Estando en esta empresa, me desempeñe como
conserje en el área de producción, y al mes de
estar en este trabajo, mediante memorándum del jefe de
personal me promovieron a operario, esto significaba que
ganaría más y estaba en medio de dos maquinas
sentado en una pata de gallina tomando las bolsas de leche que
tiraba cada aparato de estos y llenando cajas con 24 litros cada
una, como a los dos meces de estar en este puesto fui promovido a
ayudante del pasteurizador que significaba preparar la leche que
se envasaba y enviarla por tuberías akl pasteurizador,
siempre en esta empresa fui promovido a operador de las maquinas
envasadoras, manejando seis maquinas y con uno de los salarios
más altos del área de producción.
Cumpliendo el
SMP
En 1986 estando en esta misma empresa, ya la guerra en
Nicaragua era desastrosa donde cada puente, cada puesto de salud,
cada escuela, eran derribados por la contrarrevolución y
muchos jóvenes morían defendiendo ese gran
sueño de una patria libre y soberana, fui citado por
primera vez para el SMP (Servicio Militar Patriótico).
Tenía 16 años pero solo me faltaban cuatro meces
para los 17 que decía la ley, pero desde que tuve uso de
razón me sentí Sandinista y con gran deseo de
hacer
historia o ser parte de ella para el bien de la patria y
cuando me presenté, me dijeron que me harían
chequeo médico pero les dije que me sentía bien y
que me integraría al SMP. Fue entonces que ese 04 de Junio
del año 1986, fui movilizado y reconcentrado en un lugar
conocido como cofradía que pertenece a tipi tapa en la
carretera norte de Managua.
En este lugar permanecimos por cinco días hasta
que se me ocurrió hacer el último paseo por Ciudad
Sandino MI Barrio donde residía y en
compañía de dos amigos nos fuimos al barrio un
día sábado con la idea de regresar Lunes, pero
cuando regresamos los habían trasladado a todos y no
sabíamos para donde, pero como era tan grande el deseo de
defender la revolución y ya escuchaba a algunos que ya
habían cumplido, propuse al grupo, que nos
presentáramos al estado mayor y cuando llegamos les
conté lo sucedido y me respondieron que nos
mandaría a dejar y en un vehículo del ejercito nos
llevaron donde estaba el grupo de 800 cachorros nuevos, porque
ese era el nombre (Los Cachorros de Sandino).
Llegamos a apanas donde estaba toda la pelota y nos
contaban que ya los habían llevado a mulukuku donde no los
recibieron porque estaba lleno y tampoco nos quedamos en apanas y
fuimos trasladados al. CEPEM Reinerio Tijerino de la ciudad de
Somoto en Madrid, carretera panamericana al espino
Honduras.
Este centro de Especialistas Menores (CEPEM), se
encargaba de entrenar y preparar a Sargentos mayores, sanitarios
mayores, comunicadores o comones y morteristas y en estas cuatro
especialidades nos preparamos 800 nuevos cachorros, yo me
especialicé como Sanitario Mayor, durante tres meces que
dilató el entrenamiento llegó mi madre, mis
hermanos a visitarme y también otros familiares al igual
que dos novias que tenia, recuerdo que en este lugar que estaba
junto al costado norte de la iglesia católica donde cada
15 minutos sonaba un reloj conocí a Enrique Armas
Rosales, quien se encargaba de promover el deporte entre los
reclutas y conseguía películas para levantar el
ánimo a los cachorros.
Finalizados los tres meces del entrenamiento llegaron
los: BLI (Batallón de Lucha Irregular). A cada
batallón le asignaron 20 cachorros es decir cinco de cada
especialidad y existían 12 BLI (Batallón de Lucha
Irregular) por lo que el resto quedó asignado a las
diferentes unidades permanentes del país.
Durante este acto de graduación y
asignación a unidades de combate a mi me toco el BLI
Farabundo Martí, este operaba en la 5º región
y Zelaya central, con migo iban algunos de los amigos principales
desde el reclutamiento, otros estaban asignados a otras unidades
pero por estar con sus amigos se cambiaban a otras de manera
secreta, pero puedo asegurarles que fue la primer gran despedida
de todos los compañeros y amigos de estos tres meces de
preparación.
El BLI donde yo pertenecía a partir de este
momento estaba en Mulukuku, lugar donde fui a parar con algunos
compañeros, tales como: Sebastián (guachan),
originario de Tipi tapa en la entrada al balneario el Trapiche de
Managua, toño Gaseosa, Ponce, Juan de dios y otros que no
recuerdo el nombre.
El jefe del BLI ya era Víctor Manuel
Gallegos, alias Pedrito el hondureño. El puesto de
mando se encontraba antes de llegar a mulukuku en unos naranjales
que están a mano izquierda yendo de Rio Blanco A Mulukuku.
En este lugar estuvimos por más de 20 días, ya
estábamos aburridos y en una ocasión le dijimos al
jefe que si no nos mandaba a la montaña donde estaban las
tropas combatiendo nos iríamos a otro; BLI, y nos
preguntó ¿quieren combatir? Todos contestamos si,
pues mañana entran a la zona de combate, pasó esa
noche y al llegar el seguido día, nos mandaron a llamar y
estando en formación se nos notificó que
saldríamos a la zona de combate y sin más
preámbulo nos montamos en un camión zil y fuimos a
la pista de los helicópteros y esperamos por que estos
andaban dentro de la montaña, yo me sentía un tanto
nervioso y arrepentido de haber pedido ir a combatir, pero
llegaron los helicópteros y todo era horrible cuando por
primera vez vi que bajaban de los helicópteros alrededor
de diez muertos envueltos en las hamacas y un plástico
negro y nos dicen arriba y subimos a estos aparatos hechos para
la guerra dotados de artillería y un ametralladorista
pesado en la parte de atrás, cuando subimos el piso estaba
lleno de sangre y mal olor pero al final inició el
despegue y los 20 compañeros que por primera vez
pisábamos la zona de combate bajamos en un lugar llamado
las delicias en Zelaya central, propiamente en una casa de zinc
conocida como la viuda. En este lugar nos distribuyeron en
las diferentes compañías yo me quede en la primer
compañía, junto a marció, el sargento
francisco, el diablo, William, toño gaseosa y otros que
formaban parte de mi pelotón, el primer día como
todo nuevo a media noche me caí de la hamaca por no poner
bien la estaca, pero después todo pasó y cuando
emprendimos la marcha pasando por un lugar llamado San Antonio
siempre en Zelaya central y por 20 días de caminar y
caminar no tuvimos ni un solo combate, llegaron nuevamente los
helicópteros y pidieron a 20 cachorros de todo el BLI,
pero de los más nuevos y al primero que seleccionaron fue
a mí, y por orden de mi jefe de compañía me
subí al helicóptero salí nuevamente al
puesto de mando que ya se había movido de mulukuku a un
lugar cerca del ayote de Zelaya central conocido como el alfiler
junto al rio Siquia.
Me mandaron con otros compañeros a una escuela
militar en el Municipio de el Sauce llamada Arlen Siú,
esta ves para prepararme como jefe de escuadra, dotación y
ametralladorista pesado, por dos meces completos, este curso
finalizó un 12 de diciembre del año 1986, ya
había cumplido mis 17 años de edad.
Hasta este momento no había tenido ni un solo
combate, nos llegaron a traer de cada unidad y esta vez mi BLI;
se encontraba en la comunidad de. El Verdun de Nueva Guinea, y a
mi llegada, como si tal me estaban esperando, al siguiente
día partimos al poblado del Almendro del departamento de
rio San Juan, donde por la noche hubo un pequeño
hostigamiento pero no paso a más, al seguido día,
salimos del almendro rumbo a casa de zinc en ese mismo poblado
perteneciente al Rio San Juan, como a eso de la una de la
mañana seguíamos a la contra y logramos alcanzarlos
recibiendo disparos a lo loco por todos lados pero no
podíamos disparar por que podíamos herir a nuestros
mismos compañeros, al amanecer continuo la marcha y como a
eso de las 12 del medio día mientras descansábamos
en la comunidad casa de zinc, mis compañeros me pidieron
que fuera a traer agua para cocinar en mi escuadra y fui con tres
recipientes de plásticos conocidos para los nicas como
pichinga, mientras llenaba se escucharon los primeros disparos.
eran los contras que estaban en una casa cercana a donde estaba
un pelotón de mi compañía donde se
instaló el combate en ese momento yo no supe cómo
pero cuando me percate estaba con un cachorro del segundo pelotos
volando balas a diestra y siniestra y caminando entre balas para
alcanzar a la contra, mientras pasaba por una casa, vi que estaba
un fuego con mucha carne de res y entré cuidadosamente
mientras el otro compa me esperaba atento fuera y llene mi
mochila de carne y tortillas para ser compartidos con los de mi
pelotón.
Nos regresamos y al llegar donde inició el
combate los de mi pelotón me estaban buscando y nunca
pensaron yo estaba combatiendo, pero después de ese
día yo deje de ser el nuevo que todos querían
mandar y aprovechar, ya era el gran combatiente, y me iniciaron
un gran respeto, en ese mismo combate ahí inicio de los
primeros tiros hirieron a un compa que solo le faltaban dos
días para cumplir sus dos años al cual tuve la
dicha de rescatar con vida y esa fue su desmovilización
porque aun que su herida era leve, ya había
cumplido.
De este lugar pasamos de un día a otro hasta un
lugar conocido como curinwuas hasta donde nos trasladaron en los
famosos helicópteros y casi que nos dejan caer encima de
la contra por que solo caminamos diez minutos y estábamos
chocando en un gran combate que finalizó con la saldo de
21 contras muertos y solamente el ametralladorista de mi
pelotón herido, porque no quiso hacer caso a mis
recomendaciones durante el combate, este era de Managua. De
nombre Juan Bautista. Con las dos piernas heridas pero sin
tocarle hueso alguno, cuando este fue herido en pleno combate le
quite la ametralladora y dispare con odio y con sed de venganza,
finalmente recogimos los muertos de la contra y los montamos en
el helicóptero que llegaba a dejar o reponer las
municiones gastadas.
Continuando la rutina llegue a un lugar conocido como
las martinas donde un día domingo pero ya del año
1987 dimos alcance a la contra en una capilla evangélica
donde frescamente estaban dentro de los civiles y mientras
maniobrábamos para caer de sorpresa fuimos descubiertos
iniciando un gran combate donde salieron varios civiles heridos
los que sacamos al hospital en un helicóptero, emprendimos
la marcha rumbo al rio grande de Matagalpa y cuando formamos la
columna la exploración paso la voz diciendo que pase
Víctor y todos pasamos la voz pero Víctor no paso y
en ese momento me di cuenta que este estaba muerto y nos
regresamos al lugar del combate y en efecto en los primeros
disparos fue ultimado por un disparo de fal en el abdomen. Nos
quedamos en el lugar después de regresar a los
helicópteros para que sacaran a Víctor (q e p d)
quien entro a la compañía, sancionado, por que se
metió con una de las mujeres del jefe de BLI.A la
mañana siguiente seguimos la marcha cruzando el rio grande
de Matagalpa y llegando a las lomas de calzón quemado
donde nos esperaba la contra con sonido de fales y AK chinas,
acompañados de morteros 60, M 79 y algunas M 50. En este
lugar por segunda vez me andaban cerca la primera fue donde
mataron a Víctor que mientras cambiaba de posición
me dieron en el centro de la mochila por el costado derecho y
esta vez en las lomas de calzón quemado donde la bala paso
por el pie de la pierna pero solo el pantalón, obviamente
creí que no saldría con vida pero de esta manera
continuo pasando el tiempo. Legando a tener más de 80
combates a finales del año 1987.
Durante este mismo año la
contrarrevolución inicia una gran ofensiva contra los
pueblos de chontales, matando y saqueando todos estos pueblos y
somos llevados a este lugar en las famosas pipi lachas donde
bajamos en el tablazal donde se encontraba el BLI. Juan Gregorio
Colindre, tenían 5 días y 5 noches de combate, con
muchas bajas causada pero también al enemigo ya les
habían causado muchísimas bajas. Al bajar del
helicóptero en este lugar con los primeros que me
encontré fue con los cachorros: Israel Martínez
Dávila y Jairo Andrade, quienes eran de mi pueblo y me
reconocieron a lo inmediato y mientras conversamos sobre
cómo estaba la cosa en el lugar, el helicóptero de
donde ya me había bajado fue derribado con un san 7 y se
venía hecho pedazo asía el suelo, mientras
caía el aparato. Israel me decía, mira donde fueras
voz, y mientras bromeábamos me decía que lo
vería salir. Pensó que yo era permanente, pero le
conteste, no, eres tu quien me verá salir, y
pregunté ¿Cuántos meces tienes? Siete, me
contesto, te fijas le digo, sois voz quien me verá salir,
porque ya tengo 17 meces de servicio militar.
Nos despedimos y comenzó la fiesta de plomos y
amanecí comido de todo tipo de animal nocturno y al
día siguiente la fiesta continuo con mucha música
de fusilería, monos, arañas, PKM, RPK, morteros,60
y 82mm, fales y dragonog.
En diciembre de ese mismo año nos
encontrábamos en Muelle de los Bueyes, el 24 nos mandaron
en los helicópteros, unos nacatamales y una cuarta de
licor para cada uno y nos pusimos sabrosos, en este lugar
falleció un compa de. León, a quien le dio mala
digestión después de comer naranjas y leche correr
desesperado por que vio a un grupo de contras.
El 31 de diciembre en ese mismo año llegó
a Muelle de los Bueyes el comandante "Daniel Ortega". Me
designaron para participar en el acto como vanguardia de mi
compañía, distinción que se ganaba por
acciones en combate, asalto y recupere al enemigo.
En la exploración. La exploración
era una escuadra de cinco cachorros y un oficial que siempre van
delante de la compañía para recabar
información, y para detectar al enemigo, solo cargan
municiones, fusilería, granadas y unos binoculares de
apoyo, cada vez que acampa la tropa esta escuadra explora un
perímetro de un kilometro a la redonda como
prevención.
En una ocasión entramos operar en un lugar
conocido como wawachan esto está cerca del tortuguero
Bluefields, donde hasta cuatro veces al día
encontrábamos a la contra y teníamos combates de no
más de una hora, y les causábamos muchas bajas,
pero era tan duro que ya no quería que me los mencionaran
y tratábamos de no encontrarlos, pero como estaba tan
lleno de ellos, que siempre los encontrábamos.
Es importante retroceder para hablar de un compa de.
León de nombre; Leo Humberto Moya, del barrio el coyolar a
quien una mina dejada después un combate le cercenó
un pie, yo estaba detrás de él, este muchacho
recuerdo que tenía 19 meces de servicio, yo apenas 10
meces, era tan terrible que yo ni siquiera quería verle el
pié, pero este de forma desesperada me llamaba para
pedirme ayuda y fue cuando me acerque y vi que solo tenía,
pedazos de carne con huesos colgando de lo que quedaba de su
pierna y de bota nada, ni señal de que la andaba, en ese
momento.
Continué con más combates, pero el suceso
de ese día fue el que me dejo marcado para siempre y en el
momento me hice un juramento. No tendré compasión
con cada contra que encuentre y me volví una persona llena
de odió y cada que escuchaba decir contras sentía
ganas de matarlos a todos de un solo tiro, y creo que para
venganza fue suficiente lo que logré hacer
Les cuento que la jefatura del BLI. Me propusieron a una
medalla Camilo Ortega en Oro, máxima orden para destacados
en combate, los oficiales que me propusieron fueron: Pedrito El
Hondureño, Bayardo, jefe de la primera
compañía, el pollo, Galeano y el político
del BLI. El compañero Ebert Delgadillo actual
Secretario político y delegado del poder ciudadano a nivel
Departamental.
El Combate donde
el coto
Eran como las 7 de la mañana de un día
sábado, mientras la marcha avanzaba los que
estábamos en la JS19 J, porque en el BLI. También
se organizaba la Juventud, porque era necesario levantar el
ánimo a la tropa, y nos adelantábamos de la marcha
y poníamos rótulos de papel pegados en las ramas de
arbustos, con notas que expresaban. (Apúrate cachorro que
adelante esta la chavala esperándote y al subir una
cuesta, o loma sonaron los primeros disparos de la contra que
estaba tendida en toda las lomas del lugar junto a la casa del
famoso coto, quien se desempeñaba como colaborador de la
contra y al cual más tarde ajusticiamos, llegaron las 5
pm, y el combate continuaba como al inicio, pero sin heridos ni
muertos, pedimos apoyo aéreo y llegaron los
helicópteros mix 25 al los cuales por radio le
decíamos los delgaditos, en un abrir y cerrar de ojos todo
termino y por el medio de comunicación me dijeron,
guárdenme algo de lo que encuentren y conteste es
corrales, que para los comunicadores de guerra esto significaba,
es correcto.
Entre la lluvia de plomo pasaban las vacas del coto y
cuando todo terminó habían cinco vacas muertas y
solo una podíamos cargar al destazarla, porque solo
éramos 100 hombres en la compañía.
Continuamos la marcha y nos quedamos donde Antonio Toledo en
comunidad las delicias en Zelaya central, este era un
señor ganadero que tenía unas 1000 cabezas de
ganado, y cada que llegábamos nos decía que
él no tenía problemas y cada que pasaba la contra
le daba una vaca y cada que pasaba el ejercito también le
regalaba una, tenía tres hijas muy preciosas que
estudiaban en; Boaco, pero que para salir a esta ciudad tardaban
15 días según el señor. Toledo.
Fui jefe de escuadra, explorador, jefe de pelotón
y por último político de la primera
compañía, en todos estos cargos me destaqué
menos en el político porque estaba más acostumbrado
a dirigir combates y disparar sin miedo que hablar y decir
grandes discursos.
Tuve un amigo de nombre; Denis Molina, originario
de Granada que vive del trillo San Alfonso 25 varas al norte,
cruzando el arrollo, con este amigo combatimos muchas veces
juntos, tenía una hermana que siempre lo visitaba cuando
podía al igual que mi hermana; Vilsa Martínez (q e
p d) la de este amigo le Llamaban Guadalupe la cual siempre me
recordaba a mi madre. Cuando salí desmovilizado
visité a este amigo quien salió tres meces antes
que mi, cundo lo visité le caí de sorpresa y me
presentó a todas sus hermanas porque además de;
Guadalupe tenia a: Damaris, Blanca y Marlene. Este no solo es mi
amigo sino mi hermano de lucha y de todo.
Los que fuimos al Servicio militar somos seres de
conciencia revolucionaria avanzada, aquí se comparte todo,
desde la vida hasta la conciencia porque para mí, el
revolucionario se hace y no nace porque ser revolucionario
implica estar dispuesto a morir por la humanidad sin pensar en
recompensas materiales sino en las del espíritu, por eso
la frase: Porque los héroes no dijeron que
morían por la patria sino que murieron.
Es una escuela donde se forjan hombres para la vida y
hombres para la muerte.
De mi pueblo Cumplieron el. SMP. Más de 30
compañeros, entre ellos: Nelvin González,
Jesús Trujillo, Jader Trujillo, Emilio Pulido (calvina),
Juan Pulido, Jack Moncada, mi gran amigo Israel Martínez
Dávila, Huber Urroz, Eddy Moncada, Álvaro Valdez,
Elizardo Aguirre, Luder Aburto (q e p d), Omar Rivas entre
otros.
En mi BLI solo yo era de. Santa Rosa, debido a que me
reclutaron viviendo en Managua, pero tuve la dicha de encontrarme
con cachorros de mi mismo municipio, como: Israel
Martínez Dávila (Mata perro), Jairo Andrade y Huber
Urroz, quienes cumplieron en el BLI Juan Gregorio
Colindre.
En un BLI. Se camina todo el tiempo, nunca estas en un
solo lugar, porque se trataba de ir siempre en busca del enemigo
para eliminarlo o el te eliminaría a vos,
caminábamos según las indicaciones del puesto de
mando, generalmente se iniciaba la marcha a las 5 de la
mañana hasta las 6 de la tarde, recuerdo que en una
ocasión salimos del. Ayote y cuando nos percatamos
estábamos en Bluefields, en más o menos un mes de
camino propiamente en el poblado del Tortuguero.
Autor:
Oscar Danilo
Martínez
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