- Hipótesis
- Breve cronología de las
islas Malvinas. - ¿Por qué las
Malvinas son argentinas? - Las razones que llevaron a la
guerra. - El episodio de las Georgias,
aparente desencadenante del conflicto
armado. - La ocupación militar de
las Malvinas. - Del triunfalismo a la
derrota. - La reacción de la
población ante la guerra de
Malvinas. - La visita del papa Juan Pablo
II. - La
rendición. - Los efectos políticos de
la derrota. - Conclusión
- Testimonios.
- Bibliografía.
Hace ya 21 años,
el 2 de Abril de 1982, Argentina echaba a los ingleses de las
Islas
Malvinas.
Pocas semanas después, Londres envió una flota a
recuperar el honor y las tierras, y lo logró tras una
guerra breve y
vertiginosa que terminó el 14 de Junio.
Las estadísticas dicen que en el conflicto
combatieron más de 12000 argentinos que lo dieron todo y
700 no volvieron a casa.
Me parece importante
resaltar que la Guerra de Malvinas fue
la única guerra que libró la Argentina en el siglo
XX.
• "¿Estábamos preparados para enfrentar
una guerra?"….
• A pesar de la
negatividad de la contienda, me atrevería a decir
que…
"La
Guerra de Malvinas fue en algún punto,
positiva."
DESARROLLO
BREVE
CRONOLOGÍA DE LAS ISLAS
MALVINAS.
Las islas
figuran en los mapas
cartográficos desde los años 1515-1520, antes del
viaje de Magallanes.
Hacia 1527 las islas
Malvinas fueron bautizadas como islas San Antón
por el rey español
Carlos I. por el Tratado de Tordesillas de 1494 las islas estaban
dentro del ámbito geográfico español.
El inglés
John Strong surcó en 1690, el estrecho de San Carlos. En
1701, los balleneros de Saint Maló difundieron la
existencia de las islas, originando el nombre de Malouines (del
que deriva Malvinas) con el que se las conoció en el siglo
XVII, y actualmente.
Las islas
permanecieron deshabitadas hasta 1764. En esa época Louis
Antoine de Bougainville fundó Fort Royal o foro Saint Louis, en la
bahía de la Anunciación.
En 1765, los ingleses
establecieron una colonia, Puerto Egmont, en la isla Trinidad.
España,
que se consideraba soberana de la región, protestó
ante Francia por la
colonización logrando la restitución de Port Saint
Louis que pasó a llamarse Puerto de Nuestra Señora
de la Soledad. También se logró erradicar a los
británicos quienes partieron definitivamente en 1774.
La creación
del Virreinato del Río de la Plata (1776), mantuvo a las
Malvinas bajo la jurisdicción de Buenos Aires.
A fines de 1820, el
gobierno
argentino tomó posesión efectiva de las Islas
Malvinas que nos pertenecían por ser herencia
española. El pabellón nacional argentino fue izado
por primera vez el 6 de noviembre de 1820.
Argentina
otorgó tierras a los ciudadanos Jorge Pacheco y Luis
Vernet con el fin de que establecieran una colonia.
Además, creó la Comandancia Política y Militar
con asiento en Puerto Soledad y designó a su cargo a Luis
Vernet.
En esa época,
la fauna costera era
objeto de una depredación irracional. El comandante Vernet
dispuso medidas para frenar esa situación, ordenando la
detención de tres barcos pesqueros estadounidenses. La
reacción inusitada de Estados Unidos
(saqueo de las poblaciones y captura de los habitantes),
provocó un largo pleito.
Inglaterra
aprovechó la situación conflictiva y envió
sus fuerzas militares en la corbeta Clío, bajo el mando de
Jhon Onslow.
El 2 de enero de
1833, en Puerto Soledad, se enarboló la bandera inglesa
iniciándose así el largo periodo que Argentina
considera una usurpación, razón por la cual, a lo
largo de los años, no ha cesado de reclamar su soberanía.
Numerosas
negociaciones se han llevado ha cabo desde entonces. La Argentina
ha presentado ante Gran Bretaña, la ONU, OEA y varios
organismos internacionales, continuos reclamos que exigen la
inmediata devolución de las islas. Los argumentos
presentados son de carácter histórico,
geográfico y político: sin embargo Gran
Bretaña se ha negado a admitir alguno de ellos.
En 1982 las tensiones
desembocaron en un conflicto bélico que produjo profundos
cambios en la región. El triste episodio culminó
con el triunfo de Inglaterra que contó en todo momento con
el apoyo de Estados Unidos y los países integrantes de la
Comunidad
Europea. La Republica Argentina se encontró aislada
internacionalmente.
Después de
casi una década de interrupción, se restablecieron
las relaciones bilaterales entre los dos países,
inaugurándose una nueva etapa en la disputa de la
soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias y
Sándwich del Sur.
¿POR QUÉ LAS MALVINAS SON
ARGENTINAS?
Las Malvinas
son Argentinas por las siguientes razones:
• Histórica:
• Geográfica:
• Jurídica:
• HISTORICA:
España fue la nación
descubridora, por haber sido Esteban Gómez (miembro de la
expedición de Magallanes), el primero que las
avistó.
• GEOGRAFICA:
* Se encuentran dentro de la zona otorgada a
España por las bulas de Alejandro VI por
el Tratado de Tordesillas.
* Las
islas se encuentran dentro de la plataforma submarina argentina,
a una distancia de 346 Km.
del continente, mientras que de Inglaterra están a 12000
Km.
*
Pertenecen a la Patagonia
argentina.
* El
archipiélago figura en la cartografía de la época, no
así en la inglesa.
• JURIDICA:
Al independizarnos heredamos de España
los derechos sobre
ellas, sin reclamaciones por
parte de ningún país.
LAS RAZONES QUE LLEVARON A LA
GUERRA.
A
principios de
1982 el régimen militar, estaba llegando a su fin. El
descontento popular por el deterioro de la situación
económica y política, sumado el
conocimiento sobre las violaciones de los derechos humanos
que amparaba el régimen, llevaron a la Junta Militar a un
callejón sin salida. Ante los resultados nefastos de la
gestión, el régimen, entró en
una crisis casi
terminal.
La
recuperación de la soberanía sobre las Islas
Malvinas se convirtió en una de las preocupaciones
centrales del gobierno militar encabezado por el General Leopoldo
F. Galtieri, frente a la posibilidad de que Chile obtuviera el
control de
Canal de
Beagle y Argentina perdiera presencia en el Atlántico
Sur. Para ello comenzó, una ofensiva diplomática e
irreflexible que duraría hasta el comienzo de la
guerra.
Argentina se propuso
reactivar las negociaciones y alcanzar algún tipo de
acuerdo con Inglaterra sobre la soberanía de las Islas
Malvinas.
En enero de 1982, la
Junta militar decidió, retomar las negociaciones
diplomáticas y emplear la fuerza armada
en caso de fracaso de la primera opción. La
operación militar prevista inicialmente era incruenta y
consistía en el desembarco, la ocupación y el
retiro inmediato de las islas. De este modo, los militares
argentinos buscaban evitar una reacción del gobierno
inglés y obligarlo a una negociación.
Sin embargo, una vez
producido el desembarco, la Junta decidió no retirarse de
las islas porque advirtió que la campaña militar
por la recuperación de la soberanía sobre las Islas
Malvinas podía generar importantes beneficios
políticos internos, ya que los militares necesitaban
realizar una acción
espectacular que desviara la atención del publico del aumento de los
conflictos
sociales. La guerra de Malvinas, una causa de
reivindicación nacional de largo tradición, les
permitiría, además, conseguir el apoyo de amplios
sectores sociales que ya comenzaban a mostrar su disconformidad y
su oposición a la dictadura.
A principios de
marzo, el gobierno militar argentino propuso al gobierno
británico acelerar las negociaciones diplomáticas
para "obtener una pronta solución".
Los reclamos de la Argentina fueron adquiriendo un tono
cada vez más agresivo.
EL EPISODIO DE LAS GEORGIAS,
APARENTE DESENCADENANTE DEL CONFLICTO
ARMADO.
Hacia fines de mayo de 1981, la empresa
"Georgias del Sur", en cumplimiento de un convenio firmado con
Gran Bretaña, contrató un grupo de
operarios argentinos con la misión de
desmantelar una planta ballenera que se hallaba instalada en la
Isla San Pedro (la mayor de las Georgias del Sur) ocupada al
igual que las Malvinas y las Sándwich del Sur.
El 20
de marzo de 1982, Londres presentó una protesta
considerando un hecho grave de desembarco del personal civil y
militar, quienes habían izado la bandera Argentina y
cambiado señales
inglesas, y que además se habían escuchado disparos
de armas de fuego.
Esta actitud fue
considerada por el gobierno británico como el primer paso
de una invasión.
Como consecuencia, se
llevaron a cabo los primeros movimientos de tropa de ambos
países. Argentina envió varias unidades de la flota
de guerra para prestar apoyo y proteger al citado grupo de
ciudadanos, el gobierno ingles por su parte envió una
embarcación militar para desalojar de inmediato al grupo
de trabajadores que había "cometido actos contrarios a la
soberanía británica en la región". Este
hecho hizo pensar al gobierno argentino que Gran Bretaña
estaba utilizando esta oportunidad para reforzar su presencia
militar en las islas.
LA OCUPACIÓN MILITAR
DE LAS MALVINAS.
Durante la noche del 1º de abril de 1982 y la madrugada del
viernes 2, parte de la flota argentina de mar operaba frente a
las Islas Malvinas. Entretanto, la reducida dotación de
británicos en la capital
malvinense se desplegaba en actitud defensiva.
Esa misma noche se
reunía el Consejo de Seguridad de las
Naciones Unidas,
a pedido de Gran Bretaña, que denunció "la
inminente amenaza de invasión argentina a las islas". La
reacción argentina fue inmediata. Nuestro embajador
denunció ante las Naciones Unidas la situación de
grave tensión provocada arbitrariamente por Inglaterra en
las Georgias.
A las 6.30 de la
mañana del viernes 2 de abril, las Fuerzas Armadas
argentinas (ejército, marina y aviación)
desembarcaron en las Malvinas tomando posesión de Puerto
Stanley, al que rebautizaron Puerto Argentino. Cabe aclarar
aquí, que también los jóvenes argentinos que
hacían el servicio
militar fueron "embarcados y llevados" hacia el sur. Ellos no
combatieron en la guerra porque tenían una carrera militar
sino porque el servicio militar era entonces
obligatorio.
Luego de algunos
enfrentamientos en diversos lugares de la isla culminaron con la
rendición del gobernador británico, así fue
como la Fuerza Armada argentina levantó la bandera
nacional.
Debido al exitoso
resultado del operativo, el gobierno militar comunicó a la
población que "la Republica, por intermedio
de las Fuerzas Armadas, mediante la concreción de una
excelentísima operación conjunta, ha recuperado las
Islas Malvinas, Georgias y las Sándwich del Sur…".
La noticia fue anunciada al país por cadena oficial y
generó una primera reacción de sorpresa
generalizada.
DEL TRIUNFALISMO A LA
DERROTA.
Como mencioné en el apartado que se refiere a la
ocupación militar, con el episodio sucedido el 2 de abril,
el gobierno y la población, creían que el triunfo
estaba cerca.
Además, las
autoridades militares argentinas siempre consideraron improbable
que las autoridades británicas intentaran recuperar
militarmente las islas, estaban confiados en que Gran
Bretaña no entraría en una contienda bélica
en territorios tan alejados, y según creían los
estrategas de las Fuerzas Armadas argentinas, sin importancia
para los intereses británicos. Este error de
apreciación fue la razón por la cual la Junta no
tenía previsto un plan de defensa
de sus posiciones una vez que las islas habían sido
tomadas. Por otra parte, confiaban también en que, en caso
de un enfrentamiento armado, las fluidas relaciones que la
Argentina tenía con el gobierno de Ronald Reagan,
presidente de los Estados Unidos, servirían para asegurar,
por lo menos, la neutralidad de ese país en la guerra.
Sin embargo, la
reacción británica no fue la que habían
previsto Galtieri y los otros jefes militares. Los grupos
conservadores de aquel país, liderados por la primera
ministra Margaret Thatcher, vieron, al igual que los militares
argentinos, la posibilidad de utilizar la guerra del
Atlántico Sur como un medio para conseguir consenso hacia
su política interna. Rápidamente los
británicos enviaron una gran cantidad de buques de guerra
hacia la zona austral, al mismo tiempo que
lograban la solidaridad de
los miembros de la Comunidad Económica Europea y el apoyo
del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, y también
de la OTAN.
Argentina, por su
parte, había conseguido un tibio respaldo de la
Unión Soviética y la solidaridad total, aunque no
armada, de los países latinoamericanos. El ministro de
Relaciones Exteriores Costa Méndez, realizó
infructuosas gestiones para lograr el apoyo del gobierno
estadounidense, pero no se pudo lograr. Por el contrario poco
después de terminada la guerra se supo que Estados Unidos
había otorgado apoyo logístico a las tropas
británicas.
Inicialmente, el
gobierno de EEUU cumplió el papel de mediador entre sus
aliados. Sin embargo, la gestión conciliadora,
fracasó. La guerra, entonces, apareció como la
única opción.
La llegada de los
buques de guerra británicos a las islas hizo evidente que
los ingleses consideraban que tenían muy poco para
negociar con el gobierno argentino. Luego de recuperar sin
mayores problemas las
Islas Georgias, a principios del mes de mayo, los
británicos comenzaron el ataque militar contra las
Malvinas.
A comienzos de junio,
la infraestructura de combate era considerablemente inferior a la
tecnología
bélica de los ingleses y las condiciones alimentarias de
los soldados argentinos eran pésimas. Pese al
heroísmo de nuestros soldados y algunos resultados
exitosos de la aviación, el resultado de la guerra iba
mostrando la cruda realidad de la derrota argentina.
LA REACCIÓN DE
LA POBLACIÓN ANTE LA GUERRA DE MALVINAS.
Al igual que en el apartado anterior,
también el sentimiento de la población
transitó de la euforia a la desmoralización.
En principio, la
actitud triunfalista en el gobierno se extendió a todo el
pueblo que apoyó con fervor y entusiasmo el desembarco de
la Fuerzas Armadas argentinas en las islas.
El 2 de abril,
Galtieri convocó al pueblo a Plaza de Mayo. Desde el
Mundial de Fútbol de 1978, los jefes militares no
habían tenido otro "baño de multitud". La sociedad
argentina se vio arrinconada contra una paradoja imprevista: el
régimen que había sumido el país en una de
sus etapas más tenebrosas, ahora aparecía como
paladín de una vieja y legítima
reivindicación: la recuperación de las Islas
Malvinas. Nadie pudo permanecer al margen acerca del tema; muchos
se movilizaron de una u otra forma, para expresar su apoyo a la
acción militar. Una encuesta
registra un 90% de adhesión a los militares.
El pueblo argentino
dio un total apoyo a la decisión del gobierno militar, no
sólo con su voz sino también donando ropa, joyas,
dinero,
chocolates y todo que podía ser de ayuda para los chicos
de la guerra.
Como contraparte de
la euforia que manifestaba el pueblo, sediento de venganza contra
la histórica usurpación inglesa sobre nuestro
país, se hallaban padres y familias enteras rogando por el
regreso de sus hijos; esos hijos que no eran mas que nuestros
soldaditos de 1982, desprotegidos, solos, lejos de sus seres
queridos, con miedo de ser muertos como mucho de sus
compañeros. Algunos de ellos, los que sobrevivían,
enviaban cartas a sus
familiares y seres queridos, contando la verdad de los
acontecimientos. …pensemos en la angustia y
desesperación de ellos, tan diferente a la alegría
y euforia de todo del resto de la población, que hablaba
de un triunfo cercano.
Así, el
clima de
euforia aumentaba y siguiendo instrucciones oficiales, los medios de
comunicación eran los encargados de informar sobre
este episodio, con la misma pasión con que se transmite un
partido de fútbol y con la misma seguridad de que el
partido estaba ganado.
Es así
entonces, como la sociedad mantuvo un espíritu
triunfalista que era alimentado por los órganos de
prensa
manipulados por el régimen militar. La censura aplicada a
la información sobre el curso de la guerra
creó la ilusión de la victoria.
A pesar de todo, como
mencioné antes, la inferioridad de combate frente a los
ingleses nos llevó lentamente a la derrota y cuando esto
no pudo disfrazarse más, los partes oficiales y los
medios de
comunicación lentamente comunicaron la verdad de lo
que estaba ocurriendo, la Argentina estaba siendo vencida.
LA VISITA DEL PAPA
JUAN PABLO II.
Ante la extrema gravedad de la situación, el Papa Juan
Pablo II decidió viajar a la Argentina, lo cual
hacía prever el fin de la guerra.
A principios del mes
de junio, antes de la rendición incondicional de las
tropas argentinas frente a las inglesas, el Papa llegó a
Buenos Aires. Permaneció en el país dos
días, durante los cuales desplegó una intensa
actividad que comprendió, fundamentalmente, una prolongada
entrevista con
la Junta Militar con el presidente de la Nación.
A su vez celebró dos misas una en Palermo y la otra, en
Luján, a las que concurrieron más de miles de
seguidores, instando por la paz del país.
Al
mismo tiempo que el Papa elevaba sus súplicas por la
concordia y la paz ante inmensas multitudes, recrudecía en
las Malvinas y en las Georgias la lucha después del
desembarco británico en diversos puntos de sus
territorios.
El día 14 de
junio las fuerzas británicas presionaban con una
manifiesta superioridad en armamentos y en efectivos humanos, en
las afueras del Puerto Argentino, capital malvinense.
Al promediar la tarde
de ese día, el Estado
Mayor Conjunto informó que se había acordado un
alto el fuego, signado por el gobernador militar argentino en las
islas, general Mario Benjamín Menéndez y el
comandante de las fuerzas británicas.
La guerra que
había durado 74 días, en la que muchos soldados
murieron en la lucha en la que la inferioridad de condiciones
materiales de
las Fuerzas locales fue determinante, había dejado como
saldo más de 700 muertos y alrededor de 1500 heridos.
La rendición
se produjo ante la posibilidad de <<continuar la resistencia sin
producir un estéril derramamiento de sangre>>.
LOS EFECTOS
POLÍTICOS DE LA DERROTA.
El día 15, Galtieri convocó a la
población a Plaza de Mayo con el propósito de
anunciar la rendición y realizar un balance del conflicto.
Una multitud volvió a cubrir la plaza, pero esta vez
repudió a la dictadura militar
y también criticó la irresponsable
conducción de la guerra por parte de los militares.
Los partidos
políticos de la oposición, hicieron
responsables a los militares de haber utilizado la excusa del
conflicto para frenar las presiones sociales y mantenerse en el
poder.
También criticaron la falta de una correcta evaluación
de la situación internacional y la actitud negligente con
la que los comandantes militares habían enviado a la muerte a
jóvenes conscriptos sin experiencia de guerra, mal
alimentados y con armamentos de dudosa efectividad.
La
concentración en la plaza, terminó con una violenta
represión de las fuerzas de seguridad contra todos los
presentes.
La derrota de
Malvinas provocó una profunda crisis en el régimen
militar. El desgaste del gobierno se aceleró y Galtieri
renunció en julio de 1982. Por su parte, la
oposición política y social reclamaba el fin de la
dictadura, la convocatoria a elecciones y la aparición con
vida de los detenidos-desparecidos por la dictadura militar.
La salida hacia la
democracia ya
tenía fecha: octubre de 1983 de la mano del Dr.
Raúl Alfonsín.
Por otra parte, la
victoria militar de Gran Bretaña, permitió a
Thatcher recuperar su capital político y obtener su
reelección en las elecciones de 1982.
A lo largo de este trabajo
traté de exponer todo lo que me pareció más
relevante en cuanto a la guerra.
Fue evidente que no
estábamos preparados para una guerra en ningún
sentido: armas, ropas, psicológica y moralmente, ni
entrenados para enfrentar a los británicos. La mala
estrategia del
gobierno, también nos llevó a la derrota.
A pesar de que este
episodio no sirvió de mucho para la Argentina, porque
fueron muchos los hombres que murieron y porque las Malvinas
siguen siendo "usurpadas", aunque nuestro sentimiento diga lo
contrario, mi hipótesis planteaba algo de positivo: Me
parece importante aclarar que la apabullante derrota y la sangre
derramada en Malvinas, abrió paso al fin de la dictadura
militar y el inicio de un periodo de transición a la
democracia, esto fue muy importante para nosotros y mucho
más para le generación anterior que sufrió
la persecuta, el maltrato y el asesinato por parte de los
militares. El terrible costo de la
recuperación institucional se encuentra en el fondo del
mar (los chicos del Manuel Belgrano) o las turbosas tierras de
las Malvinas (los soldados y los oficiales muertos en las
islas).
De todos modos,
según mi criterio, la Guerra de Malvinas, pudo haber sido
evitada, porque se podía haber llegado a un acuerdo
político y no haber terminado en un conflicto
bélico.
Otra cosa que me
parece importante resaltar, es que unos 270 veteranos argentinos
de la Guerra de Malvinas se suicidaron en los últimos 20
años y que la gran mayoría de los sobrevivientes
del conflicto con las tropas británicas, hoy con alrededor
de 40 años, carecen de empleo y
vivienda digna, cuando seria el Estado el que
debería hacerse cargo de ellos.
Reportaje
a uno de los sobrevivientes del Crucero General Belgrano:
José Alberto Villalba
1. Desde su punto de vista: ¿por qué
ocurrió la guerra? ¿Por qué perdimos?
2. ¿Recibió durante la guerra ayuda de la
gente argentina?
3. ¿Cuáles fueron las mayores dificultades que
vivieron en la guerra?
4. ¿Cómo vivió la guerra?
5. ¿Usted cree que estaban bien preparados para
enfrentar a los ingleses teniendo en cuenta la
tecnología avanzada de ellos?
6. ¿Qué reacción tuvieron cuando les
dieron la noticia de que habíamos perdido?
1. a) Desde mi punto de vista, la guerra ocurrió
porque el gobierno sabía que si dejaba pasar el tiempo,
perdía el derecho de Malvinas y a su vez tapaban la mala
conducción y administración del país. b) Creo que
perdimos por la mala estrategia del gobierno y de
las
Fuerzas Armadas.
2. La
gente ayudó pero en sí, no tuvimos conocimiento
que se hayan enviado a Noso- tros y a Malvinas la ayuda. A
pesar de que la gente, donó muchas cosas para los chicos
de Malvinas.
3. La
mayor dificultad la tuvimos cuando fue bombardeado el
crucero
General Belgrano, afuera de la zona restringida y
tuvimos que abandonar el barco
en balsas.
4. Yo viví una experiencia con mucha angustia y
dolor de la cual no me he podido
recuperar.
5. La mayor parte de
nosotros, no estábamos preparados para enfrentar a los
ingleses,
sabiendo que ellos estaban
ayudados por Estados Unidos. Nosotros no estábamos
equipados, por ejemplo con
ropa par frío y armamento, la mayor parte de estos no
servía.
6. Cuando me enteré
de la noticia, que habíamos perdido, sentí mucha
indignación, tuve bronca, no solo por la noticia,
sino por los compañeros que quedaron en el mar y
Malvinas.
Distintas
encuestas
realizadas (ambas docentes)
¿Cómo ocurrió la guerra?
Por ataque inglés, ante la no
negociación diplomática.
¿Por
qué perdimos?
Por el mal manejo diplomático y por
incompetencia del gobierno.
¿Cómo vivió la gente la guerra?
En el momento que sucedía, los medios masivos
mentían, sólo cuando terminó la
guerra, nos dimos cuenta de las
difamaciones.
Viví la guerra con mucha angustia, por
ver morir tantos chicos que no estaban
preparados, creo que tenían que resolver el problema
los diplomáticos.
* <<Fuimos a Malvinas sin estar
preparados para esa guerra.>>-Teniente general
Martín Balza, jefe del Ejército Argentino y ex
combatiente de esa guerra, abril de 1996.
* Los chicos de la guerra. " Ya en
Malvinas distribuyeron raciones para diez días, pero se
nos prohibía comerlas alegando que éstas eran para
el caso de que entráramos en combate. Tener estas raciones
era como sacarte la lotería; por su parte, la comida
caliente que nos suministraban consistía en agua caliente
con dos o tres fideos. Mi sección se tuvo que quedar en el
aeropuerto para carga y descarga, tuvimos que pasar la noche a la
intemperie mientras los oficiales y suboficiales, por supuesto,
la pasaban en las instalaciones del aeropuerto… Ya en las
afueras de Puerto Argentino tomamos posiciones. Cavamos nuestras
trincheras, que eran de 1,20 por 3 metros. Tratábamos de
acondicionarlas porque las características del suelo de Malvinas
hacían que se llenaran de agua en un corto tiempo. La vida
allí era muy dura. Porque además de las
dificultades de comida, tampoco conseguíamos agua. Lo
terrible era que frente a estas privaciones vi a
compañeros estaqueados, a la intemperie bajo el
frío, debido que fueron a pedirle al teniente a cargo mas
comida. El teniente interpretó que habían
abandonado su puesto y los consideró como traidores a la
patria; por eso los estaqueó. Esta situación se
repetía corrientemente… Teníamos la misma
información que el resto del país, así que
la mayoría del tiempo pensamos que íbamos ganando.
Nos enteramos de que los ingleses habían hecho cabecera de
playa, que seguían avanzando, pero nosotros igual
íbamos venciendo, según nos decían."
Ex combatiente Héctor A. Garompolo,
1983.
Para
realizar este trabajo utilicé distintos libros,
textos, fascículos e Internet.
• Alonso, M. E., Vazquez, E. C.
HISTORIA
–La Argentina contemporánea 81852-1999).
Buenos Aires, Editorial Aique, 2000.
• Cesarini Hnos. Argentina desde 1832 y el mundo
contemporáneo. Buenos Aires, 1982.
• Cibotti, Ema. HISTORIA 9 –El siglo XX-. Buenos
Aires, A-Z Editora S.A., 1998.
• Destefani, Laurio H. Malvinas, Georgias y
Sándwich del Sur ante el conflicto con Gran
Bretaña. Buenos Aires, Editora Edipress, 1982.
• El gran libro de
Clarín.
• Enciclopedia CLARÍN (tomo 16). Buenos Aires,
Visor S.A., 1999.
• Enciclopedia de Historia
Argentina. Buenos Aires, Clarín, 2002.
• Fontana, Andrés. De la crisis de Malvinas a la
subordinación condicionada. Conflictos intramilitares y
transición política en la Argentina. Buenos Aires,
Cedes, 1985.
• López, J. L. La Guerra de las Malvinas, norte-
sur, frente a frente, en los hechos políticos del siglo
XX. Buenos Aires, Hispanoamérica, 1985.
• Thompson, Ancrés. Las luchas sociales en la
Argentina (1976-1983). En: Cheresky, I. y otro (comp.). Obra
citada.
• Tocuato Di Tella. HISTORIA ARGENTINA –desde
1830 hasta nuestros dias-. Buenos Aires, Editorial Troqvel,
1995.
• Vazquez de Fernandez, Silvia. El mundo/ America
Latina/ La Argentina –desde fines del
sigloXIX hasta el presente-. Buenos Aires, Kapelusz Editora S.A.,
1998.
María
Jimena
Paciaroni