El hombre ha
desarrollado a lo largo de la historia distintos ideales
pero, a veces en su concreción, sólo piensa
individualmente y no en los derechos de los
demás.
Persigue la satisfacción de sus necesidades sin
pensar tampoco en lo más importante para el desarrollo de
su vida: el Planeta; la casa de todos.
Consciente del gran daño
que le causa, no se da cuenta de que no es sólo el Planeta
el que se perjudica, sino también la vida del resto de los
seres humanos y de la naturaleza, la
cual le brinda todos sus recursos para que
pueda satisfacer sus necesidades y desarrollar su vida.
Al dañar el Planeta está destruyendo su propio
hogar. Si el daño sigue, se producirá tal
deterioro, que las generaciones futuras no podrán acceder
al derecho de vivir en un mundo sano y equilibrado.
Por eso nos preguntamos:
¿Es posible el cuidado del Medio
Ambiente?
Las personas toman los mismos datos de la
realidad, pero llegan a conclusiones muy distintas. Esto sucede
frente a este problema, genera discusiones acerca de lo que ha de
hacerse y los recursos que se han de implementar para
subsanarlos.
En nuestra sociedad
podemos observar distintas actitudes:
La mayoría de las personas, especialmente de las sociedades
ricas, poseen una Visión optimista ingenua,
tienen una forma de actuar basada en el derroche, en la idea de
que siempre habrá más de todo.
Así el que no controla el uso del agua y de la
energía, los consumistas. Podemos decir, que aquí
están también los que no se preocupan, los que no
ven el problema o los que lo ven cuando los enfrentan al
mismo.
También piensan que siempre seremos capaces de usar la
tecnología
para salvarnos de nosotros mismos. Por lo tanto, el "no se
preocupen", es una de las actitudes de vida que manifiestan.
Para ellos, el ingenio humano y su poder sobre
todo el resto de la naturaleza, siempre dará lugar a ideas
y recursos de supervivencia.
En la forma de su actuar manifiestan que se sienten superiores y
no necesitan de la naturaleza. Por eso hacen abuso de
ella.
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