1.
Introducción
2. La épica como instrumento de
expresión heroíca
3. Alonso De Ercilla Y
Zúñiga(1533-1594)
4. La Araucana
5. Poetización en "la
araucana"
6. El heroísmo en "la
araucana"
7.
Conclusión
8.
Bibliografía
La historia de la conquista
ofreció gran material para la literatura ejemplo de ello
es la audacia de pequeñas bandas de aventureros
españoles; la lucha indígena por preservar su
libertad y el
trauma mutuo de ambas culturas por el enfrentamiento de un "otro"
radicalmente diferente. De esta forma se llega a la
creación estética de "La Araucana" conformada por
este amplio y complejo mundo de elementos enmarañados en
una representación histórica contradictoria. Todo
gracias al genio de Alonso de Ercilla y Zúñiga que
jugó el papel de poeta
y soldado logrando en ello expresar un poema épico de gran
sentimiento heroico.
Ahora bien, dentro de esta complejidad nos centraremos
en el "Heroísmo de la Conquista en La Araucana", tal tema
fue llevada a cabo ideológicamente expresando las grandes
hazañas de ambos grupos; sin
embargo la idealización de la raza araucana sobresale
majestuosamente y monumentalmente sobre la de los conquistadores
españoles. Este trabajo se ve acompañado por
evocaciones a la naturaleza y a
los mitos griegos
y latinos queriendo lograr igualar a los héroes araucanos
con personajes como Ulises y Aquiles, a su vez que enaltece su
propia épica utilizando imitativamente recursos de la
épica tradicional que acompaña con un sentimiento
del renacimiento de
éste género.
Para la realización de este trabajo se
tendrá en cuenta varias teorías
para llegar a un exhaustivo análisis de la obra tomando como punto de
inicio su estructura
épicas y las funciones que
cumplen otros elementos característicos de la épica.
También se indagará sobre el concepto de
héroe y que papel ocupa en
la obra desde la teoría
de Bajtín. De esta forma concluiremos con este
trabajo.
Historia de la Conquista de Chile
La conquista se inicia en l519 con la entrada de la
banda de Hernán Cortés al imperio controlado por la
ciudad de Tenochitlán, el período de la conquista
culmina literariamente con "La Araucana" de Alonso de Ercilla y
Zúñiga(1533-1596).En tal época se lleva a
cabo la estabilización de colonos en Chile bajo el
liderato de Pedro de Valdivia.
En "La Araucana" se observa un conjunto de motivos
contradictorios que quedan insertados en el monumental
espectáculo de una victoria militar elevada a la
universalidad espiritual del imperio. La estructura
narrativa de la obra está basada en la movilización
del imperio araucano contra la segunda expedición de Pedro
de Valdivia al sur de Chile en
1553.Este material histórico cubre desde el salto araucano
al fuerte de Tucapel hasta la derrota sufrida por los indios en
Quipeo a fines de 1558. Lo cual podría tratarse de un
desarrollo
horizontal en el que Ercilla introduce un eje vertical marcado
por la llegada de García de Hurtado y su expedición
punitiva a la Isla de Quiriquina en 1557, en la que venía
el poeta. Este acontecimiento da la visión
ideológica en la que Ercilla habla de la
concentración de un poder superior
en individuos que al intervenir en el curso de la historia la transforman en
una gloria imperial.
A modo de superar los errores cometidos por los
españoles en la campaña como la muerte de
valdivia y el avance de Lautaro, líder
militar araucano sobre la ciudad de Santiago y la muerte de
éste en un ataque sorpresivo sirven de augurio del arribo
de la Expedición de García de Hurtado con que se
inicia la segunda parte de la obra. De allí en adelante se
dan las victorias españolas. Por otra parte la tercera
parte se inicia con la derrota española en Purén
con la sublevación araucana que implica una
disgregación y desviación del material
histórico. En parte esto se debe a la declinación
del ánimo combativo de los araucanos: Caupolicán el
segundo líder
militar araucano es capturado y ejecutado. En adelante Ercilla
presenta la guerra
araucana diluida en múltiples escaramuzas menores hasta la
gran batalla en Quipeo es ésta la tercera parte en la que
predomina un aspecto autobiográfico de la
pacificación .En ella relata el incidente conocido del
duelo, por tal conducta fue
condenado a muerte,
perdonado y encerrado en prisión. De esta manera "La
Araucana" culmina con el retorno del autor a Europa.
2. La épica como
instrumento de expresión heroíca
La necesidad de interpelar al Estado
Español
llevó los protagonistas de la conquista a estructurar sus
discursos de
acuerdo con modalidades propias del género épico.
La épica era tomada como forma de elaboración
ideológica de la experiencia histórica: ella supone
un descomunal salto entre lo específico y lo universal.
Ese salto se da en el hecho de que la épica articula
intereses privados que en el desarrollo del
discurso
aparecen como verdades.
En el esquema épico la figura
históricamente concreta del líder militar
transformado en héroe suprahumano se revela durante las
pruebas que
debe sufrir, convención esencial de la épica. En
este proceso el
héroe demuestra su valor,
resistencia,
espíritu de empresa, sangre
fría, sabiduría y audacia ante el peligro.
Así logra su superioridad por sobre el resto de los
hombres realizando hazañas fuera de lo común y de
lo normal. El problema ideológico entre la especifidad
privada y la universalidad pública surge cuando en
algún momento el individuo parece postergar sus intereses
privados y exhibe su magnanidad que pasa a representar los valores
más excelsos de su raza, pueblo o nación.
El héroe y por extensión la comunidad
representada, quedan exaltados a la categoría de
arquetipos de la especie humana en busca de una vida plena, en
que no existen obstáculos para la voluntad.
La arquetipificación universalista no logra
borrar, sin embargo, el origen clasista de esta construcción. Esto es visible en la
estructura misma de la épica: la narración enfoca
primordialmente al héroe y a sus seguidores, conforman una
élite de poder que se
diferencia de las masas soldadescas. Mientras todo lo contrario
sucede con las masas estás que surgen como una fuerza
anónima, difusa, sin voluntad propia, maleables a la
voluntad del héroe y de su élite.
El interés
material potente en la épica dirige la atención sobre el revés de la trama
de la convención de la épica universalizante, pues,
para lograr lo que el héroe quiere éste debe
someter a otros hombres. Porque, porta en su mente un esquema de
ordenamiento social y frente a ese esquema las sociedades
encontradas adquieren un aspecto cultural
caótico.
Por último, es necesario indicar dos aspectos
complementarios del género épico: su existencialismo y religiosidad. Lo primero ocurre
porque la posibilidad de la muerte es
esencial en la aventura épica, Por ello es que durante el
relato, el sentimiento del tiempo toma un
ritmo urgente a la espera de la catástrofe final,
impulsando a los héroes a la superación de
sí mismo. Tal incentivo a la superación se ve
reflejada en la religiosidad, adquiriendo de esta forma un tono
metafísico, como una concreción divina que se
manifiesta en las acciones
humanas. Esta certidumbre refuerza todavía más la
capacidad épica para depredación,
destrucción y represión de los vencidos.
En fin todo estos elementos serán observados
posteriormente en el análisis correspondiente de "La Araucana",
visualizaremos de la mano de Ercilla la compenetración de
lo americano y lo español en su obra. En la que supo
cantar sobriamente la epopeya de una raza heroica que sólo
a sangre y fuego
pudo ser domeñada, y hoy en día Chile cuenta entre
sus glorias raciales con el ambiente y
tono de su poema "La Araucana".
3. Alonso De Ercilla Y
Zúñiga(1533-1594)
Poeta y soldado español, autor de la primera gran
epopeya americana: "La Araucana" .
Nacido en Madrid de familia noble,
entró a servir en la corte como paje del entonces
príncipe Felipe II. En 1556 llegó a Perú con
el virrey García hurtado de Mendoza, fue nombrado
gobernador de Chile, Ercilla le acompañó y
participó en la expedición contra los araucanos. La
campaña duró un año y medio y le supuso la
experiencia que se referiría a ella "como los años
más floridos de mi vida".Y que es la contemplación
del heroísmo y del espíritu indómito de los
indígenas araucanos y de los soldados españoles, le
inspiraron el poema épico de la , gran épica culta
de la literatura
americana, sobre la conquista de La Araucania que formó
parte del Virreinato del Perú. En la obra también
se habla de intrigas y disputas entre los españoles y que
en una de ellas perdió el favor de Hurtado de Mendoza y
tuvo que regresar a Europa, aunque
esto no significa que perdiera los favores reales ya que en 1564
fue nombrado duque de Lerma.
Poema Épico de la conquista interesante por su
tono realista y por las circunstancias de su composición
supuestamente la única escrita durante el curso de una
guerra
"escribiendo muchas veces en cuero por falta de papel y en
pedazos de cartas". Sin
embargo, la obra no aparenta ser escrita apresuradamente.
Compuesta en octavas reales, consta de 37 cantos que abarcan la
descripción de Chile, los preparativos para
la guerra, las victorias de Lautaro y Caupolicán.
Además incluye muchas digresiones como la historia de la
hermosa Glaura y Tegualda, narradas al propio Ercilla, quien en
ese momento se convierte en personaje de su propio poema. Otro
aspecto interesante es la manera en que el autor trata de captar
el punto de vista de los caciques indígenas:
"Tomé y otros caciques se
metieron
en medio de su destos bárbaros de presto
y con dificultad los despartieron
…………………………………………
y en voz airada, ya el temor pospuesto,
Colocolo, el cacique más anciano,
A razonar así tomó la mano:
Caciques del estado
defensores,
Codicia de mandar no me convida
………………………………………..
mas el amor que
siempre os he mostrado,
a bien aconsejaros me ha incitado."
Canto II
Demostrando con ello su intento de penetrar en aquellas
almas que tanto fascinación causaron en él, por lo
tanto esta simpatía es defendida en su prólogo
temiendo posibles críticas al respecto: "y si algunos le
pereciere que me muestro algo inclinado a la parte de los
araucanos, tratando sus cosas y valentías más
extendidamente de lo que para bárbaros se requiere, si
queremos mirar su crianza, costumbres y modos de guerras y
ejercicio de ella, veremos que mucho no les han hecho ventaja, y
que son pocos los que con tan gran constancia y firmeza han
defendido su tierra contra
los fieros enemigos como son los españoles".No obstante, a
pesar del sentimiento de admiración que siente el poeta
por el pueblo araucano, éste en el transcurso del poema
justifica la guerra como mandada por Dios, sumamente interesante
por la perspectiva del autor.
Por otra parte, "La Araucana" intenta superar la
monotonía de su estilo mediante el realismo de
sus descripciones bélicas. El logro del autor es solamente
parcial, pues tiene notoria dificultad en manejar los transcursos
de una escena a otra. Es verdad que "La Araucana" no es
constante; y no lo es por una razón lógica,
ya que, tratando sobre algo tangible, que está
sucediendo en el momento, por fuerza la
imaginación se ve en ocasiones relegada por la necesidad
de ceñirse a la realidad histórica. En lo
demás, el poeta historiador se superpone el historiador
poeta, y aún cuando se trate de cosas que en realidad
sucedieron, pone en ella algo de inspiración
poética. Además esta obra fue escrita por la
necesidad de que esta conquista no perdiera en el tiempo, pues,
ella reclamaba un cronista veraz:
"si causa mi incitó a que
escribiese
con mi pobre talento y torpe pluma,
fue que tanto valor no
pereciese
ni el tiempo injustamente la consuma"
Canto XII
De esta manera, el sentido de crónica verdadera
se anima a través de episodios coetáneos como la de
Lepanto, San Quintín y alusiones a la antigüedad con
narraciones como las de Elisa y Dido, tal variedad refuerzan el
discurso.En
consecuencia cabe destacar que "La Araucana" conserva a pesar de
estas digresiones la objetividad de la épica
española como las del tiempo de la gesta, ya que Ercilla
se coloca como testigo de la historia y a la vez que lo dedica a
su señor tal poema como si fuera este su único
público:
"Suplícoos gran Felipe, que
mirada
este labor, de vos sea recibida,
que, de todo favor necesitada,
queda con darse a vos favorecida.
Es relación sin corromper sacada
De la verdad, cortada a su medida;
No despreciéis el don, aunque tan pobre,
Para que autoridad mi
verso cobre.
…………………………………………….
Y haberme en vuestra casa yo criado,
Que crédito
me da por otra parte,
Hará mi torpe estilo delicado,
Y lo que va sin orden,, lleno de arte;
Así, de tantas cosas animado,
La pluma entregaré al furor de Marte;
Dad orejas, Señor, a lo que digo,
Que soy parte dello buen testigo."
Canto I.
Aunque, Ercilla afirma que se va a relatar la verdad, no
significa como se ha dicho anteriormente que se escriba el
discurso en la formación discursiva
historiográfica. Pero como discurso da suficientes
indicaciones de inscripción en el tipo de discurso
épico en la formación poética. Es
sólo en el nivel de una semántica del mundo en el
que se ofrece una variante al cambiar la generalidad de lo
verosímil por lo particular de la verdad. Y luego, sabemos
que el programa que
iniciativamente se había propuesto el autor no se lleva
cabo. Y este cambio de
perspectiva conducirá a un discurso más
épico y poético, ejemplo de ello es la
modificación de la primera estrofa del Canto
XIX:
"Hermosas damas, si mi débil
canto
no comienza a esparcir vuestros loores
y si mis bajos versos no levanto
a concetos de amor y obras
de amores,
mi priesa es grande, y que decir hay tanto
que a mil desocupados escritores
que en ello trabajasen noche y día,
para todos materia y
campo habría."
Canto XIX
Cerrando este capítulo es necesario mencionar que
esta obra corresponde a la categoría de los poemas
épicos cultos: son creaciones más reflexivamente
elaboradas que las tradicionales. En los poemas cultos
se manifiesta la
personalidad del autor. Por su asunto pueden distinguirse los
poemas heroicos, religiosos, filosóficos y
alegóricos. Y "La Araucana" corresponde a los de asunto
heroico que según Rafael Lapesa Melgar: "los poemas
heroicos son los mas cercanos al espíritu de la epopeya
tradicional".El modelo
clásico del poema heroico culto fue la Eneida de Virgilio
cuya grandiosidad se debe a su intenso dramatismo y suave
melancolía.
5. Poetización en "la
araucana"
En el Renacimiento
con la formación de las naciones modernas, cada uno de los
países deseo poseer una epopeya culta, exaltadora de las
glorias nacionales. Además, la poesía
es el género que primero asimiló la estética
del Renacimiento, por
medio de la imitación de maneras italianas como la
utilización de elementos distintivos como el verso
endecasílabo que se combinaba con diferentes estilos de
estrofas como la octava real. Un ejemplo de la disposición
de la rima octava es la siguiente: AB: AB: ABCC
(2+2+4)
"El buen Lasarte con la diestra
airada
en medio del furor se desenvuelve;
pasa el pecho a Talcuén de una estocada
y sobre Titagnan furioso vuelve;
abriole la cabeza desarmada mas el rabioso bárbaro
revuelve
y antes que la alma diese, le da un tajo
que se tuvo al arzón con gran trabajo"
Canto XV
Es así que el poeta anima la estructura fija de
esta estrofa épica, y tales características fueron las que aseguraron
lo italiano en las letras hispanas. Resultado de esto fue las
aspiración del poeta en expresar sus sentimientos,
adoptando una actitud
idealizadora de la realidad, ejemplo:
"Chile fértil provincia y
señalada
en la región antártica famosa
de remotas naciones respetada,
…………………………………………"
Canto I
La mención de esta descripción da la
sensación de un locus amenus de Garcilaso, una especie de
paisaje ideal como las de las poesías
pastoriles. Y consecuentemente esta forma del italianismo es
común en todas las literaturas europeas y ningún
país aparece en la primera mitad del siglo XVI más
saturado de tal influencia que España.
Dentro de los escritores del Renacimiento Ercilla
constituyó un imitador de Virgilio, Ariosto y Tasso.
Aunque en él se manifiestan aquel indianismo, que
podría revelarse objetivamente como una propuesta de una
patria tolerante fusionada en el mestizaje que exigía el
territorio conquistado. Ercilla habla a través del
texto
haciéndose presente en el poema como conciencia
crítica. Con su poema se coloca entre los pioneros, como
Las Casas en criticar el poder, la violencia, y
la expropiación de los conquistadores quienes destruyen
ese paraíso, plantando la codicia como
estandarte:
"Nuestro campo por orden recogido
retirado del todo el enemigo
fue entre algunos un bárbaro cogido,
…………………………………………
hubo de ser, para ejemplar castigo
de los rebeldes,……………………..
mandándole cortar ambas manos"
CantoXXII
Su sensibilidad lo lleva a tomar una posición que
asume como poeta ante el hombre
americano obligado a admitir tales crueldades:
"Quien sin duda publica que entraba
destruyendo ganados y comidas,
privando a los caciques de la vida;
quien a nobles dueñas deshonraban
y forzando a las hijas recogidas,
haciendo otros insultos y maldades;
sin reservar lugar, sexo ni
edades."
Canto XXV
La aventura de Chiloé proporciona la pintura de un
Chile idealizado. El descubrimiento de la región del sur
de Araucania, aun sin explotar y no contaminada por los
españoles, es el lugar donde situar una nueva humanidad y
concretar la utopía anhelada por el europeo:
"Hacese este concilio en un gracioso
asiento de mil florestas escogido
donde se muestra el campo
más hermoso
de infinidad de flores guarnecido;
allí de un viento fresco y amoroso
los árboles
se mueven sin ruido,
cruzando muchas veces por el prado
un claro arroyo limpio y sosegado,
do una fresca y altísima almeda
por orden y artificio tienen puesta
en torno de la plaza
y ancha rueda
,capaz de cualquier junta y grande fiesta,
que convida a descanso,……….."
Canto I
La poetización de esta obra se encuentra
precisamente en el mencionado anteriormente de que en Ercilla
pudo más el poeta que el cronista en el momento de poner
por escrito sus memorias. El
lapso entre los hechos ocurridos y la escritura
acrisolo y despertó la sensibilidad del poeta para darnos
un poema épico donde vencedores y vencidos son seres por
igual
6. El heroísmo en "la
araucana"
En "La Araucana" el Heroísmo se presenta como un
intento de igualar ambos bandos opositores, sin embargo, son los
araucanos los que con gran monumentalidad emergen de este canto
épico. Por lo tanto son ellos los verdaderos
héroes, tenaces en la defensa de sus territorios. Mientras
que los españoles vienen a representar el papel de
antihéroes, que sólo con la desolación pudo
vencer aquella raza lograron vencerlos, aunque siempre fieles a
sus deberes patrios, constituyendo esta condición una
forma de enaltecer su patria: España.
Con respecto a los españoles estos dentro de la
estructura épica del poema son una fuerza casi
anónima, ya que aparecen nombrados en masas adquiriendo
solamente épicamente en grupos:
"Fue hecho muy notable que requiere
mucha atención y autorizada pluma:
y así digo que aquel que lo leyere,
en que fue de los grandes se resuma.
…………………………. …………………
y los nombres también de los soldados,
que con razón merecen ser loados.
Almagro,Cortés, Córdoba, Nereda,
Morán, Gonzalo Hernández, Maldonado,
Peñalosa, Vergara, Castañeda,
Diego García Herrero el arriscado
Pedro Niño, Escalona, y otro queda
Con el cuál es número acabado:
Don Leonardo Marique es el postrero,
Igual en el valor siempre primero"
Canto VI
Otras características sobre el héroe
español es la de su personalidad
definida por el mismo autor, cuyas expresiones exaltan
constantemente el valor personal, como
también de su vanagloria, orgullo, arrogancia y su codicia
por riquezas. Y es así que a lo largo del poema van
desfilando las figuras de Almagro, "animoso, valiente, franco y
quisto"; Valdivia, perezoso y negligente, descuidado", aunque en
mi parecer es la figura más destacable en el bando
español, pues, él fue el expedicionario que
domeñó en primer instancia al pueblo araucano. No
obstante pese a ello fue muy incrédulo y en consecuencia
se encaminó hacia su fatal muerte. Otra figura de
héroe español es la de Villagrán,
según Ercilla de "sabias razones como capitán
escarmentado, que incita con el ejemplo a continuar con la lucha
y evitar el pánico".
Y personalmente lo más llamativo de "La Araucana"
es la presentación implícita de la persona de
Ercilla, cuya personalidad
se expresa serena, defensor de las mujeres, compasivo, justo
consuela a la india
Tegualda, a la que ayuda a rescatar el cadáver de su
marido o lo más desgarrador es su opinión sobre la
muerte de Caupolicán afirmando lo siguiente:
"que si yo a la sazón allí
estuviera,
la cruda ejecución se
suspendiera"
Canto XXV
Los indígenas son en definitiva los verdaderos
héroes. Entre los araucanos sobresale la
personalidad de Colocolo, el sabio anciano que determina la
prueba del madero; Lautaro como hábil, industrioso y
cauteloso; y la figura de Tucapel se ve manifestada por un
carácter nervioso, instintivo e impetuoso,
pues, cree que la fuerza es todo figura en mi parecer bastante
bárbara:
"Tucapel que de rabia reventando
Estaba oyendo al viejo, más no atiende
Que dice: "Yo veré si adivinando
De mi maza este necio se defiende
Diciendo esto y la maza levantado
La derriba sobre él, y así lo tiende"
Canto VIII
Pero si de héroes se trata no cabe la menor duda
que Caupolicán es el que cumple con los requisitos del
arquetipo épico soportando la dura prueba del madero en el
Canto II, logrando con ello ponerse al frente del ejército
araucano. Su figura se destaca de los demás "corpulento,
alto de pecho, áspero y fuerte, hábil y ligero a la
par", y esto se mantiene hasta su muerte en el Canto XXXIV, "el
varón de autoridad"
pasea su majestuosa y salvaje grandeza en la obra de Ercilla.
Así este comportamiento
lo acompaña hasta su final cuyo suplicio es de gran
grandeza épica:
"Descalzo,destocado, a pie desnudo,
os pesadas cadenas arrastrando,
con una soga en el cuello y grueso ñudo"
Canto XXXIV
Así como resignado por su sentencia
también se indigna por la humillación siente al ver
a su negro y sucio verdugos arrojándose sobre él.
Tal conducta le
valió que seis flecheros rematasen sobre él sus
crueles flechas. Todo el final se mantiene con este aire de crudo
dramatismo.
En definitiva, dentro del esquema de la acción
épica el héroe es colectivo: el pueblo araucano
busca la liberación de su pueblo. Se reconoce ese plano de
universalidad fundamental en la ética
aristotélica predominante en la época. Así
la sublevación de los araucanos es un acto universal
válido por sí mismo porque es la búsqueda de
la libertad ,
dando consecuente un fondo idealizador de belleza. En la que los
líderes araucanos alcanzan el rango principescos y sus
personalidades como su cuerpos toman la oratoria romana y
la belleza griega ejercitada en juegos
olímpicos y en una democracia que
ideológicamente es admirada por Ercilla cuya política
democrática permite el paso del más apto de acuerdo
a sus méritos propios.
Los héroes como Caupolicán y lautaro son
arquetipos humanos que elevan las más sobresalientes
virtudes como el valor, su magnanidad, justicia y su
espíritu de compañeros que comparten la victoria
lograda:
"Amigos si entendiese que el deseo
de combatir sin otro miramiento,
y la fogosa gana que en vos veo,
fuese de la victoria fundamento
hágaoos saber de mí que cierto creo
estar en vuestra mano el vencimiento;
y un paso atrás volver que yo no quisiera
si el mundo sobre mi todo viniera"
Canto XXII
Estos versos rebelan el heroísmo de Lautaro
más adelante se verá a nuestro héroe como
fuerza psicológica de una nación, cuyo acto de
arrojo le determina un acto significativo como lo expresa
Bajtín "el héroe no sólo actua porque
así se deba …sino que él mismo es así".
Por ejemplo esta afirmación se observa en Canto III en el
que Lautaro se arroja sobre los españoles para dar
ánimos a su pueblo que está por ser
vencido:
"Un hijo de un cacique conocido
que a Valdivia de paje le servía
en su niñez por él favorecido
en su servicio a la
sazón venía
del amor a su
patria conmovido
comienza agrandes voces animarla,
viendo que más andar se retraía,
y con tales razones a incitarla:"
Canto III
Ahora bien, Ercilla se siente en relación con
estos héroes algo turbado haciendo de ello una
interrelación entre él y ellos, de este modo el
héroe esta bajo la supremacía de este escritor.
Cuyo destino sólo es determinado por su totalidad como
personalidad que construye su propia vida , pues, el destino es
individual y no es el YO-PARA-MÏ sino su existencia. Un
ejemplo de ello es la muerte de Caupolicán, por cuya
Fortuna recibió cien flechas que le hirieron el cuerpo y
por ella también muere Lautaro por una flecha que le
atravesó el corazón,
aquí el tema de religiosidad está presente ya que
los paganos se ven víctimas de la creencia de estas
fuerzas mientras la divina Providencia socorre a los devotos
españoles.
En fin, el reconocimiento, respecto y exaltación
de la humanidad del indio no cancela la necesidad y certeza de su
derrota, según el designio imperial.Tampoco las victorias
indígenas implican en Ercilla la capacidad de erguirse por
sobre la lealtad que de él espera cono súbito del
imperio. La magnificación del indio indirectamente
magnifica al español capaz de vencerlo. Además en
el trasfondo está el plan divino
implementado a través de los españoles como
instrumentos de Dios. Es que de esta manera las fuerzas comandads
por valdivia son vencidas por no poseer esa virtud
aristotélica. Su soberbia y vanagloria, y sin control no
pudieron lograr inspirar la mesura, ecuanimidad y justicia . Por
lo tanto Dios castiga estos excesos usando a los indios como
instrumento de su ira. De modo que, en el plan divino, la
universalidad indígena es sólo instrumento para
disciplinar a los agentes imperiales e impulsarlos a la virtud
que resulta en una mayor eficiencia
militar para la conquista. Pues, los hombres se redimen de sus
errores y salvajismo para alcanzar su grandeza en el
espectáculo de la magnaficiencia y fortuna variable del
combate que los une en un imperio universal.
Ercilla Como poeta cometió muchos errores desde
la forma épica y la de no concebir un héroe
único, ni siguió un tema de meditada
progresión. Pero aún hoy podemos deleitarnos con
este poema tan personal. Pero
creo personalmente que la vigencia de éste poema no
procede exclusivamente de los méritos literarios, sino de
los valores
humanos expresados que dignifica la propia condición
de ser sensible, comprensivo y justo que exhibe el autor al
ponderar el sentido de libertad en el hombre
americano. Causa por la cual "La Araucana" se ha transformado en
una pieza documental testimonio irrecusable en la interesante
"leyenda negra" de la Conquista.
Por eso quiero destacar que mi trabajo se basó en
un análisis más sociológica determinando la
función
de la épica en la literatura de la conquista y que
desempeños cumplieron los protagonistas en esta parte de
la historia. Por eso tal vez no me detuve a indagar con
profundidad sobre otros elementos como lo mitológico, los
recursos
estilísticos, los cuales constituyen material que
refuerzan la acción de la historia. En consecuencia pido
disculpas si a ello no me he referido, sin embargo me encuentro
realmente satisfecha , ya que esta obra me ha marcado en mi
sentimiento de mestiza hallando en ello una revaloración
de nuestra propias raíces latinoamericanas.
-De Ercilla y Zúñiga , Alonso: LA
ARAUCANA. Bs. As. Espasa- Calpe Argentina S.A.
1977
-Castagnino, R. H: Escritores hispanoamericanos. Barcelona.
Editorial Nova, 1971
-Zainz de Robrez, F.C: Ensayo de un
Diccionario de
la Literatura T. I. Barcelona, Editorial Aguilar, 1953
-Valvuena Prat, A: Historia de la Literatura Española T I.
Barcelona, Editorial Gustavo Gili S.A. 1963
-Lapesa Melgar, R.: Introducción a los Estudios Literarios,
Salamanca. Editorial Amaya, 1971-
Bajtín, mm: Estética de la Creación Verbal,
México.
Siglo Veintiuno editores, 1971
Resumen.
El Heroísmo De La Conquista En "La Araucana": El
poema épico más patriótico que pudo existir
en nuestra literatura latinoamericana, hoy lo tenemos como
evidencia de un pasado oscuro que formó parte de la
leyenda negra de nuestra conquista. De esta manera en este
trabajo nos enaltecemos en presentar la poesía
épica como expresión de las hazañas heroicas
cantadas por el español Alonso de Ercilla y
Zúñiga que en medio de la lucha de Arauco
plasmó su admiración por esa raza y se lo
dedicó a su gran monarca Felipe II en plena época
Renacentista en la que se estaba reanudando ese nacionalismo a
través de América.
Autor:
Ponce Natalia Alejandra
Estudiante del Profesorado de Letras
Universidad
Nacional de Misiones
Categoría: Literatura