- Introducción
- Resumen de la obra
- Algunas enseñanzas
- Abstracciones esenciales
- Conclusiones
- Bibliografía
El libro "El
secreto de las siete semillas", cuyo autor es el
catedrático David Fischman, tiene un estilo novelesco. El
autor revela que se trata de una novela
autobiográfica en la que descubre las diversas etapas de
su crecimiento espiritual.
Cuando el protagonista,
Ignacio Rodríguez, sufre un preinfarto, decide hacer un
cambio radical
en su vida, la que había estado marcada
por el stress y la
prioritaria dedicación al trabajo.
Progresivamente, aunque al principio sin mucho entusiasmo,
ingresa al mundo de la meditación oriental orientado por
un gurú que se convierte en su maestro y
guía.
Su motivación
original era librarse de las tensiones y cuidar su salud, pero por el camino se
va dando cuenta de su misión
fundamental en la vida y aprende cuál es el verdadero
sentido de la misma a partir del "secreto de las siete semillas"
que su maestro le va revelando.
La primera semilla, la
semilla chancada, representa el autoconocimiento; la manera de
cómo nuestro pasado influye en nuestro presente. Tiene una
duración de un mes.
La segunda semilla, la mimosa
púdica, representa el contacto con el espíritu; la
manera de cómo encontrar la paz y la felicidad interior.
Tiene una duración de un mes y trece
días.
La tercera semilla, el rosal
púrpura, representa el control del ego;
la manera de poder ver una
realidad interna escondida de nosotros por nuestro ego. Tiene una
duración de cuatro meses.
La cuarta semilla, el
árbol de mango, representa el servicio
desinteresado; la manera de dejar de pensar solamente en ti.
Tiene una duración de tres meses y medio.
La quinta semilla, el
girasol, representa la toma de
decisiones éticas; la manera de dejar de ver
sólo el corto plazo y orientarse a la luz. Tiene una
duración de casi dos meses.
La sexta semilla, el pino,
representa el perfecto equilibrio en
la vida; la manera de organizar nuestro tiempo y de
alimentar correctamente nuestro cuerpo y mente. Tiene una
duración de seis meses, nueve semanas y un
día.
La séptima semilla, el
hunco, representa la flexibilidad y el desapego; el
conocimiento de la verdadera importancia de las
cosas.
I
Ignacio
Rodríguez, gerente
general de R&G es un ejecutivo muy materialista. Debido
a la agresividad de la competencia, su vida había dejado de
ser la de antes, había descuidado a su familia y a
su cuerpo.Tenía la
responsabilidad de mantener el liderazgo de R&G, se esforzaba mucho
pero no obtenía resultados. Es de esta forma, que en
una discusión con uno de sus gerentes, le sobrevino
un preinfarto.El doctor le
recomendó cambiar radicalmente su estilo de
vida, que si no lo hacía, la
muerte lo visitaría en un par de años.
Ignacio aún no podía creerlo, estaba
preocupado por el
trabajo de la oficina,
el doctor logró convencerlo de que debía
cambiar sus hábitos de vida y le habló de la
meditación como una técnica para reducir el
estrés y la
tensión.Ignacio aún no
creía del todo este asunto, pensaba que la
meditación era una pérdida de tiempo, de la
que Miriam, su esposa, era partícipe; Ignacio le
contó a Miriam la recomendación del doctor,
Miriam entusiasta le entregó un papel con el nombre
y la dirección de un maestro
oriental.Transcurrido un mes de
este hecho, en un altercado, Ignacio revivió el
dolor en su pecho, y se asustó muchísimo,
recordó el papel que le había entregado su
esposa y se enrutó hacia la dirección del
brujo.Estando allí, el
lugar destacaba como una isla en medio del vecindario,
estaba arrepintiéndose de haber llegado, asustado
por la falta de aire
decidió entrar.Contempló la
belleza del jardín, lo hicieron pasar y allí
conoció al maestro, era delgado y trigueño,
éste le preguntó varias veces el por
qué de su visita e Ignacio dio varias veces la misma
respuesta: quería aprender a relajarse, el maestro
insistió una vez más, esta vez la respuesta
de Ignacio fue que todo era una pérdida de tiempo y
se dispuso a retirarse.Entonces el maestro le
preguntó que si era feliz, esta pregunta lo
enfureció, respondió que él era un
empresario de éxito y enumeró sus
posesiones; a lo que el maestro respondió que
él sólo quería saber si se
sentía feliz, Ignacio se sentía invadido por
un sentimiento incontrolable y lloró.Le explicó,
mediante una historia,
que debería de aprovechar las dificultades y los
errores para desarrollarse y lograr la felicidad, que la
felicidad no se compra sino se siente y se siente con el
espíritu, ese espíritu que Ignacio
había dejado de lado hace mucho tiempo, y que ahora
se lo volvía a encontrar. Ignacio le dijo que
había llegado a él para aprender a relajarse
y así poder controlar su estrés y su
angustia, el maestro le respondió que había
que arreglar el verdadero problema: generar felicidad en su
vida.Ignacio le pidió
que le mostrara lo que debía de hacer, entonces el
maestro saca un cofre y le entrega una semilla. Le dice que
la siembre, y que luego descifrarían el significado.
Ignacio siembra la semilla en secreto.- Capítulo
1Luego de cuatro semanas
de cuidarla como oro,
Ignacio no nota diferencia alguna en el terreno, entonces
decide remover y ve que la semilla no ha variado en
absolutamente ¡nada!Frustrado se dirige
donde el maestro, allí el maestro le dice que esta
semilla jamás hubiera crecido, ya que había
sido golpeada, con ésta hizo una analogía
acerca de los niños maltratados, humillados y
desvalorados, que a diferencia de la semilla,
crecerían pero no llegarían a alcanzar un
buen desarrollo. El modo de cómo afecta
nuestro pasado en el presente: El
Autoconocimiento.Las emociones
destructivas almacenadas durante nuestra niñez,
memorias
subconscientes, emergen e interfieren con nuestra vida y no
nos damos cuenta de ello. La forma de deshacernos de ellas
es analizando cada sentimiento que aflore y explorando
algún suceso de nuestra niñez para obtener
alguna pista acerca de nuestra conducta, durante este proceso
te conocerás mucho mejor y comprenderás por
que actúas de cierta forma. Mientras más
conciencia y conocimiento tomes de tu subconsciente,
tendrás más libertad
y capacidad de ser feliz – dijo el
maestro.Nuestros errores no son
más que condiciones para poder aprender y hacernos
mejores como personas.Ignacio ya estaba de
vuelta en casa, como siempre había logrado ocultarse
del mundo, estaba en su "escondite": su estudio, su lugar
predilecto donde se olvidaba por completo del mundo de su
alrededor (incluyendo las emociones).Al día
siguiente, Ignacio, que se había comprometido a
volver donde el maestro, dudaba, finalmente fue. Ya
allí, Ignacio le narró orgulloso la forma del
cómo él "controlaba" sus emociones
ocultándose de su mundo exterior, entonces el
maestro trajo un vaso de agua y
hielo, comparó a los sentimientos con los cubos de
hielo, por más que se les empuje siempre regresan a
la superficie, al igual que los sentimientos y peor
aún no somos concientes de esto. Ignacio
debía aprender a integrar su lado emocional con su
lado racional para poder lograr la felicidad.Además Ignacio
le narró su día de trabajo, de cómo
había gritado a uno de sus empleados por su
incompetencia, justificó que su padre les
enseñó que uno debe pagar por sus errores. El
maestro concluyó que Ignacio actuaba así por
que para él era normal, ya que según lo
contó Ignacio había vivido en la violencia.Las memorias
subconscientes no se olvidan y permanecerán hasta
que puedan ser entendidas y digeridas. El maestro le dijo
que no bloqueara sus emociones, que al principio
podían ser amargas y negras pero que luego
serían dulces y transparentes, le encomendó
que debería analizar qué emociones y
pensamientos llevaron a su forma de actuar. Además
el único que perdía, por gritar a sus
empleados, era él.Al llegar a su casa,
tuvo el impulso de "ocultarse del mundo", pero
recordó lo del maestro y decidió analizar sus
emociones que afloraban, se sintió feliz.Al día siguiente
tuvo el apuro de visitar nuevamente al maestro por otra
discusión, ya que quería contarle sus
experiencias vividas en el día, el maestro
escuchó y le dijo que haberse dado cuenta de su
error era ya un gran avance y que cambiar años de
costumbre tomaría mucho tiempo. Analizando la
situación Ignacio se dio cuenta que en el fondo
estaba reviviendo lo que su padre hacía.La única forma
era tomar conciencia de éste tipo de acciones
y analizando que tipo de sentimiento la ha generado. A
medida que tomes más conciencia de tus conductas,
tendrás una mayor capacidad de mejorar. El maestro
le entregó otra semilla y le dijo que regresara en
cuanto ésta brotara. - Capítulo
2Pasado un mes, Ignacio
ya contemplaba una plantita, hasta entonces ya sabía
que tenía un problema de agresión, pero
éste ocurría cuando él no era
conciente y no podía evitarlo.Ese día se le
negó un préstamo de un banco
por la mala calidad
de sus documentos, Ignacio estaba furioso y fue a
"castigar" a su gerente de finanzas; pero algo frenó en seco sus
palabras, recordó que era así como su padre
le gritaba cuando erraba. Se disculpó, Ignacio
estaba calmado, se sentía triste por haber insultado
a su empleado y a la vez alegre por haber tomado conciencia
a tiempo para disculparse.Al culminar el
día Ignacio se enrumbó hacia la casa del
maestro, le contó todo este incidente, el maestro le
explicó que los traumas de la niñez colocan
trozos de leña en la mente; esta leña se
enciende fácilmente y crea fuegos y conflictos ante cualquier problema. Entonces
¿cómo hacer para que no se prendan a
menudo?El maestro le
enseñó a humedecer los leños mentales
practicando la meditación. Dentro de nosotros existe
un tesoro inmenso de paz y tranquilidad. Este tesoro se
llega a alcanzar dejando de pensar, es decir
adentrándose dentro de uno mismo.La planta que
germinó tenía la peculiaridad de "cerrarse"
cuando había ruido a
su alrededor, es la mimosa púdica.Al meditar
habitualmente se siente una paz y una felicidad
increíbles, recuperas tus cualidades innatas y
humedeces tus leños mentales. Pero dejar de pensar
es difícil, es por eso que el maestro le
enseñó una técnica: repetir una y otra
vez una sola palabra. Ignacio al momento de poner a prueba
esta técnica, por un momento sintió una
sensación de amor y
paz.Pero la
meditación requiere un 100% de concentración,
y esto sería difícil de hacer en el trabajo,
por tal razón el maestro le enseñó una
técnica para usarse en el día: el control de
la respiración. Debería tomar
unos minutos cada dos horas para concentrarse en su
respiración. Es luego de esta explicación que
el maestro el entrega a Ignacio un anillo, para que
recuerde lo del control de su
respiración.Ignacio debía
hacer una presentación audiovisual a un futuro
cliente,
el asistente que debía hacer la instalación
de los equipos aún no lo había echo, esto
intranquilizó a Ignacio y empezó a gritar,
pero tocando el anillo se concentró en su
respiración y logró calmarse, se
sentía muy bien, lleno de paz y tranquilidad,
irradiaba mucha energía e hizo una excelente
presentación. Se corría la voz de que Ignacio
estaba cambiando.El maestro le
explicó que una mente en paz y armonía atrae
lo bueno y lo positivo, además que el verdadero fin
de una
empresa es generar un entorno para aprender y
desarrollar el espíritu. Las utilidades que genere
son sólo un medio y no un fin.Dentro de nosotros
existe un río de sabiduría, meditando lo
sacas poco a poco. Lo haces aflorar y te da un conocimiento
intuitivo de lo que debas hacer. Un par de días
después Ignacio meditando logro sentir nuevamente
esa sensación de paz y amor, hasta llegó a
salir de su cuerpo.Estaba orgulloso de
haber logrado esto, pero el maestro exhortó que el
verdadero motivo de la meditación es el encontrar la
divinidad que cada quien lleva dentro. Meditar te ayuda a
ponerte en contacto con tu verdadera esencia.Luego el maestro le
enseñó una técnica para la
meditación que consideró la más
valiosa: el Kriya Yoga, esta técnica te
enseña una serie de posturas que a través de
ciertos movimientos físicos, afectan tu sistema
nervioso dándote una mejor capacidad de
concentración, y por lo tanto te permite avanzar
más rápido en el camino de la
meditación.Diez días
después el maestro le entregó la tercera la
semilla y le ordenó que regresara cuando la planta
floreciera. - Capítulo
3Pasados cuatro meses,
la semilla ya había germinado en un rosal. Ignacio
ya meditaba media hora en la mañana y en la noche.
Se notaban claramente los efectos de la
meditación.Ignacio se
sentía ganador y superior a todos, se sentía
invencible; además su empresa
estaba mejor. Citó a una reunión a los
ejecutivos importantes de la
empresa y sin darse cuenta empezó a jactarse y
hasta decir que valía más que los 10
vendedores de la empresa. Todo el mundo estaba
descontento.Ya era tiempo de
visitar al maestro, el mensaje de la rosa es que es hermosa
pero sólo la puedes admirar de lejos, si te acercas
demasiado te hinca.Esto mismo ocurre con
las personas que están manejadas por su ego. Dedican
su vida a "inflarse" de admiración, de prestigio, de
estatus y de aceptación; pero si te acercas
verás una realidad espinosa, de miedo y dolor
interno. En el fondo estas personas se sienten poco
valoradas e inseguras.El mensaje de la
tercera semilla es el control del ego. El ego en su
afán de ocultar una realidad interna y ocultarla
principalmente de ti mismo, desarrolla una serie de
conductas inconcientes; el objetivo
del ego es esconder tus carencias internas, pero sobre todo
de ti mismo. Debes de estar muy conciente para evitar que
tu ego te controle.Cada vez que meditamos
quemamos una pequeña parte de nuestro ego. Con el
ego buscamos la aceptación y el amor
afuera, cuando la tenemos aquí, dentro de nosotros.
Sólo meditando la obtendremos. Terminando la
sesión el maestro el entregó otra
semilla. - Capítulo
4Pasados un mes y medio,
la semilla se convirtió en una pequeña planta
de hojas verdes, alargadas y llena de ondulaciones. Ignacio
estaba obsesionado por tratar de eliminar su
ego.Ese día
tenía una reunión mensual con sus ejecutivos,
Ignacio quería probarse a sí mismo con lo del
ego, la mejor forma era haciendo participar a todos, que
cada quien exponga sus logros. Le tocó el turno a
uno de ellos y dijo que les iba mal, pero ni siquiera
logró terminar cuando uno de sus colegas
empezó a insultarlo y se unió a éste
otro.Ignacio veía
este cuadro con mucho rechazo, estaba totalmente conciente
y podía ver como los egos de sus ejecutivos los
controlaban. Ignacio calmó a todos e inmediatamente
le preguntó qué cual era la forma en que
podían ayudarlo. Éste respondió y dijo
que el principal problema era Ignacio, que se había
metido en su área y desmotivado a su
gente.Ni bien terminó
de hablar, el Ignacio de antes, el Ignacio controlado por
su ego empezó a vociferar, se dio cuenta y
terminó la reunión. Estaba decepcionado
consigo mismo, tarde tomó conciencia. Ignacio se
dirigió a la casa del maestro y le contó todo
este incidente, al maestro le pareció que el ego de
Ignacio era el que quería deshacerse de su
ego.Al querer ser el
vencedor y ganarle a su ego, estaba actuando con su ego.
Cuando te molestas, te angustias o te da rabia, atraes al
ego. Cuando estás en paz, con tranquilidad y
balance, el ego se aleja. El objetivo de la vida es
disfrutar caminando dando lo mejor de ti, al margen de los
resultados, y manteniendo tu paz y tu felicidad interior.
No te propongas vencer al ego, esto implica que hay un
ganador y un perdedor, lo cual va indirectamente al
ego.La semilla era del
árbol de mango, su mensaje es la importancia del
servicio desinteresado. Nuestro ego nos hace actuar todo el
tiempo de forma interesada. El servicio es lo opuesto al
ego.Aquellas personas que
han orientado su ser al servicio de los demás son
muy espirituales, felices, desapegadas y tienen muy poco
ego. Las personas buscan la felicidad en el sitio
equivocado, se sienten totalmente distintos, pero al final
son todos uno. La mayoría no quiere dejar ni entrega
ni una gota de sus recursos, pero lo que no saben es todos
somos un mar de energía divina.El servicio es una
actitud
hacia la vida, es dejar de pensar solamente en ti y pensar
en los demás. Servicio es preocuparse en el
crecimiento y desarrollo de otras personas. El maestro
ayudó a Ignacio a encontrar su misión, su
darma, su lección que aprender: comunicar sus
conocimientos sobre estas cuatro semillas a los ejecutivos
y empresarios. Ignacio tenía miedo de hablar en
público, el maestro el recomendó para que el
miedo desaparezca que debemos de poner como objetivo
servir, con amor y desinterés al
público.Pasados dos meses
Ignacio hizo la presentación, luego de haberse
preparado mucho, pudo llegar a controlar su miedo usando el
control de la respiración, hizo una excelente
presentación. Al terminarla todos le aplaudieron y
le agradecieron.Al día siguiente
fue a visitar a su maestro, e Ignacio le reprochó
que la técnica de pensar en servir a los
demás no era útil, entonces el maestro le
dijo que esta técnica sí servía,
sólo que para cada persona
es diferente. Además le dijo que el mejor antídoto para vencer al miedo era
enfrentarlo.A medida que seas
más conocido y popular, te será cada vez
más difícil evitar que el ego te manipule. A
medida que logres más éxitos,
requerirás meditar más, de tal forma que el
éxito no te haga sentir superior.El maestro el
entregó la quinta semilla, Ignacio al mirar las
plantas,
se dio cuenta que el lento crecimiento de las plantas
representaba el lento desarrollo que él
experimentaba en cada uno de los ámbitos
espirituales.Ignacio ahora meditaba
45 minutos en mañana y en la tarde. Al día
siguiente, tenía una reunión importante pero
tuvo que parar para festejar el cumpleaños de una de
sus colegas. A Ignacio no le gustaba esto de los
cumpleaños, no disfrutó absolutamente nada
del cumpleaños y estaba apurado, aún
molestó a la dueña del cumpleaños.
Luego tuvo que disculparse, recordó que el servicio
era pensar más en los demás y dejar de pensar
en uno mismo.Al día siguiente
contó este hecho al maestro, él dijo que sus
ojos y sus oídos habían estado cubiertos con
una capa de cera. Sólo te veías y escuchabas
a ti mismo en todas tus acciones. Ahora a través de
la meditación, el servicio desinteresado y el fuego
de tu alma que
aflora empezarán a derretir esta capa de cera y
podrás escuchar más las necesidades de otras
personas. El maestro el ordenó que regresase en
cuanto la semilla germine. - Capítulo
5La semilla que
germinaba era de girasol. Ignacio andaba más
preocupado por que necesitaba realizar una reducción
de personal, no sabía que hacer.
Habían asegurado una venta
grande, pero ésta sólo se realizaría
si coimeaban al vendedor.Con estas preguntas
Ignacio fue a visitar al maestro. Él le dijo que un
alpinista siempre tiene muchos caminos para llegar a la
cima, la elección del camino dependerá de
cuál sea el objetivo del alpinista. Si lo que quiere
es llegar lo más rápido posible a la cima,
tomará la ruta más corta y arriesgada. Si su
objetivo, es disfrutar cada uno de sus pasos en el ascenso
hacia la cima, con paz, felicidad y tranquilidad,
tomará el camino más seguro.La meditación,
hacer servicio desinteresado, controlar su ego había
hecho que aflore el ángel interno de Ignacio: su
alma. Ha hecho que se desarrolle su intuición y
espiritualidad y que tenga más presente la divinidad
en todas sus decisiones.Además el
maestro le explicó que si no existían los
consumidores del fruto de acciones anti-éticas
(piratería por ejemplo) tampoco
existirían los que las hacen (pirata). De
cómo nosotros mismos hemos fomentado los antivalores
que ahora son aceptados por todos.Pagar la coima, le
traería graves consecuencias a largo plazo. Ignacio
debía a aprender a pensar no sólo a corto
plazo, debería aprender a analizar las consecuencias
de sus actos y a ver la figura completa. La semilla de
girasol enseña que no importa la circunstancia o el
momento, debemos orientar nuestras decisiones hacia la luz,
hacia Dios. Debemos buscar siempre la luz que ilumine
nuestro camino. En cuanto al dilema que tanto preocupaba a
Ignacio, el maestro lo convirtió en un "trilema"
aumentando la opción: "Una reducción de
salarios
a todos por un tiempo para no despedir a nadie".Con las semillas
anteriores se habían dedicado a limpiar su foco de
luz interna y ahora con esta semilla asegurarían que
el sendero esté alumbrado. Disfruta de la felicidad
y la tranquilidad, y cosecha los frutos producidos por
vivir éticamente, le dijo el maestro, además
le entregó una semilla, que demoraría en
crecer, le ordenó que regresase cuando sepa cual era
la planta, hasta entonces debería practicar todo lo
aprendido. - Capítulo
6Ignacio había
tratado de incorporar el secreto de la semilla de girasol
en su vida. Estaba seguro de que su misión en la
vida era llevar espiritualidad al mundo de la empresa.
Ignacio se había dado cuenta de que muchos temas
relacionados con liderazgo y marketing estaban profundamente relacionados
con el enfoque espiritual.Ignacio
últimamente vivía muy estresado, ya que el
tiempo se le iba volando, él quería hacer de
todo, se sentía el "salvador del mundo". Se pasaba
el sábado y domingo trabajando todo el día,
su familia era la más perjudicada.Pasados seis meses,
desde que había sembrado la semilla, ya asomaba un
brote de pino. Ignacio sentía que no tenía su
vida bajo control. Ese día se dirigió a la
casa del maestro. El maestro le enseñó que
Ignacio tenía tantas pérdidas de tiempo que
le quedaba poco tiempo para las cosas realmente
importantes. Ignacio podía trabajar doce horas
diarias pero aún así no lograría
emplearlas correctamente. No es un problema de horas de
trabajo sino de cómo las empleas. Además el
maestro amonestó a Ignacio diciéndole:
¿Qué ejemplo estás dando?
¿Realmente estás enseñando paz y
felicidad, cuando te ven correr desesperadamente de
aquí a allá?El maestro le
recomendó que tratara de delegar en otros la mayor
cantidad de trabajo, darles confianza y prepararlos para
que decidan por su cuenta. Ignacio no debía actuar
con su ego como el salvador del mundo, debía cuidar
las interrupciones, además aprender a dejar de ser
el centro de todo.La
característica esencial del pino es el equilibrio y
el balance, el mensaje del pino es el perfecto equilibrio
en la vida. Ignacio debía tratar de equilibrar cada
papel para lograr un balance perfecto, de modo que un papel
no le haga sombra a otro, planificaría cada semana
para darle tiempo a cada uno de sus papeles y haría
una evaluación profunda de cómo le
fue y seguiría. Le tocaría preocuparse en dar
impulso a todos los papeles sino uno de ellos caería
al suelo. El
maestro le indicó que congelase el tiempo en bloques
para sus actividades importantes.Además el
maestro le explicó el importante papel de los
alimentos,
el qué comes debe ser una elección privada
para buscar un mayor balance en la vida. Nuestro cuerpo nos
avisa con muchas señales lo que no debemos comer, pero
nosotros no le hacemos caso.No sólo debemos
preocuparnos con que alimentamos a nuestro cuerpo sino
también con que alimentamos a nuestra mente,
la
televisión nos llena de temor, violencia y
agresión. Buscar tu paz interior es tu
responsabilidad. El maestro le ordenó que regresase
luego de tres semanas de haber aplicado esto, esta vez no
le entregó ninguna semilla. - Capítulo
7Pasadas seis semanas,
Ignacio había bajado de peso y se sentía
más ligero y saludable, ya no veía televisión y le resultaba asombroso
todo el tiempo que había ganado para leer y pensar.
Ahora se sentía más tranquilo y podía
meditar mucho mejor.Aún no
podía estar conciente de todas las interrupciones.
Muchos de sus empleados no se sentían felices con la
nueva política de la empresa. Ellos
debían tomar decisiones por su cuenta y sólo
debían interrumpir cuando existiera algún
asunto verdaderamente importante. Ignacio ya había
delegado la mayoría de sus funciones y
se dio cuenta del enorme cantidad de labores que le
quitaban tiempo. El ego de Ignacio sentía que ya no
era importante, que no lo necesitaban.Ese día
decidió visitar al maestro. Pero al llegar todo se
sentía vacío, no había nadie; entonces
resolvió visitarlo al día siguiente. Pero al
día siguiente, nada ni nadie le habría,
empezó a pensar lo peor. Entonces decidió
preguntar a la dueña de la casa vecina si
había sabido algo acerca de su maestro. Ella
apesadumbrada le dijo que él había sido
atropellado unas tres semanas atrás, y que
había fallecido. El maestro murió mostrando
algo parecido a una sonrisa. Esta noticia terminó
por confirmar sus peores temores, le cayó como un
aluvión encima. Se sentía impotente
¿Qué sería de él? No dejaba de
pensar en que no terminó su enseñanza.De pronto sintió
que sólo pensaba en sí mismo, un sufrimiento
egoísta. Entonces la señora le entregó
la llave de la casa. Ignacio entró, quiso meditar,
pero recordó que no tenía ninguna foto de su
maestro, entonces empezó a registrar la casa. Se
enteró que había sido ejecutivo. Se dio
cuenta de el maestro siempre había tenido la
humildad de no hablar sobre sí mismo, todo su tiempo
había orientado a servir, amar y ayudar a Ignacio;
Ignacio nunca le había dicho "gracias", el maestro
aunque muerto le enseñaba una
lección.Regresó a su
casa, y se puso a analizar todo el camino de las 6 semillas
que hasta ahora tenía. Estaba triste, luego de
meditar su dolor y pena se fue transformando en una
sensación de paz y tranquilidad. - Capítulo
8 - Capítulo
9
Habían pasado tres
semanas desde que se enterara de la muerte de su
maestro. Ahora se había volcado íntegramente al
servicio, daba entre tres y cuatro charlas semanales. Una noche
cuando Ignacio llegó a casa encontró un sobre
extraño. Lo desempaquetó y encontró un
grupo de
semillas y una carta. La carta estaba
escrita por el maestro, leyendo Ignacio entendió que la
misión del maestro era que sus discípulos crezcan
y se desarrollen, la séptima es la semilla de la
libertad y está representada por el árbol de
hunco. La flexibilidad de este árbol le da la libertad
total de movimiento,
lo único rígido y que no se mueve es la
raíz.
Nos enseña dos
mensajes: Flexibilidad, para tener la libertad de adaptarnos a
los vientos de cambio y la sabiduría del Desapego, no
arraigarnos a lo material, aprender la verdadera importancia de
las cosas.
El reto del ser humano es
tener el valor de
crear un nuevo camino y dejar de seguir las rutas conocidas,
para mejorar y crecer. El primer enemigo de este cambio
será el ego. Cada día debería hacer el
esfuerzo de pasar por encima de su ego y darle la bienvenida al
cambio. Las cosas no siempre son lo que parecen. No te dejes
convencer por lo evidente, por lo conocido y atrévete a
retar lo establecido.
Deberemos encontrar nuestra
verdadera identidad,
ese pedacito de Dios que todos llevamos dentro: en nuestro
espíritu. Los seres humanos estamos acostumbrados a
tener una perspectiva a corto plazo. Enfrenta los problemas
con desapego y compasión, vive en libertad y toma una
actitud de flexibilidad en la vida.
Por último el
maestro el ordenó que cuidara cada semilla, que cuidara
el mensaje de sabiduría, que lo aplicara a cada aspecto
de tu vida, sin olvidar su darma: comunicar y transmitir a los
hombres de negocios un
mensaje espiritual.
Ignacio terminó de
leer la carta, se sentía feliz y realizado, se
sentía entero, afortunado, íntegro y querido por
su maestro. No dejaba de pensar en su darma, y se le
ocurrió escribir un libro para llegar a una mayor
cantidad de gente. El título "El secreto de las 7
semillas"…
II
La primera semilla de
la felicidad es el autoconocimiento. El maestro oriental le
explica a Ignacio que los niños son como semillas.
Tienen un potencial inmenso cuando nacen, como si fueran un
árbol de vida capaz de alcanzar las mayores alturas.
Pero si los padres golpean la semilla, si maltratan al
niño, lo humillan, lo violentan, no lo valoran y no
le dan cariño, entonces la semilla no
germinará. A lo sumo, si crece, producirá un
árbol débil y limitado.Sin embargo, a
diferencia de las semillas, los seres humanos que han sido
golpeados de niños sí pueden crecer,
desarrollarse y ser felices. Pero para lograrlo necesitan
conocerse a sí mismos, tomar conciencia de su pasado
y de cómo los afecta en el presente. De allí
la importancia del autoconocimiento.Las sensaciones
derivadas de momentos difíciles de
nuestra niñez están grabadas en una memoria
emocional de la cual no somos conscientes. A esta memoria
se le denomina técnicamente "memoria subconsciente"
y tiene la particularidad de ser atemporal, es decir, que
la recordamos como si fuera ayer.Los momentos duros y
tenebrosos de nuestra niñez se proyectan en
emociones destructivas que sabotean nuestras relaciones
interpersonales y nuestra autoestima, impidiéndonos muchas
veces lograr la felicidad.La verdad es que
proyectamos nuestras memorias subconscientes en la pantalla
de las situaciones y personas del presente.Nuestra mente es como
un iceberg. Nuestro consciente es la pequeña parte
que está fuera del agua. Pero ese iceberg tiene una
inmensa masa de información sumergida que no podemos
ver: nuestro subconsciente. Mientras más conciencia
y conocimiento uno tome de su subconsciente, más
libertad y capacidad se tendrá para ser
feliz.Otro de los sencillos
ejemplos del maestro de Ignacio Rodríguez,
protagonista de "El secreto de las siete semillas" nos
sirve para aclarar aún más lo que ya se
venía explicando en la obra: "Cuando te tomas un
té usando una de esas bolsitas filtrantes, el agua
de tu taza se tiñe gradualmente de un color
oscuro. De la misma forma, ante las diferentes situaciones
de la vida, si nuestra niñez ha sido difícil,
nosotros somos como los sobres de té. Teñimos
las situaciones con emociones oscuras guardadas por largo
tiempo en nuestra mente, pero por desgracia no somos
conscientes de ello".La mayor parte de la
gente se resiste a reconocer la turbiedad de sus emociones
porque está tan asustada con esas aguas negras que
justamente las bloquean, las retienen y las mantienen. Al
aferrarse a ellas, se esclavizan más todavía.
Por eso la recomendación del maestro es dejar que
salgan las aguas negras de las emociones y luego,
recién entonces, podrán brotar las aguas
transparentes que hay que canalizar para desarrollar una
vida feliz.La clave del
autoconocimiento se parece a la experiencia de pasar de
manejar un auto automático, sin pensar y sin tomar
conciencia de cada acto, a un auto mecánico, para el
que se necesita estar consciente de cada cambio. El hecho
de darse cuenta de los propios errores y limitaciones es ya
un gran avance.Cuando uno está
vendado y tiene que caminar por un sendero donde hay varios
fuegos, puede esquivarlos al detectar su calor.
Lo mismo en la vida real. Si uno tiene fuegos emocionales
que lo llevan a actuar agresivamente, por lo menos debe
percibir su calor e intentar controlarse. A medida que se
tome más conciencia de las propias conductas, se
tendrá una mayor capacidad de mejorar y transformar
la propia existencia.- Primera
semillaLa segunda semilla de
la felicidad nos ayuda a encontrar la paz interior y
ponernos en contacto con nuestra energía interior:
se trata de la meditación. Es sabido que dentro de
nosotros existe un tesoro inmenso de tranquilidad, de
sosiego y calma. Pero ese tesoro está custodiado por
unos guardianes que son nuestros pensamientos. La
única forma de poder acceder a este tesoro es
dándole un descanso a los guardianas. En otras
palabras, dejando de pensar.Gracias a la
meditación, el ser humano se pone en contacto
periódico con su energía vital
y va recuperando entonces sus cualidades innatas. Logra
humedecer tanto sus leños mentales que,
después de un tiempo de práctica, ya no
prenden fuego. Esto quiere decir que por más que uno
enfrente problemas y dificultades complicadas, ya no se
explota ni se estalla en ira.Y esto porque las
personas somos como focos de luz pintados por fuera de
negro. Cuando dejamos de pensar diariamente por unos
minutos, descascaramos la pintura
poco a poco. Nuestra luz interior empieza a brillar en
nuestra vida, nos hace más felices, pero sobre todo
nos orienta a seguir iluminando otras vidas.Los seres humanos somos
también como jarrones de plata abandonados: no han
sido limpiados en mucho tiempo y están oscurecidos.
Todos estamos acostumbrados a verlos oscuros y no sabemos
que esa no es su verdadera apariencia. Al dejar de pensar y
meditar es como si los limpiáramos un poco cada
día. Llega un momento en que la plata empieza a
brillar y a iluminar por sí misma. Pero si la
dejamos de limpiar, sino practicamos diariamente, se vuelve
a ensuciar.A lo largo del
capítulo 3 del libro, Fischman explica brevemente
cómo aprender a meditar, a desconectarse de las
preocupaciones y a respirar, a fin de encontrar a Dios
dentro de sí. - Segunda
semillaLa tercera semilla es
el control del ego. Cuando uno se molesta, se angustia o le
da rabia, atrae al ego. Cuando uno está en paz, con
tranquilidad y equilibrio, el ego se aleja."Cuentan que unas
personas – dijo el maestro a su discípulo-
estaban navegando en un bote, cuando una de ellas
comenzó a perforar debajo de su asiento. Los otros
pasajeros le gritaron: "¿Qué estás
haciendo? ¿Te has vuelto loco?". El pasajero
respondió: "¿Qué les preocupa a
ustedes? Es mi asiento el que estoy perforando". Y las
personas le contestaron: "El agua entrará por tu
hueco y no sólo te hundirá a ti sino
también a nosotros". Lo mismo le ocurre a la
humanidad. Cada persona se preocupa por sus cosas y no se
da cuenta de que con su conducta está hundiendo a la
humanidad entera".Muchas veces pensamos
que nosotros somos los únicos que sabemos y que
somos más inteligentes y que tenemos la razón
más que los demás y no queremos escuchar a
los demás; es el ego que actúa por nosotros y
nos impide ver la realidad, nuestra realidad interna que
cada uno de nosotros poseemos, es como una máscara
el cual impulsa nuestra forma de actuar inconscientemente.
Una forma de reducir el ego es tomando conciencia de
nuestro actos y meditando. - Tercera
semillaLa cuarta semilla, la
del servicio desinteresado, deviene natural cuando se ha
conseguido obtener la tercera, la del control del propio
ego. Es en el servicio que el
hombre crece y se desarrolla más en
armonía con los otros y consigo mismo.El servicio es el
opuesto al ego. El servicio es dejar de pensar solamente en
ti y pensar en los demás. Servicio es preocuparse en
el crecimiento y desarrollo de otras personas. - Cuarta
semillaLa quinta semilla es la
del girasol, flor que simboliza el apego a la luz. Debemos
ser fieles a nuestros principios,
valores
y virtudes morales, practicando siempre la ética
profesional.Esta semilla nos
enseña que debemos dedicar nuestro tiempo a lo
importante, no sólo a lo urgente. Para lograr esto
debemos aprender a delegar, a confiar más en los
otros, a dejar que vuelen solos. Si los que nos rodean
crecen integralmente y se superan, lo haremos nosotros
también.Usa la regla de oro:
"No le hagas a otros lo que no quieres que te hicieran a
ti". Ahora la semilla de girasol nos permite llevar tu luz
por todo tu camino en la vida, asegurando que el sendero
esté iluminado. Disfruta la paz y la tranquilidad, y
cosecha los frutos producidos por vivir
éticamente. - Quinta
semillaLa sexta semilla es la
del equilibrio, la que nos muestra
la importancia de alcanzar la armonía en los
diferentes papeles que jugamos en la vida. Sigamos el
ejemplo del pino: sus ramas logran el balance perfecto,
recibiendo por igual la energía del sol. En vez de
angustiarnos y cargas con los problemas, aprendamos del
pino a permanecer siempre ligeros.Esta semilla nos
enseña el equilibrio que debemos de tener entre
nuestra vida y las actividades que tenemos que realizar
cada uno de nosotros; por ejemplo si tenemos familia, no
descuidarla y tomarnos un tiempo para estar con ella, nos
descuidemos nuestro alimento que es lo más
importante; consumiendo alimentos sanos y equilibrados los
cuales nos van a proporcionar tranquilidad y paz e
incrementan nuestra vitalidad y fuerza
(vegetales, verduras, productos lácteos y comida fresca), y hacer los
mas importante y dejar, dejar de mirar la televisión y leer los
periódicos, así sabremos que hacer y que no
hacer.Planificando cada
semana, podremos darle tiempo a los diversos roles de
nuestra vida en forma pareja, sin descuidar
ninguno. - Sexta
semilla - Séptima
semilla
La sétima y
última semilla es la de la libertad y está
representada por el árbol del junco. Este árbol
tiene la particularidad de ser totalmente flexible. Tiene la
capacidad de soportar vientos huracanados y hasta de doblarse y
colocarse en posición horizontal. Su flexibilidad le da
libertad total de movimientos. Lo único que es
rígido y no se mueve es su raíz, que le sirve de
centro y lo arraiga al suelo.
Así, si bien todo
cambia en el mundo material, lo único que no cambia es
el espíritu. De allí que el cultivo de nuestro
espíritu, que será lo único que nos
trascienda, tiene que ser uno de los objetivos
más importantes de nuestra vida.
Muchas veces tenemos miedo
a los cambios, pero cambio es bueno y debemos estar dispuestos
a cambiar y ser flexible. El reto del ser humano es tener el
valor de crear nuevos caminos y dejar las rutas conocidas, para
mejorar y crecer. Cambiar significa asumir el riesgo de
equivocarse y esto nos hace vulnerable, que es exactamente lo
que el ego no quiere. Tienes que ser sordo a las cosas
negativas.
III
Conductas inconscientes
del ego
- Mostrarse
superior. - Mostrar y contar tus
capacidades a todos, para sentirte aceptado y
solicitado. - Hablar a espaldas de las
personas, para sentirte diferente y superior a esa
persona. - Buscar culpables, para
encubrir que no nos sentimos competentes. - No aceptar las ideas de
los demás, para sentirte el mejor, el más
inteligente, el más capaz.
Servicio de la
empresa
- En el negocio puedes
decidir que el fin es hacer dinero y
orientar todas tus fuerzas a ello. - En el negocio puedes
decidir que el fin es ser un medio de servicio a la sociedad y
un entorno adecuado para que las personas aprendan y
encuentren felicidad. - Venderle una
participación de tu negocio a Dios. Donar parte de tus
utilidades a entidades benéficas.
Identificación del
drama
- Identifica tus
dificultades. - Identifica tus
retos. - Identifica tus pruebas.
- Identifica tus
problemas. - Descubrir tus verdaderas
capacidades y aptitudes como persona. - Debe estar orientada con
tu campo. - Siempre está
orientada al servicio.
Selección de una
alternativa en un dilema
- Entender bien el
problema. - Definir qué valores
están enfrentados. - Analizar las consecuencias
positivas y negativas de tomar cada decisión (a corto y
largo plazo y no sólo las consecuencias
económicas). - Definir cuál de
ambas maximiza la felicidad o minimiza el sufrimiento de las
personas. - Analizar que alternativa
está más alineada con las cualidades del alma,
del amor y la compasión. - Pregunta a tu
espíritu y a tu intuición con cual alternativa
podrás "dormir mejor". - Y si aún así
no se soluciona, entonces contemplar la posibilidad de
convertir el dilema en un "trilema": generar más
opciones.
Quitar la dependencia de
los subordinados
- Prepáralos
- Capacítalos
- Luego lánzalos al
vacío para que vuelen solos. Mantente cerca pero a la
vez lejos.
El tiempo es como el
agua
- Cuando vives movido por
las urgencias tu tiempo se evapora
rápidamente. - Cuando estas más
conciente de la necesidad de concentrarte en las cosas
importantes es como el agua líquida: todavía
escurridiza. - Cuando hacemos bloques con
nuestro tiempo y lo separamos para las actividades importante
es como los bloques de hielo: tenemos el control en nuestras
manos.
Tipos de
alimentos
- Tamásicos: producen
somnolencia, flojera, inacción, inercia y pesadez, son
por Ej.: comida guardada, enlatada, sobre cocinada, seca,
quesos curados, carnes rojas, vino, bebidas alcohólicas,
tabaco,… - Rajásicos: producen
euforia, energía, agresividad, te llenan de
pensamientos, angustias y preocupaciones, son por Ej.:
condimentos picantes, mostaza, ají, rocoto, pepinillos
encurtidos, ají, ajo y cebolla, café,
carne de pescado y pollo,… - Sátvicos: producen
balance y paz e incrementan tu vitalidad y fuerza,
además producen alegría, claridad y equilibrio;
son por Ej.: vegetales, frutas, nueces, comida fresca,
productos lácteos, mantequilla, quesos suaves,
cereales,…
La meta del ser humano no es
el desarrollo material, no es llegar más de prisa, es
disfrutar de la vida dando lo mejor de uno mismo, es utilizar
cualquier circunstancia con el propósito de crecer y
desarrollar nuestro espíritu, es encontrar ese pedazo de
Dios que cada uno lleva dentro, es escuchar a esa luz interna:
nuestro espíritu.
El ser humano busca la
felicidad y el amor donde nunca los va a encontrar, piensa que la
felicidad está en las cosas materiales,
que está en lograr metas; pero no es así, cada
quien tiene un tanque interior lleno de felicidad y de amor, que
sólo podremos llegar a usarla si nos adentramos en
buscarla dentro de nosotros.
El cambio es un proceso lento
y difícil de mantener que requiere de muchísima
perseverancia, no se puede cambiar un hábito, que es
normal en nosotros, en una noche. Este proceso jerárquico
representa el lento crecimiento de cada semilla, no se puede
saltar etapas. Cambiar significa asumir el riesgo a equivocarse y
nos hace vulnerables, los errores no son más que grandes
oportunidades de aprender.
El objetivo del ego, es
ocultar una realidad interna, y ocultarla especialmente de ti,
este ente siempre existirá dentro de nosotros, no radica
en eliminarlo sino tratar de controlarlo.
¿De qué sirve
conocerse a sí mismo, meditar, controlar al ego,
reflexionar éticamente si toda tu vida es un desbalance y
un desorden total? Se debe lograr el equilibrio entre lo racional
y lo emocional, entre lo espiritual y lo material, entre el
trabajo y la familia. No
actuar con el ego, al creerse el salvador del mundo.
El presente se ve muy
afectado por nuestro pasado, la toma de conciencia a
través del autoconocimiento nos sirve para poder detectar
actitudes que
residen en nuestra memoria emocional.
Fischman, D. (2002). El
secreto de las siete semillas. Lima: El Comercio.
Trabajo enviado
por:
León Vilca,
Edwin
Mamani Humpiri,
Luis