- Viajar en el
Tiempo ¿Para qué? - El
concepto físico de tiempo - La
relatividad del tiempo - Cómo volver
al pasado - Los
"hoyos negros" cósmicos como "máquinas del
tiempo" - Principios
físicos del viaje trans-temporal - ¿"Túneles"
espacio-temporales? - Ingeniería
de los viajes a través del tiempo - Posibilidades de la
Física del futuro - "Extrañeza" del
mundo a escala subatómica - La
interpretación de "universos paralelos" de
Everett - Paradojas
de la experiencia trans-temporal - La
lógica de los viajes a través del
tiempo - Conclusiones
Los principios de la
Física
hacen presumir que los viajes a
través del tiempo
podrían convertirse algún día en una
realidad. Pero, ¿hasta qué punto podemos imaginar
el alcance de las paradojas que, a raíz de estas
travesías, deberemos enfrentar?
La literatura y
el cine de
ficción intentan representar tales experiencias, pero rara
vez se ajustan a los principios físicos que harían
posible el "turismo temporal", y tampoco
logran agotar sus alucinantes consecuencias.
Introducción
¿Podemos viajar a través del tiempo? La
posibilidad de retornar al pasado para cambiar nuestro presente o
de remontarnos hasta el más remoto futuro para conocer
nuestro destino, ¿es algo más que una extravagante
fantasía? ¿Podría algún día
convertirse en una realidad tan espectacular como lo es, en el
presente volar o viajar a otros planetas?
Frente a interrogantes como éstas, nunca se es lo
suficientemente modesto. La historia posterior a la
Revolución
Industrial ha demostrado que, cuando se trata de la
manipulación del mundo, no existen límites
para el hombre. Otto
Lilienthal y los hermanos Wright cumplieron el sueño de
Leonardo da Vinci al sentar las bases aerodinámicas para
que una persona pudiera
volar. Y, si en el siglo XIX, Julio Verne especulaba sobre la
posibilidad de llegar hasta la Luna, hoy para nadie semejante
viaje es algo extravagante o imposible. En el presente, ni
siquiera la muerte
biológica resulta un hecho ineluctable, y es
cuestión de tiempo para que se terminen de comprender los
mecanismos biomoleculares y genéticos que determinan el
envejecimiento celular. ¿Por qué, entonces,
tendríamos que dudar de nuestra eventual capacidad para
manipular el tiempo?
Tres son las más fuertes causas de esta duda. La
primera es la ignorancia que tenemos todos acerca de la naturaleza del
tiempo. La segunda es la ignorancia de una gran mayoría en
torno a lo que
la Ciencia (en
particular, la Física) ya sabe acerca del tiempo.
La tercera, las situaciones paradojales a que nos veríamos
enfrentados, si suponemos posible realizar semejantes excursiones
al pasado (por ejemplo, de viajar un año antes del
presente, ¿nos encontraríamos con un doble
más joven de nosotros mismos? ¿O nos
"encarnaríamos" en el cuerpo que teníamos en ese
entonces?).
En cuanto a las dos primeras fuentes de
escepticismo, estamos tan equivocados como los que se burlaban de
Leonardo y de Julio Verne: nos dejamos apabullar por el misterio
que parece encerrar la experiencia del tiempo, y nos olvidamos
del poder de
manipulación que provee la comprensión
científico-matemática
de las cosas. Veremos en adelante cómo esta
comprensión física del tiempo basta para abrir
más posibilidades de viajar en el tiempo que las que
imaginamos. En cuanto al argumento de que las paradojas que
involucra el viaje en el tiempo son demasiado
extrañas… no nos parece un motivo para poner en
duda una tecnología futura. Lo
raro que pudiera parecer una Tierra
esférica a los contemporáneos de Colon no le
impidió a éste inaugurar las rutas de los viajes
alrededor del mundo.
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