Indice
1.
Introducción
2. Hernia inguinal
3. Hernias crurales
4. Hernia umbilical
5. Hernia epigastrica
La presión intraabdominal puede ser bastante alta
al toser, defecar o efectuar ejercicio muscular enérgico,
y puede causar protrusión o hernia de una vísera,
generalmente del intestino delgado, por un punto débil de
la pared abdominal. Las hernias son más frecuentes en la
región inguinal; se denominan inguinales cuando
están por arriba del arco crural, y crurales si
están por debajo del mismo. Sin embargo, puede ocurrir
herniación en otros sitios, especialmente el ombligo o el
diafragma, en el orificio esofágico o en el hiato
diafragmático.
Los distintos tipos de hernias son:
- Inguinales
- crurales
- umbilicales
- epigástricas
- Obturatrices
- De la linea blanca
- ciáticas o isquiáticas
- perineales
- Lumbares superiores e inferiores
- Diafragmáticas
- Rectales
Una hernia es la protrusión de visceras
contenidas en la cavidad abdómino-pelviana, a
través de zonas de debilidad de la pared abdominal o
perineal congenitamente pre constituidos, o a través de la
capa fascial y muscular destinadas a contenerlas.
Clínicamente, la parte importante de la definición
es la protrusión, porque sin que salga un órgano es
prácticamente imposible el diagnóstico de hernia.
Las caracteristicas anatómicas importantes de una
hernia son el orificio y el saco herniarios. El orificio
herniario es un defecto en la capa aponeurótica más
interna del abdomen, y el saco herniario es una
evaginación del peritoneo. El cuello de un saco herniario
corresponde al orificio de la hernia. El tamaño de esta
última depende de la dimensión del cuello y el
volumen del
saco distendido. Una hernia es externa si el saco sale por
completo a través de la pared del abdomen, interparietal
si está contenido dentro de la misma, e interna si se
encuentra en la cavidad visceral. La hernia es reducible cuando
es posible regresar al abdomen el órgano que ha salido e
irreducible si no es factible.
Una hernia estrangulada es aquella en la que se
compromete la vascularidad del órgano que sale, por lo
general en el cuello. Es más probable que ocurra una
estrangulación en hernias con orificios pequeños y
sacos relativamente voluminosos. Esta alteración siempre
es importante, incluso mortal, y es la principal razón
para reparar una hernia. Con frecuencia se utiliza la palabra
"incarcelación" en relación con las hernias; la
incarcerada no es nada más que la que no puede reducirse y
no significa, como algunos cirujanos pretenden, que la que no se
reduce está al borde de estrangularse. Las maniobras
necesarias para reducir una vísera atrapada en un saco
herniario se conocen como taxis.
Las hernias de la pared del abdomen solo ocurren en
áreas en que la aponeurosis y la fascia estan desprovistas
del apoyo protector del músculo estriado. Normalmente
existen muchos de estos sitios, pero algunos pueden adquirirse
por atrofia muscular o cirugía. Sin una fuerza
oponente, las áreas aponeuróticas desnudas
están sujetas a los estragos de la presión
intraabdominal y ceden si se deterioran o tienen irregularidades
anatómicas. En consecuencia, cabe predecir que los sitios
comunes de herniación son la ingle, el ombligo, la
línea blanca, la linea semilunar de Spiegel, el diafragma
e incisiones quirúrgicas. Otros sitios similares, pero muy
raros, de herniación son perineo, triángulo lumbar
superior de Grynfelt, triángulo lumbar inferior de Petit,
y los agujeros obturador y ciático de la
pelvis.
Algunos pacientes con hernias no se dan cuenta de su
presencia hasta que se les indica. Las sintomáticas
producen una gran variedad de molestias inespecificas
relacionadas con el contenido del saco y la presión que el
mismo ejerce en el tejido vecino. Las molestias que causan
siempre son más molestas al final del día y se
alivian por la noche cuando el paciente se acuesta y se reducen.
Las inguinales no causan dolor testicular; el dolor inguinal sin
una hernia demostrable por lo general no indica ni anuncia su
inicio. Casi todas las hernias se desarrollan de manera
insidiosa, pero algunas, en especial en pacientes con la
posibilidad de una compensación se precipitan por un
acontecimiento muscular forzado aislado.
Las hernias se diagnostican con facilidad en el
exámen físico. De manera característica, el saco herniario con su
contenidocrece y transmite un impulso palpable cuando el paciente
hace un esfuerzo o tose. Por lo general, durante el examen el
enfermo debe estar de pie porque es imposible palpar con certeza
una hernia inguinal reducida si esta acostado. Los hidroceles
pueden simular una hernia inguinal irreducible, pero se
transiluminan, situación que no ocurre con las primeras. A
las hernias no detectables en un examen fisico puede comprobarlas
el radiologo mediante sonografía, TC, imágenes
de resonancia magnética nuclear y herniografia; en esta
última se inyecta un agente de contraste no irritante en
la cavidad peritoneal. La estrangulación produce dolor
intenso en la hernia seguido con rapidez de hipersensibilidad,
obstrucción intestinal y signos y síntomas de
sepsis. En contraste con una hernia irreducible, la estrangulada
no crece ni transmite un impulso cuando tose el paciente.
Está contraindicado reducir una hernia estrangulada si hay
sepsis o se piensa que el contenido del saco es
gangrenoso.
En general todas las hernias deben repararse a menos que
el estado
local o sistémico del paciente impida un resultado final
seguro. La
posible xcepción a esta norma es una hernia con cuello
ancho y un saco superficial que se anticipa crecerá con
lentitud. Los bragueros y cinturones quirúrgicos son
útiles en el tratamiento de hernias pequeñas cuando
esta contraindicada la cirugía. Sin embargo los primeros
no deben utilizarse en pacientes con hernias
femorales.
-anatomia del conducto inguinal.
El conducto inguinal tiene 3.75 cm de longitud,
aproximadamente, es una abertura oblicua en la pared abdominal
entre los anillos inguinales interno y externo, situado un poco
por arriba y paralelo al arco crural. La apred anterior esta
formada por la aponeurosis del oblicuo mayor reforzada hacia
fuera, por delante del anillo interno, por la incersión de
origen del oblicuo menor. El techo es constituido ppor las fibras
arqueadas del oblicuo menor y el transverso, y entre estos dos
músculos entra en el conducto el nervio abdominogenital
menor. El tendón conjunto forma la parte principal de la
pared posterior del conducto detrás del anillo inguinal
externo, pero por delante del tendón se halla la
porción refleja del arco crural, y por detrás
lña fascia transversalis, que forma elresto de la pared
posterior. La fascia transversalis limita al conducto hacia abajo
al unirse al arco crural, pero parte de la porción interna
del sueloestá formada por la porción
pectínea del arco crural o ligamento de Gimbernat. Por el
conducto pasan el cordón espermático o el ligamento
redondo del útero, que llevan consigo envolturas que
continuan las de la pared abdiminal; a saber, Fascia
espermática interna o túnica fibrosa, procedente de
la fascia transversalis en el anillo interno; fascia
cremastérica o túnica muscular, derivada del
tendón conjunto, y fascia espermática externa o
túnica celulosa, procedente de la aponeurosis del
oblicuomayor en el anillo externo. Incluidos en la fascia
cremastérica se encuentran los fascículos del
cremáster, festoneado sobre el cordón
espermático entre el oblicuo menor y la espina del pubis;
recibe su inervación de la rama genital del genitocrural
(L1).
-Hernias
La ingle es una de las áreas débiles
naturales de la pared abdominal y el sitio más
común de herniación. Afecta ambos sexos en todas
las edades, pero es 25 veces más probable que los varones
padezcan una hernia inguinal; se estima que su frecuencia es de
3%, lo que determina que constituyen un problema económico
mayor.
La hernia inguinal lleva consigo peritoneo parietal al
conducto inguinal, y sale por el anillo inguinal externo, por lo
cual la tumefacción superficial está
invariablemente cubierta por la piel, ambas
capas de la aponeurosis superficial y la fascia
espermática externa; puede alcanzar el escroto. estas
hernias difieren en cuanto al sitio por donde salen de la cavidad
abdominal. la hernia inguinal oblicua entra en el anillo inguinal
interno en la fosita inguinal externa por fuera de los vasos
epigástricos y, siguiendo el conducto inguinal en toda su
longitud por delante del cordón espermático,
comparte con este último las envolturas
aponeuróticas. la hernia inguinal directa entra en el
conducto por detrás del cordón espermático y
hacia adentro de la arteria epigástrica, por las fositas
inguinales media o interna; esto es: por fuera o por dentro del
cordón fibroso de la arteria umbilical obliterada. Las
hernias oblicuas están cubiertas por aponeurosis derivada
de la fascia transversalis e independiente de la fascia
espermática interna que rodea al cordón, pero, por
estar hacia fuera del tendón conjunto de manera que sus
envolturas, profundamente a la fascia espermática externa,
son independientes de las del cordón
espermático.
Con frecuencia no es posible diferenciarlas
clínicamente y tiene poca importancia ya que se reparan
con la misma operación. En varones son más
frecuentes las indirectas por 2:1, en tanto que en mujeres las
directas son una rareza. En varones las hernias indirectas
estranguladas también pueden causar estrangulación
concomitante del cordón espermático y el testículo.
-Anatomia De La Hernia Inguinal
El saco de una hernia indirecta es en realidad un
proceso
vaginal persistente dilatado. Pasa a través del anillo
profundo, se encuentra dentro del cordón
espermático y sigue el trayecto indirecto del mismo al
escroto. En el anillo profundo el saco ocupa el lado
anteroexterno del cordón. Con frecuencia el saco de un
ahernia indirecta se acompaña de grasa preperitoneal y se
conoce como lipoma del cordón, aunque la grasa no es un
tumor. Los lipomas del cordón espermático pueden
simular con exactitud al primero.
El saco de una hernia indirecta es completo si desciende
a los testículos
y llena el lado del escroto e incompleto cuando no sucede. Sie el
proceso
vaginal permanece abierto por completo, el testículo se
encontrara dentro del saco. Este tio de hernia se conoce como
hernia congénita o hidrocele comunicante. Es común
en lactantes y rara en adultos.
Los órganos retroperitoneales, como colon
sigmoide, ciego y uréteres, pueden deslizarse al interior
de un saco indirecto y en consecuencia formar parte de su pared y
son suceptibles a lesionarse durante una hernioplastia. Estas
hernias por deslizamiento con frecuencia son grandes y
parcialmente irreducibles.
Los sacos de una hernia inguinal directa se originan a
traves del piso del conducto inguinal, es decir, el
triángulo de Hesselbach; salen directamente y los reprime
la aponeurosis del músculo oblicuo mayor. Solo rara vez
crecen lo bastantepara forzar una vía a través del
anillo superficial y descender al escroto. Las hernias directas
suelen ser difusas e incluir la totalidad del piso de conducto
inguinal; las discretas, menos comunes, tienen orificios
pequeños y sacos de forma diverticular. Las hernias
inguinales directas también se originan laterales a los
vasos epigástricos inferiores y se presentan por el anillo
profundo o intersticialmente a través de deslizamientos
por zonas de atrofia musculoadiposa de los músculos que
obturan el anillo profundo. Estos tipos de hernia inguinal
directa son raros y por lo general se denominan
erróneamente indirecta extrafunicular e indirecta
intersticial, respectivamente. No siguen el cordón
espermático y crecen interparietalmente. Los vasos
epigástricos inferiores no son un límite
anatóminco propiamente dicho que diferencia en todos los
casos una hernia directa de una indirecta, como piensan algunos
cirujanos. Es común que la vejiga sea un componente por
deslñizamiento del saco de una hernia directa.
Las hernias inguinales pueden ser congénitas
oadquiridas, y en ambas suele haber un antecedente familiar
positivo. En consecuencia, la mayor parte de ellas setransmite
genéticamente. Todas las indirectas son congénitas
y resultan de la persistencia del proceso vaginal con el que nace
el paciente. En 80% de recién nacidos y 50% de
niños de un año se encuentra persistencia del
proceso vaginal. Su cierre continua hasta los 2 años de
edad. La frecuencia de persistencia del proceso vaginal en
adultos es del 20%. El tener la posibilidad de un ahernia no
significa que se desarrollará. Deben existir otros
factores que originen la incapacidad de la fascia transversal
para retener el saco visceral en el orificio miopectíneo.
La postura erecta de hombre
promueve la herniación al estirar y exponer la ingle y,
cuando existe un ahernia, permitir que los intestinos caigan por
gravedad al saco herniario. La deficiencia muscular contribuye a
la herniación. Las insuficiencias congénitas o
adquiridas de los músculos oblicuos internos del abdomen
en la ingle exponen el anillo profundo y el piso del conducto
inguinal a los estragos de la presión intraabdominal. La
destrucción del tejido conjuntivo que resulta del esfuerzo
físico de la presión intraabdominal, el tabaquismo, la
edad, enfermedades
del tejido conjuntivo y afecciones sistémicas reducen la
fuerza de la
aponeurosis y la fascia transversalis. Se han demostrado en las
estructuras de
tejido conjuntivo de pacientes con hernias la fractura de fibras
elásticas y alteraciones en la estructura,
cantidad y metabolismo de
la colagéna. En ocasiones son importantes diversos
elementos. La distensión abdominal y el aumento constante
de la presión intraabdominal por ascitis y diáliis
peritoneal pueden dañar el orificio miopectíneo y
originar la dilatación de un proceso vaginal persistente.
Las hernias inguinales de todos los tipos ocurren por igual en
varones sedentarios y fisicamente activos. La
actividad física
enérgica no es una causa por sí misma de
herniación inguinal, aunque un esfuerzo intenso puede
agravar factores predisponentes y precipitarla.
-anatomia.
El arco crural es convexo hacia abajo y tendido sobre el
psoasilíaco, el pectíneo, los vasos femorales y el
nervio crural, se continua con la aponeurosis del muslo. Hacia
fuera, la cara superior presenta un canal profundo, pero hacia
adentro es menos honda, forma el suelo del
conducto inguinal, conduce el cordón espermático y
se expande a la cresta pectínea del pubis en una
prolongación triangular casi horizontal llamada
porción pectínea del arco crural o ligamento
lacunar de Gimbernat; el vértice de este triángulo
es la espina del pubis y la base, cóncava, forma el borde
interno del anillo crural, prolongandose hacia la cresta
pectínea como el ligamento pectíneo de Cooper,
formación resistente. Desde la porción medial de la
cresta pectínea, algunas fibras, a menudo mal
desarrolladas, se extienden hacia arriba y adentro por
detrás del cordón espermático y se
entrelazarn en la linea alba; esta formación se denomina
porción refleja del arco crural.
El anillo inguinal externo es un espacio triangular
entre las incerciones del oblicuo mayor en la sínfisis
púbica y la espina del pubis, inserciones que forman
respectivamente el pilar interno o superior, delgado y aplanado,
y el pilar externo o inferior, fuerte y curvo. Desde su base en
la cresta del pubis, el triangulo se extiende hacia arriba y
afuera en la longitud aproximada de 2.5 cm; forma el orificio
externo del conducto inguinal, por el que pasan el cordón
espermático en el hombre y el
ligamento redondo en la mujer; los
bordes del anillo están unidos cerca del vértice
por fibras arciformes. El anillo inguinal externo puede palparse
en el sujeto vivo invaginando con el dedo el escroto y siguiendo
el cordón espermático, pero sus bordes no se
identifican fácilmente por la disección mientras no
se liberen de la fascia espermática externa o
túnica celular del cordón espermático, hoja
delgada que se prolonga desde los pilares y rodea al
cordón espermático.
Por detrás del arco crural y por delante del
psoasilíaco y del origen del pectineo, la fascia de
revestimiento del abdomen forma alrededor de los vasos femorales
un divertículo llamado vaina de los vasos femorales o
conducto crural. Tiene la forma de túnel aplanado que
abarca una extensión de 3.75 cm, profundamente en
relación con la fascia lata del muslo; termina
uniéndose a las paredes de los vasos y se divide en tres
compartimientos. El compartimiento externo da paso a la arteri
afemoral y la rama crural del nervio genitocrural, que atraviesa
la pared externa; el compartimiento medio contiene la vena
femoral, y el compartimiento interno cónico, llamado
infundibulo crural, esta ocupado por tejido conjuntivo laxo, un
ganglio linfático y abundantes vasos linfáticos. La
pared anterior de la vaina femoral es atravesada por la safena
interna y por vasos linfáticos.
El anillo crural, el extremo superior ovalado del
conducto crural, esta situado entre la vena femoral y la base
curva de la porción pectínea del arco crural; la
porción no ocupada del anillo es cerrada por el septum
crural, condensación del tejido extraperitoneal que
contiene un ganglio linfático y es cruzada por muchos
vasos linfáticos. El peritoneo suprayacente puede
evaginarse por el anillo y formar el saco de una hernia crural,
llevando consigo una envoltura del septum crural. Esta clase de
hernia puede ser pequeña y circunscrita al infundibulo
crural; en ocasiones distiend ela pared anterior de la vaina
femoral y puede presentarse por el orificio de la safena interna
o fosa oval en la fascia lata, evaginando la fosita cribiformis
que cierra este orificio. Una vez que ha llegado al tejido
subcutáneo laxo, la hernia puede extenderse hacia arriba
por delante del arco crural. En las mujeres, el anillo crural es
mayor y, en consecuencia, esta variedad de hernia es más
frecuente.
Hernia Crural
El orificio crural está limitado por arriba por
la arcada crural, abajo por el ligamento de Cooper, por dentro
por el ligamento de Gimbernat y por fuera por la cintilla
ileopectinea, si bien la zona de mayor deslizamiento está
limitada por la vena femoral.
Las hernias pueden ser prevasculares, intervasculares,
extravasculares, pero lo más común es que salgan
por dentro de la vena femoral.También existen las hernias
del ligamento de Gimbernat, hernia crural pectinea o de Clocket,
hernia de Beclard, la que sale por el orificio de Safena interna.
Las visceras se dirigen hacia el triángulo de Scarpa y
pueden salir por los orificios de la fascia cribiformis que
constituiría el orificio externo.
La hernia crural tiene escasa sintomatología, rara vez
produce dolor y lo hace por traccionamiento epiploico, pero muy
frecuentemente se estrangula, pues tiene un orificio
rígido, que compromete la circulación arterial.
Puede estar ocupada por epiplon y establecer adherencias entre el
saco y la viscera que la tornan irreductible.
Diagnóstico diferencial: Con adenitis por
criptitis, o intertrigo micótico, o papilitis,
adenopatía neoplásica de origen
ginecológico, anal o rectal.
Puede dar sintomatología de oclusión intestinal,
con dolores abdominales altos y si el médico no examina la
zona herniógena puede ser interpretado como otra
patología y no hacerse el diagnóstico correcto.
Las hernias femorales o crurales suelen considerarse una
entidad separada, pero en realidad son una forma de
herniación inguinal directa. En general son raras y en
varones excepcionales. Ocurren en ocasiones en mujeres, en
especial de edad avanzada, pero no con tanta frecuencia como las
inguinales. El 10% de mujeres y el 50% de varones con hernias
femorales tienen una hernia inguinal o la desarrollarán.
Las hernias femorales casi siempre aparecen como una masa
irreducible del tamaño aproximado de una nuez en la base
interna del triángulo femoral de Scarpa. Al parecer no se
reducen, aunque el saco puede estar vacío por la grasa y
ganglios linfáticos del conducto femoral que rodean el
saco. Un ganglio linfático crecido aislado o un quiste
sinivial pueden simular exactamente una hernia femoral. Es
posible que las reducibles, raras, se confundan con una varice
safena.
Las hernias femorales tipo Richter estranguladas son
relativamente frecuentes y conllevan una morbilidad y mortalidad
importantes. Su diagnóstico siempre se retrasa porque se
presentan sin obstrucción intestinal y con manifestaciones
locales mínimas hasta que se gangrena el nudillode
intestino delgado atrapado. Un soplo sobre la vena femoral indica
que la hernia femoral adyacente está incarcerada o
estrangulada porque la hernia implacable comprime la vena. Son el
doble de frecuentes en el lado derecho.Ello se atribuye al
taponamiento del conducto femoral izquierdo por el colon
sigmoide.
-Anatomia De La Hernia
Los sacos de la hernia femoral se orifginan del conducto
femoral a través de un defecto en el lado interno de la
vaina del mismo nombre. El conducto femoral contiene uno o dos
ganglios linfáticos, de los cuales al mayor lo denominan
de Cloquet los franceses y de Rosenmüller los alemanes.
Estas estructuras se
expulsan del conducto femoral por una protrusión
peritoneal y con frecuencia originan una masa palpable. Las
hernias femorales también ocurren a través de la
vaina femoral anterior; las prevasculares son raras y se
encuentran con mayor frecuencia como recurrencias después
de una hernioplastía inguinal en la cual se ha utilizado
en la reparación la vaina femoral o el fasículo
iliopúbico.
-anatomia del ombligo
Es una cicatriz hundida situada aproximadamente al nivel de la
parte más alta de las crestas ilíacas, enfrente del
disco intervertebral que separa la tercera y la cuarta
vértebra lumbares. La linea blanca o alba, banda media
vertical y avascular formada por las aponeurosis fusionadas de
los musculos
rectos mayores del abdomen, tiene 1.25 cm de ancho y
también presenta la cicatriz, y en la cara profunda se
aprecian los restos obliterados de la vena umbilical, las
arterias umbilicales, el uraco y en ocasiones el conducto
onfalomesentérico, cordón fibroso que va al
íleon. Pueden ocurrir estas anormalias: escurrimiento de
orina por el uraco permeable; eliminación de heces por el
conducto onfalomesentérico persistente, o bien el epitelio
de estas formaciones presenta exudado seroso, cuando son
permeables solo en el ombligo.
Como en periodo incipiente de la vida intrauterina el
ombligo circunda a todo el embrión, no es dificil
comprender que sea invariablemente un punto débil de la
pared abdominal por el cual pueden presentarse hernias; sin
embrago, la hernia umbilical pequeña que se observa con
frecuencia en el recién nacido suele desaparecer sin
tratamiento quirúrgico.
-Hernia
Son aquellas que hacen protrusión a través
del anillo umbilical no obliterado en la vida embrionaria, que
serían las hernias congénitas, o bien a
través de un anillo umbilical abierto después del
nacimiento, que serían las hernias adquiridas del
niño y del adulto.
El anillo fibroso que queda despues de la caida del cordón
umbilical está cubierta por una fascia que va de lado a
lado, fascia de Richet, a este anillo llegan desde abajo: los
restos fibrosos de las arterias umbilicales y el cordón
fibroso del uraco, llegando desde arriba el cordón de la
vena umbilical.
La hernia umbilical es probablemente la enfermedad
quirúrgica más frecuente en la edad
pediátrica. Al nacimiento, el ombligo está
representado por un defecto en la línea alba rodeado por
un anillo fibromuscular que continúa contrayéndose
después de que el cordón se desprende y que
usualmente se cierra por completo poco después del
nacimiento. Cuando este anillo fibromuscular no cierra por
completo, un saco de piel umbilical
protuye condiciona lo que llamamos hernia umbilical.
La inmensa mayoría de las hernias umbilicales son
diagnosticadas antes de los seis meses de edad. El signo
más importante de la hernia umbilical es un aumento de
volumen a
nivel del ombligo que puede hacerse más prominente cuando
el paciente llora o puja. A la exploración se palpa un
defecto circular en la cicatriz umbilical, rodeado por un anillo
fibroso, a través del cual puede entrar y salir un saco de
piel y que usualmente mide poco más de 1
centímetro. En muy raras ocasiones, cuando la hernia se
encarcela o estrangula, puede haber cambios de coloración
y dolor local, vómitos y dolor
abdominal.
El diagnóstico de la mayoría de las
anomalías umbilicales es fundamentalmente clínico;
sin embargo, existen algunas situaciones especiales como la
existencia de un ombligo húmedo en las que ciertos
estudios radiológicos pueden ser necesarios.
La gran mayoría de las hernias umbilicales no
requieren cirugía ya que se resolverán solas para
los tres años de edad. Las únicas indicaciones
absolutas para su reparación antes de esa edad es el
cambio de
coloración acompañada de dolor, vómito y fiebre.
Otra indicación relativa son los defectos herniarios muy
grandes mayores de 2 centímetros que condicionan una
deformidad importante de la pared abdominal. Todo paciente con
hernia umbilical debe ser seguido por el pediatra o cirujano
pediatra a intervalos frecuentes, para asegurarse que el anillo
fibromuscular continúa su proceso normal de cierre.
Actualmente es razonable esperar hasta la edad preescolar
para indicar el cierre quirúrgico de una hernia umbilical
que ha persistido. La técnica quirúrgica que se
realiza en forma ambulatoria es a través de una
incisión infraumbilical el saco es disecado, seccionado o
invaginado y la aponeurosis reparada en forma transversal con
puntos separados. El ombligo se fija a la aponeurosis con un
punto y la herida se cierra con sutura intradérmica
quedando una cicatriz casi invisible.
Las hernias umbilicales tanto las que cerraron solas
como las operadas son usualmente enfermedades benignas que al
diagnosticarse y tratarse a tiempo y de
manera adecuada, no condicionan ningún problema a largo
plazo.
Causas predisponentes: Obesidad,
embarazos, partos repetidos, disminución brusca de peso en
los obesos, tumores intracavitarios, esfuerzos en constipados,
prostáticos y tosedores, además las aponeurosis de
los músculos anchos del abdomen hacen tracción
sobre las vainas de los rectos separándolos. En los
niños las causas predisponentes pueden ser, la tos,
constipación, el llanto, estornudos, flatulencia,
traumatismo.
Hernias umbilicales congénitas: sería el
onfalocele o hernia amniótica, que debe ser tratada como
una afección quirurgica de urgencia, no se trata de una
hernia estrangulada, ni de una hernia, desde el punto de vista
embriológico es una falta de coalescencia en la pared
abdominal, es la protrusión de visceras que no se han
introducido en el abdomen a través de la base del
cordón umbilical. El saco herniario está
constituido por el saco amniótico y el peritoneo, puede a
veces ser muy pequeño y ser confundido por un
cordón umbilical normal. Cuando son grandes hay una gran
desproporción entre la cavidad abdominal y las
vísceras que protruyen, hay que tratar de cerrar el saco y
cubrirlo con piel.
Las hernias menores de un centímetro cuando nace
el niño suelen cerrar de manera espontánea hacia
los tres años. Los defectos mayores no cierran solos y
deben repararse quirúrgicamente a los cuatro años
de edad. La hernia umbilical se reconoce con facilidad como una
saliente del ombligo recubierta por piel normal. En ocasiones es
tan grande que la protrusión causa una deformación
y altera tanto al niño como a los familiares. En estas
circunstancias puede ser aconsejable repararla temprano. Cuando
el defecto es pequeño y es probable que cierre solo, es
apropiado posponer la corrección quirúrgica hasta
los cuatro o cinco años de edad. En una hernia umbilical
rara vez se observa incarceración. A diferencia del
tratamiento de la hernia inguinal de lactantes y niños
pequeños, no es razonable intentar reducir una hernia
umbilical incarcerada. Una hernia umbilical no complicada se
repara a través de una insición infraumbilical
curva pequeña que se adapta al pliegue cutáneo del
ombligo. El defecto facial se cierra con puntos separados de
material permanente en un plano transversal. En niños no
se requieren los colgajos de fascia y otras reparaciones
complicadas que se recomiendan para adultos. Cuando se reparan
hernias umbilicales en la niñez nunca se extirpa el
ombligo.
-anatomia de la vaina del recto
La vaina esta formada por las aponeurosis de los tres
músculos anchos del abdomen. La aponeurosis del oblicuo
mayor, con el tendón conjunto formado por la fusión de
las aponeurosis del oblicuo menor y del transverso, está
situada por delante de la porción inferior del recto, el
que en este sitio está separado del peritoneo sólo
por la fascia transversalis y el tejido conjuntivo
extraperitoneal que reviste la cavidad abdominal. Entre el borde
costal y la mitad de la distancia entre la espina del pubis y el
ombligo, el recto mayor esta envuelto por una vaina completa
formada porque la aponeurosis del oblicuo mayor está
envuelto por una vaina completa formada porque la aponeurosis del
oblicuo menor se desdobla en dos capas, en el borde externo del
recto. La hoja anterior se fusiona casi inmediatamente con la
aponeurosis del oblicuo mayor; la hoja posterior se confunde
más cerca de la línea media con la aponeurosis del
transverso; el borde inferior forma la línea semilunar de
Douglas, poco definida. El transverso es parcialmente muscular
por detrás de la parte superior de la vaina. Las tres
capas se fusionan con las del lado opuesto en la línea
alba. Las dos capas profundas se insertan en el reborde costal,
de manera que por arriba de este sitio el recto está
adosado directamente a la pared torácica, y sólo
está cubierto por la aponeurosis del oblicuo mayor, que en
este lugar da origen a parte de las fibras del pectoral
mayor.
-Hernia
Está hernia es una protrusión de grasa
preperitoneal y del peritoneo a través de la
decusación de las fibras de la vaina del recto en la
línea media (línea blanca) entre el xifoides y el
ombligo. Con frecuencia no pueden reducirse, de manera invariable
tienen defectos aponeuróticos pequeños, en
ocasiones son múltiples, y a veces producen una molestia
desproporcionada con su tamaño. Es fácil repararla
a través de una incisión vertical en la
piel.
Categoria: salud-enfermedades
Definicion, causas, tipos de hernias: inguinales, crurales,
umbilicales y epigastricas.
Trabajo enviado y realizado por:
Rosa Elia González Becerra
Elyrosy[arroba]latinmail.com