- La
mentalidad del español Conquistador - El
choque de las dos civilizaciones - La
"Visión" Indígena - Conclusiones
- Bibliografía
- Citas
y Notas
La mentalidad del
español Conquistador
¿Cuáles fueron las pretensiones que
motivaron a los conquistadores a explorar las Indias luego de su
descubrimiento? ¿Cuáles fueron los factores que
incidieron en la realización de la empresa colonizadora?
¿Cuáles eran las ambiciones que tenían los
aventureros? ¿Cuáles eran los objetivos que
perseguían o qué era en definitiva lo que esperaban
les daría las Indias? ¿Cuál fue la actitud
que tomaron los conquistadores ante la población nativa?
Tales preguntas tienen que ver en términos generales con
la mentalidad de los conquistadores y la actitud que tomaron
estos una vez que pisaron suelo americano. Bien cierto es que
para entender la mentalidad del conquistador deberemos tratar
diversos puntos especiales. Los trataremos a continuación
en forma ordenada para que resulte mucho más fácil
su comprensión. Cabe aclarar que el orden es por razones
sistemáticas y no está dado por un estricto valor
de importancia. Todas ellas se encuentran intrínsecamente
relacionadas y juntas caracterizan la ideología del
conquistador.
La mentalidad expansionista
Europea.
Quizás lo mas lógico sea empezar por la
mentalidad expansionista que imperaba en Europa
occidental, cuyas manifestaciones podemos observar ya desde el
siglo XIII. Particularizando, podríamos hablar de la
temprana expansión portuguesa y la española: los
primeros contactos con los archipiélagos atlánticos
(Canarias, Madera, Azores) y el descubrimiento y ocupación
del Litoral Africano en sus distintas etapas hasta llegar en 1498
hasta la India oriental con Vasco de Gama. Uno de los fines
perseguidos era abaratar las especias y demás
productos orientales tan demandados por la sociedad europea. Era
pues necesario descubrir el camino por mares y océanos que
lleven a las regiones orientales.
El descubrimiento de las Indias americanas supuso para
España una oportunidad para lograrlo. La noticia se
divulgó por toda España y desde el segundo viaje de
Colón las personas que se unían a la empresa
aumentaban progresivamente y los conquistadores aumentaron
más aun desde el momento en que la corona española
otorgó el pase libre a estos, rompiendo así con el
prometido monopolio colombino.
Afán de la sociedad cristiana por
imponer su religión.
No menos era el deseo de los europeos de imponer, sobre
lo que para ellos era el mundo entero, el
cristianismo y lograr así el tan deseado
triunfo sobre la religión musulmana que dejaba sentir su
influencia en Europa cada vez más. Ante tal
expansión, el cristianismo vio la necesidad de reaccionar
y contrarrestó la presión oriental por medio de las
cruzadas. Esto llevaba a un enfrentamiento entre el bien y el
mal, y como es de suponerse, en esta lucha debía de ganar
el bien y la verdad, representados y defendidos
para los europeos por ellos mismos. Era esta una guerra que no
podía ni debía perderse.
Una vez conquistado el continente americano, o al menos,
ciertos territorios, los eclesiásticos, y no menos
también el papado, vieron la necesidad urgente de acercar
sino imponer la religión cristiana a los naturales de las
Indias y evitar la llegada de cualquier influencia religiosa
ajena que no sea la de la Europa cristiana a
Hispanoamérica. La nueva sociedad cristiana que el clero
pretendía crear debía mantenerse pura en
términos religiosos y no debía contaminarse con los
males de la sociedad europea: la expansión de la fe
cristiana en América era indispensable para
lograrlo.
Búsqueda del oro y la riqueza
económica.
Por otra parte, en el primer encuentro de Colón
con la población autóctona, de lo que él
creía era el país de las especies, pudo este
vislumbrar muestras de metales preciosos, que una vez en la
Península, al regresar este, bastaron para estimular la
imaginación de mucha gente que soñaba con poseer
grandes riquezas (vehículo para un ascenso social)
descubriendo y poseyendo el metal más preciado en aquella
época: el oro. Es por esto que no debe de
sorprendernos que una de las ideas mas precisas de los
españoles en su segundo viaje a las Antillas era
precisamente el buscar oro. (1) La mayoría de ellos, sino
todos, iban hacia América con claras pretensiones
económicas y con el objetivo de encontrar riquezas y
regresar a las tierras que ahora dejaban
momentáneamente.
La concepción etnocéntrica del
europeo. Idea del continente vacío y del tropicalismo
de América. Reconstrucción de un nuevo mundo en
América.
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