A la realización de estos largos viajes no lo
empujaron ni encargos oficiales o privados, ni la sed de
ganancias económicas, sino solamente el amor a
la ciencia, al
muy noble deseo de ampliar sus dominios. Desde el inicio, para
poder cubrir
los gastos
necesarios, que no eran pocos, debió someterse a una
severa economía. Su sueldo de profesor al
comienzo era de 50 escudos al mes, luego de 75, pero mas tarde lo
debió ceder al suplente que lo reemplazó. A menudo
le faltaban las cosas más necesarias. Un día el
Conde Carenzi lo vio en su laboratorio
mientras rompía algunas piedras, y le preguntó que
estaba haciendo. Raimondi le contesto que esas piedras, que
había recogido en uno de sus viajes, contenían
plata pura. Pensaba fundirlas con el objeto de vender el metal y
de esa manera poder tener dinero en esos
días de penuria. No le faltó la ayuda de amigos y
protectores; el mismo gobierno peruano
le suministró subsidios, y nuestro Raimondi recibió
un sueldo como químico y geólogo consultor del
Estado.
Desempeñando ese cargo escribió varios informes al
gobierno, sobre minas, divisiones territoriales, colonizaciones,
cuestiones relacionadas con el guano, aguas útiles,
nitrato, acerca de la posibilidad de introducir nuevas industrias y
manufacturas, sobre combustibles, fósiles, instalaciones
astronómicas, y sobre muchos otros argumentos
económicos y científicos. Estos informes fueron de
gran utilidad para
el estado
peruano.
Entre los muchos escritos publicados por Raimondi, entre cada
uno de sus viajes, citaré una memoria sobre el
borato de calcio, una sobre el guano, otra en la cual demuestra
que no es necesario el uso de la balanza hidrostática para reconocer el peso
especifico de los minerales, sino
que basta una balanza común.
Para facilitar el estudio de la botánica a sus alumnos, escribió
sobre los elementos botánicos aplicados a la medicina y a
la industria; por
este trabajo fue
conocido y estimado por el naturalista Dr. Weddel, quien puso el
nombre de nuestro científico a dos nuevas especies de
plantas. Cuando
en 1861 Raimondi regresó de su viaje a la Amazonía,
publicó un libro sobre
esas regiones, rico en descripciones preciosas y en
consideraciones importantísimas. Ese libro que fue impreso
por el gobierno, tuvo gran acogida en Europa,
especialmente en Inglaterra.
Diversas partes de ese libro fueron traducidas por las dos
sociedades de
Londres: La Real Sociedad
Geográfica y La Sociedad Antropológica, las cuales
lo nombraron socio corresponsal. El mismo honor ya había
recibido por la Sociedad Humboldt de México, y
en 1866 por parte de la Sociedad Italiana de Ciencias
Naturales.
También fue nombrado socio de la Academia de Ciencias
Naturales de Filadelfia, y la Sociedad de Ciencias Naturales de
California publicó en sus actas un informe de
Raimondi sobre la Geología
del Perú, que él había escrito junto a dos
memorias sobre
el Río Mantaro y los nativos Campas.
Recordándose de su patria, envió diversos
objetos al Museo Cívico de
Historia Natural
de Milán: tres cajas que contenían una momia de las
antiguas culturas peruanas, pájaros, reptiles, y algunos
minerales raros de los volcanes
peruanos. Más tarde envió también una
hermosa colección de serpientes, y el profesor Jan,
director de ese museo, puso el nombre de Raimondi a dos especies
de ofidios. No hay que olvidar que el célebre naturalista
Breithaupt le había dedicado el mineral Raimondit, el
eminente geólogo Gabb puso el nombre de nuestro
científico a ocho nuevas especies de fósiles.
Durante lo 19 años de viajes, nuestro Raimondi se
había formado una rica y magnífica
colección. Hay más de 300 objetos entre vestimenta,
armas y
ornamentos de nativos; cráneos, momias, armas antiguas,
vasijas de plata, ídolos de plata o de madera.
Habían también nueve mil ejemplares de mamíferos, aves,
reptiles, moluscos, insectos, conchas, dientes y huesos
fosilizados; habían veinte 5mil ejemplares de plantas
disecadas; quinientos ejemplares de fruta, cortezas, gomas, y
resinas. Tres mil ejemplares de minerales. Desprenderse de esa
colección de hubiera significado un gran dolor, no tanto
por le hecho que contenían cosas de gran valor
únicas en su especie y hasta entonces desconocidas por la
ciencia, sino
por le hecho que al ceder cosas que le habían costado
tanto sacrificio y por las cuales había corrido tantos
peligros, le hubiera parecido ceder parte de su sangre y de su
propia vida. Sin embargo, debido a que esa enorme
colección y por sus estudios requería de muchos
libros e
instrumentos, así como de un vasto edificio donde colocar
un laboratorio estable, aceptó ceder esa colección
al gobierno peruano. La comisión que para ese efecto fue
nombrada por el gobierno peruano, juzgó que se le
debía dar en compensación la cantidad de cincuenta
mil escudos, para que Raimondi pudiese dedicar el resto de su
vida a la continuación y cumplimento de su obra. Casi todo
ese dinero fue utilizado por Raimondi en la compra de una casa en
la Calle Junín número 333, donde habita actualmente
y donde tiene su laboratorio.
En el mismo año, o sea en 1869, el gobierno peruano
decretó que la obra que Raimondi está escribiendo
sería publicada con fondos del estado. Tal obra gigantesca
se titula "El Perú", y constará de más de
veinte volúmenes. La obra se dividirá según
las materias de estudio, de manera tal que si el autor es
sorprendido por la muerte,
cada parte puede ser independiente. La primera parte consistente
en un volumen es la
introducción a toda la obra; la segunda de
la cual ya han sido publicados tres volúmenes, es la
Geografía
y la Meteorología; la tercera parte será la
Mineralogía; la cuarta la Geología y
Paleontología; la quinta la Botánica, la sexta la
Zoología; la séptima y ultima será la
Etnología. Los volúmenes que ya han aparecido dan
una idea de lo que será toda la obra: ciertamente
será uno de los monumentos científicos más
importantes erigidos por un solo hombre.
Además de todo esto, nuestro Raimondi está
levantando un gran mapa del Perú; las hojas que ya se han
publicado de este mapa anuncian que será una obra
verdaderamente digna del gran científico.
En el mismo año de 1869, Raimondi consideró que
la larga serie de viajes había culminado, y que
debía dedicarse a una vida tranquila y sedentaria, se
casó y actualmente es padre de dos graciosos niños.
La familia
Raimondi ofrece un caso humano muy singular: de los cinco
hermanos varones solamente sobrevivieron los dos que salieron de
Italia vagando
por el mundo y expuestos a todo tipo de peligros. Uno era
Antonio, el otro era Timoleón, quien luego de haber
participado en calidad de
sacerdote en los combates de 1848, entró en el Colegio de
Propaganda. Al
culminar sus estudios fue misionero de la fe católica en
Australia y luego en Asia. Un
capitán mercantil genovés lo encontró en
Hong
Kong, se sorprendió al verlo vestido a la usanza
china y de
oírlo predicar en la lengua del
celeste imperio. Por medio de ese capitán, don
Timoleón Raimondi, quien hoy es obispo de Acanto y Vicario
Apostólico en Hong Kong, envió una larga carta a su
hermano Antonio, quien de este modo luego de muchos años
tuvo noticias de su
hermano.
6 Entre los honores recibidos por Raimondi, debemos recordar
con admiración la medalla de oro que le fue
entregada en 1871 por la Sociedad
Geográfica de Italia, la primera medalla que esa
sociedad ha entregado. En esa ocasión el presidente de
dicha sociedad dijo con mucha propiedad y
elegancia:
"En nadie hemos encontrado el concurso completo de todas las
cualidades constituyentes de un glorioso viajero
científico, en el más amplio y variado sentido de
la palabra, como en el profesor Raimondi".
En 1872 su bella colección de minerales del
departamento de Ancash le mereció la medalla de oro de la
Exposición de Lima. él
escribió sobre ese departamento y sus riquezas naturales
un gran volumen, que contiene un muy detallado mapa
geográfico.
Entre la publicación del segundo y del tercer volumen
de la gran obra de Raimondi, fue anunciada la exposición
de París de 1868. Para la ocasión nuestro
científico en muy breve tiempo supo
enviar a esa exposición una magnifica colección de
más de seiscientos minerales, entre los cuales
habían varios nuevos para la ciencia. Esa muestra estaba
acompañada por un volumen de trescientas páginas,
que contenía más de quinientos análisis. Eso le valió una medalla
de oro, y la comisión examinadora declaró que la
riqueza mineral del Perú estaba excelentemente
representada por el trabajo
hercúleo de Raimondi.
Nuestro científico tiene hoy 55 años, pero si
deberían juzgarlo por el aspecto, por su paso, por la
rapidez de sus movimientos, no le darían más de 40
años. Tiene la frente amplia, el pelo menos gris que la
barba que lleva solamente en el mentón, en el rostro casi
siempre tiene una sonrisa, y expresa un aire de bondad
que revela su calidad humana. Alto, derecho, flaco, lleno de vida
y fortaleza, sería capaz de repetir mañana el
más largo y fatigoso de sus viajes. Es muy sobrio en el
comer y no bebe licor. No fuma, consume bastante café, y
duerme lo menos posible. Al ingenio, a la profunda ciencia y a la
bondad, él une una gran modestia y una rara bondad de
ánimo que se expresa en su mirada, en su rostro tranquilo
y sereno, en sus maneras simples y amables. él suele decir
que su mayor consuelo en la vida es el de hacer el bien y que
cada uno, sin ser emperador puede gustar cada día el
placer de una obra benéfica. Ninguno de los menesterosos
que acuden a él regresa con las manos vacías.
No se puede conocer a Raimondi sin dejar de sentir afecto por
él. Un señor italiano solía decir que cuando
estaba algún momento cerca de él, se sentía
reconciliado con la especie humana. No hay forastero de
algún valor que pase por Lima que no quiera conocerlo, y
no admire su gigantesco trabajo, su ingenio y su carácter dulce. Todos los que pretenden
iniciar una empresa
minera, agrícola o industrial, si dirigen a él para
obtener información y consejos. Y él es
cortés con todos, dando información. Aunque
él conoce muy bien el valor del tiempo, cuando recibe un
visitante ocioso e inoportuno, lo recibe con exquisita gentileza,
sin hacerle sentir que su visita es prolongada.
Raimondi vive en una casa tranquila alejada del centro de la
ciudad, dedicando todo su tiempo al estudio y a la familia. Sus
únicas distracciones son la conversación con
visitantes y los paseos con sus hijos durante los días de
fiesta.
Habla correctamente el idioma italiano con un leve acento
lombardo. Es muy raro oírle alguna palabra o frase donde
mezcle el italiano con el español.
El ambiente de
trabajo que rodea a Raimondi es muy ordenado. Se puede notar en
sus colecciones, sus libros, sus manuscritos, sus dibujos, en
los mapas y en el
laboratorio químico. Hasta ahora conservo en mi memoria
más de trescientas pequeñas cajas parecidas a
volúmenes de libros, en las cuales se encuentran ordenadas
sus plantas. Con mucho gusto vi. que en estas pequeñas
cajas estaba correctamente impreso el nombre de Raimondi, y no el
españolizado como Raymondi o Raimondy como muy a menudo se
escribe su nombre en libros y periódicos.
Un detalle curioso: con tantos "conmendatori" poco menos
que analfabetos que Italia tiene en el reino y en el extranjero,
nuestro científico no es siquiera "commendatore" de la
Corona de Italia. ¡Quam magna sapientia
decorantur gentes! Exclamaremos en latín
recordando la sentencia dl famoso ministro sueco.
– A qué piensas? Se le preguntó un día a
un diputado.
– A un problema muy difícil – respondió – : si
es más ignorante una persona que me ha
elegido y a quien he condecorado, o el ministro que lo ha
condecorado.
Y aquí, antes de culminar estas breves frases sobre
Raimondi, le deseo desde lo más profundo del corazón,
que la suerte le conceda lo que él desea sobre cualquier
otra cosa, o sea, poder finalizar su gigantesca obra. Y
déjenme también expresar mi esperanza, de que
algún escritor, menos profano que yo en las ciencias
naturales, escriba un libro acerca de Raimondi que sin duda
será rico en preciosas enseñanzas y de gran honor
para nuestra patria.
"Commendatore" es un título honorífico en
Italia. (Nota del traductor).
Nota
biográfica sobre Pietro Perolari Malmignati y su
libro
"El Perú y sus tremendos días"
Giovanni Bonfiglio, Lima 2003.
Pietro Perolari Malmignati fue un diplomático italiano
que estuvo en Perú durante los años 1878 y 1881,
desempeñándose como cónsul en Lima. De
regreso a Italia, en 1882, publicó un interesante libro
con las impresiones de su estadía en el Perú: Il
Perú e i suoi tremendi giorni. Pagine d'uno
spettatore, que contiene agudas observaciones sobre la escena
social limeña y las costumbres de los habitantes de la
ciudad.
De los 12 dapítulos de su libro, el octavo está
dedicado a Antonio Raimondi, a quien conoció
personalmente. Fue el mismo Perolari Malmignati quien
otorgó a Raimondi el certificado que lo acreditaba como
ciudadano italiano, con ese certificado Raimondi pudo proteger
sus colecciones en su casa, para evitar que fueran tomadas por el
ejército chileno durante la invasión de Lima.
El mayor aporte del libro de Perolari Malmignati es la
descripción del ambiente que se
vivía en la ciudad en los momentos previos y posteriores a
la ocupación chilena, incluidos los detalles de las
negociaciones entre el cuerpo diplomático acreditado en
Lima y las fuerzas de ocupación (negociaciones en las que
Perolari participó). Dedica un capítulo a la
descripción de los diversos grupos
étnicos residentes en Lima: indígenas, criollos,
europeos, asiáticos (contiene la única
descripción que se conoce del teatro chino que
existía en la calle Capón de esta ciudad).
Esta obra contiene igualmente contribuciones en el campo de la
historia y en lo que podríamos llamar antropología urbana, en especial lo
concerniente a las relaciones entre los diversos grupos
étnicos limeños. No deja de tener también
apreciaciones sobre el sistema
político peruano, pues analiza la causa de los
frecuentes golpes de estado y especialmente la coyuntura del
asesinato de Manuel Pardo (con interesantes acotaciones sobre el
cortejo fúnebre que se organizó para el entierro de
este personaje). Termina su libro dando una interpretación de la debilidad de la
democracia
peruana, que muy bien se podría aplicar a los tiempos
presentes, y ubica la raíz del fenómeno en la
ausencia de una monarquía constitucional que aglutine las
fuerzas de la nación
.
Perolari Malmigmati estaba influenciado por las teorías
antropológicas de fines del siglo pasado, que daban al
elemento racial una connotación explicativa. Otro rasgo
ideológico de Perolari era su filiación
monárquica, a diferencia de la mayoría de los
inmigrantes italianos en el Perú, que eran republicanos.
Por otro lado, este libro contiene ausencias significativas. Por
ejemplo, no menciona el caso de los bomberos italianos fusilados
por los chilenos en Chorrillos. Ese hecho fue uno de los
detonantes para el distanciamiento político entre la
legación diplomática italiana y la dirigencia de la
colonia, que le reprochaba el no haber hecho las gestiones
necesarias para evitar esa desgracia (Bonfiglio 1993).
A pesar de estos sesgos ideológicos y de estos
vacíos informativos, el libro de Perolari contiene
interesantes datos
históricos y agudas apreciaciones críticas, que
justifican su traducción al español, pues se trata
de un libro muy poco conocido por historiadores peruanos.
El libro de Perolari queda como un importante testimonio y
fuente informativa, aunque los juicios sobre él han sido
controversiales, motivo por el cual ha sido poco difundido (no se
encuentra en las Bibliotecas
peruanas). Al parecer, la marginación de este libro
responde a las apreciaciones que Perolari hace sobre las causas
de la guerra del
Pacífico. Por ejemplo, la historiadora Margarita Guerra
Martiniere afirma: "Perolari Malmignati… es autor de un relato
que contribuye a la leyenda negra sobre la actitud de la
sociedad peruana frente a la ocupación chilena…"
[mientras que] "Tomás Caivano… es más objetivo en su
Historia de la guerra de América
entre Chile, Perú y Bolivia".
Si bien es cierto que el libro de Perolari hace una
descripción descarnada de los hechos (lo que puede herir
ciertas sensibilidades, sobre todo cuando pone en evidencia las
deficiencias organizativas del Perú en víspera de
la guerra y la indolencia de la diplomacia peruana en el
período previo al conflicto),
sin embargo se trata de un escrito que debería ser
rescatado del olvido histórico y leído con ojos
desapasionados. Como en numerosos otros libros de la época
escritos por viajeros europeos, el de Perolari contiene
también apreciaciones subjetivas relacionadas con las
teorías raciales en voga en la época . A pesar de
ello es un libro valioso, en cuanto testimonio directo de una
época crucial para la historia del país, que no
deja de tener apreciaciones agudas.
A diferencia del libro de Perolari, que ha sido casi
descartado por la historiografía oficial peruana, el libro
de Tommaso Caivano ha sido editado en varias ocasiones (Caivano
1979).
Las diferencias entre ambos trabajos reflejan las distintas
actitudes de
sus autores. En tal sentido, el aporte de los cronistas italianos
de la guerra del Pacífico es plural; por lo mismo es
interesante su comparación, a la luz de los
acontecimientos históricos y de las investigaciones
posteriores: Caivano (republicano, antimonárquico y
anticlerical) hace una interpretación marcadamente
antipierolista, su adhesión a la causa peruana refleja el
apasionamiento típico del romanticismo
italiano; mientras que la interpretación de Perolari
(monárquico), es aguda, descarnada y pone el acento en
aspectos de organización política y
militar.
Perolari retornó a Italia en 1881 y murió
allí el 16 de julio de 1886.
Fuentes: Annuario Diplomatico Italiano. Roma, Ministero
degli Affari Esteri, 1990; Perolari
Malmignati 1882; Sacchetti 1906: 68.
Ver: Guerra Martiniere, Margarita. "La República,
1827-1899". En: Historia General del Perú, tomo
VII.
Lima, Ed. Brasa, 1994, 399 p.
Este rasgo es común con autores europeos como el
francés Charles Wienner e incluso el alemán
Ernest Middendorf; cuyos libros sin embargo han sido
recientemente traducidos al español y publicados. Por otro
lado, en los últimos años han aparecido varios
informes consulares y de viajeros que hacen descarnadas
descripciones del ambiente político y social peruano del
siglo pasado. En tal sentido, el libro de Perolari debería
ser más difundido y leído críticamente.
Según Estuardo Núñez, el ambiente oficial
peruano ha dejado de lado el libro de Perolari de un modo
explícito (incluso se prohibió hacer referencias a
ese documento en la década de 1940).
Algo parecido sucedió antes con los escritos de Ernest
Middendorf y de Wienner, hasta que fueron vencidas las
resistencias
iniciales.
(1)La fotografía
que aparece en la obra de WIENER, Perou é Bolivie, no es
otra que la que tuvo por años nuestra abuelita Ana
María, justamente en el cuarto que daba al lado izquierdo
de la casa de Chota 1263 en Lima; cuadro que estuvo allí
por años, sin que nadie se interesara por el. Pasados unos
años, nuestra tía Agripina (la tía Pina),
decidió que esa fotografía debía ir a parar
a la casa del Arq. Fernando Belaúnde Terry; sí, el
propio ex – Presidente Constitucional del Perú, ya que
éste era un estudioso de Charles WIENER, conjuntamente con
el Dr. Félix Alvarez Brún (ex – Embajador del
Perú y Canciller de la
República), ambos se internaban por horas, revisando
apuntes y recopilando escritos de nuestro bisabuelo ¡aunque
Usted no lo crea, mi querido primo! Otro personaje que tiene
información, es nuestra prima "Chinita Tarazona Wiener";
ella, inclusive sabe algo de su vida y hasta el asunto
hereditario que él rechazó de su familia, con tal
de irse de Austria y hacer su vida como mejor le parecía,
cosa que para ti, hoy es un asunto nuevo, tanto lo último
como lo anterior.(Nota de Mario Gino Garibotto Wiener a su
primo)
En Ecuador..
Entre 1.879 y el 82 vivió en el Ecuador. A poco de
arribado a Guayaquil sufrió el contraste del hermoso
panorama de la costa con su marcada insalubridad. Gratamente
impresionado por la obra emprendida por el Dr. César Borja
Lavayen, le tocó estar presente en la epidemia de fiebre icteroide
de 1.881, año en que asumió el Viceconsulado de
Francia en
Guayaquil. En Julio de 1.882 visitó la región de
Manabí y envió al "Museo del Hombre" un par de
sillas de piedra, de lo cual dio informes, aparecidos en la
Revista de
Etnografía de París. Tenía
ideas muy especiales sobre las enfermedades, pensaba que
los excesos alcohólicos y de otra índole
predisponían al pueblo a sufrirlas. Amante de la naturaleza,
realizó un viaje al Amazonas utilizando el muy conocido
camino de Papallacta hacia el Río Ñapo, para lo
cual salió desde Tumbaco, de cuya epidemia de fiebre
tifoidea opinó correctamente, que era debida al agua malsana
que se bebía en esa población. (1)
En el oriente estudió el Mal del Bicho (oriurosis
amebiasis) y su doloroso tratamiento, comentó sobre los
trastornos producidos por las picaduras de los mosquitos y de
ciertos artrópodos como los alacranes. Informó de
cuestiones étnicas de los indios Yumbos, Záparos,
Sunos, sus hechicerías y otras prácticas
relacionadas con la medicina naturista a base de hierbas.
Retornó por la vía de Manaos a Europa en 1882.
En 1880 había editado en París el libro
"Pérou et Bolivie" en cuarto, con profusión de
mapas en 791 Págs. Más bien descriptivo que de
valor.
En 1882 dio a la luz en París "Les Indiens Colorados et
les sieges de Fierre de la Región de Manabí",
articulo de cuatro páginas solamente, pero de gran
interés
porque habla de los indios Colorados diseminados por Guayas, Los
Ríos y Manabí antes de su internamiento al
último de sus habitat, las actuales selvas de Santo
Domingo. Dicho trabajo fue traducido y en 1.885 salió como
"Visita de los Colorados" en la Revista Globus de Alemania. Sin
embargo sus principales publicaciones iban a la
conocidísima revista francesa con ediciones en diversos
idiomas: "América Pintoresca" donde aparecieron bajo el
título de "Viaje al río de las Amazonas y a las
Cordilleras" indicando que había descubierto una nueva
vía comercial de grande importancia para
Sudamérica, lo cual no era cierto. En otros
periódicos también salieron noticias suyas,
así por ejemplo en "L' Exploración", donde
llamó mucho la atención, tal afirmación, aunque los
geógrafos
más familiarizados con los descubrimientos en
Sudamérica se rieron del "descubrimiento". Desconozco si
regresó a estos países o si radicado en Europa no
volvió a salir.
GUILLERMO HIGGINS
LAMBERT
El 20 de Enero de 1.878, el Encargado de Negocios de
Francia Du Chesne de Bellecourt, le había extendido las
Letras Patentes como Vice Cónsul de Francia en Guayaquil.
El exequátur fue firmado en Ambato por el General Ignacio
de Veintemilla y su Canciller Javier Endara. Higgins se
desempeñó hasta el 81 que fue reemplazado por
Charles Wiener.
(1) Aunque no estuvo presente para la epidemia de fiebre
hicteroide que azotó Guayaquil en 1881 y de la que tuvo
noticias por medio del Cónsul William Higgins; a su
regreso se asombró de las obras de saneamiento ordenadas
por el Dr. César Borja Lavayen y opinó que los
excesos alcohólicos y de otras índoles de la gente
del pueblo, les había hecho más propensos a sufrir
esa enfermedad.
En 1880 le fue encargada una Misión
científica en la Amazonía para lo cual
siguió la vía de Tumbaco, de cuya epidemia de
tifoidea tomó nota que se debía a las aguas
malsanas consumidas en dicho sector.
En la Amazonía permaneció hasta 1882 explorando
principalmente las riberas del río Napo y haciendo
anotaciones científicas muy curiosas. Se interesó
en la oriurosis amebiana o enfermedad del Bicho, cuyo tratamiento
era muy doloroso. Contó los trastornos producidos por los
diversos tipos de mosquitos y artrópodos como el
alacrán. Igualmente informó sobre otras cuestiones
étnicas de los indios Yumbos, Záparos y Sunos, sus
hechicerías y prácticas médicas
naturistas.
En 1880 la Editorial Hachette de París dio a la luz sus
obras "Pérou et Bolivie. Récit de voyage, survi
d'etudes archelogiques et etnographiques, et de notes sur
escriture et les langues des populations indiennes" volumen en
cuarto y 791 pags. Y "Routes dens Interiour de la Republique de'l
Ecuateur" que tuvieron gran venta y
aceptación por su carácter exótico a la par
de científico, sobre todo la primera, por los 1.100
grabados, 37 cartas y 18
planos de los antiguos monumentos.
En 1883 fue ascendido a Vicecónsul y luego a
Cónsul del Servicio
exterior francés. Entre el 83 y el 84 la revista "Le Tour
du Monde" de París publicó por entregas su obra
más conocidas "Amazonas y Cordilleras" profusamente
ilustrada por célebres artistas, que apareció
traducida al español con el título de "Viajes al
río de las Amazonas y a las cordilleras" en la
Colección América Pintoresca editada en Barcelona.
Una tercera edición
apareció en 1958 en la Biblioteca
Indiana de Madrid.
A fines del 84 le fue encargada la función de
Secretario del Consulado francés en Santiago de Chile. De
allí en adelante, dedicado por entero a su
profesión diplomática, dejó de escribir. En
1889 fue Agregado en la Legación de México. El 95
fue Cónsul en el Paraguay y
presidió una Misión en Sudamérica. El 97
viajó a Montevideo y Río de Janeiro. Luego estuvo
en Caracas.
En 1907 ascendió a Ministro Plenipotenciario de
primera clase,
distinción que ostentó hasta su jubilación
en 1910 y establecido en Río de Janeiro le
sorprendió la muerte de
escasos 62 años en Diciembre de 1913, con fama de hombre
de mundo de gran ilustración y muchas aventuras.
. En Guayaquil revisó la política del Ecuador,
las relaciones del dictador Ignacio de Veintemilla y la iglesia, el
comercio, la
importancia económica y política de las islas
Galápagos, la mejor vía de comunicación para relacionar al Ecuador con
Francia. Igualmente recorrió el país y
dedicó gran atención a su capital,
aconsejando la construcción de una vía fluvial
entre Bahía y Guayaquil. También revisó la
influencia norteamericana en los negocios del país
etc.
Wiener, Charles <1851, Österreich –
1913, Brasilien>: Pérou et Bolivie : récit de
voyage suivi d'études archéologiques et
ethnographiques et de notes sur l'écriture et les langues
des populations indiennes /par Charles Wiener. Ouvrage contenant
plus de 1100 gravures, 27 cartes et 18 plans. —
Paris : Hachette, 1880. – 796 S. : Ill.
Abbildungen aus dem Buch von Wiener
Wiener, Charles. Pérou et Bolivie . Récit the
voyage suivi d"études archéologiques et
etnographiques et de notes sur l"écriture et les langues
des populations indiennes. Paris, Hachette & Cie.
1880
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En Brasil
De esta importancia conferida a los yacimientos
arqueológicos surgieron las investigaciones sobre los
"montes de conchas" efectuadas por Charles Wiener (1876)
Wiener (1876) calculó que los concheros
tenían dos o tres siglos. Las observaciones
geológicas de los yacimientos arqueológicos
sirvieron de base para la fijación de una
cronología sobre el poblamiento de Brasil
Wiener (1876), por ejemplo, a partir del examen de las
evidencias
óseas suministradas por los esqueletos humanos, muestra
cómo algunos de ellos estaban rotos, calcinados e
incompletos. Sólo podrían ser entonces restos de
comidas, pues la carne humana era muy apreciada por los indios de
los concheros, eran ellos un pueblo que veía en su
semejante solamente un objeto de alimentación.
Domingos Soares Ferreira Pena (1876: 88) no estuvo de acuerdo con
Wiener. Los concheros de Pará, al final, revelaron
esqueletos completos y, además, los indígenas
sí comían la carne humana, pero sólo la de
sus enemigos, para satisfacer su excesivo odio y extraordinario
espíritu de venganza. Pero, además de la
antropofagia, los indígenas poseen otras costumbres
repugnantes. Los indios de los concheros entierran a sus muertos
en el mismo suelo donde
duermen, entre vestigios alimenticios, en el medio de la basura y lo
más próximo posible al padre, hermano, madre, hijo
y mujer del
fallecido (WIENER: 1876). Sí, si el Imperio quiere
interiorizar la civilización, debe domesticar a los
indígenas, hacerles convivir con los blancos, inculcarles
costumbres nobles, librarles de la antropofagia. Pese a ello, no
todo está perdido. Manuel Goçalves Tocantins
(1876), estudiando el cotidiano de la sociedad que produjo las
reliquias de la "cultura
marajoara", analizándolas meticulosamente, enfatizó
que el pueblo que las fabricó era bastante adelantado en
la industria cerámica. Se podría, incluso,
llevarlas a las grandes Exposiciones Universales, donde
evidenciarían que el Imperio posee una génesis
histórica fundada en una cultura sofisticada.
Además, algunas tribus se someterían con más
facilidad a las normas de una
política indigenista, puesto que ya están
habituadas a la labor y al esmero industrial. – WIENER, C.
1876. Estudos sobre los Sambaquis del Sul del Brasil.
Arquivos del Museu Nacional, (1): 2-20.
Sistema
de cálculo de
los incas en
debate
Ingeniero italiano afirma haber descubierto nuevo sistema
contable
dcodificato da un ingegnere italiano di Pescara il
complesso calcolo degli incas denominato yupana
Dennis Dávila Picón
Fonte: asp?val=1
7 febbraio 2004
c.u. 28-01-2004| Una nueva interpretación del sistema
de cálculo de los incas, la yupana, fue revelado por el
ingeniero italiano Nicolino De Pasquale quien anunció el
descubrimiento de uno de los misterios
estudiados por más de 500 años en la muestra
Perú, 3.000 Años de Obras Maestras que se realiza
en Florencia desde diciembre de 2003. El profesor universitario
Pasquale afirma que este sistema estaría en base 40, con
lo cual contradice todo lo que se creía hasta ahora, en el
sentido de que los antigüos peruanos utilizaban un sistema
contable con base decimal. Los incas, que recurrían a la
yupana para hacer sus cálculos, operaban de derecha a
izquierda y, comenzando desde la última fila que
correspondería a las unidades, lograban efectuar
cálculos con sorprendente precisión tanto en
operaciones
sencillas hasta complejos cálculos astronómicos. El
doctor Carlos Radicati, en su obra El sistema contable de los
incas: yupana y quipu, señala que el estudio del tablero
comenzó en 1869 al descubrirse en la provincia de Cuenca,
Ecuador, un objeto semejante a la yupana referida por
Guamán Poma en 1613 y aludida por el padre Juan Velasco en
1789. Posteriormente fueron registrados hallazgos en las ruinas
de Chán-Chán y otros ejemplares fueron descubiertos
en la sierra de Ancash y zonas aledañas, así como
en la provincia de Pisco. Estas tablas presentaban diferencias en
diseño,
material con el que estaban elaborados, tamaño, forma y
disposición de los escaques o cuadrículas en bajo
relieve.
Hechas de piedra, arcilla, madera o hueso y mostraban, algunos de
ellos, decoración con motivos humanos y animales, todo lo
cual reflejaba la existencia de subtipos originarios de diversas
regiones del Tahuantinsuyo. En cuanto a su utilidad, se le
atribuía tres usos posibles: eran maquetas
arquitectónicas, ábacos para cálculo o bien
tablas empleadas para los juegos de
azar.
Pero la hipótesis que tuvo mejor aceptación
fue la de Charles Wiener (1877), quien reportó dos
tableros de granito parecidos que habían sido encontrados
en una ruina de un poblado prehispánico. Estos
instrumentos -según Wienner- servían para calcular
los tributos que
pagaban los ayllus de la zona; en ellos fueron registrados, por
medio de granos de diferentes colores, las
contribuciones de todos los habitantes de un pueblo,
representando cada color una tribu.
También presentó una posible manera de realizar el
cálculo, afirmando que los pisos de estas especies de
depósitos tenían la particularidad de elevar diez
veces más el valor del grano que allí se hallaba;
de manera que un grano en una división indicaba un valor
de contribución, que podía ser diez o cien veces
mayor que el de otra división. Esto, inicialmente, fue
aceptado por los historiadores, pero luego el mismo Wiener la
modificó por otro procedimiento que
contenía inconsistencias, por lo que fue dejado de
lado.
El primer investigador que dio una interpretación a la
yupana había sido Henry Wassén (1931), quien
sostenía que en este instrumento el valor numeral se
expresaba verticalmente y según una progresión
decimal que iba de 1 a 10 000. El cálculo se hacía
horizontalmente, empleándose una progresión de 5,
15, 30 y 30. Pero esta forma de contar fue considerada poco
práctica e imposible por algunos matemáticos, por lo que pronto fue
desestimada. Con el transcurso de los años, gran
número de historiadores han tratado el tema y, así,
mucha tinta ha corrido tratando de descubrir este misterio. Pero,
a pesar de ello, a nadie se la había ocurrido cuestionar
el sistema decimal, atribuido tradicionalmente al proceso
mediante el cual calculaban los antiguos peruanos. Hasta que,
hace poco, un ingeniero aeronáutico italiano de 54
años, Nicolino De Pasquale, se atrevió a hacer
público un trabajo que ha remecido los cimientos de estos
estudios y amenaza con dejar obsoleto todo lo argumentado en
favor de los decimales incaicos. Pasquale, quien no sabía
nada de este imperio del sur, ha afirmado sin rodeos que el
sistema de cálculo incaico es en base al 40, lo cual no
deja de ser interesante, sobre todo si se toma en cuenta que los
estudios que analizan la cosmovisión inca sostienen que
estaba basado en el número cuatro; cuyo mejor ejemplo son
los cuatro suyos: Antisuyo, Collasuyo, Chinchaysuyo y Contisuyo.
La polémique está abierta.
De Colombia
Otros viajeros, franceses en esta oportunidad, como Charles
Wiener, Jules Crévaux, Claude Charnay y Edouard
André, en especial, nos dejaron memorias gráficas de gran valor, gracias a sus
dibujantes que sin haber estado presentes (algunos de ellos),
interpretaban, allá en el Viejo Mundo, las descripciones
de los recién llegados. Las gráficas, casi todos
grabados, se puedan ver en las obras, América
Pintoresca (ver edición, El Ancora Editores.
Bogotá, 1984 y en La Geografía Pintoresca de
Colombia.
Edición Litografía Arco. Bogotá, 1984). En
el primer libro figuran bajo títulos, al texto,
así: -Pág. 46 Guardadora de lguazas en
Tuluá. -Pág. 106 Hocos (pavas), lguaza (pato),
Harpia (águila), Clasico Mohudo (oropéndola).
-Pág. 112 Yacuman (Loros y paujiles).
IRENE WIENER VDA. DE GARIBOTTO
LA NIETA DE CARL WIENER
Regards sur
l'Amérique latine
A la différence des autres continents,
l'Amérique ne fait l'objet d'aucune visée coloniale
de la part de la France qui y développe son influence
selon trois axes majeurs : les investissements de capitaux,
le mouvement des hommes, la diffusion de sa culture. La
période est marquée par deux échecs
retentissants : l'anéantissement du rêve
mexicain de Napoléon III et le scandale de Panama.
>S'il est vrai que la structure des échanges
commerciaux avec le continent sud-américain porte la
marque du peu d'intérêt porté par les
industriels français á ces marchés
lointains, s'il est vrai aussi que la concurrence anglaise et
allemande y est particuliérement vive, la part des
investissements français en Amérique latine
enregistre une forte progression, passant de 4 á 12 %
entre 1882 et 1902.
Quant au flux migratoire, il s'oriente principalement vers
l'aire méridionale et tempérée, avec plus de
100.000 résidants en Argentine á la veille de la
Grande Guerre, l'Uruguay et le
Chili constituant les deux autres grands pays d'accueil. C'est en
fait trés peu en comparaison des communautés
espagnoles, italiennes et allemandes.
Dépourvue de colonies influentes et massivement
implantées, incapable d'atteindre une position
économique et financiére dominante qui puisse
rivaliser avec celle qu'occupe l'Angleterre, la France jouit
cependant du rayonnement de sa production culturelle et
artistique et occupe, dans ce domaine, la premiére place
á la faveur du grand mouvement de circulation des
idées. Passée l'époque des luttes pour
l'indépendance sud-américaine, le capital de
sympathie dont bénéficie la France, héritage
des Lumiéres et de la Révolution française,
ne s'évanouit pas, loin s'en faut. Son audience
auprés de l'intelligentsia reste trés forte,
notamment marquée par un goût
immodéré pour les lettres françaises.
Dans un mouvement inverse,les nombreux voyages d'exploration
et les missions scientifiques, témoignent d'un
éveil français á la
spécificité latino-américaine, ouvrant un
vaste champ d'études alors á peine
défriché. Les photographies que le consul
Charles Wiener a rapportées en 1899 de sa longue
mission attestent de cet intérêt, oú se
mêlent la curiosité du géographe et l'envie
de faire découvrir.
Conversando con un amigo judio me explico que la
asimilación habia sido todo un drama para los judios en el
mundo, de alli que decidi transcribir la explicación:
La
asimilación
La asimilación es uno de los flagelos más
importantes del siglo pasado y del presente. El mundo, que antes
los segregaba y los encerraba en los guetos o buscaba su
desaparición, ha dado un vuelco total y, por lo menos a
nivel social, les abre sus puertas a las anchas y los invita a
ser parte integral de su sociedad. Incluso la Iglesia Cristiana
ha tomado una senda de conciliación y tolerancia.
La educación del
judío, que hace muchos años creaba recelo y
envidia, hoy genera admiración.
Lamentablemente muchos judíos
no solo aceptaron esta apertura, sino que le facilitaron el
trabajo de absorción, por medio de la asimilación a
esa sociedad. No supieron poner límites a
esta invitación de la sociedad moderna, y muchos, de
invitados se convirtieron en anfitriones.
El costo fue y es
muy alto, hay quienes dicen, que el daño de
la asimilación ha superado ya al del Holocausto, se
han perdido más judíos con este flagelo que con la
maquinaria de exterminio nazi.
Hay dos causas para la asimilación: 1) La
pérdida los valores
judíos fundamentales, 2) la pérdida de la vida
judía.
La
pérdida de valores
judíos
Esta pérdida suele suceder paulatinamente y se
refleja en los momentos de disyuntiva, donde deben optar entre
dos valores contradictorios. Por ejemplo: cena de Shabat en casa
o salida con amigos, trabajo en Shabat y progreso profesional o
Shabat en el Shul, comida kosher o tacos con los
compañeros de la universidad, una
buena muchacha judía o una buena muchacha gentil. En este
caso son ellos los que definitivamente eligen, nadie los
condiciona y al darse la pérdida de nuestros valores la
vulnerabilidad llega a su grado máximo.
La
pérdida de la vida judía
Obviamente está directamente relacionada con lo
anterior. Cuando cambian estos valores, disminuye o desaparece la
vida judía ya que contradice su nuevo Standard.
El cuidado del Shabat es un buen antídoto para la asimilación. Por un
lado el Shabat les enseña los valores, de la existencia de
un Creador, los redime de la esclavitud a sus
instintos, a sus pasiones, a las adicciones, a la
sociedad, etc les enseña la trascendencia espiritual, une
a la familia y por otro lado genera una capa protectora contra la
asimilación al provocar un cambio
sustancial en su vida judía, no es una mitzvá de un
momento dado en el año, es un precepto continuo y
cíclico. Ningún gentil va a estar interesado en
unir su vida a una persona que vive 24 horas, un día a la
semana, en otra dimensión. No trabajar, no viajar, no
cocinar, dedicar el día al rezo y al estudio, etc.
El cumplimiento del Shabat no sólo los hace
distintos un día a la semana, sino que cambia su
visión de toda la semana.
Ahora podemos entender por qué la Pesikta
(Midrash) dice "Todo el que cumple el Shabat es como si cumpliera
toda la Torá". No es una exageración, al
concientizarlos de los valores antes mencionados, toman conciencia de
muchos otros aspectos importantes del judaísmo, si creo en
Dios y entiendo que la espiritualidad debe tener un papel
protagónico en la vida, entonces no sólo el Shabat
es importante, también lo es el kashrut, las fiestas, las
leyes de la
pureza familiar y por sobre todo la educación de los
hijos en este camino.
Dijeron los Sabios: "Más de lo que los
judíos cuidaron al Shabat, el Shabat cuidó a los
judíos". El Shabat salvó de la asimilación a
los judíos en la época de los griegos, arriesgando
sus vidas por su cuidado. Salvó la identidad de
miles de judíos en la inquisición que
encendían velas de Shabat en los subsuelos de las casas,
mantuvo la identidad de miles de inmigrantes europeos y
sefarditas que estuvieron dispuestos a perder su trabajo para
conservar este valor tan importante. Mantuvo la dignidad
judía en los guetos y campos de concentración. Y
sigue siendo hasta hoy día el mejor regalo a su pueblo,
como lo expresa el Midrash (Yalkut Shimoni; Parashat Ki
Tisá)
"Le dijo Dios a Moshé: "Un hermoso regalo tengo
en mi depósito, su nombre es Shabat, y quiero
entregárselo a Israel, ve y
díselo a ellos""
SIGNIFICADO DE
JANUCA
Y Yehudá Macabí y sus hermanos con toda la
comunidad de
Israel resolvieron que la fecha de la reinauguración del
altar debía ser celebrada, año tras
año, durante ocho días, desde el 25 del mes de
Kislev con alegría y regocijo (Macabeos, IV, 57)
Janucá significa en hebreo inauguración. Se
refiere en este caso a la reinauguración del Templo de
Jerusalén, primera medida reparadora adoptada por los
heroicos luchadores después de su victoria sobre las
huestes enemigas (griegos).
Dice la leyenda que al penetrar los judíos en el
Beit Hamikdash, profanado durante años de
dominación Siria, y al disponerse a encender de nuevo el
candelabro cuya luz debía arder continuamente en el altar,
hallaron un cántaro del aceite puro y
sagrado que había permanecido inviolado; y aunque su
contenido era el que otras veces consumían las
lámparas en un solo día, en esta oportunidad
alcanzó para ocho, tiempo requerido para la
preparación del aceite fresco.
Debido a ello se llama Janucá "Fiesta de las
luminarias" y la Janukia o Menorá con las velas es el
símbolo característico de esta festividad. Sostiene
otra leyenda que al ver profanado la Menorá, los Macabeos
tomaron ocho lanzas olvidadas por los sirios en el interior del
Templo y las rodearon de maderos en cuya extremidad superior
asentaron las lámparas, creando así, con las mismas
armas del enemigo, un provisorio al símbolo ultrajado.
LA MESA DE
JANUCA
Como Janucá es la Fiesta de la luces, la mesa debe ser
atractiva y decorada con diferentes tipos de Janukiot y velas de
diferentes colores. (No hay ningún tipo de
restricción en la cantidad de Janukiot que debe de haber
en las casas, solamente que el shamash siempre se distinga del
resto de las demás luces). Una Janukia deberá
ponerse en la ventana para que pueda ser vista desde afuera y
así cumplir con la Mitzvá de "Pirsum Hanes". Debe
haber adornos alusivos a la fiesta como martillos (por la palabra
Macabi), Dreidls, las letras Nun, Gimel, Hei, Shin o Pei
recortadas en hebreo de diferentes colores, monedas de chocolate
cubiertas de papel metalizado, ¿elefantes?… si elefantes
ya que los griegos tenían en su ejército este tipo
de animales y por desgracia uno de los Macabeos pereció al
ser aplastado por uno de ellos). Las flores rojas representan la
sangrienta batalla de los Macabim contra el enemigo y el mantel
azul representa la justicia de la
causa judía. Los niños probablemente estarán
familiarizados con los dreidls pero no con las jarritas o
elefantes, lo cual le ofrece la oportunidad de platicarles
más sobre la historia de Janucá.
Mantelería
La combinación de manteles de diferentes colores
alegra siempre la mesa.
Para un arreglo tradicional, usan un mantel blanco o
beige con servilletas doradas o azules, y alrededor de las
servilletas un moño dorado o azul que hace contraste. Para
un efecto más moderno usan un mantel de papel color dorado
con servilletas rojas. O utilizan un mantel rojo, con servilletas
azules o doradas.
Janukiot
Hacen su propia lámpara de aceite. Es muy
fácil de hacer. Solamente ponen un poco de aceite de oliva
en nueve frasquitos de vidrio iguales y
pon un pabilo que salga del frasquito. Los arreglan de tal manera
en la mesa que el shamash esta en el centro y se reconoce que es
el shamash.
Decoración en las paredes
Coronas o guirnaldas con flores significan el gran
triunfo de Yehuda Hamacabi ya que así decoraron el Bet
Hamikdash después de haber sido recuperado. Cadenas de
papel con estrellas de David, dreidls, moneditas y
elefantes.
Alimentos
Los alimentos que se
acostumbran comer en Janucá están relacionados con
aceite. También se acostumbra comer alimentos lácteos.
Cesar A. Salomón Herrada, Peruano – Italiano,
Nació en el Callao – Perú el 12 de Noviembre de
1947, hijo de César Augusto, Salomón Calle,
de origen Palestino y de Doña Daría, Herrada
D"Ángelo, de origen Siciliano, Italiano,
cursó sus estudios en el Colegio Particular
"César A. Vallejo", Callao – Perú y sus
estudios Universitarios los realizo en la Universidad
Nacional "Federico Villarreal", Facultad de Administración, Lima – Perú,
1967-1971 y en la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas
1981-1987, graduándose como Licenciado en Administración y Abogado respectivamente en
dicha Universidad, mereciendo la distinción de
MENCIÓN HONROSA, al graduarse de Abogado. Tiene las
siguientes publicaciones:
http://www.gratisweb.com/csalomonh,
http://www.members.fortunecity.es/cesarsalomonh/resumen.htm
"Dimona: Muerte en el Neguev", Abril 2002, Cuento
Denuncia, Contra la Proliferación de Centrales
Atómicas; "Dimona: Muerte en el Neguev", Septiembre
2003, Novela Denuncia,
Contra la Proliferación de Centrales Atómicas;
"Camino por la Vida": Historia para comentar, Novela sobre
los Refugiados en Canadá, Septiembre 2003; "Poemario
por la Paz", en francés, septiembre 2003; "Literatura y Cultura
Palestina", publicado por la Casa del Poeta Peruano. Lima
-Perú.
"Historia de Inmigrantes y el Problema de la Inmigración Italiana en el Perú
1855-1890", Diciembre 1999, Lima – Perú, www.callao.org/cultura,
Libro microfilmado por el Archivo de
Historia
Familiar de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los
Últimos Días.
Cuentos: "Don Elías, Escultor y Restaurador por la
Gracia de Dios" Noviembre 1998; "Milagro en la
Catedral" 1999; "Rasputín" Cuento para Meditar,
1999; "Nafi el Benefactor"– Mayo 1999;
"Los Niños de los Campamentos" Cuento de
Ocupación, Julio 2005; "En Busca de la Identidad
Perdida Charles Wiener" 2006, Yaser Arafat El Solitario"
2005, "Cesar Vallejo: El Poeta" 2005,
"Invitación al Fraude"
2005.
Premios Internacionales en Torino-Italia, Centro de
Estudio Cultura y Sociedad "Poesía
por la Paz",
Premio Poesía "De la Palestina, De la Paz, del
Amor y otros
más", Abril 2000; Premio en Narrativa
Cuento "Nafi el Benefactor"– Mayo 1999; Premio
Poesía poema "Alguien dijo", Mayo 1996;
Director de la Revista "Panorama Árabe"
1996-2002, Lima – Perú; Corresponsal Periódico
"Mundo Árabe", Santiago – Chile 1996-2002;
Director de la Revista "Italianita" Lima-Perú,
2002;
Director de Relaciones Exteriores de la Casa del Poeta
Peruano 1994; Presidente de la Federación de Entidades
Americano – Árabes – FEARAB-PERÚ
1996-1999; Presidente de la Federación Palestina del
Perú, FEPAL PERU 1994-1995; Miembro de la Junta
Directiva del Ilustre Colegio de Abogados del Callao –
Perú, 1995-1996; Senador del Parlamento Mundial de los
Estados para la Seguridad y
La Paz, Palermo-Italia 2000-2010, Profesor Honorario de la
Universidad San Andrés, Santiago Chile 2000 y Universidad
Andina Néstor Cáceres Velásquez, Juliaca
Perú, 1999; Miembro Ilustre del Colegio de Doctores en
Educación del Perú, 2000; Ha sido distinguido con
la "Estrella Académica Universal" del
Board Mundial de Presidentes
O.M.H.S de la Republica Argentina
2006.
A Irene Wiener Vda. de Garibotto
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