- Los principales "factores de
riesgo" para adquirir una ITS - Normas generales de tratamiento
que deben seguir los/las jóvenes - Complicaciones y secuelas
más frecuentes de las infecciones de transmisión
sexual - Clasificación de las
infecciones de transmisión sexual por
síndromes - Infecciones de
transmisión sexual más
frecuentes
Las Infecciones de
Transmisión Sexual (ITS), son un grupo de
infecciones adquiridas fundamentalmente por contacto
sexual.
Cerca de un millón corresponden a infecciones por
el virus de
inmunodeficiencia humana (VIH), el agente causal del SIDA. Su
importancia y la necesidad de su control
está no sólo en las infecciones agudas que causan,
sino también, en las complicaciones que las caracterizan
(como la enfermedad pélvica inflamatoria, el embarazo
ectópico (embarazo fuera del útero) o la
infertilidad (incapacidad de tener un embarazo).
Se conocen más de 20 microorganismos
transmisibles por contacto sexual, pero se puede afirmar que las
infecciones más comunes son seis: tres consideradas las
ITS clásicas:
- Sífilis
- Gonorrea
- Chancro blando o chancroide
- Clamidia
- Herpes genital
- Infección por VIH
- Virus de Papiloma Humano
- Hepatitis B
Los principales
"factores de riesgo" para
adquirir una ITS es exponerse a ella.
Por eso los factores de riesgo son:
- Tener una pareja sexual infectada.
- El comportamiento sexual de la persona, ya
que se relaciona con la probabilidad
de exposición y transmisión de las
mismas. - Tener relaciones coitales sin
protección. - Tener prácticas sexuales de riesgo como
anal, vaginal, oral sin condón. - Uso de alcohol y
drogas que
promuevan conductas sexuales de alto riesgo. - Existen infecciones como el VIH y la
infección por hepatitis b
que se pueden adquirir con material punzocortante mediante
tatuajes y perforaciones y no son precisamente por contacto
sexual. - Relaciones sexuales sin protección con
personas desconocidas. - Ser víctima de abuso
sexual o violación por uno o varios
agresores.
- Para descartar la presencia de ITS, deben
examinarse los siguientes casos:
- La presencia de salida de flujo por la vagina
(líquido que puede ser blanco, amarillo/verdoso),
dolor pélvico (dolor en abdomen bajo). - Y en el hombre
puede haber salida de líquido transparente o amarillo
a través del pene (llamada
secreción). - Dolor y ardor al orinar, tanto en hombres como en
mujeres - Todo (a) adolescente sexualmente
activo(a) - Todo (a) adolescente que se sospecha haya sido
víctima de violación, abuso sexual o
incesto. - Adolescentes embarazadas
- Adolescentes con antecedentes de varias parejas
sexuales. - Adolescentes sexoservidoras o
bisexuales - Adolescentes homosexuales
- Adolescentes que han tenido (o se sospecha que han
tenido) contacto sexual con una persona que tiene ITS o que
hayan usado drogas aplicadas en las venas - Que hayan practicado el coito anal sin
protección - Inicio de relaciones
sexuales a temprana edad sin
protección - Falta de uso de condón
- Adolescentes presos
- Adolescentes varones con leucocituria (presencia de
glóbulos blancos en la orina) - Adolescentes con infecciones sexuales
recurrentes - Adolescentes drogadictos o que han compartido
agujas
No es raro que una o más ITS se presenten y se
repitan durante el periodo de la adolescencia y
la reinfección es la causa más frecuente. La
existencia de dos o más infecciones de transmisión
sexual al mismo tiempo es
común. Se debe hacer seguimiento y estar alerta
para detectar las secuelas (consecuencias) a largo
plazo, tales como:
- Enfermedad inflamatoria pélvica (dolor
abdominal bajo) - Esterilidad
- Embarazo ectópico (embarazo fuera del
útero). - Orquitis, epididimitis y deferentitis (Inflamación de los testículos).
- Infecciones en el recién nacido de una madre
infectada. - Cáncer cérvicouterino (del cuello
uterino).
Entre las causas se encuentran varios factores
determinantes, de ellos destacan:
Factores Socioculturales
- El comienzo de las relaciones sexuales a edades
más tempranas, que implica una mayor posibilidad de
contactos con distintas parejas sexuales. - Uso inconstante del condón.
- El aumento de la actividad sexual, sólo con
la protección de métodos
anticonceptivos. - La modificación de las costumbres (valores
morales y familiares). Múltiples parejas
casuales. - No tener una educación sexual formal.
- El consumo de
drogas y alcohol asociados a conducta
de riesgo sexual irresponsable.
Factores Médicos
- Resistencias de los gérmenes causales, es
decir las bacterias,
virus, hongos y
otros crean resistencia a los medicamentos debido a la
automedicación y al uso incorrecto de
los antibióticos. - Lo que contribuye a un aumento constante y continuo
de las infecciones de transmisión sexual.
NORMAS GENERALES DE TRATAMIENTO QUE DEBEN SEGUIR
LOS/LAS JÓVENES
Siempre que se sospeche o se sepa con certeza que se
está frente a una infección de transmisión
sexual, se deben tener en cuenta una serie de normas antes de
iniciar un tratamiento adecuado.
Se debe pensar que el o la joven tiene una
infección de transmisión sexual cuando presente una
lesión genital o bien, frente a una erupción
cutánea de causa desconocida y antecedentes de contacto
sexual.
Cualquiera que mantenga relaciones sexuales con personas
diferentes, puede contagiarse; hay que olvidarse de los
prejuicios sociales o personales.
Hay que llevar un tratamiento adecuado y administrar las
dosis correctas, así como tratar a la pareja ya que de
ello depende el curso de la enfermedad.
Se debe recomendar la abstinencia sexual (no tener
relaciones sexuales mientras exista la infección de
transmisión sexual) hasta comprobar la curación
total de la infección de transmisión sexual. Esta
recomendación es válida tanto para el/la joven,
como para las posibles parejas sexuales, ya que si no ha sanado
completamente, se facilita su diseminación (se trasmite a
otras personas).
A todo adolescente que se le ha diagnosticado una ITS,
se le debe otorgar orientación-consejería,
asesoría y los recursos
necesarios para el tratamiento, con la finalidad de disminuir la
posibilidad de adquirir nuevamente una ITS
COMPLICACIONES Y SECUELAS MÁS FRECUENTES DE
LAS INFECCIONES DE TRANSMISIÓN SEXUAL
Las ITS (infecciones de transmisión sexual)
pueden dejar como secuela la infertilidad y otras complicaciones
en la capacidad reproductiva de la persona:
EN LA
MUJER:
- La enfermedad inflamatoria
pélvica - El dolor pélvico crónico (dolor
abdominal bajo) - La infertilidad;
- El carcinoma cervicouterino, el cual puede ser
consecuencia de la infección por algunos tipos de
virus de papiloma humano.
Son secuelas importantes de ITS, en particular las
causadas por la chlamydia y el gonococo. A su vez, la enfermedad
inflamatoria pélvica mal atendida, por sus efectos sobre
las trompas de Falopio que conducen a cicatrización puede
llevar a complicaciones como infertilidad y embarazo
ectópico (fuera del útero).
EN EL HOMBRE:
Está en riesgo de complicaciones como
- Epididimitis (inflamación del
epidídimo que se encuentra dentro de los
testículos), - Estrechez uretral (significa que el conducto por
donde sale la orina se hace estrecho), - Orquitis (inflamación de los
testículos) - Esterilidad (que ya no puede fecundar a un
óvulo y no puede embarazar a su pareja).
EN EL EMBARAZO:
Algunas infecciones transmitidas sexualmente, como la
sífilis, el VIH, la gonorrea y la clamidia,
pueden pasar de la madre a su hijo durante el embarazo, al
momento del nacimiento o la lactancia; y
ocasionar complicaciones al producto como
infecciones perinatales en ojos, sistema nervioso,
tracto digestivo, así como otro tipo de
afecciones.
CLASIFICACIÓN DE LAS INFECCIONES DE
TRANSMISIÓN SEXUAL POR SÍNDROMES
Los cuatro síndromes más comunes
son:
SÍNDROME DE SECRECIÓN
URETRAL
La secreción uretral es la molestia más
frecuente en hombres con ITS. En estos casos se observa la salida
de secreción a través de la uretra, con frecuencia
acompañada de disuria. (Ardor al orinar). Los agentes
más comunes que causan la enfermedad son en estos casos
Neisseria gonorrheae, Chlamydia trachomatis y Ureoplasma
urealyticum .
Para fines prácticos la uretritis
(inflamación del conducto por donde pasa la orina en el
hombre) se
subdivide en gonocóccica (causada por Neisseria
gonorrhoeae) y no gonocóccica (causada por Chlamydia
trachomatis y Ureoplasma uretriculum.
SÍNDROME DE FLUJO VAGINAL
Si bien la presencia de flujo vaginal es la
afección ginecológica más común de
las mujeres sexualmente activas, no todos los casos son
anormales, ni indican la presencia de una ITS. La percepción
de un flujo anormal depende de la paciente, es frecuente que
exista como parte de la molestia una mayor cantidad de
secreción, un cambio en el
aspecto u olor, prurito (comezón), disuria (ardor al
orinar), dolor abdominal bajo, dolor genital o al tener
relaciones sexuales. Existen microorganismos causantes del flujo
vaginal que no son necesariamente infecciones de
transmisión sexual (candidiasis y vaginosis
bacteriana).
El flujo vaginal que proviene del cérvix (cuello
uterino) es, por lo general, causado por N. gonorrheae y/o C.
trachomatis; aquel que proviene directamente de las paredes
vaginales es debido a T. vaginalis, C. albicans o se trata de una
vaginosis bacteriana.
Existen también vaginitis químicas por la
aplicación de medicamentos, limpieza vaginal con
sustancias abrasivas o la introducción de cuerpos extraños. Es
importante recordar que la paciente con candidiasis vaginal
(infección por hongos) recurrente, puede tener diabetes mellitus
o bien infección por VIH.
La elección del tratamiento debe tomar en cuenta
la causa más probable, la posibilidad de embarazo y la
historia de
contactos sexuales recientes de la o el paciente. Con
excepción de los casos de candidiasis (infección
por hongos) y vaginosis bacteriana (infección vaginal por
bacterias) él o los contacto(s) sexual(es) deben incluirse
en el tratamiento.
SÍNDROME DE ULCERACIÓN
GENITAL
Los agentes que comúnmente producen
úlceras genitales son Treponema pallidum (sífilis),
Heamophilus ducreyi (chancroide), Calmidobacterium granulomatis
(danovanosis), los virus del herpes simplex
(HSV-1 y HSV-2) y las variedades de Chlamidia trachomatis que
causan el linfogranuloma venéreo (es una infección
de transmisión sexual que afecta al sistema
linfático)
Hoy en día, la importancia de las úlceras
genitales está en su capacidad para aumentar, tanto la
susceptibilidad de una persona no infectada al VIH durante una
relación sexual con una persona infectada, como el
aumentar la inefectividad de una persona infectada por VIH con
úlcera genital. Por ello, el manejo oportuno y apropiado
de la enfermedad ulcerativa genital debe considerarse como una de
las estrategias para
el control de la epidemia del SIDA.
Las úlceras genitales pueden ser dolorosas
(chancroide) o sin dolor (sífilis) y, con frecuencia, se
acompañan de crecimiento de los ganglios de la
ingle.
SÍNDROME DE DOLOR ABDOMINAL
BAJO
Cuando una mujer se presenta
con dolor abdominal bajo, es importante descartar que se trate de
alguna emergencia médica, debida a padecimientos como:
obstrucción o perforación intestinal, apendicitis
aguda, embarazo ectópico o un aborto
séptico. Una vez excluidos estos diagnósticos, la
causa más frecuente de dolor abdominal bajo en la mujer
sexualmente activa, es la enfermedad pélvica
inflamatoria
INFECCIONES DE TRANSMISIÓN SEXUAL MÁS
FRECUENTES
SÍFILIS
Las características que hacen que sea
difícil el diagnóstico de la sífilis, son las
siguientes:
- El chancro sifilítico se cura en forma
espontánea, por consiguiente, el paciente puede no darle
importancia y no consulta al médico. - En las mujeres la lesión inicial (en los
labios menores de los genitales femeninos y/o alrededor del
ano), puede pasar inadvertida o puede estar oculta en el
cérvix (cuello uterino). - Durante el período de latencia, la
sífilis no presenta síntomas. - La sífilis secundaria y tardía se puede
parecer a (y confundir con) una gran variedad de enfermedades.
La sífilis se presenta por lo general en una
de las siguientes formas:
- Sífilis primaria (10 a 90 días
después del contagio). Se caracteriza por la
presencia de una pápula (lesión tipo roncha) que
evoluciona a una úlcera que no duele con bordes elevados
llamada chancro e inflamación de un ganglio
regional. - En la sífilis secundaria (seis o más
semanas después de la infección), se presenta
un malestar, fiebre,
cefalea, dolor de garganta, inflamación generalizada de
los ganglios, lesiones cutáneas (varias, por lo general
simétricas, extensas y no producen comezón, a
menudo son superficiales y papuloescamosas; el eritema
(coloración rojiza) es bastante marcado en la palma de
las manos y los pies; cuando se encuentra afectada toda la cara
las lesiones tienden a ser anulares), lesiones de la membrana
mucosa (Condyloma latum), hepatitis (inflamación del
hígado). - Sífilis tardía (toda enfermedad
sifilítica que sigue a la fase secundaria). Las
manifestaciones más comunes son meningitis aguda, o
subaguda, que puede ocurrir un año después de la
infección, accidentes
cerebrovasculares (cinco años después de la
infección inicial pueden observarse accidentes
cerebrovasculares debido a artritis
sifilíticas). - Sífilis congénita tardía.
Caracterizada por sordera, debido a la lesión del octavo
par craneano, queratitis intersticial, lesiones nasales
(periostitis, que se manifiesta en un hueso frontal prominente
y una hendidura del dorso de la nariz), lesiones de la tibia
(periostitis, que se manifiesta en una curva exagerada en la
tibia), artritis de la rodilla (articulación de Clutton)
anormalidades de la dentición permanente (dientes de
Hutchinson).
En toda adolescente embarazada, como parte importante
del control prenatal (antes del nacimiento del bebé), se
debe realizar una prueba de VDRL(es una prueba de sangre para
detectar si hay infección de transmisión sexual) si
pertenece a un grupo de alto riesgo de contraer ITS, se debe
efectuar un segundo análisis de sangre antes del parto. Cuando
hay dudas acerca del diagnóstico, la joven embarazada debe
recibir tratamiento para prevenir una posible enfermedad en el
recién nacido. Este estudio es de bajo costo y se puede
realizar en un Centro de Salud o clínica que
cuente con laboratorio de
la Secretaría de Salud.
GONORREA
La gonorrea está producida por el diplococo
Neisseria gonorrhoeae, (Bacteria).
En la mujer regularmente los signos
vulvares (aparecen en la vulva) son los primeros. La paciente
consulta por un edema (inflamación) doloroso de la vulva,
acompañado de una leucorrea verdosa (salida de
líquido o flujo vaginal) aparecida entre dos y siete
días después de una relación sin
protección (condón). La mayoría de
las mujeres están lejos de presentar este cuadro
clínico ya que son casi asintomáticos. En los
hombres, uno de los síntomas iniciales es la disuria
(ardor al orinar), así como aumento en la frecuencia de la
micción (orina frecuente) y descarga uretral purulenta
(flujo a través de la uretra, es decir por el
pene).
Diagnóstico
El diagnóstico sólo puede establecerse con
seguridad
mediante examen vaginal o uretral en el caso de los
hombres.
Tratamiento
El tratamiento consiste en la
administración intramuscular de 4.8 millones de
unidades de penicilina procaínica y 1 gr.
de Probencid por vía oral.
CHLAMYDIA
Una de las razones de la diseminación
rápida de la clamidiasis es que un grado importante de la
infección es desconocida. En la mujer las infecciones por
Chlamydia se presentan en endocérvix (tejido interno del
cuello uterino) donde el microorganismo
parasita el epitelio columnar de transición. En el hombre,
parasita el epitelio uretral (tejido interno de la uretra, es
decir por donde pasa la orina).
El microorganismo se aísla frecuentemente de
mujeres cuyos compañeros sexuales padecen uretritis
inespecífica (inflamación de la uretra de causa
desconocida). Algunos de los hombres infectados son
asintomáticos. Los que manifiestan sintomatología,
presentan síntomas urinarios como disuria (ardor al
orinar), frecuencia urinaria aumentada (orina frecuente) y
descarga uretral de aspecto mucoide o purulento (flujo a
través del pene).
El diagnóstico se hace a través de un
examen de cultivo de secreción vaginal.
Tratamiento
Ambos grupos de
pacientes requieren una sesión de 14 días de
tetraciclina 500 mg. cada 6 horas o
minociclina 100 mg. cada 12 horas. Al terminar el
tratamiento y para asegurarse que la infección ha sido
erradicada, se repiten los cultivos. Cuando no se dispone para
hacer cultivos de chlamydia se iniciará un tratamiento
empírico de 21 días. Las embarazadas pueden
tratarse con eritromicina 800 mg. c/6 horas, durante
siete días.
HERPES
GENITAL
El virus del herpes pertenece a un amplio grupo
del cual cinco especies contaminan habitualmente al ser humano.
Hay que distinguir el herpes con manifestaciones en boca, de
transmisión bucofaríngea (a través del
contacto de la boca), que puede dar lugar a lesiones genitales y
el Herpes 2, con manifestaciones en las vías urinarias y
genitales.
El herpes del recién nacido es casi siempre de
tipo 2, consecuencia de un herpes genital de la madre. El
interés
de esta infección va en aumento debido a su papel en la
etiología del contagio del cuello uterino.
Los síntomas son vesículas únicas o
múltiples, pruriginosas (que causan comezón) y
aparecen en cualquier lugar en los genitales. La lesión
primaria puede persistir de tres a seis semanas, mientras que los
síntomas que reaparecen periódicamente, duran entre
siete y diez días. La infección primaria puede
acompañarse de signos generales: fiebre, cefalea (dolor de
cabeza), y falta de apetito. Las lesiones se presentan a nivel de
la vulva en la mujer l (vestíbulo de los labios y de la
zona del clítoris)
Diagnóstico
Debe sospecharse siempre un Herpes genital ante la
presencia de vesículas y/o ulceraciones genitales. El
diagnóstico clínico es fácil en una
infección primaria y complejo en casos de recaídas.
Deberá hacerse la identificación de las lesiones
características por citología, cultivo, o mediante
la preparación de un frotis de Tzank con raspados de las
lesiones.
Tratamiento
El tratamiento del adolescente con herpes genital es
sintomático. La región genital debe mantenerse
limpia y seca. A veces, la aplicación de ungüento de
xilocaína al 2% alivia las molestias al producir analgesia
local; también pueden administrarse analgésicos
sistémicos (medicamentos para el dolor). En los casos de
disuria (ardor al orinar) severa se recomienda a las pacientes
orinar sentadas en una bañera.
Los mejores resultados se han logrado con acyclovir
oral, que ha demostrado ser efectivo para reducir la
excreción del virus, acelerar la cura de las lesiones y
disminuir la duración del dolor.
Se sospecha una relación entre el herpes genital
y el carcinoma del cuello uterino. La adolescente infectada con
herpes debe ser informada de esta relación y de que debe
someterse a la prueba de Papanicolaou una vez al año.
Durante el primer trimestre del embarazo el herpes genital puede
provocar aborto espontáneo y posteriormente graves
problemas al
recién nacido.
Los adolescentes
con herpes genital requieren atención especial. La recurrencia
imprevisible de los ataques y el hecho de que la enfermedad es
incurable pueden causar gran ansiedad, pérdida de
confianza en sí mismo y disfunción sexual. Por lo
tanto, el adolescente debe recibir apoyo psicológico y al
mismo tiempo debe ser orientado en relación con la
responsabilidad que tiene por ser portador de
virus herpético durante toda la vida. Además, las
lesiones abiertas facilitan la infección con el virus de
la inmunodeficiencia adquirida. Las relaciones sexuales
monógamas (una sola pareja), el uso de condones y la
abstinencia sexual ayudan a prevenir nuevas
infecciones.
VIRUS DEL PAPILOMA HUMANO
(CONDILOMA ACUMINADO)
La infección genital por el virus del
papiloma humano, tiene un período de
incubación de pocas semanas a varios meses. La
lesión más visible, el condiloma acuminado,
habitualmente es transmitido sexualmente y a menudo se encuentra
asociado a otras infecciones sexualmente transmisibles. En
algunos países del mundo es actualmente la
infección de transmisión sexual más
frecuente. Existe el potencial de la posible inducción del cáncer con el pasar
del tiempo, los tipos de papiloma humano 16 y 18 han sido
asociados a la neoplasia cervical intraepitelial (Cáncer
del cuello uterino) l x.
Diagnóstico
La lesión de condiloma acuminado puede abarcar
cualquier parte de la región genital, incluyendo la
vagina, la uretra, la vejiga y el recto y puede hallarse
extremadamente extendido. Las lesiones son más severas en
aquellas pacientes que tienen secreción vaginal, poca
higiene
personal o
perspiración profusa, así como en pacientes
embarazadas. Puede haber lesiones planas e infección
subclínica.
Tratamiento
No existe un tratamiento satisfactorio. Actualmente el
tratamiento local con ácido tricloracético (50-90%)
tiene una buena acogida por tener menos toxicidad. Se aplica
semanalmente, no requiere lavado posterior y duele sólo
los primeros 30 minutos.
Otra posibilidad es el uso de tintura de podofilina, que
puede usarse en porcentajes que oscilan entre el 3 y el 25%,
aplicada en las lesiones, especialmente en casos en que el
área afectada es menos de 2 cm. Este tratamiento
está contraindicado durante el embarazo. Se debe usar
vaselina para proteger los tejidos sanos
circundantes y es importante lavar cuidadosamente la
región 2 a 4 horas después de la aplicación
de podofilina. Las aplicaciones pueden ser necesarias
semanalmente y son más efectivas en aquellas lesiones que
son húmedas.
SINDROME DE INMUNODEFICIENCIA
HUMANA
La persona infectada con el retrovirus humano
VIH (virus de la inmunodeficiencia humana) estará
infectada por toda su vida. Inicialmente permanecerá
asintomática (SIN SINTOMAS), a veces por muchos
años. Sin embargo, cuanto más tiempo dure la
infección más grave será el ataque al
sistema inmunitario.
SÍNTOMAS DE VIH*
l Infección
inicial.**
Asintomática en la mayoría de los
pacientes***
Síndrome viral similar a la mononucleosis
infecciosa: fiebre, debilidad y mialgia (dolor muscular), dos a
cinco semanas después de la inoculación
ll Portador asintomático.
***
Casi todas las personas infectadas
lll Complejo relacionado con
SIDA
Linfadenopatía generalizada (inflamación
de los ganglios) con o sin sudores nocturnos, fiebre, diarrea,
pérdida de peso, debilidad e infecciones inusuales
(candidiasis oral, candidiasis vaginal crónica, herpes
zoster)
lV SIDA
La definición de SIDA requiere que se cumplan las
cinco condiciones establecidas por el CDC*
La enfermedad es crónica, progresiva, con
periodos de recuperación y potencialmente
fatal.
* Clasificación del Centro para el Control de
Enfermedades (CDC).
** Se pueden detectar anticuerpos a las 8 semanas de
iniciada la infección, aunque hay pacientes que pueden
demorar seis meses o más.
*** A pesar de NO TENER SÍNTOMAS y aparentemente
sanos pueden transmitir el virus.
VÍAS DE
TRANSMISIÓN
Aquellos adolescentes que son homosexuales, usan drogas
endovenosas, sufren de hemofilia o tienen relación sexual
con alguien infectado con el virus, están en mayor
riesgo.
Coito
- Homosexual, entre hombres.
- Heterosexual, del hombre a la mujer y de la mujer
al hombre.
Inoculación de sangre
- Transfusión sanguínea y de productos
de sangre. - Agujas compartidas por los consumidores de drogas
endovenosas. - Pinchazo hipodérmico, herida,
exposición de membranas mucosas (boca, ano, vagina) en
trabajadores de la salud. - Inyección con agujas no
esterilizadas. - Perinatal.
- Intrauterino.
MANIFESTACIONES
CLÍNICAS
Son muy variadas, van desde el paciente
asintomático hasta el que presenta cuadros febriles,
sudores nocturnos, fatiga, cansancio, diarrea, pérdida de
peso, linfoadenopatía generalizada y candidiasis oral. Las
infecciones sintomáticas habitualmente son
crónicas. Debe recordarse que las infecciones genitales
ulcerosas (como el herpes y la sífilis), facilitan la
infección y también que la tuberculosis y la
sífilis tienen un cuadro clínico más severo
en aquellos pacientes infectados con VIH.
DIAGNÓSTICO DEL
SÍNDROME DE INMUNODEFICIENCIA
ADQUIRIDA
Aunque la mayoría de los casos se ha detectado en
adultos jóvenes, se ha observado un incremento del
número de adolescentes afectados. Muchos adultos
jóvenes adquirieron la infección durante la
adolescencia. La infección debe sospecharse en todo
adolescente que tiene infecciones oportunistas, tales como:
candidiasis recurrente, infecciones herpéticas recurrentes
u otros estados de enfermedad crónica con presencia de
pérdida de peso, diarrea y linfoadenopatía
generalizada (GANGLIOS INFLAMADOS EN CUELLO, AXILAS, INGLES,
ETC).
La ceroconversión demora entre dos a cinco meses,
por lo tanto, si no han pasado 3 meses entre la fecha de probable
infección y la de la prueba del VIH, el resultado no
será confiable. La incubación del SIDA es de dos
años promedio en adultos y un año en niños y
jóvenes, pero puede ser más prolongada. Los
modelos
matemáticos han estimado que el período de
incubación puede ser de cinco años y a veces tan
largo como 15 años.
PRONÓSTICO, TRATAMIENTO Y
PREVENCIÓN DE LA INFECCIÓN POR
VIH
Para los adolescentes que se infectan con VIH el
pronóstico es grave, pero está mejorando. A veces
pasa mucho tiempo antes de que el paciente desarrolle SIDA y tal
vez no todos lo hagan.
La gente con SIDA actualmente vive más tiempo que
al comienzo de la epidemia y su calidad de
vida ha mejorado. Hay varios factores que son responsables de
este progreso: Las infecciones oportunistas que matan a la
mayoría de los pacientes con SIDA son diagnosticadas y
tratadas más rápidamente (con antibióticos
apropiados, aerosol de pentamidina, etc.); la terapia antiviral
(sidovudina AZT) reduce la frecuencia y/o severidad de dichas
infecciones y finalmente, la calidad de los
programas de
atención médica y los sistemas de apoyo
han mejorado.
Actualmente se están introduciendo medidas de
prevención de las complicaciones. La prevención de
la infección se basa en control de la inoculación
de sangre (control de transfusiones, no compartir agujas,
precauciones universales) y la práctica del sexo protegido
y sexo seguro (IR A SEXO
SEGURO Y SEXO PROTEGIDO).
HEPATITIS B
El virus de la hepatitis B es la única
INFECCIÓN DE TRANSMISIÓN SEXUAL que se puede
prevenir con una vacuna.
Es muy contagioso y representa un peligro grave para la
salud de las adolescentes que no son vacunadas. En 1996 se
publicó la recomendación de varias organizaciones
médicas de vacunar en forma universal contra la hepatitis
B a cualquier adolescente no vacunado entre 11 y 12 años
de edad, y a los mayores con riesgo.
Esta vacuna se administra en forma de varias inyecciones
en el músculo deltoides (en el brazo) y se repite entre un
mes y dos meses después y entre cuatro y seis meses
más tarde. Después de tres dosis, más de 90%
de las personas vacunadas posee una concentración
protectora de anticuerpos; la tercera dosis es especialmente
importante para la inmunidad prolongada. Si la serie se
interrumpe después de la primera o segunda dosis, la
faltante se debe administrar tan pronto como sea posible, aunque
no es necesario comenzar de nuevo la serie. Cuando un (a)
adolescente no VACUNADO tiene contacto el virus de la Hepatitis B
mediante relaciones sexuales sin protección o el contacto
de líquidos corporales, se le debe administrar profilaxis
(tratamiento preventivo) con inmunoglobulina de hepatitis B, e
iniciar la serie de vacunas dentro
de los primeros 14 días después de la
exposición.
Después de la evaluación
física se
debe ofrecer tratamiento para prevenir ITS y embarazo.
Las recomendaciones actuales para la profilaxis
médica (tratamiento preventivo) en la violación
reciente son las siguientes:
Gonorrea y Sífilis en incubación.-
Ceftriaxano sódica 125 a 250 mg intramusculares, en caso
de ser alérgica a las cefalosporinas sustituir por
Espectomicina, 2 g IM DU.
Clamidia.- Azitromicina, Ig por vía oral una sola
dosis o Doxiciclina, 100 mg vía oral cada 12 hrs. durante
7 días.
Tricomoniasis y Vaginosis Bacteriana.- Metronidazol, 2g
por vía oral una sola dosis
Virus de la Hepatitis B.- Vacuna contra hepatitis B;
repetir la dosis entre uno y dos meses y a los 4 y 6 meses
después de la dosis inicial.
VIH.- No se recomienda un tratamiento
profiláctico sistemático contra VIH, sino que se
individualiza con base en los riesgos
potenciales; si el agresor es VIH positivo se utiliza la
profilaxis (previene de una its) con fármacos
múltiples según las recomendaciones más
recientes para los casos de contacto de las mucosas.
Virus de Herpes Simple.- No se
recomienda administrar profilaxis sistemática contra virus
de herpes simple; si el agresor posee una lesión genital
la víctima debe recibir profilaxis (tratamiento
preventivo) durante 10 días con aciclovir, famciclovir o
valaciclovir.
Virus de Papiloma Humano.- No se
recomienda tratamiento preventivo para HPV
Silvia Martínez