- Introducción
- Literatura de
México - Explicación
del Titulo - Movimiento
Literario - Estructura
externa de la obra - Estructura
Interna de la Obra - Temas
Principales - Temas
Secundarios - Argumento
- Género
y especie al que pertenece - Tipo
de Narrador - Persona
- Lengua
- Personajes
Principales - Personajes
Secundarios - Ubicación
- Recursos
- El
contexto Social, Político y cultural de
México - Conclusión
- Bibliografía
Introducción
La literatura
tiene una serie de términos a los cuales les da
significado especial. Para leer bien y comprender una obra
literaria se necesita estudiarla cuidadosamente para reconocer
los aspectos que la forman.
Como Agua para
Chocolate de Laura Esquivel es una novela que cuenta
la sensibilidad y romanticismo de
Tita, la menor de las tres hermanas que verá como su amado
Pedro se casa con su hermana Rosaura, mientras ella tendrá
que ocuparse de la cocina y de su madre, Mama Elena, al respetar
la tradición de que la hija menor tendrá que
permanecer soltera al lado de su progenitora.
En este caso investigue a través del libro teniendo
en cuenta los momentos más importantes y rescatable de
la novela para
luego transcribirlas a la monografía, sin dejar de lado los
mínimos detalles para no quitarle sentido a la obra.
Tuve en cuenta aspectos que tienen mucho que ver con la obra,
como por ejemplo la literatura mexicana, y los distintos
contextos del lugar. Para ir relacionando los momentos y poder conocer
mas sobre el tema a analizar.
Literatura de
México
La literatura de México
tiene sus antecedentes en las literaturas de los pueblos
indígenas de Mesoamérica. Sin embargo, con la
llegada de los españoles, se dio un proceso de
mestizaje que luego dio paso a una época de
criollización de la literatura producida en la Nueva
España.
El mestizaje de la literatura novohispana es evidente en la
incorporación de numerosos términos de uso
corriente en el habla local del virreinato. Durante la
época del virreinato, Nueva España albergó a
escritores barrocos como Bernardo de Balbuena, Carlos de
Sigüenza y Góngora, Juan Ruiz de Alarcón y Sor
Juana Inés de la Cruz, El Fénix de América.
Hacia el final del régimen colonial, en Nueva
España surgieron figuras como José Joaquín
Fernández de Lizardi, cuya obra es considerada como
emblema de la picaresca mexicana. Ya como nación
independiente, la propia inestabilidad política durante el
siglo XIX favoreció no sólo en la literatura, sino
en todas las actividades artísticas en México.
Hacia la segunda mitad de ese siglo, la literatura mexicana
comienza a resurgir, con obras como los mexicanos pintados por
sí mismos, libro costumbrista. Hacia el final del siglo,
durante el Porfiriato,
los escritores mexicanos se inclinaron hacia las tendencias
dominantes de la época. Destacan la pléyade de
poetas modernistas como Amado Nervo y Manuel Gutiérrez
Nájera. Una vez concluido el conflicto
civil, el tema de la Revolución
apareció como tema en novelas, cuentos y
obras teatrales. Esta tendencia sería antecedente del
florecimiento de una literatura nacionalista, que tomó
cuerpo en la obra de escritores como Rosario Castellanos o
Juan Rulfo.
También aparece en escena una literatura de corte
indigenista, que pretende retratar el pensamiento y
la vida de los pueblos indígenas de México, aunque
irónicamente, ninguno de los autores fuera
indígena. Entre ellos hay que señalar a Miguel
Angel Menéndez Reyes a Ricardo Pozas y a Francisco Rojas
González.
De modo alterno a estas corrientes dominantes, se
desarrollaron en el país otros movimientos menos conocidos
por estar fuera del foco principal. Entre ellos hay que
señalar a los estridentistas (década de 1920), como
Arqueles Vela y Manuel Maples Arce. Otro literario de relevancia
para la historia
literatura del país lo constituyó el grupo de Los
Contemporáneos (década de 1930), que agrupaba a
figuras como el periodista Salvador Novo y los poetas Xavier
Villaurrutia y José Gorostiza. Ya hacia la segunda mitad
del siglo XX, la literatura mexicana se había
diversificado en temáticas, estilos y géneros. En
1990, Octavio Paz se
convirtió en el único mexicano hasta la fecha que
ha ganado el Premio Nobel de Literatura.
Escritores del México independiente (Siglo
XIX)
Durante el siglo XIX hubo tres grandes corrientes literarias:
el romanticismo, el realismo-naturalismo y el modernismo.
Los escritores románticos se agruparon en
torno a dos
asociaciones, la Academia de Letrán, fundada en 1836
(José María Lacunza, Guillermo Prieto, Manuel
Carpio, Andrés Quintana Roo, José Joaquín
Pesado, Ignacio Rodríguez Galván, Ignacio Ramírez) y
el Liceo Hidalgo, fundado en 1850 (Ignacio Manuel Altamirano,
Manuel Acuña, Manuel M. Flores).
Más tarde, durante el auge del positivismo el
gusto estético cambió. Entre los escritores
mexicanos realistas y naturalistas tenemos a Luis G.
Inclán, Rafael Delgado, Emilio Rabasa, José
Tomás de Cuellar, Federico Gamboa y Ángel de
Campo.
Dentro de la corriente modernista, revolución
literaria originaria de América
Latina, hubo numerosas innovaciones métricas y de rima
y principalmente, hallazgos simbólicos. Entre 1895 y 1910
México se volvió un núcleo de actividad
modernista, entre los escritores tenemos a Gutiérrez
Nájera, González Martínez, Díaz
Mirón y Amado Nervo.
Novelistas y Cuentistas
Justo Sierra O'Reilly (1814 – 1861)
Florencio María del Castillo (1828 –
1863)
Ignacio Manuel Altamirano (1834 – 1893)
Federico Gamboa (1864-1939)
Ángel del Campo (1868 – 1908)
José Rubén Romero (1890 –
1952)
José Tomás de Cuellar (1830 –
1894)
Gregorio López y Fuentes (1897
– 1966)
Manuel Payno (1810 – 1894)
Guillermo Prieto (1818-1897)
Edmundo Valadés (1915-1990)
Poetas
Manuel Acuña (1873)
Salvador Díaz Mirón (1853 –
1928)
Juan de Dios Peza (1852-1910)
Enrique González Martínez (1871 –
1952)
Manuel Gutiérrez Nájera (1895)
Enrique González Rojo (1899 – 1939)
Renato Leduc (1898-1986)
Rafael López (1873 – 1943)
Página siguiente |