- Definición
- Factores de
riesgo - Mecanismo normal de
erección - Tipos de disfunción
eréctil y sus causas - Tratamiento
- Vivir con disfunción
eréctil
Se ha denominado tradicionalmente como impotencia a la
incapacidad de realizar el acto sexual por no alcanzar o mantener
la suficiente erección del pene para introducirlo o
mantenerlo introducido en la vagina de la mujer durante
el tiempo normal
del coito. Es la incapacidad de conseguir o mantener la
erección más del 20 por ciento del tiempo. La
disfunción eréctil afecta a millones de
hombres.
Aunque se solía creer que se debía a
problemas
psicológicos, en la actualidad se sabe que del 80 al 90
por ciento de los casos de impotencia son causados por problemas
físicos, por lo general relacionados con el suministro de
sangre al
pene. Ha habido muchos adelantos tanto en el diagnóstico como en el tratamiento de la
disfunción eréctil.
De acuerdo con los Institutos Nacionales de la Salud (National Institutes
of Health), la disfunción eréctil también es
un síntoma de muchos trastornos y enfermedades.
Entre los factores de riesgo directos
de la disfunción eréctil se pueden incluir los
siguientes:
- Problemas de la próstata.
- La diabetes de
tipo 2. - El hipogonadismo asociado con varias enfermedades
endocrinológicas. - La hipertensión (presión
sanguínea alta). - La enfermedad vascular y la cirugía
vascular. - Los niveles altos de colesterol en la
sangre. - Los niveles bajos de lipoproteínas de alta
densidad (su
sigla en inglés es HDL). - Las drogas.
- Las enfermedades neurogénicas.
- La enfermedad de Peyronie (distorsión o
curvatura del pene). - El priapismo (inflamación del pene).
- La depresión o ansiedad.
- El consumo de
alcohol. - La falta de educación
sexual. - Las técnicas
sexuales deficientes. - Las relaciones
interpersonales inadecuadas. - Muchas enfermedades crónicas, principalmente
la insuficiencia
renal y la diálisis. - El fumar, que acentúa los efectos de otros
factores de riesgo, como la enfermedad vascular o la
hipertensión. - La edad parece ser un factor de riesgo importante e
indirecto, ya que está asociada con la probabilidad de
aumento de los factores de riesgo directos, algunos de los
cuales se mencionaron anteriormente.
Se calcula que cerca del 5 por ciento de los hombres se
vuelven impotentes alrededor de los 40 años de edad, y del
15 al 25 por ciento antes de los 65 años de edad. La
identificación exacta de los factores de riesgo y de la
caracterización son esenciales para la prevención o
para el tratamiento de la disfunción
eréctil.
Respuesta
Circulatoria:
La erección ocurre gracias a la capacidad del
pene para llenarse con sangre que se deposita en tejidos
especiales llamados cuerpos cavernosos. Para que esto
suceda es necesario que la circulación sanguínea
del órgano funcione de manera adecuada pues ésta
cambia en los estados de flacidez y erección del
pene.
En estado
flácido, la sangre circula libremente a través de
los cuerpos cavernosos sin acumularse. Durante la
erección, el calibre de las arterias (los vasos
sanguíneos que llevan la sangre hacia los órganos),
aumenta, mientras que las venas, por efecto de la presión
de la sangre acumulada en los cuerpos cavernosos, se cierran
evitando la salida de la misma. Esta acumulación produce
la rigidez y el aumento de tamaño del pene
característicos de la erección
Respuesta
Neurológica
Además de la integridad de la procesos
circulación, la erección normal requiere que los
mecanismos neurológicos que la regulan tampoco presenten
alteración. Los fenómenos vasculares comienzan a
suceder cuando los vasos sanguíneos del pene son
estimulados por impulsos nerviosos que pueden provenir de
diferentes fuentes.
En primer lugar pueden surgir de los mismos
órganos genitales al ser estimulados por contacto directo.
En segunda instancia, los impulsos nerviosos pueden llegar desde
los órganos de los sentidos al
ser estimulados de manera conjunta o independiente y por
último, la erección puede ser motivada por señales
producidas por estímulos psicológicos, originados
en la corteza cerebral en forma de recuerdos, fantasías,
deseos o pensamientos.
En la médula espinal convergen todos los
estímulos neurológicos, sea de manera aislada o
combinados, y desde allí se envían, a través
de nervios del sistema
parasimpático, señales a los cuerpos cavernosos del
pene para que ocurran los cambios circulatorios que determinan la
erección. De esta manera tenemos que una persona que tenga
una fantasía sexual, transmite desde su cerebro
estímulos a la médula espinal, la cual a su vez
pasa estas señales al pene. Por otro lado, una caricia en
los órganos genitales, incluso sin que la persona
esté recibiendo estímulos de ninguna otra
índole, también lleva señales a la
médula y puede hacer que ésta medie para el inicio
de una erección.
TIPOS DE DISFUNCION
ERECTIL Y SUS CAUSAS
A continuación se enumeran algunos de los
diferentes tipos de impotencia y sus posibles causas:
Eyaculación
prematura
La eyaculación prematura es la incapacidad de
mantener la erección el tiempo suficiente para conseguir
la satisfacción mutua. La eyaculación prematura se
divide en primaria y secundaria:
- Eyaculación prematura
primaria
La eyaculación prematura primaria es un comportamiento que el hombre
aprende en el inicio de su vida sexual activa. Al igual que
cualquier comportamiento que se aprende, éste se puede
modificar. Esta forma de eyaculación prematura primaria
se llama impotencia psicogénica (opuesta a la
orgánica o física). (El
derrame venoso congénito es un subgrupo de la
eyaculación prematura primaria, causado por el derrame
venoso congénito, en el cual el sistema de drenaje
venoso del pene no se cierra adecuadamente.) - Eyaculación prematura
secundaria
La eyaculación prematura secundaria ocurre cuando,
después de muchos años de eyaculación
normal, la duración del coito se acorta progresivamente.
La eyaculación prematura secundaria se debe a causas
físicas que generalmente afectan a las arterias o venas
del pene o a ambas.
Ansiedad de
desempeño
La ansiedad de desempeño es una forma común de
impotencia psicogénica generalmente causada por el
estrés
o por la ansiedad.
Depresión
La depresión es otra causa de la impotencia
psicogénica. Algunos medicamentos antidepresivos causan
disfunción eréctil.
Impotencia
orgánica
La impotencia orgánica afecta a las arterias o
venas del pene o a ambas y es la causa más común de
la impotencia, sobre todo en los hombres de edad avanzada. Cuando
el problema es arterial, generalmente es causado por la
arterioesclerosis o endurecimiento de las arterias, aunque la
causa podría ser un trauma a las arterias. Los factores de
riesgo controlables de la arterioesclerosis – el exceso de peso,
la falta de ejercicio, el colesterol alto, la presión
sanguínea alta y fumar cigarrillos- a menudo pueden causar
disfunción eréctil antes de afectar al corazón.
Muchos expertos creen que cuando las venas son la causa, el
derrame venoso o "insuficiencia cavernosa" es el problema
vascular más común.
Diabetes
La impotencia es común en personas con diabetes.
En Estados Unidos
hay 5 millones de hombres adultos con diabetes y se calcula que
la mitad de ellos son impotentes y con el tiempo la otra mitad se
volverá impotente. El proceso
implica el endurecimiento prematuro e
inusualmente severo de las arterias. Por lo
común, las personas que tienen diabetes pueden sufrir de
neuropatía periférica, que afecta a los nervios que
controlan las erecciones.
Causas
neurológicas
Hay muchas causas neurológicas (problemas de los
nervios) de la impotencia. La diabetes, el alcoholismo
crónico, la esclerosis múltiple, la
intoxicación por metales pesados,
las lesiones de la médula espinal y de los nervios, y los
nervios dañados por operaciones
pélvicas pueden causar disfunción
eréctil.
Impotencia inducida por
medicamentos
Una gran variedad de medicamentos recetados, como los
medicamentos para la hipertensión, los medicamentos
antidepresivos y contra la ansiedad, las gotas oculares para el
glaucoma y los
agentes quimioterapéuticos contra el cáncer
son únicamente algunos de los muchos medicamentos
asociados a la impotencia.
Impotencia inducida por
hormonas
Las anomalías hormonales, como el aumento de
prolactina (hormona producida por la glándula pituitaria
anterior), el abuso de los esteroides por los
físicoculturistas, demasiada o demasiado poca hormona
tiroidea, y las hormonas
administradas para tratar el cáncer de
próstata pueden causar impotencia. Raramente la
testosterona baja es responsable de la impotencia.
Los procedimientos de
diagnóstico para la disfunción eréctil
pueden incluir los siguientes:
- La historia médica y
sexual del paciente – puede revelar condiciones o enfermedades
que causan impotencia y ayuda a distinguir entre problemas de
erección, eyaculación, orgasmo o deseo
sexual. - Examen físico – para buscar evidencia de
problemas sistémicos como los siguientes: - Es posible que exista un problema en el sistema
nervioso si el pene no responde como se espera a cierta
palpación. - Las características sexuales secundarias,
como el patrón del cabello, pueden señalar
problemas hormonales asociados con el sistema
endocrino. - Un aneurisma podría indicar problemas
circulatorios. - La impotencia puede deberse a
características inusuales del pene.
- Es posible que exista un problema en el sistema
- Exámenes de laboratorio
– entre los exámenes que pueden ayudar a diagnosticar la
impotencia se incluyen el recuento de sangre, el análisis de orina, el perfil de lípidos, medición de glucosa en
sangre y medir la creatinina y los enzimas
hepáticos. - Medicion del nivel de hormonas: testosterona,
gonadotrofinas y prolactina. Cuando la disminución del
deseo sexual es un síntoma, la medida de la testosterona
en la sangre puede proporcionar información acerca de problemas del
sistema endocrino. - Estudio con Doppler bidimensional, que mide el flujo
de sangre antes y después de la
erección. - La cavernosometría: mediciones de los cuerpos
cavernosos - La cavernosonografía: radiografias de los
cuerpos cavernosos del pene - La angiografía: radiografías de la
arteria principal del pene. - Inyeccion directa en los cuerpos cavernosos de
sustancias vasolilatadoras. - Examen psicosocial – ayuda a revelar factores
psicológicos. La compañera o compañero
sexual también pueden ser entrevistados para determinar
las expectativas y percepciones que se encuentran durante el
coito.
El tratamiento específico de la disfunción
eréctil será segun su causa y determinado por su
médico basándose en lo siguiente:
- Su edad, su estado general de salud y su historia
médica. - Qué tan avanzada está la enfermedad.
- Su tolerancia a
determinados medicamentos, procedimientos o terapias. - Sus expectativas para la trayectoria de la enfermedad.
- Su opinión o preferencia.
Algunos de los tratamientos disponibles para la
disfunción eréctil incluyen los siguientes:
Tratamiento
Psicológico: conducido por un terapeuta
sexual, sigue siendo parte importante del manejo de esta entidad,
aunque ya no es frecuente que sea la única
intervención que recibe un paciente. Con el advenimiento
de nuevas formas de tratamiento, este tipo de manejo cumple mejor
el papel de reconstruir la vida sexual del individuo o
parejas que se hayan vistos
afectados por el problema.
El citrato de sildenafil
(ViagraTM)
ViagraTM es un medicamento fabricado por Pfizer
Pharmaceuticals, y es el primer tratamiento no quirúrgico
aprobado para el tratamiento de la disfunción
eréctil que no tiene que inyectarse ni introducirse
directamente en el pene para lograr y mantener la
erección.
La Administración de Medicamentos y Alimentos de
Estados Unidos (Food and Drug Administration, su sigla en
inglés es FDA) aprobó su venta con receta
médica a finales de marzo de 1998.
Viagra no causa la erección del pene
directamente, pero ayuda en la respuesta a la estimulación
sexual. La FDA recomienda que los hombres sigan estas
precauciones generales antes de tomar Viagra:
- No debe usar Viagra si toma medicamentos que
contienen nitratos, como la nitroglicerina. La toma de los dos
medicamentos juntos puede bajar demasiado la presión
sanguínea. - Las mujeres y los niños
no deben utilizar Viagra. - Hágase una historia médica y un examen
físico completos para determinar la causa de su
disfunción eréctil. - Es posible que los hombres que tienen condiciones
médicas que pueden causar una erección sostenida,
como la
anemia por células falciformes,
la leucemia o el mieloma múltiple, o los hombres que
tienen un pene de forma anormal no puedan tomar
Viagra. - Informe a su médico de todos los medicamentos
que toma, incluyendo los de venta sin receta médica, ya
que existen medicamentos cuya interacción con Viagra puede ser
negativa. - No se ha estudiado el uso de Viagra en
combinación con otros tratamientos para la
disfunción eréctil; por consiguiente, no se
recomienda usarlo en combinación con otros
tratamientos.
Terapia de reemplazo
hormonal
La terapia de reemplazo de testosterona puede mejorar la
energía, el estado de
ánimo y la densidad de los huesos, aumentar
el peso y la masa muscular e intensificar el interés
sexual en hombres de edad avanzada que pueden tener niveles
deficientes de testosterona. Los suplementos de testosterona no
se recomiendan para los hombres que tengan niveles normales de
testosterona para su edad, ya que existe el riesgo de
agrandamiento de la próstata y otros efectos secundarios.
La terapia de reemplazo de testosterona está disponible en
forma oral y en parches para la piel.
Implantes de pene
Hay tres tipos de implantes usados para tratar la
disfunción eréctil, que incluyen los
siguientes:
- Bomba hidráulica – se colocan una bomba y
dos cilindros dentro de las cámaras de erección
del pene, lo cual causa la erección descargando una
solución salina; para bajar la erección la
bomba también puede retirar la
solución. - Prótesis – se
colocan dos varillas semirrígidas pero moldeables
dentro de las cámaras de erección del pene, las
cuales permiten manipularlo en la posición de
erección o de no erección. - Hormas plásticas blandas entrelazadas –
estas hormas se colocan dentro de las cámaras de
erección del pene y pueden inflarse o desinflarse
utilizando un cable que pasa a través de
ellas. - Las bombas de
vacío producen una disminución de la
presión alrededor del pene, facilitando la entrada de
sangre al órgano. Al mismo tiempo comprimen la base
del mismo para evitar que la sangre que entra pueda
salir.
La causa más común de los fallos del
implante del pene es la infección, y se trata con
antibióticos. En algunos casos, el implante infectado
deberá ser reemplazado por un implante nuevo. Por los
general, los implantes no se consideran hasta que no se hayan
probado otros métodos de
tratamiento.
La disfunción eréctil puede causar
tensión en una pareja. Muchas veces, los hombres
evitarán las situaciones sexuales debido a su dolor
emocional asociado a la disfunción eréctil,
causándole a su pareja una sensación de rechazo o
ineptitud. Es importante comunicarse abiertamente con su
pareja.
Algunas parejas consideran la búsqueda de
tratamiento para la disfunción eréctil juntos,
mientras que otros hombres prefieren buscar tratamiento sin
el
conocimiento de su pareja. La falta de comunicación es el obstáculo
principal para buscar tratamiento y puede prolongar el
sufrimiento. La pérdida de la capacidad de erección
puede tener un efecto profundo en el hombre. Lo
positivo es que la disfunción eréctil generalmente
puede tratarse segura y eficazmente.
Xavier Conesa
Sexologo.
Barcelona