Simposio
XVI Congreso mundial de
sexologia
Marzo 11 del 2003
- Quién se ha enamorado?
- Quién ha amado?
- Quién ha sentido que ha tocado el cielo con
los dedos? - Quién aquí ha hecho fiesta con el
amor? - Quién ha visto los destellos del
amor? - Quién ha acariciado con palabras?
- Quién ha sentido química
erótica con una pareja? - Quién se ha enamorado en simultánea de
más de una pareja? - Quién ha sido imantado por la magia del
amor? - Quién ha vivido ese momento sublime en que
sientes: "si ahora tuviéramos sexo, eso
sería hacer el amor"? - Quién ha sido tejedor de amor?
- Quién ha escrito palabras con tinta del
corazón? - Quién se ha desenamorado?
- Quién ha dejado de amar?
- Quién tiene un recuerdo de pasados
amores?
Entonces si ha constatado SI muchas de las anteriores
preguntas, sabrá de qué se tratará este
simposio
Imagina sintiendo por un
momento…
- Decir te quiero con una sonrisa y regalarse con los
ojos una flor… - Imagina por un momento …Amarse tanto que el
amor llegue a estar celoso … - Imagina por un momento…Que por tu pecho corre
una cascada de vino tibio que cae desde la boca de alguien a
quien deseas, amas y provoca en ti ternura… - Imagina que este vino es suavemente lamido con la
ternura que una persona puede
tener… - Imagina sentir un escozor que emana de tus genitales,
del resto de tu cuerpo y de tu ser…
La sexualidad es
vida, sexualidad y vida van de la mano. La vida sabiamente ha
sabido crear la sexualidad, el erotismo, el amor y la ternura, lo
ha hecho para sí misma, para darle vida a la vida, para
vitalizar la existencia humana. Como seres humanos tal vez
podamos sobrevivir sin amor, ternura, erotismo, pero vivir a
plenitud sin estas dimensiones muy difícilmente
será posible.
El enamoramiento, la formación de relaciones
amorosas y eróticas juegan un papel
importante en la vida de las personas, para bien o para mal.
Desafortunadamente para una buena proporción de las
personas no lo es para bien.
El erotismo, el amor y la ternura son dimensiones para
la vivencia plena de la sexualidad humana. Si bien es cierto
vivimos momentos cruciales y de cambio
relacionados con la sexualidad, el amor, el emparejamiento y la
vida erótica, aun es mucho lo que hay que hacer para
lograr que la sexualidad deje se ser fuente de malestar,
sufrimiento y frustración y se convierta en lo que merece
ser para la gran mayoría de los seres humanos; fuente de
crecimiento y de realización personal.
Entendemos el erotismo como la capacidad que tenemos los
seres humanos de vivir, experimentar, compartir y expresar placer
sexual, es esa capacidad de movilizar y activar en nuestro SER la
excitación sexual y las emociones que le
acompañan en el contexto de un "encuentro" que tiene como
fin la posibilidad de intimar con otro(a).
Somos un cuerpo hecho para sentir, rico en
órganos sensoriales. tenemos una gran capacidad sensorial
y sensual. Aprendemos a sentir, aprendemos practicando,
experimentando, activando nuestros sentidos y órganos
sensoriales. Tenemos capacidad para sentir, experimentar
sensaciones, gozar el placer que produce la estimulación
sensorial. Captamos estímulos táctiles, olfativos,
propioceptivos, visuales, auditivos, etc. Y los transformamos en
experiencias sensoriales. Las sensaciones y experiencias
sensoriales son construcciones mentales, existen y se hacen
realidad en nuestra mente.
Son variados los sentidos y
órganos sensoriales que tenemos, sin embargo usamos unos
pocos en el ejercicio del erotismo. Tenemos un inmenso potencial
sensorial y sensual por desarrollar, experimentar y vivenciar.
Hemos aprendido ha vivir la sexualidad de una forma
prácticamente genitilizada si no del todo genitalizada y
exclusivamente centrada en el orgasmo inmediato y fugaz.
Pareciera ser que los genitales fuesen la única parte de
nuestro cuerpo y los únicos órganos sensitivos que
tuviésemos para vivir la sensualidad y el erotismo. Hemos
aprendido a vivir la sexualidad en medio de un culto sobre
valorado al ejercicio de una genitalidad inmediatistamente
orgásmica.
El orgasmo es importante en el ejercicio sexual, el
ejercicio genital también lo es, pero estamos perdiendo la
oportunidad de conocer las inmensas posibilidades sensuales que
tenemos para vivir y disfrutar de nuestra sexualidad. Sin temor a
errar podríamos afirmar que somos "analfabetas en el
arte de amar,
sentir y gozar". Desconocemos lo que somos como cuerpo, tenemos
poca comprensión de lo que somos cómo órgano
sensorial, todo el cuerpo que somos es un gran órgano
sensorial. Nuestro cuerpo lo recubre la piel, esta es
de aproximadamente dos metros cuadrados construida por millones
de células
sensoriales y terminaciones nerviosas que nos permiten percibir y
sentir, ternurizar, amor y erotizar.
Excitarse y tener orgamos es importante, así como
también lo es saber encontrarse e intimar
con el otro, haciendo contacto con su ser y con mucho tacto
tocarse, en todo el sentido de la palabra, tocarse con la piel,
con el tacto, con el alma, con la mirada. Con la voz, con todo su
cuerpo, tocarse con la esencia de su ser y dejarse tocar del otro
para experimentar la magia del encuentro, con capacidad de
asombro. Intimar implica erotizar el encuentro, teniendo sexo con
sentido, viviendo el amor con sentido sexual.
Tener sexo no garantiza intimidad, intimar es una
necesidad humana. Una genuina intimidad implica
vinculación afectiva profunda, una cercanía
existencial y un mutuo conocimiento
(María Ladi Londoño, 2002). Una buena parte de las
parejas a pesar de llevar muchos años teniendo sexo y
conviviendo juntos no logran construir intimidad,
dimensión importante para construir amor. La intimidad va
más allá de la compenetración física de dos cuerpos
con sus genitales. Algunas parejas no logran siquiera
compenetrarse en lo físico, mucho menos logran hacer del
encuentro físico una magia, lo cual, les impide construir
una genuina intimidad amorosa y erótica.
HACER EL AMOR CON
TACTO
Quiero hacer el amor con tacto:
Quiero que nos toquemos con la mirada
Quiero que nos toquemos con los destellos del
corazón
Que nos toquemos con el deseo
Que tu deseo toque el mío
Que mi deseo toque el tuyo
Que nos toquemos con la piel
Que nos toquemos con el pensamiento
Que nuestras desinhibiciones toquen nuestras
inhibiciones
Que mi ser toque todo el tuyo
Que tu ser toque todo el mío
Así quiero que hagamos el amor: con
tacto…
LEROS
Leonardo Romero S.
La pareja marital no es precisamente, en muchos casos,
la persona con la que se logra satisfacer la más profunda
necesidad de intimidad. A pesar del tiempo conjunto
sus corazones y sus almas no llegan a estar en
sintonía.
QUIÉREME
ASI
Quiéreme con excitación,
Excítame con tu amor,
mírame con el deseo,
y deséame con la ternura,
tócame con ganas
y que las ganas te lleven a tocarme con ternura y
deseo.
Que me exciten el deseo y la ternura,
tanto, que no sepa que me excita
más.
Que me enternezca el deseo y la ternura,
tanto, que no sepa que me enternece
más.
Que sean como dos siamesas la excitación y la
ternura,
bello será que estén juntas,
como buena y bienvenidas ambas.
Que la una se sienta bien con la presencia de la
otra,
juntas en el alma y el cuerpo,
juntas en el cuerpo y el espíritu.
Que el deseo y la excitación sientan que
crecen
tanto como la ternura y el amor.
Que el amor y la ternura sientan que crecen
tanto como el deseo y la excitación.
Que la una no se queje de la falta de la
otra
y que la otra no se queje de la falta de la
una
o al menos de la ausencia…
Quiéreme así…!!!
Con ternura y deseo
Con amor y excitación
Así quiero quererte
Así quiero desearte
LEROS
Leonardo Romero
Sexuar, erotizar, amar y ternurizar son parte del
arte de construir intimidad, arte que requiere de la
habilidad para erotizar la ternura, ternurizar la sexualidad y
amorizar el sexo.
La sexofía occidental ha dicotomizado el amor y
el sexo, ha satanizado el placer y sublimado el amor. El placer
tiene sentido si hay amor, lo que hace sublime el sexo es la
presencia del amor, pero no se concibe que el sexo haga bello el
amor. Se tiene la idea maniquea que el sexo sin amor no es bueno,
que el sexo por si solo es malo.
A los hombres se les ha enseñado a vivir el sexo
genital y a las mujeres se les ha enseñado a amar y
ternurizar. Tal como lo describe Helen Fischer (1999) "los
hombres creen que el sexo se limita a tener un orgasmo. Esa es la
diferencia… Las mujeres sitúan el coito dentro de
un contexto físico más amplio…
también insertan el sexo en un tejido emocional
demás completo. Erotismo y sensualidad parece interesar
más a las mujeres".
De esta forma hombres y mujeres parecen estar destinados
al desencuentro. Las mujeres demandan un hombre que
raramente tiene lo que necesitan, porque a los hombres no se les
educó para ternurizar y amorizar el sexo y sexo y
sexualizar el amor y la ternura. Lo que los buscan en las mujeres
no lo encuentran porque a las mujeres se les educó para
ternurizar y amar sin sexualizar.
En un estudio piloto con mujeres realizado con motivo
del XI Congreso Colombiano de Sexología y Educación
Sexual: "Erotismo, amor, ternura y sexualidad" (Romero, 2001)
el 25% de las encuestadas reportó que "su vida
erótica la siente monótona y le falta variedad ".
El 58.3% de las mujeres "Deseaba que su pareja fuese mas tierna,
afectuosa y cariñosa", el 66.7% "deseaba ser más
tocada y acariciada por su pareja". El 58.3% de estas mujeres
"les gustaría tener más contacto y caricias antes
de la penetración en las relaciones sexuales" y el 58.3%
"desearía que los contactos sexuales con su pareja fuesen
de mayor tiempo".
Se evidencia la necesidad de ir más allá
de la práctica genital. La mayor parte de estas mujeres
tienen orgasmos sin embargo manifiestan insatisfacción en
cuánto a la ternura, al contacto y al tacto. No cabe que
es un llamado a los hombres y a ellas como mujeres que invita a
reflexionar sobre la calidad de la
intimidad, las relaciones sexuales y a la relación de
pareja.
Cuerpo, emoción y conciencia son
componentes claves del erotismo, que erotismo no se consigue
aprendiendo posiciones gimnásticas, ingiriendo sustancias
extrañas o usando prendas circenses, para ella el erotismo
se consigue con una clara conciencia de la libertad para
el goce íntimo (Londoño 2000). Las parejas se
preocupan muchos de las técnicas
para tener relaciones sexuales y de lograr recetas mágicas
para mantener el encanto y el erotismo con base en unos principios que
sustentan la vida sexual, vivir apoyados en ellos
permitirían que cada quien y cada pareja fluya con su
energía sexual.
María Ladi Londoño (2000) afirma: "El
enriquecimiento erótico no se aprende en ningún
curso teórico, su desarrollo es
un espiral constante, podría decir que su aprendizaje dura
toda la vida si subsiste el interés y
es entendido como un proceso con la
pareja o con cada nueva pareja, dada la subjetividad del placer.
El erotismo florece con el afinamiento de la sensibilidad, con
las expresiones y variaciones del placer deseado,
siguiéndole el ritmo interno al deseo, a la
excitación y dejando correr la ternura"
En otras palabras vivir gozosamente el erotismo implica
dejarse llevar, ir con las danzas y ritmos naturales del
erotismo, la ternura y el amor. Estamos bien hechos para sentir y
vivenciar el erotismo, la ternura y el amor, pero las actitudes,
temores, creencias y estereotipos aprendidos en la sociedad
occidental respecto al amor y el erotismo dañan y
perturban el natural fluir de nuestra capacidad para erotizar,
ternurizar, amar y sexuar.
Los siguientes serían algunos de los principios
que se propondrían:
- Contactarse consigo mismo o misma, con el propio
erotismo, las emociones, los afectos y las
sensibilidades. - Ser auténticos y genuinos.
- Vivir el aquí y el ahora.
- Permitirse fluir con el deseo y las
emociones. - Sentirse libre para sentir e imaginar, sentirse
dueño o dueña de la posibilidad de imaginar,
fantasear y jugar con la imaginería. - La única norma a seguir es: "no existe una
norma a seguir y cumplir" (libertad). - Cada quien se encarga de sí.
- No intentar encargarse del otro, ni ser un objeto
complaciente que se olvida de sí. - Sentir el propio sentir y el sentir de la pareja,
sentir y experimentar lo que estimula, lo que agrada, excita y
es emocionante. - Sentir como el otro u otra siente con
uno. - Compartir y comunicar lo que se siente, comunicarlo a
la pareja, hacer saber los gustos, deseos, expectativas,
fantasías etc. - Actuar, hacer y encargarse.
- Activar e involucrar la mayor cantidad de sentidos
(Vista, olfato, tacto, oído,
gusto, piel, etc). - Experimentar, probar, ensayar y ampliar horizontes,
descubrir el potencial erótico, no auto limitarse ni
conformarse con lo obvio y rutinario.
Gran parte de los problemas de
pareja se originan en que no saben "hacer el amor", pero no en
sentido sexual, no saben ser constructores del amor. El amor se
construye con actos de amor, lograrlo implica tener conciencia de
ello. Una buena parte de las parejas no sabemos construir amor,
un amor que sea único y especial, somos analfabetas
emocionales, no sabemos hacer una amor que viva y cambie, que
crezca y no se anquilose, que brille, que libere y no consuma,
que de vida y no muerte, que
produzca placer y no dolor.
El modelo de
pareja y las concepciones posesivas de amor en que se basan los
emparejamientos conducen a que el matrimonio no sea
la mejor alternativa para la realización del amor y el
erotismo. El modelo no funciona, no llena las expectativas de las
personas y requiere de cambios. Se intenta construir pareja
basándose en supuestos idealistas y estereotipados del
amor y en una total ignorancia de lo que significa "hacer amor".
Tenemos el reto de construir alternativas de vida de pareja que
ofrezcan otras posibilidades a la pareja y al amor.
La mayor parte de las parejas parten de un sentimiento
llamado amor que les conduce formar pareja, esta suele
legalizarse con un matrimonio (para luego desparejarse), el paso
siguiente es formar una familia a pesar
del desemparejamiento que a la mayoría de las parejas
maritales les ocurre (Londoño 2000). A pesar del fracaso
del modelo tradicional marital las personas siguen intentando a
través del matrimonio tradicional realizar sus necesidades
de amor, erotismo e intimidad.
Por esta razón no creo posible tener relaciones
sexuales con "el mismo entusiasmo, durante toda la vida y con la
misma persona" si la pareja no ha elaborado y construido el amor
y la intimidad emocional necesaria para la vida
marital.
El amor es una construcción nunca acabada, que evoluciona
y cambia, que vitaliza y activa la creatividad
emocional y que transforma a los seres que lo
experimentan.
Una adolescente respondiendo sobre lo que para ella era
el enamoramiento dijo: "el amor es un sentimiento que te hace
poeta sin tú serlo y te convierte en un pájaro sin
que tengas alas". Reeditando su planteamiento que: "el amor es un
sentimiento que despierta el poeta que a todos llevamos por
dentro y que activa las alas que tenemos como pájaros del
amor, el erotismo y la ternura".
Y si soy más que una ilusión me amarás? y si mi azul envejece? y si anochece? vendrás? Y cesa la magia la inventarás? y si huye el misterio me lo dirás? y si…cualquier cosa pasa sonreirás? y si… cualquier otra cosa me abrazarás? | Deja que te cuente cuanto te amo y de que manera te extraño deja que cuente uno por uno los granos de arena que tengo en mi mano. | Frente a ti aquí donde puedas verme, voy a esconderme de espaldas al mundo me encontraré frente a ti?
Ángela Botero (Colombia) |
Nacemos con un inmenso potencial para amar, ternurizar,
erotizar y sexualizar, pero estos potenciales son sensibles al
aprendizaje y a la educación. No
será posible una sociedad sexualmente saludable si su
gente no sabe amar, ternurizar, erotizar y sexualizar, y si la
misma sociedad no institucionaliza una educación sexual que
desarrolle estas potencialidades. Hace falta una educación
sexual que forme para SER y que facilite el desarrollo de
este potencial. Vivimos en una pobreza y
analfabetismo
emocional relacionado con lo erótico, el amor y la
sexualidad. Hará falta apostar a la formación de
seres humanos que aprendan amar con inteligencia
emocional y a vivir realizantemente su erotismo.
Necesitamos una educación sexual intencionada y
sistemática para el erotismo, el amor y la sexualidad, que
forme seres humanos: Con capacidad de evolucionar, que disfruten
del SER, que sepan reconocer su cuerpo como fuente de placer, que
aprendan a sentir y expresar con el cuerpo que son, que
desarrollen inteligencia
para amar, erotizar, ternurizar y sexuar, capaces de intimar y
construir vínculos sanos, que sepan vivir el amorgasmo,
con capacidad para estar en contacto consigo mismo y con otros,
con capacidad de búsqueda, etc.
Cuando hayamos logrado este objetivo,
entonces seremos otra clase de sociedad.
Palabras para
acariciarte
Besar tu cuello
Sentir tu olor
Tener tus besos
Perderme en tu boca
Qué gusto!!!
Sentirme al norte y al sur
al este y al oeste
decidido a entrar en mi
y yo ansiosa de poseerte
y verte luego gozoso
indefenso y rendido al placer de mi cuerpo
No hay más glorias!!!
Joan
LEONARDO ROMERO S.
- Normalista Escuela
Normal de Barranquilla, Colombia - Psicólogo egresado de la Universidad
del Norte. - Codirector del CAC, Centro de Asesoría y
Consultoría. - Tallerista y Ponente en diferentes eventos
nacionales e internacionales. - Miembro Titular de la Sociedad Colombiana de
Sexología. - Miembro de la WAS, Word
Association for Sexology. - Autor del libro
"Elementos de Sexualidad y Educación
Sexual". - Docente invitado en diferentes Universidades de
Colombia, México y Ecuador. - Secretario de la Sociedad Colombiana de
Sexología (2001-2003) - Secretario de la FLASSES, Federación
Latinoamericana de Sociedades
de Sexología y Educación Sexual
(2002-2006)
Leonardo Romero Salazar
(Colombia)