- Abstract
- La Cultura como Caja
negra - Magia,
ciencia y religión - La magia
vista por la magia - Kant en el
estructuralismo - Agnosticismo
- Referencias
El Pensamiento
Salvaje de la Antropología (Kant en la
teoría
antropológica).
Abstract.
Las teorías
antropológicas, especialmente el estructuralismo y el funcionalismo,
provienen de la cepa del idealismo
subjetivo de Kant, lo que las aleja de una explicación
auténticamente científica de la cultura; pero
las acerca a una teoría fenomenológica de la
cultura. En este ensayo se
reflexiona sobre este problema epistemológico, desde la
crítica
hegeliana a la teoría kantiana del conocimiento,
a la que Hegel califica de
conciencia
ordinaria. Desde este punto de vista, estructuralismo y
funcionalismo, no explicarían el fenómeno de la
cultura, sino que al recrearlo fenomenológicamente, se
constituirían en un pensamiento salvaje de la
antropología.
Palabras clave:
Teoría antropológica, fenomenología, teoría del
conocimiento, epistemología.
Introducción.
"Se ve cuando se mira de cerca, que buen número
de nuestras doctrinas filosóficas no son sino una reproducción de la vieja metafísica. Se halla aquí un
pensamiento sin crítica y tal como se presenta a la
inteligencia
de cualquiera". Así se refiere Hegel especialmente al
idealismo subjetivo de Kant, al que hace una despiadada
crítica en su Lógica, porque no va
más allá de la conciencia ordinaria. Se refiere a
éste, como ciencia de lo inmediato, en contraste
con el
conocimiento mediatizado, que es el que caracteriza a
la ciencia.
Plantea Hegel, que el sistema de Kant
es similar al del pensamiento mágico.
Si Malinowski aplica a su teoría
antropológica el sistema de Kant, las consecuencias
epistemólogicas son importantes. Cuando Malinowski analiza
la magia, lo hace desde el mismo sistema mágico. La magia
explicada por la magia, el mito explicado
por el mito.
La
Cultura como Caja negra.
Malinowski era un hombre formado
en las ciencias
naturales, específicamente en la física, y
también en la psicología, lo que lo
lleva a ser uno de los primeros antropólogos que aplicaron
los métodos de
las ciencias
naturales al análisis socio-cultural. La influencia de
Kant en Malinowski no es directa, ocurre a través de uno
de los fundadores de la psicofísica: el científico
austriaco Ernst Mach.
Para los empiriocriticistas, todo lo que está
dentro de la frontera del
yo (umgrenzung) es del dominio de la
psicología, y lo que está fuera, de la
física. Esto llevó a Malinowski a explicar los
fenómenos de la cultura a partir de un determinismo
psico-subjetivo, que se objetiva al trascender el
umgrenzung. Como idealista, considera que el conocimiento
de la realidad es subjetivo, y que la objetividad es posible como
intersubjetividad, y lo más importante, que sólo
vemos en la realidad, lo que nosotros mismos ponemos en ella.
Esto conduce a una contradicción que soluciona gracias a
los métodos del conductismo,
pues la estandarización de la conducta humana,
permite la formulación de leyes estadísticas de la cultura:
"El hecho es que la dimensión social del
consenso público es una condición necesaria pero
no suficiente y que, sin el análisis de la mente
individual, no podemos avanzar un paso en nuestro entendimiento
de la religión (Malinowski, 1.985 p.
75)".
Esto implica, el estudio de la conducta humana,
al margen de la conciencia; la construcción de una inmensa caja negra de
la cultura, donde no es posible ver los procesos
culturales como fenómeno consciente, sino como conducta
manifiesta determinada por las necesidades:
"La tensión de las necesidades instintivas, las
fuertes experiencias de la emoción, conducen, de una u
otra suerte, al culto y al credo (1.985, p. 14)"
El conductismo en Malinowski, es consecuente, y
está regido por la idea, de que existe un mecanismo
psicofisiológico universal ( 1.985 p. 89):
"El valor del
conductismo se debe en primer lugar, al hecho de que sus
métodos son idénticos, en cuanto a sus
limitaciones y ventajas, a los de la investigación antropológica de
campo (Malinowski, 1.967 p. 35)".
Esta premisa de Malinowski, tiene implicaciones muy
serias para en el método
etnográfico, porque una de sus limitaciones es que en el
análisis conductual puro, la conducta del ser humano
está separada de los procesos cognitivos de la conciencia.
Desde este punto de vista, sólo es posible entender los
fenómenos culturales, en función de
su efecto pragmático sobre la sociedad, y no
en su significado socialmente elaborado.
"La ruta desde la naturaleza
hasta el estómago del salvaje es muy corta, y en
consecuencia, también lo es hasta su mente, y el mundo
para él, es un fondo indiscriminado del que sobresalen
las especies de plantas y
animales que
son útiles y comestibles primordialmente (Malinowski,
1.985 p. 43)".
Esta idea, no es tan original en Malinowski, pues ya
formaba parte de la ideología empiriocriticista,
específicamente de la de E. Mach, quien era aún
más recalcitrante en el determinismo impuesto por el
hambre:
"Así también, la conciencia de clase y los
prejuicios de clase, como el sentimiento de patria, aún
de patria chica, puede ser muy útil para ciertos fines.
Pero estos conceptos no los debe tener ante su vista el
investigador serio, por lo menos en el momento de la
investigación. Todos estos motivos egoísticos
sólo sirven para fines prácticos. Naturalmente el
hábito existe en el hombre de
ciencia. Las
pequeñas picardías de los sabios, los logros
mañeros, y las torcidas interpretaciones de las obras de
un extranjero, en ciertas ocasiones prueban sobradamente que
los caminos de la ciencia terminan en el estómago, y que
el amor a la
verdad en nuestro actual estado
social es solo un ideal (Mach 1.948 p. 21)".
Se puede colegir de aquí, que Malinowski era el
producto de
toda una época, donde el empiriocriticismo o positivismo
fenomenológico, perneaba a todas las ciencias, un
fenómeno que Konrad Lorenz critica en su obra sobre la
conducta animal y humana. En aquel entonces, Kant era el padre
filosófico de muchos científicos: físicos,
psicólogos, biólogos; pero sobre todo, de los
psico-fisícos como Mach.
Que Malinowski edifique su teoría
científica de la cultura a partir de la necesidad
más primaria (el hambre ), no es una casualidad, es una
necesidad ideológica, que va llevar hasta las
últimas consecuencias en la antropología aplicada.
Más adelante advierte que la nutrición adecuada de
los obreros nativos de las transnacionales inglesas en las Islas
del Mar del Sur, es una prioridad; el más importante
asunto de la
administración colonial. Ahora bien,
¿cómo es una cultura producto del hambre
?
Página siguiente |