¿Qué es la estrategia del Océano Azul?
SubSon negocios que no tienen competencia, crean un territorio
nuevo, sin necesidad de dividir mercados ya existentes. Las
situaciones competitivas más habituales en cualquier tipo
de industria son: Estrategia del tipo Océano Rojo y
Estrategia del tipo océano Azul
Estrategia de Tipo Océano Rojo Estrategia de Tipo
Océano Azul
Los océanos rojos son los que representan las industrias
existentes. En los océanos rojos los límites de las
industrias están perfectamente definidos y son aceptados
tal cual son. Además, las reglas del juego competitivo son
conocidas por todos.
Conforme aparecen más competidores, las posibilidades de
beneficios y crecimiento disminuyen, los productos se
estandarizan al máximo y la competencia se torna
sangrienta (de ahí el color rojo de los
océanos).
Los océanos azules, por el contrario, son los que
representan las ideas de negocios que hoy por hoy son
desconocidas, y se caracterizan por la creación de
mercados en áreas que no están explotadas en la
actualidad, y que generan oportunidades de crecimiento rentable y
sostenido a largo plazo. El hecho fundamental es que cuando
aparecen los océanos azules, la competencia se torna
irrelevante, pues las reglas del juego están esperando a
ser fijadas.
Tomemos el ejemplo del mundialmente famoso Cirque du
Soleil.Creado en Canadá en 1984 por un grupo de actores,
sus representaciones han conseguido llegar a más de
cuarenta millones de personas en noventa ciudades de todo el
planeta.
Desde el punto de vista estratégico, la industria del
circo era a todas luces algo poco atractivo. Antes de que
surgiera el Cirque du Soleil, los circos estaban inmersos en una
competencia feroz para ver quién conseguía atraer a
los mejores payasos, los mejores domadores, en definitiva,
quién conseguía tener más estrellas entre su
elenco.
Esta batalla dejó de tener sentido para el Cirque du
Soleil, que no podía ser considerado ni como un circo ni
como una producción teatral. De hecho, consiguió
romper las fronteras de la industria, tal y como se
conocían hasta ese momento, al ofrecer a la gente la
diversión y emoción propias del circo (manteniendo
sus símbolos tradicionales, como la carpa, los payasos y
los ejercicios acrobáticos) junto con la
sofisticación y riqueza intelectual del teatro (cada
representación tiene su propio hilo argumental, hay danza,
se escucha música compuesta especialmente para la
ocasión, etc.).
El Cirque du Soleil ha sabido crear un océano azul
caracterizado por un concepto de espectáculo innovador,
nítidamente diferenciado de las industrias preexistentes
(circo y teatro), ha reducido los costes en aquellos factores en
que la industria a venía compitiendo tradicionalmente y ha
ampliado las fronteras del mercado mediante la
diversificación del público al que se dirige.
Principios para desarrollar una estrategia de Océano
Azul
1. Crear nuevos espacios de consumo El proceso de descubrir y
crear océanos azules no consiste en intentar predecir las
tendencias de una industria o sector a través de un
ejercicio meramente adivinatorio.
El primer principio para la creación de una estrategia de
estas características es establecer un proceso
estructurado que logre ampliar los límites del mercado tal
y como se concibe hoy en día.
2. Centrarse en la idea global, no en los números Una vez
examinados los itinerarios que pueden llevar hasta un
océano azul, el siguiente paso habrá de ser
cómo aplicar estas ideas a nuestra propia empresa para
urdir una auténtica estrategia transformadora.
Esto nos conduce a la formulación del segundo principio
para la elaboración de una auténtica estrategia de
océanos azules: hay que concentrarse en la globalidad, no
en los números. Los autores del libro proponen una
alternativa al proceso tradicional de planificación
estratégica: en lugar de elaborar un documento formal,
resulta más recomendable dibujar sobre un lienzo, y de la
manera más clara posible, la estrategia que queremos
implementar.
3. Ir más allá de la demanda existente
¿Cómo podemos maximizar el tamaño del
mercado que estamos creando? Esta pregunta conduce a la
formulación del tercer principio de la estrategia de
océanos azules: ir más allá de la demanda
existente. Para poder alcanzar este objetivo, las empresas
deberían corregir dos prácticas estratégicas
convencionales: la que consiste en centrarse únicamente en
resolver las necesidades de los clientes actuales y la que
conduce a una segmentación excesiva de los mercados.
Para maximizar el tamaño de los océanos azules, las
empresas, en lugar de concentrarse en los clientes, tienen que
dirigir su mirada hacia los no-clientes; y, en vez de extremar su
atención a las diferencias entre los clientes, deben
potenciar los elementos comunes que todos ellos valoran.
4. Asegurar la viabilidad del océano azul El objetivo no
es otro que reducir el riesgo que entraña la
implantación de una estrategia de este tipo. Para estar
seguros de la viabilidad de la estratégia.