Indice
1.
Introducción
2. Bibliografía
La historia de los Estados Unidos de
Norteamérica es una de las más interesantes de
todos los tiempos, pues a partir de ella pueden apreciarse los
diferentes tropiezos, dificultades y contratiempos por los que
han debido atravesar sus habitantes para consolidar lo que es hoy
la nación
más poderosa del planeta. No obstante lo anterior, es
preciso recordar también que han tenido victorias
sumamente importantes en la mayoría de sus gestas, han
contado con grandes estadistas y pro hombres que le han entregado
lo mejor de si a su patria.
En el presente estudio se pretende mostrar la historia
estadounidense desde comienzos del siglo XX, atravesando por las
diversas coyunturas que caracterizaron el desarrollo de
una sociedad pujante
y el enfoque que se le pretende dar es uno a través del
cual se evidencie la importancia de los líderes de la
sociedad
estadounidense desde comienzos del siglo. También, para
iniciar, se hará énfasis en uno de los factores que
contribuyó a la conformación del país y en
sus alcances.
La inmigración que recibió este
país, es quizá el factor más determinante
del progreso alcanzado hasta el presente. Gracias a la flexible
política
de inmigración que lo caracterizó entre
la segunda mitad del siglo XIX y 1955, alrededor de 40 millones
de personas ingresaron al territorio estadounidense
constituyéndose en el mayor flujo migratorio de toda la
historia. Las razones principales por las que decidían
venir a territorio americano eran la pobreza y la
esperanza de una mejor vida.
De esta manera, en el estrecho lapso de 350 años
se dio el poblamiento del continente norteamericano y gracias a
la significativa contribución de los inmigrantes (en su
mayoría del sur y centro de europa) se
llegó a un grado de diversificación en la producción muy importante, dada la temprana
época, y aunado a ello, se obtuvo un crecimiento sostenido
de la población y las producciones
agrícola e industrial. El más claro ejemplo de esto
lo constituyen las primeras actividades de Nueva York,
ciudad en la que se establecieron la gran parte de los
judíos expulsados de Rusia y a través del trabajo
constante hicieron uno de los más importantes centros de
manufactura
textil.
Los principales alcances de este ciclo pueden apreciarse
directamente en el refuerzo dado a la incipiente expansión
económica de la nación,
y al crecimiento de las grandes ciudades, lo cual aunado al
surgimiento de una nueva demanda
contribuyó al perfeccionamiento del mercado
masivo.
Como es de esperarse esta "luna de miel" con los
inmigrantes no duró por mucho tiempo
más, pues los trabajadores estadounidenses empezaron a
resentir las actitudes
sumisas de los trabajadores foráneos, quienes estaban
dispuestos a trabajar más que ellos por incluso menores
salarios, y fue
así como "la legislación federal prohibió la
entrada a los chinos en 1882. Los japoneses fueron excluidos en
1907, pero muchos otros inmigrantes tenían libertad para
entrar a Estados
Unidos".
Ya en el siglo XX se puede apreciar con mayor claridad
el paso de una Norteamérica tradicional, fundamentada en
el trabajo de
artesanos y campesinos cuya principal fuente de ingresos estaba
constituida por la actividad agricultora a otra, en la que los
ingresos
provenían en mayor medida de la manufactura
industrial sustentada por vías férreas uniendo
ambas costas del país, permitiendo de esta manera el
correcto intercambio de bienes a lo
largo y ancho del país.
Sin embargo, a pesar de la expansión industrial,
y de la inherente movilidad del campo hacia las ciudades, se supo
mantener un correcto equlibrio entre las industrias y el
agro, sustentado en parte gracias al descubrimiento de las islas
vírgenes en el oeste, donde se mantuvo el tipo de producción de bienes
primarios. Gracias a esta balanza de producción, los
Estados Unidos pudieron desarrollar desde comienzos del siglo una
independencia
de las otras naciones, al autoabastecerse casi en la totalidad de
los productos
requeridos por la población.
Para comenzar el siglo, la presidencia de la
nación más poderosa del planeta se encontraba en
manos de Theodore Roosvelt, un republicano que gobierna desde
1901 hasta 1909. Cabe recordar que fue el sucesor del presidente
Mckinley, quien fuera elegido para el período pero muere
asesinado por un extremista, quedando la presidencia en manos de
su vicepresidente. A pesar de la corta edad con que contaba a la
hora de ocupar la casa blanca (42) , Roosvelt, "llevó
más experiencia que la mayoría de los otros en
asuntos públicos, y más energía que
ningún otro".
Bajo el gobierno de
Roosvelt ocurre el incidente de Panamá a
través del cual Colombia pierde
la soberanía sobre esa provincia y a
través del tratado Herran- Hay se le concede a Estados
Unidos una franja de 9.5 kilómetros de anchura para llevar
a cabo la construcción del canal, a cambio de una
suma de 10 millones de U$D en efectivo y una renta anual que no
fue efectivamente cancelada.
Cronológicamente, sigue como suceso más
importante en la historia de Estados Unidos el surgimiento del
movimiento
progresista, "un movimiento
para reformar la sociedad y los individuos mediante la
acción del gobierno" cuyo
objetivo de
fondo era introducir las primeras formas de intervención
estatal en el devenir de la sociedad, porque hasta 1900 tanto
el Estado como
la economía
se habían caracterizado por el completo "laissez fairismo"
o mínima intervención del Estado en
la empresa
privada. Con la llegada del movimiento progresista se
emprendió una cruzada democrática de grandes
proporciones a través de la cual se buscó brindarle
un aire de
transparencia a las administraciones tanto nacionales como de los
diferentes estados. Sus principios
eran:
- DEMOCRACIA: que existiera más y mejor
representación del pueblo. - EFICIENCIA: En el gobierno, y honestidad
en las instituciones. - REGULACION: Hacia los empresarios para evitar la
concentración. - JUSTICIA SOCIAL: Mejor distribución del ingreso y equidad para
las masas.
A través de estos principios,
"debería estar claro, entonces, que el movimiento
progresista representó el espíritu común de
una época, no solo un grupo o
partido organizado", y esta ideología es apreciable en la labor que
empezaron a desarrollar los trabajadores sociales en las
comunidades, a las cuales iban, en especial a las marginadas en
aras de levantar centros asistenciales para la prestación
de los servicios de
salud e
instalaciones recreativas para los menos favorecidos. Mientras en
las ciudades se instauraron las primeras empresas
municipales de servicios
públicos y se sentaron las bases para el funcionamiento a
futuro de las empresas de
transportes al interior de las urbes.
Para el Presidente Roosvelt, la política era "el
arte de lo
posible" y lo demostró cuando en repetidas ocasiones
mostró severidad en el cumplimiento de la ley
antimonopólica Sherman, tanto que llegó incluso a
ganarse el remoquete de "desmontador de monopolios", y no tuvo en
su aplicación discriminación alguna pues le fue impartida
a compañías grandes como es el caso de la Standard
Oil Company.
Como sucesor de T. Roosvelt se encuentra plasmado para
la posteridad el republicano William H. Taft, un hombre
bastante robusto ( 150 kgs) y jovial, que contaba con una sabia
compañera y consejera política en su esposa, la
cual sufrió un accidente a los pocos días de
haberse trasladado a la casa blanca. Desafortunadamente no pudo
aconsejar a su marido como le hubiera gustado a causa del
percance sufrido, porque más adelante éste se
vería inmerso en un sinnúmero de dificultades con
sus contradictores políticos e incluso con los de su
partido a causa de las amplias reformas arancelarias emprendidas.
Empero el balance de su administración fue bueno, si se tiene en
cuenta que en 4 años de mandato había reservado
más tierras públicas que Roosvelt en 8,
realizó más juicios antimonopolio (25) que su
antecesor (8) y finalmente se le puede atribuir la
creación de la oficina de minas
y la oficina infantil
federal (1912).
Al terminar el período de Taft, asume el poder el
demócrata Woodrow Wilson, quien resulta elegido por
primera vez en 1913 y lo reeligen hacia 1916. Tanto el como su
secretario de Estado
tenían la firme convicción que los Estados Unidos
estaban llamados a ser los promotores del orden moral y la
democracia en
el mundo. Fue el quien decidió el ingreso de su
país a la primera guerra
mundial y durante su mandato pudieron apreciarse los alcances
de dos enmiendas constitucionales iniciadas bajo el gobierno de
Taft, la primera estaba relacionada con el fisco y
específicamente autorizaba la creación de un
impuesto con
base en cuyos ingresos se adquiría para Washington un
margen de maniobra en el campo fiduciario. La segunda tiene que
ver con la democratización del senado, que hasta ese
momento era elegido por miembros de un cuerpo colegiado, y a
partir de entonces se le da el poder al
pueblo para que realice la elección de manera directa, a
través del voto popular.
Gracias a la tendencia de intervención en el
devenir estatal que tienen los demócratas, en el
período de Wilson se crea el sistema de la
Reserva Federal (1913) a través del cual se buscó
traer orden al mercado
monetario, resolver las posibles crisis que
surgiesen y controlar el sistema
crediticio de manera centralizada. Además de esta
importante institución que subsiste hasta la actualidad,
se creó en el período la Federal Trade Comission,
cuya función
principal estaba en pedir reportes a las corporaciones y
fiscalizar las prácticas de negocios
(monopolios, patentes y precios), esta
institución se hizo totalmente indispensable para el
acelerado ritmo con el que empezaba a crecer la economía.
El siguiente Primer Mandatario en la línea
cronológica es el Republicano Warren G. Harding, quien
solo gobierna durante 2 años pues la muerte
acaba con su período presidencial justo en la mitad.
Razón por la cual es sucedido por quien fuera su
vicepresidente, Calvin Coolidge, un hombre de la
provincia, (Vermont) y de familia pobre. El
mandato de este presidente, el número 30 de la historia
presidencialista norteamericana estuvo enmarcado por una gran
prosperidad sin precedentes. Fueron los años 20 la
década conocida como una de las "doradas" en el progreso
de la construcción y adquisición de la
vivienda en los EEUU, tanto que para 1924 se afirma que 11
millones de personas habían adquirido su vivienda
propia.
El gran auge de la construcción y
adquisición de vivienda estuvo acompañado por el
"Boom" vehicular, gracias a la introducción del sistema de
producción fordista en serie que permitió la
producción del modelo "T", un
vehículo accesible a la población que cambió
y mejoró significativamente las condiciones de vida de los
habitantes. La prosperidad de la época de Coolidge
"mostró la velocidad con
la que la productividad
industrial podía transformar lujos en necesidades y
esparcirlos en la pirámide de clases"
Desafortunadamente en esta coyuntura a raíz del
auge y crecimiento
económico se dio el acceso de numerosos capitales a la
población, con altas ganancias y tasas de
interés realmente bajas, había mucho dinero en la
economía disponible para invertir, miles de millones de
dólares fueron hacia el mercado de
capitales, y la burbuja resultante de este proceso
llevó los precios de las
acciones mucho
más allá de su valor real,
todo ello, para finalmente ocasionar una caída de la bolsa
y por ende de todos aquellos inversionistas neófitos que
habían especulado de manera irresponsable. De nuevo,
gracias a la filiación política de Coolidge como
republicano se puede apreciar que no realizó mayores
esfuerzos por intervenir en la economía, pues según
él, "el Estado no
debía inmiscuirse en la empresa
privada".
Herbert C. Hoover sucedió a Coolidge y fue quien
debió sortear los momentos más difíciles de
la peor crisis
financiera y económica de los últimos tiempos, "La
gran depresión". A pesar de que trató de
proteger el sector agrario con la imposición de aranceles a
los productos de
este tipo que fueran importados, se preocupó por promover
la
educación para los estudiantes negros y se
apartó de practicas corruptas de padrinazgo
administrativo, fue en realidad poco lo que pudo hacer frente a
la crisis. Y no solo fue poco lo que pudo hacer sino
también lo que decidió realizar porque su marcada
tendencia republicana le impidió tomar cartas en el
asunto e intervenir para sacar a su país a
delante.
Terminado el mandato, vino el presidente más
carismático de la historia reciente de los Estados Unidos
de norteamérica. Franklin Delano Roosvelt. En primera
instancia cabe anotar que la transición con Hoover, el
antecesor, de profesión ingeniero (poco común para
un presidente) no se realizó en los mejores
términos pues se desarrollaron varios incidentes
públicos, propiciados por Hoover en su mayoría. Sin
embargo esto sirvió para mejorar la imagen de
Roosvelt, quien salió sin preverlo beneficiado gracias a
que estos hechos ayudaron a marcar las diferencias entre las dos
administraciones.
Al momento de asumir las riendas de su país,
Roosvelt le imprimió un alto grado de confianza al
electorado y a la sociedad en general, pues desde su discurso de
posesión les dijo que lo único que debían
temer los Estados Unidos, era al miedo mismo. Su estrategia de
jalonamiento económico (con intervención estatal)
fue el "New Deal", ideología introducida con anterioridad,
pero inmortalizada durante Franklin Delano.
Lo curioso de su administración es que no obstante realizar
un excelente trabajo administrativo y guiador contaba con uno de
los factores más importantes en política, la
Suerte, que pudo verse cuando le fueron atribuidos los
incipientes visos de recuperación gestados durante la
parte final del gobierno anterior.
Una de las principales estrategias
utilizadas por su administración fue la de invertir
grandes cantidades en infraestructura con el propósito de
generar empleo y
utilizar la construcción como sector jalonador de la
economía y por ende de la sociedad en general.
Gastó 10.5 billones en trabajos públicos, 2.7
billones en proyectos
patrocinados, empleando en diversos momentos una población
de 8.5 millones de personas. Las cuales construyeron 122.000
edificios públicos, 77000 nuevos puentes, 285 aeropuertos
y mas…
Llegada la II guerra mundial,
los norteamericanos aprovecharon de la manera más
inteligente los recursos
humanos y de capital
disponibles, haciendo de la industria
bélica en sus diferentes procesos un
foco de empleo y
progreso para gran parte del país. Los Estados Unidos pese
a su participación tardía en la gran
conflagración se involucró de lleno con la causa de
detener la amenaza nazi, el exceso de poderes de Mussolini y
sobre todo tomar retaliación con los nipones tras el
bombardeo a su base de Pearl Harbor.
Las empresas norteamericanas también aprovecharon
su enorme capacidad técnica de producción y se
dedicaron a exportar los productos que les fueran demandados en
los mercados
europeos, desde vehículos de transporte
pesado como en el caso de la General Motors o de las máquinas
almacenadoras de datos como es el
caso de la International Business Machines, IBM.
Una vez finalizada la guerra, es
menester hablar de la importancia del Plan Marshall en
la economía de post conflicto.
Marshall fue un secretario de Estado que aparte de ser un genio
organizador, también era conocido por el enorme respeto que
inspiraba entre quienes le conocieron,(ganador del premio Nobel
en 1953). Desde su discurso en
una universidad en
junio de 1947 introdujo la propuesta a las naciones Europeas para
devolver la estabilidad económica y de infraestructura.
Como era de esperarse , Rusia rechaza la oferta y
consigo veta el deseo de Polonia y de la entonces Checoslovaquia
de participar.
Este plan
canalizó ayudas por cerca de 13 billones de dólares
hacia Europa, pero los
EEUU también se vieron ampliamente beneficiados con este
flujo de ayuda pues gracias a la apertura (permanente) de los
mercados y la
demanda
europeos, obtuvo un superávit en la balanza
comercial por valor de
alrededor de 12.5 billones.
Para continuar con el legado demócrata, viene
Harry Truman quien toma en el 45 la decisión de usar la
bomba atómica contra los japoneses (6 y 9 de agosto en
Hiroshima y Nagasaki), y además es de gran importancia la
forma en que se sortea el primer incidente de la Guerra
Fría, que fue el bloqueo soviético a
Berlín y el posterior abastecimiento aéreo por
parte de los aliados. Dentro de sus alcances de política
exterior, vale resaltar la creación de OTAN, el pacto de
seguridad
internacional con mayor vigencia y solidez en la historia.
Además no se pueden olvidar las instituciones
creadas hacia finales del gobierno Roosvelt que sientan las bases
para el funcionamiento económico munial como el General
Agreement on Trade and Tarifs, GATT.
Los 20 años de poder demócrata son
cerrados con Truman, pues su predecesor sería el
republicano Dwight Eisenhower, un militar, el cual tenía
como principio evitar la guerra a toda
costa, pues no creía en el concepto de
guerra limitada, para él en esos casos el objetivo era
"destruir al enemigo lo más pronto posible con todos los
medios a tu
disposición". Fue así como decidió ponerle
punto final a la guerra con Corea, pues para el fue una
conflagración innecesaria. Evitó la guerra con
China y no
dejó proliferar el conflicto en
el canal del Suez a pesar que su principal aliado, Gran
Bretaña estaba allí. Durante su mandato la doctrina
marxista leninista fue frenada parcialmente a través del
"Containment".
John Fitzgerald Kennedy tuvo una presidencia marcada por
la carrera armamentista con la URSS que para entonces estaba bajo
el mando de Nikita Kruschev. Bajo su gobierno, América
pagaría cualquier precio por
asegurar "la supervivencia y éxito
de la libertad". En
este periodo se vive la coyuntura del punto más
álgido en la Guerra
Fría como lo es la crisis de los misiles de Cuba, en
octubre de 1962.
Infortunadamente Kennedy pasa a la lista de los
presidentes asesinados, y Lyndon B. Johnson a la de los
vicepresidentes que asumen el mando. Durante su mandato, la casa
blanca se convirtió en un instrumento muy importante para
promover actos legislativos en el congreso. De hecho, gracias a
los adeptos del presidente Johnson en el congreso, esta
época fue de gran inversión, quizás una de las menos
austeras en los tiempos de paz.
Johnson se esforzó por crear "la gran sociedad",
una en la que el Estado no se limitara a subsanar y satisfacer
las necesidades de la población sino a mejorar la calidad de
vida, incluyendo el acceso al poder para los negros y la
posibilidad de todos para ejercer sus derechos políticos y
civiles.
Para concluir, puede decirse a partir de los hechos
analizados, que los republicanos no son partidarios de una gran
intervención en la economía hasta que la Gran
Depresión muestra la
importancia del gasto
público y la regulación estatal en los caminos
del mercado. Además se puede decir que tienen un poco
más de carácter
bélico que su partido opositor.
Los demócratas por su lado, se caracterizan por
tener un amplio y activo manejo de la política
exterior.
Y en general para todo el país cabe decir que la religión protestante
contribuye al crecimiento
económico o por lo menos es un factor determinante en
la sociedad. "Los valores
democráticos y religiosos crecieron juntos. Los resultados
han sido (…) que los norteamericanos consideren que la
religión
es esencial para apoyar las instituciones democráticas que
aprecian, y por lo tanto, sienten que todo norteamericano debe
profesar alguna clase de fe religiosa".
Paul Johnson, A History of the american people, Harper
Collins publishers, 1997.
J.A.S Grenville, A History of the world in the twentieth century,
Harvard University press, 1994
George B. Tindall & David E. Shi, Historia de los Estados
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Arthur M. Schlesinger Jr, Los ciclos de la historia americana,
editorial REI, Argentina
1990.
Seymour Martin Lipset, La primera nación nueva, los
Estados Unidos desde una perspectiva histórica y
comparativa. EUDEBA 1992.
Richard E. Neustadt, El poder presidencial y los presidentes
modernos políticas
de liderazgo de
Roosvelt a Reagan, Grupo editor
latinoamericano, 1993.
Autor:
Andres Felipe Bayer