar los procesos
pedagógicos–curriculares; así como
también al ámbito de la gestión de los
recursos administrativos, materiales y el u- so del tiempo,
incluyendo también aquellos relacionados con las personas
y que influyen en la eficiencia y eficacia de los procesos
pedagógico curriculares (8).
En la Dimensión Administrativa se
analizan las acciones que ejerce el gobierno, tales como las
estrategias de manejo de recursos humanos, financieros y tiempos
requeridos y el manejo de la información
significativa; en sí, esta dimensión se refiere a
todos los procesos técnicos que apoyarán la
elaboración y puesta en marcha del proyecto educativo,
así como la rendición de cuentas ante ciertas
entidades gubernamentales (Secretaría de Hacienda,
Contraloría, etc.) (12). La dimensión
administrativa se vincula con las tareas que se requieren
realizar para suministrar, con oportunidad, los recursos humanos,
materiales y financieros disponibles para alcanzar los objetivos
de una institución, así como con las
múltiples demandas co- tidianas, los conflictos y la
negociación, con el objeto de conciliar los intereses
indi- viduales con los institucionales.
Para su aplicación, la
dimensión Administrativa exige (9):
– El conocimiento de las funciones
genéricas que delimitan la intervención de la
gestión en la planificación, desarrollo,
ejecución y control, y sus relaciones en el trabajo
escolar.
– El acercamiento a nociones básicas
del proceso administrativo.
Respecto a la Gestión Financiera,
esta Incluye (8):
– Elaboración y manejo
presupuestario.
– Procedimientos para gestionar nuevas
formas de financiamiento de proyectos que mejoren la calidad de
los aprendizajes.
– Procedimientos de formulación,
ejecución y evaluación de proyectos de
innovación y de mejoramiento.
– Búsqueda sistemática de
fuentes de financiamiento alternativo para los mismos.
– Elaboración de presupuesto
anual.
– Formulación/financiamiento/control
de proyectos de mejoramiento e innovación.
– Control de ingresos y gastos.
Figura 9: Modelo de Gestión
Administrativa-Financiera
El cuadro siguiente resume las actividades
que se desarrollan en cada una de los cuatro ámbitos o
niveles de concreción de la Gestión
Educativa:
Figura 10: Modelo general de los
ámbitos de concreción de la Gestión
Educativa
Finalmente, en la Administración
escolar actual es necesario considerar los ele- mentos que
configuran la dinámica de los centros escolares, que van
desde la re -lación del centro con el entorno, la
distribución de tareas y la organización para la
enseñanza, hasta el manejo del personal y las demandas
administrativas propias del plantel (9).
Interrelaciones
Figura 11: interrelaciones entre
los niveles de concreción de la Gestión
Educativa
La Gestión Educativa es todo un
proceso, cuyo bagaje de actividades se desarrollan en los cuatro
ámbitos antes expuestos, de tal manera que conforman un
conjunto de engranajes interrelacionados con el fin de potenciar
a la gestión escolar.
La Gestión Directiva, aunque
minoría, es líder dentro del centro educativo; a –
demás, planifica, dirige y evalúa las operaciones
contenidas en el Plan Operativo Anual (POA), de la
institución. La Gestión
Pedagógica-Académica representa el engranaje
fundamental o esencia de esta interrelación mediante el
dúo Maestro-alumno, desarrollando así actividades
puramente de enseñanza-aprendizaje establecidas en el POA;
además, gestiona los recursos necesarios ante la
Gestión Administrativa-Financiera para el éxito del
proceso educativo. Esta última gestión presupuesta
y suple los recursos a los demás
ámbitos.
En sí, cada nivel de
concreción de la Gestión Educativa debe responder a
las ne cesidades y expectativas de la comunidad educativa, la
cual, mediante los padres de familia, está atenta a los
resultados obtenidos por los discentes. La Gestión
Directiva y Pedagógica apuntan en el POA reuniones
periódicas con la Comunidad (entrega de calificaciones,
reuniones de padres de familia, escuela para padres, ci tas a
consejería y/o orientación, etc.). Todos los
ámbitos o niveles de la Gestión E- ducativa
realizan encuentros diarios o periódicos en el
cumplimiento de la visión-misión y del respectivo
POA institucional. Todos ellos están comprometidos en los
propósitos educativos.
Tales ámbitos hacen uso de recursos,
de cuyo uso efectivo se encarga la gestión
Administrativa-Financiera. La Gestión de la Comunidad
parte de la institución ha – cia la comunidad, con el
visto bueno de la Gestión Educativa y utilizando los
recursos del centro bajo el control Administrativo.
Para el mejoramiento de la
institución en su conjunto, se requiere de acciones pla
neadas, sistemáticas e intencionadas dentro de un esquema
de gestión que la con vierta en una organización
autónoma, orientada por propósitos conjuntos,
valores comunes, metas y objetivos claramente establecidos y
compartidos (4).
Resulta imprescindible identificar,
caracterizar, organizar y jerarquizar la problema tica educativa
de la escuela, zona escolar o de supervisión, pues en base
a ello se construirá colectivamente un proyecto que
permita atender desde distintos escena rios, ámbitos y
niveles las causas y consecuencias de dicha problemática
(12).
Figura 12: Fases del plan de
mejoramiento institucional
Para avanzar en este proceso de
búsque da permanente del mejoramiento de la ca lidad
educativa, la institución requiere de un
plan, de una estrategia clara que le permita visualizar
unos objetivos precisos, concretos, alcanzables, en la que la
Ges- tión Directiva cumpla con su misión orien-
tadora y promotora del mejoramiento; en la que la Gestión
Académica sea esencial en el proceso de formación
de los estudi antes; en la que la Gestión de Comunidad
brinde un complemento vital en el bienes– tar de los estudiantes
y, por último, una estrategia en la que la gestión
administrativa y financiera garantice un apoyo permanente en el
del proceso de mejoramiento institucional (4).
El Plan de Mejoramiento es una herramienta
gerencial probada, que requiere un sistema de seguimiento y
evaluación que garantice su ejecución, del
conocimiento de su nivel de avance con el análisis de los
indicadores, y de proveer la informa – ción necesaria para
la toma de decisiones en la marcha. Esto es especialmente
importante para conocer si vamos bien y si estamos consiguiendo
lo esperado (4).
El modelo de
gestión educativa estratégica
Es preciso considerar un
cambio de los valores en la cultura educativa,
así:
frente a una actitud defensiva, la
apertura;
frente al aislamiento profesional, la
comunidad;
frente al individualismo, la
colaboración;
frente a la dependencia, la
autonomía;
frente a la dirección externa, la
autorregulación…
UNESCO
La administración educativa ha
evolucionado, en un principio paulatinamente y en las
últimas tres décadas de forma vivaz. Tal es
así que la mayoría de los siste – mas educativos de
Latinoamérica soportaron modelos
administrativos,burocráticos centralistas y rutinarios, lo
cual pudo haber sido funcional en su tiempo, hasta evo- lucionar
a los días contemporáneos con el modelo de
Gestión Educativa Estratégi- ca, del cual se afirma
que es un modelo que retoma el presente para
proyectarlo al futuro de una manera estratégica,
basándose en la información relevante que se tiene
de la institución educativa, para poder tomar decisiones
(13).
Conceptualización.
El modelo en cuestión constituye una
estrategia eficaz y eficiente de conducción de las
instituciones educativas, específicamente de los proyectos
o del que hacer institucional en estos tiempos globalizados; y
algunos la definen como "el conjunto de representaciones valiosas
que clarifican los factores y procesos de transformación
de la gestión en sus distintos niveles de
concreción" (16); otros la conceptualizan como "un
conjunto de procesos teórico-prácticos in –
tegrados horizontal y verticalmente dentro del sistema educativo,
para cumplir los mandatos sociales" (13).
Este modelo "es un saber de síntesis
capaz de ligar conocimiento con acción, éti ca con
eficacia, política con administración, en procesos
que tienden al mejora -miento continuo de las prácticas
educativas" (13). En sí, la Gestión
Estratégica es una manera novísima de comprender,
organizar y conducir al sistema educativo de un país y a
las organizaciones escolares del mismo (2).
La finalidad del modelo Estratégico
es asegurar progresos constantes en las for- mas de
gestión para potenciar las condiciones que detonen mejores
resultados de logro educativo, desarrollando competencias
colectivas y prácticas innovadoras de gestión
institucional, escolar y pedagógica, donde cada actor
asuma su compromi- so con la calidad educativa (2).
Características.
La Gestión Estratégica se
caracteriza por constituir un saber complejo y en
evolución permanente, y que se integra por aspectos
representativos y relevantes del quehacer de un grupo de actores
educativos, en un espacio y momento determinados (2). Para que la
Gestión Educativa se caracterice como estratégica,
aquella ha de concretarse a partir de ciclos de mejoramiento
constante de procesos y resultados, que se desarrollan con la
implementación de ejercicios de planeación y
evaluación (2).
Figura 13: Algunas
características del modelo de Gestión
Educativa Estratégica
He aquí las características
principales de este modelo de Gestión (2):
– Centralidad en lo Pedagógico.
Parte de la idea de que las escuelas son la unidad clave de
organización de los sistemas educativos, y que el trabajo
medular de las escuelas y del sistema mismo consiste en la
generación de aprendizajes para todos los
alumnos.
– Reconfiguración, nuevas
competencias y profesionalización. Supone la necesidad de
que los diversos actores educativos posean los elementos
indispensables para la comprensión de los nuevos procesos,
oportunidades y soluciones a la diversidad de
situaciones.
– Trabajo en equipo. Que proporcione a la
institución escolar una visión compartida acerca de
hacia dónde se quiere ir y de cuáles son las
concepciones y los principios educativos que se quieren promover.
También tiene que ver con los procesos que faciliten la
comprensión, planificación, acción y
reflexión conjunta acerca de qué se quiere hacer y
cómo, lo que deberá desarrollarse de manera
colegiada para que sean efectivos.
Figura 14: Enfoque del modelo de
Gestión Educativa Estratégica sobre el
ámbito de la Gestión Directiva
– Apertura al aprendizaje y a la
innovación. Ésta se basa en la capacidad de los
actores de encontrar e implementar nuevas ideas para el logro de
sus objetivos educacionales; así como para romper inercias
y barreras, favoreciendo la definición de metas y
priorizando la transformación integral. Las organizaciones
abiertas al aprendizaje son capaces
de encarar y resolver sistematicamente
situaciones adversas, generar nuevas aproximaciones, a prender de
la propia experiencia y de la de otros, y originar cono –
cimiento y trasladarlo a sus prácticas.
Figura 15: Enfoque del modelo de
Gestión Educativa Estratégica sobre el
ámbito de la Gestión Pedagógica
– Asesoramiento y orientación para
la profesionalización. Consiste en que existan espacios de
reflexión para la formación permanente, para pensar
el pensamiento,
repensar la acción, ampliar el poder
epistémico y la voz de los docentes; se trata de habilitar
circuitos para identificar áreas de oportunidad y generar
redes de inter- cambio de experiencias en un plan de desarrollo
profesional.
– Culturas organizacionales. Cohesionadas
por una visión de futuro, que se planteen escenarios
múltiples ante situaciones diversas, a partir de objetivos
claros y consensos de altura para arribar a estadios superiores
como institución; donde los actores promuevan una
organización inteligente, rica en propuestas y
creatividad, que estimulen la participación, la
responsabilidad y el compromiso compartido.
– Intervención sistémica y
estratégica. Supone visualizar la situación
educativa, elaborar la estrategia y articular acciones para
lograr los objetivos y metas que se planteen; supone
también, hacer de la planificación una herramienta
de autorregulación y gobierno para potenciar las
capacidades de todos para una intervención
con sentido.
Componentes.
El paradigma de Gestión Educativa
Estratégica (GEE), como todo campo cien tífico,
está conformado por tres claves o ejes, los cuales le
otorgan coherencia, sentido, reflexión, decisión y
liderazgo. Se afirma que todas las actividades que involucra una
GEE pueden integrar-
se en estos tres ejes, los que operan
interrelacionados y recíprocamente potenciados, dado que
aquella gestión implica diversos saberes, prácticas
y competencias (14). De otro modo, los ejes en cuestión
actúan como poleas interconectadas para potenciar esta
Gestión.
Estos ejes son (14): pensamiento
sistémico y estratégico, liderazgo
pedagógico y aprendizaje organizacional.
Figura 16: Los ejes interrelacionados
del modelo de Gestión Educativa
Estratégica.
Pensamiento sistémico y
estratégico. Este comienza con la reflexión y
la observación de la naturaleza del emprendimiento a
enfrentar. Es fundamental comprender qué es lo esencial y
luego aventurar las posibles dinámi- cas para alcanzar los
objetivos, pues el aspecto más sutil del pensamiento
estraté gico consiste en saber qué debe suceder
(14).
Figura 17: Etapas articuladas del
eje Pensamiento sistémico y estratégico del modelo
de Gestión Educativa Estratégica
Liderazgo pedagógico. En el
proceso de cambio que se persigue se requieren prácticas
de liderazgo para concertar, acompañar, comunicar, motivar
y educar; esto es que la construcción de escuelas eficaces
requiere de líderes pedagógicos pues no hay
transformación sobre la base de autoridades formales,
impersonales y reproductoras de conductas burocráticas
(14).
Aprendizaje organizacional. Hoy en
día el trabajo es en equipo, y precisamente esto es la
esencia de la GEE. Las actividades que implica esta
gestión se apegan a la idea y práctica de un ciclo
de aprendizaje organizacional o institucional, que permite
adquirir, compartir y desarrollar nuevas competencias,
sensibilidades y es quemas de observación y
auto-observación (14).
En sí, el Aprendizaje organizacional
se concibe como "la capacidad que tienen los miembros de una
institución para aprender de manera colectiva, para
convertir las experiencias en objeto de análisis
institucional, para transformar en tema de debate los avances y
obstáculos de la práctica pedagógica y sus
resultados; este eje existe cuando la institución aprende
de sí misma, cuando recupera su experiencia y la
transforma en espacios de innovación y cambio
(13).
El aprendizaje organizacional se da en la
medida en que las instituciones aumenten su radio de
acción; esto es, que se expanda el ámbito en el que
pueden diseñar e intervenir para transformar y mejorar
prácticas y resultados (14). Este eje su- pone un conjunto
de procesos que posibilitan la innovación y el cambio
institucional, pues tal es el pensamiento de la GEE, que busca
convertir a los centros edu – cativos en entes inteligentes, que
con cuya experiencia se conduzcan a la transformación
(13).
Herramientas.
Todos los supuestos del Modelo de
Gestión Educativa Estratégica (GEE), se concretizan
en sus herramientas, que son propuestas para el uso dentro de la
comunidad, a saber (2): Plan Estratégico de
Planeación Escolar (PETE), el Portafolio Institucional y
el Pizarrón de Autoevaluación.
? El Plan Estratégico de
Planeación Escolar (PETE). Es la herramienta para des
– arrollar la planeación estratégica que
surgió del PEC, a partir de considerar que si los
actores de la comunidad (maestros, directivos, alumnos y padres
de familia) formaban una auténtica comunidad escolar,
ésta tendría la capacidad de identificar sus
necesidades, problemas y metas realizables orientadas hacia la
mejora de la calidad del servicio educativo. Es un plan
estratégico propio construido por los miembros de la
comunidad escolar en el marco de los propósitos educativos
nacionales (2).
Este tipo de planeación es
proactiva, participativa y orientada a impactar a la sociedad
donde se inserta la escuela; es una herramienta de trabajo que el
director y los docentes puedan utilizar para transformar la
gestión escolar, ofreciendo como resultado lineamientos y
oportunidades para crear, desarrollar o fortalecer las
capacidades de gestión de los actores escolares
(15).
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