- Resumen
- El trabajo con la
expresión escrita - Lengua oral y
lengua escrita - La acción
docente - La expresión
escrita, la expresión oral y la
informática - Bibliografía
Resumen
Al reflexionar en torno al trabajo con la
expresión escrita es notable observar cómo este
componente afronta múltiples carencias que dañan la
calidad del proceso enseñanza – aprendizaje, las que
están dadas por factores cognitivos y motivacionales los
que permiten distinguir cómo se desempeña el
maestro y cómo reacciona el estudiante.
El acto de escribir no se concibe como un acto de
disfrute; se convierte en un instrumento evaluativo por lo que
nos vemos comprometidos a buscar y consultar a los especialistas
del tema; no sin antes delimitar las dificultades y trabajar en
pos del óptimo desempeño y desarrollo de
habilidades comunicativas en el alumno, para que trabaje,
escriba, piense y redacte sin temor, expresando libremente sus
ideas, experimentando gozo y satisfacción al escribir de
forma fluida, coherente y ajustándose a sus exigencias
técnicas y formales.
La comunicación y el idioma están
comprometidos con lo que se debe lograr en el proceso de
enseñanza – aprendizaje una actividad que se apoye
en el uso de herramientas y vías que despierten el
interés en nuestros estudiantes.
Sin dudas, el incentivo para la redacción ha de
partir de situaciones originales que surtan un efecto en el
estudiante, capaz de hacerle experimentar fuertes emociones capaz
de expresarlas por medio de la palabra oral y escrita; sin
embargo, consideramos que esto no es suficiente para promover el
desarrollo de habilidades hacia el componente de escribir; se
hace necesario el empleo de otros recursos y herramientas que
conspiren a favor de creaciones personales.
La expresión escrita, la expresión oral
y la informática
"… no hay placer como este de saber de
dónde viene cada palabra que se usa, y a cuánto
alcanza; ni hay nada mejor para agrandar y robustecer la mente
que el estudio esmerado y la aplicación oportuna del
lenguaje. Siente uno luego de escribir, orgullo de pintor y de
escultor".
José Martí
El trabajo con la
expresión escrita
Al reflexionar en torno al trabajo con la
expresión escrita es notable observar cómo este
componente afronta múltiples carencias que dañan la
calidad del proceso enseñanza – aprendizaje, carencias que
están dadas en gran medida por factores cognitivos y
motivacionales por lo que resulta evidente distinguir cómo
se desempeña el maestro y cómo reacciona el
estudiante ante estas dimensiones.
Se hace necesario indagar el porqué el acto de
escribir no se concibe como un acto de disfrute; se convierte en
un instrumento evaluativo por lo que nos vemos comprometidos a
buscar y consultar a los especialistas del tema; no sin antes
delimitar las dificultades que tenemos con el programa de la
lengua y las normas que se establecen en pos del óptimo
desempeño y desarrollo de habilidades comunicativas y
qué implicación puede tener en el alumno, para que
trabaje, escriba, piense y redacte sin temor, expresando
libremente sus ideas, experimentando gozo y satisfacción
al escribir de forma fluida, coherente y ajustándose a sus
exigencias técnicas y formales.
Marx y Engels definieron el lenguaje como "
un fenómeno social que nació de la necesidad que
sintieron los hombres de comunicar sus ideas en el curso del
trabajo, sin el lenguaje la producción social y la
sociedad misma serían imposibles"…
Al lenguaje se le concede especial importancia para el
desarrollo de la personalidad, por las diversas funciones que
cumple para el pleno desarrollo del hombre. Como instrumento de
la actividad psíquica, está vinculado
indisolublemente al desarrollo de la actividad cognoscitiva,
sirve como medio de planificación de la actividad y ejerce
una función reguladora de la actividad de la
personalidad.
La función comunicativa del lenguaje hace posible
la expresión de significados por medio de las palabras que
tienen un contenido semántico adquirido a través de
la experiencia histórica social de la humanidad, la cual
se expresa y comunica mediante el lenguaje.
El ser humano, a través del lenguaje,
también proyecta a los demás su mundo afectivo:
qué le gusta, qué le desagrada, sus emociones y
sentimientos.
Lengua oral y
lengua escrita
La lengua oral surgió primero, es más
espontánea, se caracteriza por una mayor economía
de recursos gracias a los elementos extralinguísticos y al
contexto. Posee una mayor riqueza de matices expresivos. Su papel
es más relevante porque es un medio de acumulación
y transmisión de información cultural, de
ahí su carácter perdurable.
El surgimiento de la lengua escrita es posterior. Es
mucho más elaborada y se acerca a los matices
valiéndose de los signos de puntuación,
aclaraciones, entre otros elementos.
Un diálogo, una exposición sobre un tema,
un artículo periodístico, una novela, entre otros,
son algunos ejemplos de textos ciertamente de tamaño
diferente, pero que están dotados de ciertas
características comunes.
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