Indice
1.
Introducción
2. Comentarios de sus Obras
Literarias
3. Críticas
Literarias
4. Vocabulario
Literario
5. Bibliografía
Plauto, el más popular de los autores de comedias
dominó la escena romana y se coronó como el
comediógrafo mas querido por el pueblo, pues sus obras
eran destinadas a todo tipo social, pues su principal misión era
divertir al pueblo romano que durante ese tiempo pasaba por
una crisis
política y
social.
Aunque nunca alcanzo nada parecido a la excelencia de sus
predecesores griegos logro reflejar en sus obras al verdadero
pueblo romano. Plauto cultivo la Palliata que son las primeras
comedias latinas inspiradas en el origen Helénico.
Tito Plauto es el primer poeta romano que se especializa en un
solo genero literario,
la comedia latina, y eran basadas en su talante jovial e
inclinadas a la risa fácil sin segundas intenciones. En
este sentido Plauto es una personalidad
excepcional en la literatura latina y
universal, sus obras llenas de gran alegría de vivir y del
espíritu burlón de autor todavía son
representadas y causan las mismas risas que hace dos mil
años atrás.
Datos del Autor
Plauto (c. 254-184 a.C.)
Nació en Sársina, Umbría. Los datos de la vida
de este gran comediógrafo latino que han llegado hasta
nosotros son muy inciertos y poco dignos de crédito. Se llegó a la
conclusión en que las noticias azarosas que sobre su vida,
proporcionadas por Varrón, (Erudito del siglo 1 a.C. que
dedicó grandes esfuerzos a llevar alguna claridad sobre
las circunstancias de la vida de este poeta umbro ) a
través de los escritos de Aulo Gelio, están
fuertemente influidas por hechos tomados de sus comedias, y que
difícilmente se puede creer que fueran realmente
autobiográficas.
Según la leyenda se trasladó a Roma cuando era
joven, donde trabajo en el entorno de compañías
dramáticas, donde pudo adquirir su conocimiento
poco común de los aspectos técnicos y del
repertorio tanto griego como romano. En Roma
mejoró su futuro oficio realizando arreglos y adaptando
las comedias griegas, y sobre todo observando, en vivo, las
costumbres de la gente de toda las clases
sociales, con la que diariamente convivía en la gran
ciudad. El amplio conocimiento
del lenguaje de
los hombres del mar, que revelan sus obras, hace suponer que
también realizó viajes por el
Mediterráneo, hasta el día en que su suerte lo
abandono, pues sus negocios en el
campo de la navegación no prosperaron.
Al parecer posteriormente como consecuencia de su endeudamiento
provocado por su actividad comercial debió aceptar el duro
trabajo de mover la piedra de un molino. Este incesante andar en
círculo y el esfuerzo que debía realizar para
empujar la viga fijada a la piedra eran faenas agotadoras. Sin
embargo, durante este tiempo
halló temas para sus obras y construyó todo un
mundo teatral que aún hoy perdura, creando así tres
comedias que obtienen un rápido éxito y
que lo convierten, ya hasta su muerte en el
ídolo de los espectadores.
Allí donde cualquier otro hombre hubiera
encontrado motivos de desesperanza, él aguzó su
espíritu, acrecentó el caudal de recursos
cómicos, acentuó su personalidad.
Las comedias que escribió durante este período de
su vida le recompensaron con un gran éxito
que estaba ampliamente merecido.
Después de tantos días de miseria volvió al
teatro, y esta
vez para toda la vida. Fue un su gran fama, y era ya un hombre rico
cuando murió en el año 184, con más de 70
años de edad.
2. Comentarios de sus
Obras Literarias
Fue el más popular de los autores de comedias y
dominó absolutamente la escena romana ya se actuando o
escribiendo desde el 215 a.C. fecha de su primer éxito
escénico hasta el 184 a.C. año de su muerte o, al
menos, de su ultima representación.
En la obra de Plauto se refleja la vida del autor, la cual se
sucede con interesantes peripecias que le sirvieron de gran
escuela.
Además Plauto vivió en una época de grandes
y fuertes convulsiones sociales y políticas.
Tal vez eso aplico todo su ingenio a conseguir una sonrisa del
pueblo en un momento en el que éste estaba envuelto en
enfrentamientos bélicos. Sus textos son muy accesibles y
populares intentando demostrar la lucha social entre patricios y
plebeyos propia por controlar el poder. Por tal
razón el público romano solía concurrir
masivamente a las representaciones obligando a los autores a
solicitar benevolencia y atención, como suele hacerlo el mismo
Plauto en los introitos a sus obras. La rápida
derivación de la comedia romana hacia lo vulgar y lo
obsceno puede ser considerada dialécticamente como causa y
consecuencia de la afluencia masiva del público.
Sus obras eran representadas por esclavos y libertos, la
temática tiene casi de manera invariable en motivo
general: un joven de buena familia,
enamorado de una muchacha, casi siempre de origen desconocido y
la esclava, la consigue gracias a la ayuda de un criado
intrigante o al súbito descubrimiento de que la joven tuvo
un nacimiento de alta cuna.
Entre sus principales obras se destacan las
siguientes:
La Asinaria: Esta comedia tiene por tema las alegres peripecias
del anciano Demetrio, marido obtuso, quien, dominado por una
esposa altiva, trata de sustraerle las veinte monedas que le ha
reportado la venta de unos
asnos, pues él desea obsequiarlas a su hijo, cuyas
calaveradas alienta.
El Mercader: Un joven ha comprado, en su viaje, una hermosa
esclava. Desea llevarla a su madre, como sirvienta. Pero al padre
del joven le parece la esclava muy de su gusto.
La Escota: Es ésta tal vez la obra maestra de Plauto. Un
pescador retira de las aguas una valija que contiene juguetes de
la hija de su amo, víctima de un rapto. Devuelta por las
aguas después de una naufragio, esta niña llega a
ser, sin saberlo, cliente
de su padre.
El Anfitrión: En esta obra se han inspirado Moliere y
Giradoux. Júpiter, para seducir a Alcmena, esposa de
Anfitrión, adopta los rasgos de este último.
Los Menecmos: Imitada por Shakespeare en su
Comedia de los Errores. Dos gemelos que se parecen
asombrosamente, pero que vivieron separados durante mucho tiempo,
se vuelven a encontrar en una ciudad. Todos los confunden, y ello
da origen a divertidos equívocos.
El soldado Fanfarrón: Farsa cuya víctima es un
pretendido héroe de su persona, de quien
todos se burlan solapadamente, empezando por su criado
Palestrión. Éste había hecho una abertura en
la pared para que su amo pudiera visitar a su prometida.
El Cofre: Comedia que trata de cómo, después de
múltiples aventuras, se descubre el origen de una doncella
que habías sido abandonada, cuando niña, en un
cesto de juguetes.
Stichus: Representada en el año 200, esta comedia refiere
la historia de dos
hermanas a quienes su padre reprocha ser fieles a sus maridos,
pues la pobreza obliga
a éstos a emigrar a otro país. Regresan
enriquecidos, y la virtud es así recompensada.
El persa: Es una farsa urdida contra el avaro Dordalus, burlado
por un amigo que se había disfrazado de mercader
persa.
Epidicus: Un anciano compra un muchacha, a la que ha oído tocar
la lira, creyendo que es su hija. El joven que le ha vendido
utiliza el dinero para
comprar a su hermana, a quien no conoce. El anciano ha sido
engañado, pero la muchacha es reconocida, y el esclavo que
armó la tramoya es libertado.
La Aulularia: En el avara de Moliere encontramos una
adaptación de este mismo argumento. El héroe de
Plauto encierra su tesoro en una marmita en vez de usar un
cofre.
El Fantasma: Traunión hace creer a su amo,
Filolaclés, a su regreso de un viaje, que hay fantasmas en
la casa. Éste es el punto de partida de intrigas y enredos
en los que Plauto ha puesto de manifiesto todo su virtuosismo, y
que han inspirado a
Regnard.
El Gorgojo: Aventuras de un hombre sin escrúpulos de
imaginación fecunda, que vive con austacia e ingenio.
Escudolus: (primera representación 191), refiere una
sucesión de intrigas del esclavo Pseudolus. Éste
sustrae dinero al
viejo Simón u al inescrupuloso Ballion.
Los Cautivos: A pesar de las fechorías del esclavo
Stalagmus, el anciano Hegión encuentra y libera a su
hijo.
El Bruto: La acción gravita en torno a una
hermosa mujer quien, para
burlarse de un militar, finge ser madre de un niño nacido
misteriosamente. Se refiere también a un esclavo bruto
quien, finalmente, es educado.
El Cartaginés: El anciano Hannon descubre que dos de su
esclavas son sus propias hijas, y víctimas de un rapto, y
encuentra a su sobrino, quien ama a una de ellas.
El Hombre de
los tres denarios: Después de una serie de aventuras
cómicas, un tesoro es devuelto a su legítimo
dueño. Esta comedia fue imitada por Andrieux en su obra El
Tesoro.
Casina: Dos esclavos de la misma casa buscan a una esclava: el
uno , para beneficiar al padre; el otro, al hijo. La suerte
favorece al anciano, pero, finalmente, éste será
vencido por la astucia.
Las comedias de Plauto son versiones libres de la
comedia griega, del repertorio de la comedia ática nueva.
Las obras de este comediógrafo reflejan la vida del autor,
llena de interesantes peripecias que le sirvieron de gran
escuela.
Influyen en el autor los grandes dramáticos griegos, pero
por otra parte Sus obras también reflejan la
búsqueda de la diversión lo que lleva a la
simplicidad de los personajes y del argumento. Los personajes son
tipos sin una personalidad profunda, meros instrumentos del trama
y la risa, lo que en la mayoría de las obras se repite. El
argumento es infantil, casi como un cuento de
hadas en el que los deseos de un joven se acaban haciendo
realidad. Lo que complica el trama es básicamente la
intriga y el enredo creado en sus textos.
En general todos los recursos
cómicos utilizados por Plauto en sus obras son
básicamente la diversión y el espectáculo en
los cuales se nota un gran movilidad en el escenario. La tramoya
y el vestuario son a veces espectaculares y los personajes rompen
la ilusión escénica y hablan con el público
mediante un dialogo vivo,
lleno de coloquialismos, con injurias, doble sentido
(generalmente obsceno) y las palabras se desbordan de escena, se
acumulan, se inventan, parodian otros lenguajes donde abundan los
chistes y
otros embrollos graciosos.
Es Plauto quien dota de gran riqueza a la comedia romana entre
sus principales aportes tenemos:
Dotó a la lengua popular
de una serie de recursos como el retruécano.
Creó personajes llenos de una sicología
rica y variada que llevó a que algunos le consideraran un
verdadero antecedente de Dostoievski en la tarea de mostrar que
el alma humana no sólo es compleja sino sorprendente.
Creó un tipo de criado que luego será tomado por el
posterior teatro europeo.
Tal es el caso de Shakespeare en su
"Comedia de las equivocaciones".
Consolidó el personaje "tipo".
Fue un profundo conocedor del público y supo siempre
cómo y dónde despertar su risa y sus aplausos.
Supo utilizar los discursos
(diverbias) y las canciones (cánticos) de tal manera que
el equilibrio
escénico se mantuviera siempre. El baile es otro elemento
esencial que acompañó las cánticos para dar
gracia plástica a sus obras.
Comprendió el valor ambiguo
de lo gestual de tal modo que no sólo lo utilizó
para ilustrar la escena sino a veces para denegarla. Así
el "Miles gloriosus" mientras se jacta de sus hazañas
guerreras, tiembla.
Comprendió la importancia de las duplicaciones
escénicas y se hace cargo de verdaderos juegos de
espejos que en "Anfitrión" alcanzan momentos culminantes.
Lo más interesante es que Plauto no sólo juega con
estos desdoblamientos sino que intuye que la posibilidad de ser
otro puede atender a una necesidad atávica en el ser.
Plauto no oculta en ningún momento que sus obras
están basadas en otras griegas; utiliza para referirse a
su trabajo el término "vertere" (traducir) y, en
ocasiones, cita el autor y la obra que utiliza como modelo. Sin
embargo, como hizo Nevio con anterioridad, maneja los modelos
griegos con una absoluta libertad; no
sólo mezcla fragmentos de distintas obras y de distintos
autores griegos (la ya comentada contaminatio, de la que Plauto
hace un amplio uso), sino que además modifica el original
cortando o añadiendo, insertando recursos cómicos
típicamente itálicos, recreando situaciones con
mayor fuerza
cómica y, en definitiva, dando lugar a una comedia
totalmente diferente, profundamente romana. La finalidad
última del teatro plautino es divertir: pretende conseguir
un efecto cómico en cada escena, aunque para ello tenga
que sacrificar la lógica
interna de la acción. Para lograr el efecto cómico
deseado no le importa al autor caer en contradicciones,
anacronismos e incongruencias; la caracterización de los
personajes es a veces extravagante y las situaciones se alargan
frecuentemente más allá de lo verosímil,
Todo ello contribuye a dar a las comedias de Plauto un carácter
fantasioso que es su principal virtud y que las convierte en
intemporales.
También en el campo de la estructura
formal se distancia Plauto de sus modelos
griegos, creando una forma nueva de comedia con entidad propia.
Como ya se ha comentado, desde Livio Andrónico el teatro
romano concede mayor importancia a las partes cantadas que el
teatro griego; Plauto acentúa esta tendencia, creando una
comedia en la que la parte dialogada o recitada (diverbia) ocupa
en la mayor parte de las obras sólo un tercio del total.
Los cantica se enriquecen en su estructura y
en su métrica; no sólo incluyen parlamentos y
recitados al son de flauta, también se encuentran
fragmentos melodramáticos (arias, solos, duos)
interpretados con acompañamiento instrumental. Este
carácter melodramático de las
comedias de Plauto, unido a su lenguaje
cotidiano y popular de gran fuerza
cómica, les confiere un carácter propio e
inconfundible. Plauto gozó siempre de una gran acogida
entre el público y sus comedias se siguieron representando
con gran éxito mientras existió una
tradición teatral viva en Roma. Durante el clasicismo
de los últimos años de la República y de la
época de Augusto la popularidad de Plauto sufre un cierto
retroceso por influencia de los grandes poetas del momento, en
particular Horacio, a quienes disgustaba en general la literatura de la
época arcaica. A partir del Renacimiento
Plauto vuelve a ser leído y representado, ejerciendo sus
obras gran influencia en el teatro inglés
del siglo XVI. Como muestra de esta
influencia de las comedias plautinas en el teatro europeo de los
siglos XVI y XVII baste decir que La comedia de los errores de
Shakespeare utiliza el argumento de Menaechmi y que El avaro de
Moliére recuerda al Euclión de la
Aulularia
Altiva: Orgulloso, soberbio.
Anacronismo: Error consistente en atribuir a sucesos, costumbres,
vestidos, etc., una fecha o época que no les
corresponde.
Antítesis:
Persona o cosa
opuesta en sus condiciones a otro.
Ática: De Ática o de Atenas, región y
nomarquía del este de Grecia, y
capital de
esta nación,
respectivamente.
Azarosa: Turbado, temeroso.
Benevolencia: Simpatía y buena voluntad hacia las
personas.
Denarios: Antigua moneda romana de oro (cien sestercios).
Marmita: Olla de metal, con tapadera ajustada.
Retruécano: Inversión de los términos de una
proposición o cláusula en otra subsiguiente para
que el sentido de esta última
forme contraste o antítesis con el
de la anterior.
Tramoya: Máquina o conjunto de máquinas
para efectuar en el teatro los cambios de decorado y efectos
especiales.
Gran Enciclopedia Temática, Editorial Norma,
S.A., Colombia, Tomo IX
Páginas 26 y 31.
Lo sé todo , Enciclopedia Larousse, Editorial Larousse,
S.A., Buenos Aires
Argentina, Tomo
VIII Paginas 1675 – 1678.
El pequeño Larousse Ilustrado 2000, Printer Colombiana,
S.A., Santa Fe de Bogotá D.C., Colombia.
www.encarta.com
www.britannica.com
www.google.com
Autor:
Irving Yáñez