En este momento en que cultivar conciencias aptas para
vivir en democracia no
es fácil, en que la desesperanza y la falta de ilusiones
son monedas corriente y los mensajes negativos llegan desde todos
los sectores, los jóvenes nos hemos dado cuenta de que
éstas posturas no solucionan nada.
Convencidos de que perdonar, no es lo mismo que olvidar
y sabiendo que sólo valoraremos esta democracia si no
perdemos de vista los horrores del pasado, decidimos ahondar en
temas pertenecientes a un período de nuestra historia reciente: el
Proceso de
Reorganización Nacional.
Nuestros objetivos
son:
- Tener una mirada crítica sobre lo que sucedió
entre 1976 y 1983, para alertar a nuestra generación
(y generaciones futuras), de manera que no vuelva a
suceder. - Analizar desde otra perspectiva, la de una
generación que nació y vivió en
democracia, los abusos cometidos con respecto a los Derechos
Humanos y los crímenes de lesa humanidad. - Valorar nuestro sistema
democrático sabiendo que, aún en las peores
crisis
sociales, institucionales u económicas, siempre
será mejor que un gobierno
de facto. - Para que no nos engañen nunca más,
con falsas promesas de ser "DERECHOS Y HUMANOS", cuando
sucedió todo lo contrario.
"Se puede engañar a algunos todo el tiempo…
y a todos algún tiempo…
pero no se puede engañar a
todos
todo el tiempo".
ABRAHAM LINCOLN
"En 1954 Elvis movió la pelvis y la
agitación llegó hasta la argentina, sobre todo
cuando Bill Halley visitó Buenos Aires en
1958, Entonces Elvis dejó el jazz para hacer rock &
roll y luego apareció Billi Cafaro que cantaba "Ticky
Ticky" y en seguida fue el turno del Club del Clan con Palito
Ortega, Jhony Tolengo y muchos más. Los acusaron de ser
asesinos del tango sin embargo
eran grandes artistas para el consumo
familiar. Todavía no había surgido la cultura
adolescente en la Argentina, hasta que de pronto llego Sandro que
siguió moviendo la pelvis aunque seguía cantando
éxitos del rock norteamericano traducidos al castellano. Y
ahí sí, una nueva camada bajo la influencia de los
hippies impulsó a los músicos más
jóvenes a escribir sus propias canciones. Primero los
Shakers que eran uruguayos y aún cantaban en inglés,
y luego llegaron los Gatos Salvajes y muchos grupos más
se atrevieron a cantar en castellano y algo grande se
empezó a armar: era el crepúsculo de los
años 60’. Cada vez más músicos se
unieron al movimiento. En
un principio se llamó "Música Beat", luego
"Música progresiva", pero con los años quedó
para la historia como ROCK NACIONAL".
Sandro es tomado como el trasgresor del rock en la Argentina
por ser el primero en hacerlo. En un momento de la historia donde
no se les ocurría cantar en castellano ("estaba bien
cantar en inglés y era grasa cantar en castellano"- Charly
García) Los Gatos se atrevieron y fueron el primer
grupo que tubo
la posibilidad de grabar en español.
Tenían muchas dificultades, las compañías no
los apoyaban ("La compañías discográficas no
querían hacerme un solista porque el nombre no era
comercial"- Lito Nebbia) y el gobierno no dejaba hacer recitales
porque se decía que se relacionaban con drogas,
escándalos y sexo. "La
Balsa" fue el primer éxito
nacional con el cual Los Gatos pasaron de ser rock nacional a
música popular.
Los grupos de rock se identificaban con la música
internacional: Los Gatos, con los Rolling Stones, Manal con Cream
, Almendra con los Beatles y Pappo y Moris con Elvis Presley.
El acusticazo: sus representantes fueron: León Gieco,
Porchetto, Lito Nebbia, Sui Géneris, entre otros.
Con el acusticazo, el rock nacional comienza a escucharse en
forma masiva.
En el 79’ se refuerza el rock con la vuelta de Almendra,
pero adquiere verdaderamente fuerza cuando
a fines del año 80’ Serú Girán
reúne en La Rural 50.000 personas.
En 1982 el presidente (Galtieri) lleva a la Argentina a un
conflicto
bélico con Gran Bretaña por la tenencia de las
Islas Malvinas. Esto
provoca la repentina prohibición de la música
internacional y, como consecuencia, el auge de la nacional ("las
radios te pedían demos, grabaciones, cualquier cosa para
pasar"- Lito Nebbia).
En ese mismo año, se realiza el "Fstival de la Solidaridad
Americana", a beneficio de los soldados argentinos. De todos
modos, el dinero
recaudado nunca llegó a éstos debido a que gran
parte del dinero
quedó en bolsillos de los mismos militares. En este
festival, León Gieco presentó el tema "Sólo
le pido a Dios". Los militares lo prohibieron por ser pacifista y
el músico debió exiliarse. De todos modos, Mercedes
Sosa lo graba y luego de la guerra pasa a
ser "de interés
nacional".
Con el comienzo de la democracia, muchos artistas regresan al
país.
Exiliados o con las letras censuradas, algunos grupos bajaron
los brazos, otros resistieron. Nos referiremos brevemente a los
exponentes más importantes del rock en ésta
época.
Moris enfrentó el modelo de vida
establecido en la Argentina con su personalidad,
su sentido de justicia y su
acercamiento con la gente utilizando sus canciones como "arma".
Estas tenían un doble sentido, el comercial y el
subversivo .
Es el punto de partida para comprender el movimiento del Rock
Nacional como la lucha por hacer reales dos simples palabras:
respeto y
libertad.
Sui Géneris trasmitía en sus letras solidaridad
e inocencia y eran consideradas como rebeldes en la época
en que surgían. Sobrevivían a duras penas la feroz
lucha contra la censura que no había sido precisamente
ganada.
"Pequeñas anécdotas sobre las Instituciones"
(tercer disco): Plagado de referencias contra la censura. fue
duramente censurado.
"Adiós Sui Géneris" fue el disco de despedida.
La separación se realizó con una decisión de
ambos, decidieron "vivir más, antes que tratar de
sobrevivir". Dijo Charly García: "Fue destrozado por la
censura, si hubiera salido como era hubiera sido tremendo.
Incluso hoy que estamos en democracia es fuerte. Probá
hacer una canción contra la iglesia, la
gente se puede poner muy nerviosa".
"Había un prejuicio,
como si fuera grasa hacer música de acá. Es genial
cuando uno encuentra un argumento para decir lo que quiere y te
entiende todo el mundo. Sé que la gente va a entender,
tiene que entender". (Charly García). Y la gente
entendió, cuando en los días de las torturas, los
desaparecidos y la censura se hablaba de la paranoia en la ciudad
("Déjenme en paz, no quiero más, hay paranoia en la
ciudad"-Hipercandombe, del álbum Películas) y se
lamentaban por la realidad ("Cubrís tu pelo y tu cara tan
bien como si tuvieras frío, pero en realidad te
querés escapar de algún lío"-Hipercandombe,
del álbum Películas).
Serú Girán fueron considerados los beatles
argentinos por su carisma, su imagen, su
música y el sentimiento que despertaban en la gente. La
clave de ese imán era el deseo de volver a vivir en
libertad, de luchar pacíficamente contra la dictadura.
Hubo temas como "Canción de Alicia en el país" que
describían exactamente lo que sucedía en esa
época ("te vas a ir, vas a salir, pero te
quedás…¿dónde más vas a ir? […]
no cuentes que hay detrás de aquel espejo, no
tendrás poder, ni
abogados, ni testigos").
Pipo Chipolatti fue el referente del rock divertido, que dio
una cuota de desfachatez y desenfado con la época
pasada.
Raúl Porchetto tenía letras comprometedoras. No
tenía miedo de decir las cosas. La importancia de sus
letras era mucha, por lo que hay que escucharlas con los
oídos puestas en esa época.
Cuando a fines del 78’ se hizo el balance de lo que
había sucedido recientemente, fue necesario decir bien
alto que nos estábamos quedando solos.
Hacia agosto de ese año se había producido un
"bajón" singular. Ya no circulaban por desbande los
grandes nombres del rock criollo: La Máquina de Hacer
Pájaros, Invisible, Crucis, Soluna, Alas, Arco Iris,
Pastoral, Alquerre y Celeste. Músicos como Charly
García, David Lebón, Gustavo Santolalla, Pino
Marrone, Aníbal Kerpel y León Gieco no estaban en
el país. La producción discográfica había
caído notablemente y la cerrazón en radio y T.V. era
absoluta para la Nueva Música Urbana. Reinaba la
censura.
El problema económico y un sentimiento de derrota en
los músicos y el público, el narcótico
masivo armado en torno al Mundial
de fútbol y el vuelco de un gran sector de la juventud hacia
el "chetismo" y la música bailable, fueron otros detalles
grises. Fue la primera vez que el rock nacional sufría un
potente "Sock de realidad".
Los músicos ya no estaban unidos como antes, se
podía hablar de rock tucumano, santafesino, rosarino o
marplatense. Todo sucedió en compartimientos aislados,
aferrándose a vivencias básicas, lejos de la
verdadera problemática social.
EL ROCK
DURANTE LA GUERRA DE MALVINAS
Con la guerra de
Malvinas nació una de las etapas más oscuras de
la historia
argentina y a la vez una de las más brillantes del
rock nacional, debido al reflotamiento del mismo por parte de los
medios de
comunicación.
Cuando termina la guerra, vuelven a inyectar a nuestra cultura
música extranjera.
Tengamos entonces en cuenta que el rock nacional sirvió
y sirve actualmente de salvavidas al gobierno, que estudiando el
mercado decide el
tipo de música que conviene encarnar en la gente.
De todos modos, la llama del rock nacional, del verdadero rock
nacional, nunca se extinguió ni se extinguirá.
Sólo debemos saber en qué pedestal debe cada uno de
nosotros ubicarlo.
Qué mejor visión de la sociedad que
la de aquellos grupos de música formados por estudiantes.
Aquellos jóvenes que palpaban mejor que nadie la realidad.
Pero no la realidad que se veía, sino la verdadera. Porque
eran ellos los más acosados por los militares, vigilados o
confundidos con miembros de algún grupo guerrillero.
Así se unieron, eléctricos y acústicos,
para protegerse bajo un mismo escudo, convencidos de que la vida
misma era un desafío.
Comenzaron entonces a escribir sus propias canciones,
expresándose, revelándose y sometiéndose a
persecuciones y custodias militares en recitales que más
de una vez no terminaban.
Sus letras, que a veces parecían no decir nada, eran
fuertes reclamos y hondas reflexiones del ahogo que les provocaba
la falta de libertad, escondidas bajo historias aparentemente
inocentes, casi "infantiles". Con nombres como "Canción de
Alicia en el país" (Serú Girán), "El
fantasma de Canterville" (Charly), "Las increíbles
aventuras del señor tijera" (Charly), "Dinosaurios"
(Charly). Y otras más directas y también más
expuestas a la censura como "No bombardeen Buenos Aires" (Charly)
y "Nos siguen pegando abajo" (Charly).
Está claro entonces que la música
auténtica no se detiene ante ninguna frontera.
Afortunadamente no llegaron a prohibirse los recitales.
Las señales
armónicas se remontaron notoriamente. Había un
antes y un después. Por un lado el horror y el miedo; por
el otro, la vida misma. Jamás para quitarla, sino para
compartirla sin barreras.
Podría escribirse la oscura historia del proceso a
través de las letras del rock nacional que surgieron
durante y después de la dictadura.
A modo de ejemplo, éstas son algunas de ellas:
Todo comenzaba cuando en 1946, Videla, Massera y Agosti, la
primera junta de comandantes, derrocaba al gobierno
constitucional (con muchas impulsiones y desaciertos, pero electo
por el pueblo) de María Estela Martínez de Perón:
"Libertad era un asunto mal manejado por tres
libertad era almirante, general o brigadier"
Piero.
Llegaron entonces las detenciones ilegítimas, los
secuestros seguidos de tortura y muerte:
"Bronca porque matan con descaro,
pero nunca nada queda claro"
Pedro y Pablo.
También desaparecían los niños
nacidos en cautiverio. De todos los bebés nacidos en la
E.S.M.A., sólo uno, Emiliano Hueravillo.
"Prohibieron la esperanza,
y prohibido está nacer"
Piero.
No había posibilidad de reclamar por los desaparecidos
a través del Hábeas
Corpus, no había respaldo legal:
"Los inocentes son los culpables dice su
señoría,
el rey de espadas"
Serú Girán.
"No cuentes qué hay detrás de aquel
espejo
no tendrás poder, ni abogados, ni
testigos"
Serú Girán.
Para tapar tanto genocidio, los militares dosificaban
porciones de euforia y exitismo, como con el Mundial del 78:
"Esos ojos negros que miraban,
cómo se robaban el Mundial,
estaban tejiendo entre sus rutinas
una historia prohibida"
León Gieco.
Luego llegó el conflicto de Beagle y el temor y la
posibilidad de la guerra. También el rock se
expresó:
"La crisis del hombre es casi
total,
de sólo valores en lo
material
imponen la fuerza sobre lo sutil
su débil conciencia se
arrastra senil"
Pedro y Pablo.
Y una letra que muchos creen que fue creada con motivo de la
guerra de Malvinas, pero que apareció durante el conflicto
de Beagle:
"Sólo le pido a Dios
que la guerra no me sea indiferente,
es un monstruo grande y pisa fuerte,
toda la pobre inocencia de la gente"
León Gieco.
Mientras tanto, no existía la libertad de
opinión y las opiniones que fueron diferentes a las
autoridades militares gobernantes eran censuradas. Cantautores,
actores, actrices, pintores, escritores, periodistas, todos
pasaban por "la tijera". Esto es expresado únicamente en
esta canción:
"La censura no existe mi amor,
la censura no existe mi,
la censura no existe,
la censura no,
la censura,
la".
Raúl Porchetto.
La educación no estaba exenta de tales
acciones:
"Estudiar era pecado
clandestino era saber,
porque cuando el pueblo sabe
no lo engaña un brigadier"
Piero.
Los métodos
para la ejecución de las "tareas sucias" y los secuestros
llevados a cabo por los paramilitares y los parapolicías,
no guardaban el menor cuidado ante los ojos de los azorados
ciudadanos:
"Al darme vuelta me di cuenta que eran seis
muy bien peinados, muy bien vestidos
y con un Ford verde […]
al llegar me dijeron "Buenas noches"
dónde trabaja, dónde vive, usted
quién es
punto y seguido
me invitaron a subir al Ford".
Pipo Chipolati
Todo esto, fuera del marco legal-constitucional, generaba
"bronca y un enorme deseo de rebelión:
"Bronca pues entonces cuando quieren
que me corto el pelo sin razón
es mejor tener el pelo libre
que la libertad con fijador"
Pedro y Pablo.
También se aplicaba en esta letra la crisis
económica y los desfalcos:
"Para los que toman lo del pueblo
con el guante de disimular"
Pedro y Pablo
Entre tanto "desastre organizado" en 1982, durante el gobierno
del General Galtieri, sufrimos la guerra de Malvinas:
"No bombardeen Buenos Aires
no nos podemos defender"
Charly García.
"Por haber estado en las
Malvinas, te agradezco Señor,
porque se cerraron mis heridas, te agradezco
Señor, […]
por haber matado a dos ingleses, yo te pido
perdón,
por haber salvado a Luis tres veces, te agradezco
Señor"
Vivencias.
Pero también aprendimos a reconocer errores propios y
ajenos:
"Te pregunto si se equivocaron, te pregunto
Señor,
cuando vi morir tantos hermanos, te pregunto
Señor, […]
le pregunto a la cancillería, le pregunto
Señor,
si evaluaron tanta hipocresía, le pregunto
Señor,
cuando vino aquel famoso mediador.
[…]
Recomiendo a la Señora Tatcher, recomiendo
Señor,
Que en el ojo se coloque un parche […]
Y no oculte su cinismo Señor.
Les recuerdo a los señores Yanqui, les recuerdo
Señor,
Que mi pueblo derramó su sangre".
Vivencias.
También vimos el conflicto desde la óptica
de un soldado iglés:
"Sonriendo, despidió a su Madre,
iba al sur del Atlántico, el Reino lo
ordenaba,
es que unos "salvajes" osaron molestar
al orden imperial… y pagarán. […]
Pero Madre ¿qué está pasando
acá?
Son iguales a mí y aman este lugar,
Tan lejos de casa que ni el nombre recuerdo
¿por qué estoy luchando? ¿por
qué estoy matando?"
Raúl Porchetto.
Malvinas fue el fin del Proceso, nos habíamos cansado
de tanta violencia:
"Señora violencia: ¿dónde van los
hijos de tu vientre?
Músculos de cuero
resistentes, castigando "enemigo" […]
¿A quién cree que ama, matando
vivos?
Señora violencia con ubres de petardo
palabra lanzallamas y razón criminal,
arquitecta del miedo edificada a fuego"
Miguel Cantilo.
Entonces también nos cansamos de sobrevivir, de vegetar
entre la mentira y el miedo:
"Hace tiempo que no reía como hace
tiempo
y eso que yo reía como un jilguero.
[…]
Mientras alguien proponga muerte
Sobre esta tierra,
Y se fabriquen armas para la
guerra,
Yo pisaré estos campos
sobreviviendo".
Víctor Heredia.
Finalmente comenzamos a mirar hacia delante, en democracia, y
nació la "gente del futuro":
"No sirve de nada clavar el puñal,
llorando la carta del
tango fatal,
tenemos que hacerlo: un mundo mejor,
porque éste está enfermo y nosotros
no,
ésta es la gente del futuro".
Miguel Cantilo.
Ahora, todavía el rock nacional sigue reflejando lo que
pasó en esa época:
"Me parece que soy de la quinta que vio el Mundial
78,
me tocó crecer viendo a mi alrededor paranoia y
dolor,
la moneda calló por el lado de la
soledad"
Andrés Calamaro
Durante el Proceso de Reorganización Nacional las
señales armónicas se remontaron notoriamente.
Había un antes y un después. Por un lado el horror
y el miedo; por el otro, la vida misma. Jamás para
quitarla, sino para compartirla sin barreras.
Tengamos también en cuenta que el rock nacional
sirvió y sirve actualmente de salvavidas al gobierno, que
estudiando el mercado decide el tipo de música que
conviene encarnar en la gente.
Sin embargo, la música auténtica no se detiene
ante ninguna frontera.
Es por esta razón que la llama del rock nacional, del
verdadero rock nacional, nunca se extinguió ni se
extinguirá. Sólo debemos saber en qué
pedestal debe cada uno de nosotros ubicarlo.
"30 años de rock nacional"
- Pont Léxica, A y otros: "El rockero"-
Colección Rock Nacional- Editorial Perfil. - Fernández Bitar, M: "Historia del rock en
Argentina"- Editorial Distal, 1997. - Enciclopedia "Historia del rock"- La Nación– Editorial Sudamericana-
Montevideo, 1993. - Grinberg, M: "25 años de rock argentino"- Editado
por talleres gráficos Craficsur- 1992. - Alonso M y otros: "La Argentina del S. XX- Aiquí-
1998. - Rins E.C. y otros: "La Argentina, una historia para
pensar"- Kapeluz- 1999. - Film "Rock Nacional: 30 años". Dirigida y producida
por Berti Eduardo- Edición: Luis Barros.
Orellano Juan José
Boccardi Ramiro Andres
Año que cursan: 5to
Escuela de Enseñanza Media Particular Incorporada
N° 3004 "San José"
Villa Cañás CP: 2607 Provincia: Santa Fe
CUALQUIER DUDA HAGÁNMELA SABER A
Acepto felicitaciones y otras cosas…….
jejeje