- Origen de
Roma - Nombre de Roma
- Leyenda
- Roma y la loba
- Localización
- Organización
política - La
monarquía - Instituciones
- Cambios
- El imperio
- La
religión - El culto
privado - El
culto público - Formas
de culto - Sacerdotes
- Culto
imperial - Mitología
romana - Organización
económica y social - Creaciones
artísticas - La familia
romana - Causas del ascenso
de Roma - Economía
- Segunda guerra
civil - Guerra
social - Arte
romano - El
anfiteatro - El
calendario - Escritura
- Fiestas
romanas - Estándares y
signos de Roma - Primera guerra
púnica - Segunda guerra
púnica - Conquista
del mediterráneo - Guerras
pírricas - Roma
y Cartago - Conflictos
internos - La
caída de Roma - Invasiones
- Primera oleada (376
visigodos) - Bárbaros
- Últimos
esfuerzos - Caída
final - Resumen
general - Conclusiones
- Bibliografía
En este trabajo se
presentará la una reseña completa acerca de lo que
fue una de las etapas más importantes que marcó la
línea del tiempo del ser
humano.
ROMA… LA CIUDAD QUE CONQUISTÓ EL MUNDO, en
este proyecto se hace
referencia a una de las civilizaciones más poderosas de la
edad antigua., sin duda Roma fue una
ciudad muy fuerte desde su origen, así como hay dudas en
como surgió, también existe la siguiente
incógnita: ¿Cómo es que un imperio tan
poderoso cayó de repente?
Esta y más dudas han surgido a través de
la historia de Roma,
en el presente trabajo se señalan algunas cosas, de las
cuales se consideraron las más importante para poder hacer un
estudio de lo que fue esta maravillosa
civilización.
Según la tradición, Roma se fundó
el día 11 antes de las calendas de mayo, seria el 21 de
abril de 753 a. C. Fundada Roma, ya comenzó a guerrear
contra sus vecinos, esta vez por conseguir mujeres, a las que
raptaron durante unos juegos en los
que invitaron a todos los pueblos Vecinos. Vencieron a todos
menos a los sabinos por que la lucha termino en un tratado de paz
conseguido por las mujeres, que no querían perder ni a sus
padres ni sus esposos. De este tratado surgiría la
unión de los dos pueblos. Rómulo luego de guerrear
contra varios vecinos, desapareció en medio de una
tempestad. Según algunos se lo llevaron los dioses, y
según dice Tito Livio algunos pensaron que los cenadores,
únicos testigos de la desaparición, descontentos
con el gobierno de
Rómulo lo asesinaron. Así sube al trono luego de un
interregno de un año Numa Pompilio hombre insigne
que habitaba entre los sabinos.
Los pueblos que habitaban en la península
itálica son los siguientes: los latinos ocupaban la
llanura entre el río Tíber y los montes Albanos. Al
norte del Tíber se encontraban los etruscos, mas arriba
del Tíber, este separaba a los umbros al sur y los
etruscos al norte. Al este y sureste del Lacio se encontraba la
cadena Apenina que seria el dominio de
pastores nómadas emparentados entre S, los sabinos,
samnitas, marsos, volscos, cámpanos en Nápoles,
ausones y oscos. Todavía mas al sur los lucanos y
bruttios.
El origen de los pueblos que a su vez originaron a Roma,
se puede rastrear mediante la lingüística. La cual divide a las
lenguas indoeuropeas y las de otro origen.
Entre las primeras se encuentra el latín, el
veneto, etc. Se comprobó que las lenguas europeas y
asiáticas tenían un cierto parentesco, y sé
tubo la convicción durante mucho tiempo, de que el
parentesco delataba un origen étnico común, la
existencia de un pueblo indoeuropeo y de una cuna común de
su civilización. Se creía que la unidad original de
este pueblo experimento una dislocación y que los grupos
integrantes se fueron separando del conjunto, llevando en su
emigración el dialecto hablado en su patria. Pero ya esta
teoría
esta desechada. Las divergencias e interferencias que se
descubren en Italia parecen
haberse dado siempre, por muy remota que sea la génesis de
los pueblos portadores del indoeuropeo; es decir, a través
de una lenta elaboración étnica y cultural, durante
la edad neolítica (4800-1800). Al parecer según P.
Bosch, los movimientos convergieron a partir, al menos, de dos
centros: la región del río Danubio en el centro de
Europa y la
región del norte de Asia menor y
parte del Cáucaso. Aproximadamente por entonces,
según los lingüistas y los arqueólogos, el
latín (introducido también por pueblos provenientes
de la región danubiana) haría su aparición
en Italia. Cada vez es mayor la resistencia
frente a la hipótesis de una Italia pre y
protohistórica que acogería en su territorio a
masivos grupos étnicos con su original unidad, mantenida a
lo largo de la emigración. Más bien se insiste
sobre las condiciones de infiltración, dispersión y
cruzamiento en que se realizaría la intervención de
elementos extranjeros. (http://webs.sinectis.com)
El nombre del pueblo generalmente se considera referirse
a Rómulo,
pero hay otras hipótesis. Una de
ellas se refiere a Roma, cual sería la hija de Aeneas o
Evandrus. Estudios recientes parecen darle preferencia a una
proveniente raíz indo-europea con significado de
"río"; Roma en ese caso significaría "el pueblo
sobre el río".
Roma es también llamada las urbes, y este nombre
(que después en latín significaría
genéricamente cualquier otro pueblo) viene de "urvus", la
ranura cortada por un arado, aquí, por la de
Rómulo. (http://es.wikipedia.org)
Los orígenes remotos de la ciudad de Roma, se
pierden en la leyenda; siendo seguramente anteriores al
año 754 a.C. en que ulteriormente las autoridades romanas
fecharon su fundación.
Del mismo modo, siendo improbable que su
fundación haya surgido de una acción
explícita y deliberada, las tradiciones romanas
posteriores adornaron su surgimiento con diversas leyendas,
recogidas especialmente por el historiador romano Tito Livio, que
vinculan el origen de Roma a un linaje de dioses y
héroes.
Finalmente, Rómulo construyó refugios en
el monte Capitolino para esclavos y criminales fugados y
llevó a cabo el rapto de las "Sabinas", mujeres de otra
tribu del Tíber, para que los hombres que se le
habían unido tuvieran sus esposas. Después de
algunas guerras entre
ellos, las Sabinas le declararon su rey. Rómulo fue el
primer Rey de Roma y dice la leyenda que fue llevado a los cielos
por su padre Marte, y que fue venerado como el dios
Quirino.
Según la leyenda de los orígenes de Roma,
un hijo del héroe troyano Eneas, (hijo de Marte, el dios
de la guerra y de
una princesa latina), Ascanio, había fundado sobre la
orilla derecha del río Tíber la ciudad de Alba Longa;
ciudad latina sobre la cual reinaron numerosos de sus
descendientes, hasta llegar a Numitor y su hermano Amulio. Este
último destronó a Numitor; y para evitar que
tuviera descendencia que pudiera disputarle el trono,
condenó a su hija Rea Silvia a permanecer virgen como
vestal, sacerdotisa de la diosa Vesta.
Sin embargo, Marte, el dios de la guerra,
engendró en Rea Silvia a los mellizos Remo y
Rómulo. Por ese motivo, al nacer los mellizos fueron
arrojados al Tíber dentro de una canasta, la cual
encalló en la zona de las siete colinas situadas cerca de
la desembocadura del Tíber en el mar; siendo recogidos por
una loba que se acercó a beber, y que los amamantó
en su guarida del Monte Palatino, hasta que fueron hallados y
rescatados por un pastor cuya mujer los
crió.
Cuando fueron mayores, los mellizos restituyeron a
Numitor en el trono de Alba Longa, y decidieron fundar, como
colonia de Alba Longa, una ciudad en la ribera derecha del
Tíber, en donde habían sido amamantados por la
loba; y ser sus Reyes.
Cerca de la desembocadura del Tíber
existían las siete colinas: los montes Capitolio,
Quirinal, Viminal, Aventino, Palatino, Esquilino y Celio.
Rómulo y Remo discutieron acerca del lugar donde fundar la
ciudad; y resolvieron la cuestión consultando el vuelo de
las aves, a la
usanza etrusca. Mientras sobre el Palatino Rómulo
divisó doce buitres volando, su hermano en otra de las
colinas sólo vio seis. Entonces, Rómulo, con un
arado trazó un recuadro en lo alto del monte Palatino,
delimitando la nueva ciudad, y juró que mataría a
quien lo traspasara. Despechado, su hermano Remo cruzó
despectivamente la línea, ante lo cual su hermano le dio
muerte,
quedando entonces como el único y primer Rey de Roma.
Según la versión de la historia oficial de Roma
antigua, eso había ocurrido en el año 754 a.C.
(http://www.liceodigital.com)
Roma comenzó su historia como una aldea
más entre las otras muchas de pastores y campesinos que se
repartían las colinas y minúsculos valles de la
zona.
Si hemos de creer a Livio, ya entonces era muy especial,
pues sus míticos fundadores tenían algo de divino;
pero el propio escritor también confiesa que le parece
lógico que los pueblos rodeen sus orígenes con
leyendas y patrañas.
Los primeros habitantes fueron posiblemente un
conglomerado de gentes de distinta procedencia que vivían
al margen del desarrollo
económico y cultural de sus prósperos vecinos,
es decir, los etruscos al Norte y los campanios y los griegos al
Sur.
Los arqueólogos han descubierto los restos de un
primitivo poblado del s. VIII a.C. en el Palatino y
enterramientos a sus pies.
A partir del núcleo original, el poblamiento
debió irse extendiendo por las laderas de las colinas
próximas y, un siglo después, por el valle que
había entre ellas. (http://www.step.es)
En el plano anterior, se muestra
claramente, la localización de Roma, antes de su gran auge
sobre todas las naciones existentes en esa región, en
especial, Grecia.
Esta pequeña ciudad floreció y se
desarrolló hasta llegar a ser considerada durante la
época previa a la República, superior a sus
vecinos, haciéndose cada vez más fuerte a medida
que se apoderaba de más territorios. Ya en la
República, alrededor del año 270 a.C. Roma dominaba
toda la península Itálica y seguía su
expansión. Este imperio que a partir del s. I a.C.
sería gobernado por emperadores, creció y
absorbió ciudades y territorios que hoy en día
comprenden mas de 40 países con 5.000 Km., de un extremo a
otro. (http://www.fortunecity.es)
A partir de este momento, la constitución romana quedó fijada en
sus elementos esenciales.
Había tres órganos principales:
-En la base, coexistían las Asambleas del pueblo,
al que se le reunía por centurias para elegir
cónsules y decidía sobre cuestiones de guerra y
paz; y por tribus, para elegir a los tribunos
plebeyos.
-En estas asambleas se elegían anualmente
colegios de magistrados a los que, desde fines del siglo IV a.C.,
los plebeyos habían conseguido acceder.
Dependiendo del cargo que desempeñaran, se
clasifican en:
a) Los cónsules, máximas autoridades
civiles y militares.
b) Los censores, que establecían el censo de
ciudadanos.
c) Los praetores (pretores), que administraban justicia.
d) Los quaestores (cuestores), que supervisaban las
cuentas.
e) Los aediles (ediles), encargados de los asuntos
municipales.
f) El Senado, constituido por miembros vitalicios
elegidos entre los ex-magistrados.
Roma tuvo tres formas de
gobierno:
- La monarquía.
- La república.
- El imperio.
Las cuales se explicarán a
continuación.
Rómulo, según las antiguas leyendas
romanas, gobernó hasta el 716 a. C.
Luego desapareció en una tormenta, y se
suponía que había sido llevado al cielo para
convertirse en el dios de la guerra Quirino.
Por la época de su muerte, la ciudad de Roma se
había expandido desde el Palatino hasta el Monte
Capitolino y el Monte Quirinal, al norte (Con el tiempo, Roma
llegó a ocupar siete colinas, «La Ciudad de las
Siete Colinas).
La leyenda más conocida sobre el reinado de
Rómulo se refiere al problema de los primeros colonos,
quienes se hallaron ante el hecho de que los hombres
afluían a la nueva ciudad, pero no las mujeres.
Por ello, los hombres decidieron apoderarse de las
mujeres de los sabinos, grupo de
pueblos
La condición de Tarpeya aludía a los
brazaletes de oro que ellos
usaban.
Una noche ella abrió secretamente las puertas, y
los primeros sabinos que entraron arrojaron sobre ella sus
escudos, pues también los llevaban en el brazo
izquierdo.
De este modo, los sabinos, quienes (como la
mayoría de la gente) estaban dispuestos a utilizar
traidores, pero les desagradaban, mantuvieron su compromiso
matando a Tarpeya.
En lo sucesivo se llamó Roca Tarpeya a un
peñasco que formaba parte del Monte Capitolino.
En memoria de la
traición de Tarpeya se lo usó como lugar de
ejecución, desde donde se arrojaba a los criminales hasta
que morían. (http://www.step.es)
Tras Rómulo, otros reyes se sucedieron en el
trono de Roma. Comparando a Roma con otras ciudades italianas,
era una ciudad rural, habitada por campesinos-soldados que se
pasaban la vida entre el arado y la lanza, sin arte propio ni
cultura
reconocible, muy influenciada por su entorno etrusco, mucho
más rico y culto. El sucesor de Rómulo fue Numa
Pompilio. No era romano, pero como en Roma no había nadie
capacitado para gobernar fueron a buscarlo en las ciudades
vecinas. Según la tradición Pompilio gobernó
más de cuarenta años dedicándose a legislar
y dar forma a las instituciones
y a la religión, instituyendo los colegios de
pontífices, calendario, etc. Otro rey famoso fue Tulo
Hostilio, que dio su propio nombre a eso que llamamos
"hostilidad", y con razón, porque fue un monarca guerrero
que se dedicó a expandir Roma a base de anexiones. La
primera anexionada fue la cercana Alba Longa, la ciudad fundada
por Ascanio y que fue "asimilada": sus habitantes fueron llevados
a Roma y convertidos en romanos, los plebeyos se mezclaron con
los plebeyos y los nobles con los nobles, fusionándose
ambas poblaciones completamente, con lo que Roma dobló su
población… y su ejército (que
seguro que era
lo que más le importaba a nuestro amigo Tulo). Los romanos
y los albanos se consideraban hijos de la misma sangre, ya que
ambas ciudades tenían a Enéas como antepasado
común y ambas habían salido de un mismo tronco, por
lo que la historiografía romana habla de una fusión
entre familias separadas. Puesto que el mismo Rómulo era
natural de Alba Longa, todos eran familia De
aquella gens muchos siglos después saldría
Cayo Julio César. Es importante recordar que César
siempre alardeó de su noble linaje, sin duda el más
noble de toda Roma, ya que entroncaba directamente con
Enéas, cosa que a plebeyos como Catón y
Cicerón les producía envidia y odio. Sobre todo
odio. Los sucesores de Hostilio continuaron esta política de
"asimilación forzosa" de las aldeas vecinas expandiendo
Roma en una campaña de "reunificación
sanguínea". Este sistema dio tan
buenos resultados que el Imperio Romano se
fundamentó en la asimilación de las poblaciones
conquistadas.
En algún momento los etruscos tomaron el control de Roma
poniendo a uno de los suyos, Tarquinio Prisco, en el trono. Roma
no era más que una pequeña población sin
importancia que se extendía por algunas colinas vecinas.
Con la monarquía etrusca tomó sus primeros
contactos con el comercio exterior
modernizándose su ejército y organización administrativa hasta que en
510 a.C. el último rey, también de nombre Tarquino,
fue depuesto y se instauró una república
aristocrática gobernada por las familias más
poderosas de la ciudad agrupadas en un Senado o cámara de
gobierno. La nueva forma de gobierno fue denominada Senatus
Populus Que Romanus, cuya abreviatura S.P.Q.R. se
convirtió en el símbolo eterno de la ciudad.
(http://www.historialago.com)
La República
Las Instituciones Republicanas
Los romanos gustaban de atribuir una parte del éxito
internacional a la bondad de su forma de gobierno.
Como, efectivamente, una de sus más notables
creaciones fue el sistema
político, merece la pena explicar cuáles fueron
sus bases.
Aunque la tradición achaca al advenimiento de la
República la gran transformación del régimen
político, el cambio
debió de ser menos repentino y en absoluto
total.
Cambios Respecto A La Monarquía
En la práctica, lo único que
desapareció fue la figura del rey.
Para detentar su poder -lo que los romanos llamaban
imperium-, aparecieron dos magistrados, los cónsules, que
se elegían anualmente y que tenían poder de veto
mutuo.
No cambió el Senado, formado por miembros
vitalicios y que, en la época anterior, se encargaban de
aconsejar a los reyes.
El tercer gran elemento constitucional, la Asamblea
centuriada, surgida de la milicia romana y donde los ciudadanos
ricos tenían voz y voto en los asuntos de estado, pudo
haber existido ya en época real.
En definitiva, la República sólo
reforzó y acrecentó el carácter aristocrático del
régimen, que era el reflejo de una organización
social muy peculiar.
En la base del sistema estaban las gentes, que eran
grupos formados por el recuerdo de un antepasado común y
de lazos de sangre.
Las gentes eran más antiguas que la misma ciudad
y cada uno de ellas tenía sus propios ritos religiosos y
jurisdicción sobre sus miembros, que incluían a los
descendientes del ancestro mítico y a sus clientes y
dependientes.
Al organizar la ciudad, los etruscos impusieron nuevas
instituciones sobre el sustrato gentilicio, pero el liderazgo
natural siguió recayendo en los cabezas de cada gens, que
formaron el Senado y acapararon los cargos públicos y
religiosos. (http://www.step.es)
Sin embargo, Roma era demasiado débil para poder
resistir las presiones etruscas y hubo de doblegarse a su poder.
Los primeros tiempos de la República son muy
difíciles, pero la ciudad sigue creciendo a gran ritmo y
consigue agrandar su territorio a expensas de las aldeas vecinas
hasta que años después, a mediados del siglo IV a.
C. consigue su primer trofeo importante: la conquista de Veyes
por Camilo. La cercana ciudad etrusca se convertiría
así en la primera presa "extranjera" de Roma, aunque la
alegría durará poco, ya que Camilo cayó en
desgracia y fue desterrado (no sabemos bien por qué) y
pocos años después, a finales del siglo IV a.C. los
galos que habían invadido Italia saquean Roma, defendida
por terraplenes y muros de juguete. En ese momento aparece
Camilo, que viendo Roma ocupada alista en las poblaciones vecinas
un ejército de rescate con el que consigue derrotar a los
galos y hacerles huir. Tras la marcha de los galos, los romanos
se pusieron manos a la obra, reconstruyeron su destruida ciudad y
contrataron a ingenieros griegos que les construyeron las famosas
murallas que la tradición atribuye erróneamente al
rey Servio Tulio. Éstas serán las murallas que
muchos años después impedirán que
Aníbal gane la II Guerra Púnica. Mientras tanto,
Camilo, de nuevo héroe nacional, reformará
radicalmente el ejército romano encuadrándolo en
unidades llamadas "legiones".
Tiempos de alianzas con otros vecinos y de guerras sin
fin que ven como la pequeña ciudad crece a un ritmo
imparable que asusta a sus vecinos y que forjan el
carácter romano: reservado, desconfiado, austero,
despiadado, una raza de hombres que dejan el arado para
empuñar la lanza y volver nuevamente al arado sin
descanso. Ellos no lo saben, pero aquellos hombres que combaten
contra todos sus vecinos año tras año son la
simiente de una raza de titanes que conquistará el mundo
conocido paseando sus estandartes por tres continentes desde
Escocia a Arabia, desde Gibraltar hasta Crimea. Son los tiempos
en los que los plebeyos luchan por adquirir derechos políticos
que los patricios no están dispuestos a otorgarles, pero
que poco a poco, el pueblo consigue a base de tesón.
Cuando Pirro, rey del Épiro y uno de los herederos de
Alejandro
Magno invade Italia nada parece poder frenar su formidable
poder, pero una pequeña ciudad completamente desconocida
llamada Roma le planta cara y envía a sus
ejércitos, agrupados en unidades llamadas "legiones" a
enfrentarse al coloso. Tras dos sangrientas batallas, Roma es
vencida pero no derrotada y el rey Pirro, asombrado ante aquellos
romanos que se lanzan contra él masacrando a parte de su
ejército, tiene que retirarse de Italia: a pesar de haber
ganado todas las batallas ha perdido la guerra. Es lo que hoy
llamamos "victorias pírricas". Y Roma, que aunque pierde
las batallas gana las guerras, como años después
comprobará Aníbal, queda así como
dueña de la parte sur de Italia. En un siglo será
ya la dueña de toda Italia, venciendo a todos los pueblos
italianos, convertida de la noche a la mañana en una
superpotencia mundial y quedando así frente a frente a
Cartago, a la que tras 120 años de terribles guerras
conseguirá destruir y borrar de la Historia. De la
africana Cartago Roma pasó a España,
luego a Grecia y nuestro Julio César, que
conquistará para ella la Galia, será el hombre que
acabe con la República, ya un cadáver corrompido,
para que su heredero Augusto siga su legado construyendo el
Imperio. (http://www.historialago.com)
El Imperio Romano fue la genial idea de Julio
César que su sobrino y heredero Augusto convirtió
en realidad tras la guerra civil contra los asesinos de
César. El Imperio, mucho menos agresivo militarmente que
la República, se conformó con asegurar las
conquistas republicanas. Los emperadores españoles Trajano
y Adriano, a principios del
siglo II d.C., consiguen las más altas cotas de esplendor
de Roma con la máxima expansión territorial y el
mayor apogeo cultural. Pero tras ellos se produce la lenta y
agónica decadencia romana que traerá un sin fin de
guerras civiles que acabarán por destruir todo su poder
militar para acabar dividido en dos partes con la occidental
finiquitada en 476 d.C.1.229 años habían pasado
desde que Rómulo fundara la ciudad. Y 1.000 años
más pasarían hasta que los turcos acabasen con los
restos del Imperio Romano de Oriente cerrando la más
gloriosa página jamás escrita por pueblo alguno.
Una página de la Historia que permanece en la memoria de
la Humanidad gracias al soberbio legado cultural que Roma nos
dejó. (http://www.historialago.com)
La sucesión de acontecimientos y
transformaciones, de origen tanto interno como externo, que se
aprecia en el seno de la sociedad
romana durante los siglos III, IV y V después de Cristo,
producirá desde el primer momento una crisis
generalizada, que se manifiesta en todos los aspectos de la vida
política, económica y social.
Durante este periodo que conocemos como el Bajo Imperio,
Hispanía se ve afectada exteriormente por las diversas
invasiones de los pueblos bárbaros, ocasionando
situaciones de inseguridad,
agravadas internamente por las revueltas de carácter
social, que protagonizarían las bandas armadas de los
bagaudas.
La situación descrita justificaría fuera
de Hispanía la continuidad de líneas defensivas o
limes; pero también en el interior, a lo largo del
río Duero se creó, al parecer, otro núcleo
protegido por tropas de frontera
olimitanei. A esta población pertenecen las denominadas
Necrópolis del Duero, que se ubican principalmente en los
pasos naturales de los ríos o junto a las vías,
como sucede en la provincia de Soria con las necrópolis de
Suella cabras (junto aun castro fortificado de la misma
época), próxima a la vía de Astúrica
a Caesaraugusta, la de Aldea de San Esteban, cerca del cruce de
la calzada que comunicaba con Tiermes, etc.
Los tipos de enterramientos que se registran en estas
necrópolis son variados, ya que a veces se excavan fosas
en la tierra,
otras se delimitan con lajas de piedras, ordenadas de forma
rectangular, se utilizaban también ataúd, es de
madera y, en
fin, cualquier otra base o soporte funerario. Los ajuares que se
inventarían en estas tumbas consisten en elementos de uso
personal (caso
de los cuchillos y broches de cinturón o piezas que
pertenecían al atalaje del caballo, como frenos,
pasadores, anillas, petrales, botones, faleras, etc.). En estas
ocasiones, el mobiliario corresponde a los utensilios empleados
en una profesión determinada, caso de los enterramientos
en que se registran hoces, azadillas, azuelas, formones, garlopas
y otros. Por último, se anotan en este tipo de tumbas
piezas cerámicas, correspondientes a las producciones de
cerámica pintada y de sigillata
hispánica tardía.
Durante el Bajo Imperio, la sociedad sufre un proceso de
ruralización en detrimento de las ciudades,
consolidándose los dominios y propiedades de los
honestiores o grandes propietarios, frente a los humiliores,
personas libres pero económicamente humildes. Esta
polarización se debe, en parte, al debilitamiento de las
oligarquías que formaban parte de la curia o senado
municipal.
La esclavitud va
desapareciendo como fuerza de
trabajo esencial y es reemplazada por gentes libres, que pasan a
ser asalariados, realizando trabajos temporales, o colonos, que
quedan adscritos a la tierra
explotando parcelas, pero a cambio de ciertas prestaciones
al dueño, como entregar parte de su producción o trabajar en las tierras de
éste varias jornadas al año. En contrapartida, el
propietario debe protección económica y
jurídica. Los aspectos señalados están
indicando características que fraguarán en la
Edad Media
consolidarán unas nuevas formas de sociedad.
Los grandes propietarios abandonaban los centros urbanos
dejando de contribuir al sostenimiento de los mismos, y se
trasladaban a las mansiones rurales o villas, que existían
desde finales del siglo II después de Cristo y que
alcanzaban su máximo desarrollo en
las centurias siguientes (III, IV, V).
Buena muestra de estos conjuntos que,
a veces son auténticas mansiones residenciales, son las
excavadas en el territorio soriano, como Los Quintanares (Rioseco
de Soria), la de Santervás de El Burgo, la de Cuevas de
Soria, etc. Todas ellas se encontraban próximas a
corrientes fluviales y a las calzadas. Su diseño
arquitectónico responde al modelo de
establecer diversas dependencias en torno a uno o
varios patios, en cuyo centro suele existir una fuente y una
superficie ajardinada (tal como puede comprobarse en la planta de
Las Cuevas de Soria). La zona más noble, habitada por el
dueño, disponía de lujosos mosaicos en el suelo, así
como paredes ornadas con pinturas; similar tratamiento
recibían la zona de los baños. El resto de las
estancias, diferenciadas de las del dominio, albergarían a
los colonos, siervos, así como talleres, almacenes,
etc.
En las excavaciones de estos conjuntos
arquitectónicos se han inventariado, junto a los elementos
constructivos, piezas de gran valor
estético y económico, lo que demuestra el fuerte
nivel adquisitivo que gozaban los propietarios de las villas bajo
imperiales. Una muestra de esto son los diversos objetos hallados
en la villa de Los Quintanares, de los que se ofrece una muestra
selectiva en las vitrinas; destaca, entre otras piezas, la
escultura del dios Saturno. ( http://www.dipsoria.com).
A partir del siglo III después de Cristo,
comienzan a establecerse unas nuevas formas de vida, tanto
sociales como económicas, que influyen de manera
importante en el desarrollo de toda la actividad del Imperio. Si,
por un lado, la crisis imperial (en la que se suceden emperadores
de manera continúa, elegidos por las legiones) es una
buena muestra de la situación que se vive en las ciudades
experimentan un cambio radical, de lugares abiertos pasan a
amurallarse, perdiendo parte de su propio perímetro; a la
vez, dejan de ser centros seguros,
convirtiéndose el campo en el lugar en el que se buscar
refugio. La vida ciudadana se va perdiendo, los oficios (sobre
todo los de cargos públicos) desaparecen, no queriendo
nadie acceder a ellos de manera voluntaria.
Todo esto hace que el centro de la vida se traslade al
campo, y en esas villas adquieren una importancia extraordinaria,
convirtiéndose en verdaderos focos económicos y
humanos. Las villas poseen un sistema económico
autárquico, que les permite autoabastecerse, lo que no
impide que existan importaciones de
lujo para los grandes señores. Estos llegan a controlar no
sólo un territorio importante, sino también
contingentes humanos considerables; a la vez, se proveen, sobre
todo en la zona del Valle del Duero, de sus propias tropas de
protección y, también, dan cobijo a aquellos que lo
solicitan, creándose unos lazos de dependencia que
permitirán crear las bases que, posteriormente,
desarrollarán el sistema feudal que imperará en la
Alta Edad media europea. (http://www.dipsoria.com)