- El viaje
- La conquista del
velero - Gakusha, el
tigre - La dama de las
sombras - Conversaciones en las tardes
sin importancia - El caballero
Bolitro - Gabriel, la luna y el
lago - Conversaciones, simples
conversaciones - Al caer de las
velas - Velero de cristal, velero de
las estrellas - El
grito de Anna
EL
VIAJE
Eduardo viajaba con su tía Anna hacia la casa,
era un día muy caluroso pero a él le gustaba el
calor porque
no sentía dolores como en el invierno, además le
gustaba viajar viendo el paisaje.
Al llegar se detuvieron para ver el mar y fue cuando Edu
vio la casa iluminada en el muelle que para él era "un
velero de cristal".
LA CONQUISTA DEL
VELERO
Edu luego de reposar bastante por el largo viaje
comenzó a recorrer la casa la cual le pareció
maravillosa, y de la cual le atrajo una estatua de tigre al borde
de la piscina.
A el le pareció que no estaba dentro de una casa
sino de un barco, porque desde ella se podía ver el mar
por todos lados. El encontraba a todos los objetos de la casa muy
atractivos.
GAKUSHA, EL
TIGRE
amigos y podía mostrarle muchas cosas
maravillosas, hasta en las noches sacarlo a pasear. Pero Edu no
debía contar a nadie que el tigre tenia Edu luego que su
tía saliera, sale a ver la estatua del tigre la cual le
llamaba la atención y puso su oído en
ella, al oír sus latidos se alejo con miedo y ella le
hablo y le dijo que no temiera que podían ser vida.
Así nació una amistad entre
ellos. Edu seguía maravillado con el velero.
LA DAMA DE LAS
SOMBRAS
Edu tenia que permanecer en la casa porque hacía
varios días que el mar sufría una tempestad, por lo
cual él no podía salir a hablar con su amigo el
tigre.
Edu sentado en un gran sillón aproximado al gran
ventanal comienza a sentir nostalgia por su familia, y en eso
oye que doña María Jurandir le habla porque se
había desencantado lo cual ocurría martes, jueves y
sábados, y venia para charlar con el, ella era una lechuza
muy quejona.
Edu seguía afligido porque su mamá no
había llamado.
Página siguiente |