Indice
1.
Cárcel y Filosofía.
2. Explicación del
Panóptico
3. La Controversia en Torno al
Panóptico
4. Bibliografía
Creer que el filósofo encarcelado es una
garantía de producción, o ingenio, es la
tentación más natural, después de conocer la
biografía
de Russell, Wittgenstein, Gramsci, y Sócrates.
En Kathie y el Hipopótamo, Vargas Llosa nos presenta a un
filósofo que si bien confiesa su ignorancia en
Filosofía, ve con orgullo; sus antecedentes penales.
Antecedentes, que no sólo sirven a su currículum,
sino también a sus propósitos amorosos, a su
prestigio, a su proyección intelectual, y a su mejora
económica.
Una beca para el quehacer filosófico, cuyo premio
único e indivisible, sea el pasar cinco años preso,
tendría al menos, una justificación en la Historia de la
Filosofía. Además de representar una verdadera
innovación en el campo de los
estímulos al trabajo intelectual.
El filósofo Jeremy Bentham (1748-1832), se encuentra
ligado a la cárcel de un modo diferente, sus aportes son
de carácter
arquitectónico, a mejor dicho, son la concreción de
sus ideas utilitaristas.
Después de analizar el modelo de
reclusión de Bentham, prevalece el ánimo de que la
teoría
puede ser llevada a la práctica, —en eso no
sólo confía nuestro autor, sino la Arquitectura
misma— .
Vivir de la cárcel, sin vivir en ella fue la labor de
Bentham, —recordemos, que le fue concedido un premio
económico por su invento—. Pero además, el
panóptico (toda visión) se muestra con dos
rostros; el castigo y la educación. Ya que
nuestro autor se pregunta por lo que es una prisión,
contestándose que "…es una mansión en que se
priva a ciertos individuos de la libertad de
que han abusado, con el fin de prevenir nuevos delitos, y
contener a los otros con el terror del ejemplo; y es
además una casa de corrección en que se debe tratar
de reformar las costumbres de las personas reclusas, para que
cuando vuelvan a la libertad no
sea esto una desgracia para la sociedad ni para
ellas mismas".
Los problemas que
nuestro filósofo busca resolver son: crear una
cárcel barata, donde un número pequeño de
personas, cuide de una comunidad grande.
Se reforme la conducta de los
hombres y se les liquide su inclinación delictiva. El
trato humano a los presos no implique un gasto excesivo. Los
prisioneros sirvan de ejemplo a los hombres libres, y les alejen
del delito.
Si atendiéramos a la idea de Giovani Sartori de que
el lenguaje es
un instrumento del conocer, tendríamos que remitirnos al
concepto de
inspección, pues sobre éste es que Bentham
construye su modelo
carcelario.
La inspección sirve a Bentham para configurar una mirada
universal y constante sobre el preso, así, "…es el
principio único para establecer el orden y para
conservarle; pero una inspección de un nuevo género,
que obra más sobre la imaginación que sobre
los sentidos,
y que pone a centenares de hombres en la dependencia de uno solo,
dando a este hombre solo
una especie de presencia universal en el recinto de su dominio".
Unida a la idea de una presencia universal que inspecciona y
domina, está la articulación de otras miradas;
menos importantes pero que ayudan a la conservación del
orden. Foucault ha
expresado esa complejidad de miradas al decir que "…no se puede
confiar en nadie cuando el poder
está organizado como una máquina que funciona
según engranajes complejos, en la que lo que es
determinante es el puesto de cada uno, no su naturaleza…En
el Panóptico, cada uno, según su puesto,
está vigilado por todos los demás, o al menos por
alguno de ellos; se está en presencia de un aparato de
desconfianza total y circulante porque carece de un punto
absoluto. La perfección de la vigilancia es una suma de
insidias…".
Que alguien reine como espíritu, y que tenga una mirada
penetrante a la que nada escapa, son los aspectos que permiten a
Foucault afirmar
que entre Bentham y Rousseau se da
cierta continuidad, ya que "…¿Cuál es, en efecto,
el sueño rousseuniano que ha animado a tantos
revolucionarios? : el de una sociedad
transparente, visible y legible a la vez en cada una de sus
partes; que no existan zonas oscuras, zonas ordenadas por los
privilegios del poder real o
por las prerrogativas de tal o tal cuerpo; que cada uno, desde el
lugar que ocupa, pueda ver el conjunto de la sociedad; que los
corazones se comuniquen unos con otros, que las miradas no
encuentren ya obstáculos, que la opinión reine, la
de cada uno sobre cada uno…" .
La transparencia del panóptico hace emerger a un nuevo
concepto, la
opinión. Misma que se contemplaba por Bentham, pero
siguiendo la función
del ejemplo. Esta nueva opinión se da no sólo con
la apertura del Panóptico a los visitantes; durante los
servicios
religiosos, sino que también con la ingerencia de los
particulares en la
administración del lugar. La opinión del
filósofo utilitarista se inclina por una administración privada de las
cárceles, porque ese tipo de administración cuidaría su inversión mediante mejores condiciones de
vida para los internos.
Los aportes de Bentham, si bien hacen referencia a una
concepción del poder, van más allá del hecho
arquitectónico o la planeación
del espacio, que son los aspectos que Foucault resalta en sus
estudios. Pues en el panóptico se refleja la
concepción humana del autor, misma que se había
plasmado ya en otras de sus obras, y que iguala al empresario de
la cárcel, con el preso, el hombre
libre, etc.
Hombre es la
de un ser que anhela la felicidad, tanto en el éxito
como en el fracaso, y en todos sus actos continuará
haciéndolo, mientras siga siendo hombre". Con esta
directriz ha proyectado su cárcel y la
administración.
Otro de los puntos importantes en el panóptico es la
aritmética de los placeres, —tan característica del utilitarismo— . y
que podemos hallarla en las tres reglas para el funcionamiento
del lugar, la "Regla de Dulzura", la "Regla de Severidad", y
"Regla de Economía". La primera
se refiere a una eliminación de daños corporales,
la segunda a una condición de vida inferior a la de los
hombres libres, y la última regla que prescribe un rechazo
a todo gasto extra en castigos o indulgencias.
Cada hombre deberá calcular el placer proporcionado por la
cárcel y por la libertad, y en base a eso, decidirá
la libertad. Pero Bentham deja de tomar en cuenta la capacidad de
respuesta del preso, su prototipo de hombre pasivo y calculador
de su conveniencia, se desmorona frente a los mecanismos de
resistencia que
crea la población del panóptico.
Sírvanos para una valoración más justa del
Panóptico de Bentham, su consideración siguiente:
"Es falsa y vana la filosofía que considera degradad su
dignidad por el uso…La práctica, en la medida en que la
atención y el esfuerzo están
considerados como necesarios para una debida ejecución, se
denomina arte. El
conocimiento, en la medida en que la atención y el esfuerzo están
considerados como necesarios para el logro, se denomina ciencia…".
De manera esquemática, el panóptico se
representa con la figura siguiente:
Donde el círculo más pequeño, puede
representar la torre de vigilancia y el círculo mayor, el
conjunto de celdas, donde habitan los presos.
A este sencillo esquema se puede agregar un cuadrado que rodee la
panóptico y lo separe de otros edificios civiles, pero
deberá conservar el carácter
de economía
en la vigilancia, es decir, sólo puede agregarse a ese
cuadro, un vigilante por esquina.
La descripción de Bentham es la siguiente:
"Una casa de penitenciaría…debería ser un
edificio circular, o por mejor decir, dos edificios encajados uno
en otro. Los cuartos de los presos formarían el edificio
de la circunferencia con seis altos [seis pisos o niveles], y
podemos figurarnos estos cuartos como unas celdillas abiertas por
la parte interior…Una torre ocupa el centro, y esta es la
habitación de los inspectores…la torre de
inspección está también rodeada de una
galería cubierta con una celosía transparente que
permite al inspector registrar todas las celdillas sin que le
vean, de manera que con una mirada ve la tercera parte de sus
presos…pero aunque esté ausente, la opinión de su
presencia es tan eficaz como su presencia misma…Entre la torre
y las celdillas debe haber un espacio vacío, o un pozo
circular, que quita a los presos todo medio de intentar algo
contra los inspectores…El todo de este edificio es como una
colmena, cuyas celdillas todas pueden verse desde un punto
central…"
A esta innovación arquitectónica en la
construcción de cárceles, Bentham
trató de adaptarle un mecanismo para hacer audible todo lo
que dijeran los presos, sólo que no pudo evitar que los
sonidos de los inspectores llegaran hasta los mismos presos.
En el mismo panóptico, se proyecta su edificación
con respecto a la salida y puesta del sol, para que se iluminen
las celdas y se facilite la mirada del inspector. También
se pone cuidado en le aspecto higiénico, pues hay
obligatoriedad en la limpieza personal y en la
limpieza de las celdas, la luz del ocaso o
el levante, —consideró Bentham—
contribuiría en la buena salud de los internos.
Foucault ve en el aspecto de la iluminación del panóptico, la
concreción de la
Ilustración en oposición a un oscurantismo. Es
pues, un enfrentamiento entre el calabozo frío, oscuro,
inhóspito, solitario, sucio, infectado, y las celdas
transparentes del nuevo sistema.
La influencia del concepto de inspección, y los mecanismos
de control-mirada
implícitos en el panóptico, se hace patente en la
construcción de hospitales y escuelas. Bajo
ese modelo fueron construidas cárceles en España,
México,
Estados
Unidos, y Francia. Para
Bentham hubo un reconocimiento pleno, cuando la Asamblea Nacional
Francesa lo nombró "Ciudadano Francés
Honorífico", y tomó a su cargo la
publicación de la Memoria del
Panóptico.
3. La Controversia en
Torno al
Panóptico
Entre las investigaciones
más recientes, patrocinadas por la Sociedad Internacional
de Estudios Utilitaristas, está la dedicada a documentar
la autoría del Panóptico.
La aportación de Simon Werret se refiere a que el
Panóptico fue ideado por Sir Samuel Bentham, hermano de
Jeremy, en otoño de 1786. cuando Samuel Bentham
trabajó para el
príncipe Grigori Potemkin, en un poblado de nombre
Krichev, provincia de Mogilev, en la Rusia de Catalina II.
Samuel Bentham era un ingeniero naval, muy notable en la
época, lo mismo que el
príncipe Potemkin. Los datos presentados
por Werret confirman el viaje de Jeremy a Rusia, tierra donde
escribió su obra Defensa de la Usura, pero donde
también conoció los proyectos de su
hermano.
El supuesto panóptico de Samuel, fue ideado como "Casa de
Inspección", adaptada a las necesidades industriales del
poblado ruso de Krichev. El fin de esta casa era el control de los
obreros, la supervisión, y la enseñanza. El encargo hecho Sir Samuel, era
para la aplicación industrial, y como campo de
acción, tendría un pueblo entero.
Los datos anteriores,
ubicarían al panóptico como un lugar proyectado en
función
al Absolutismo,
no en función de la Ilustración, ni con intervención de
la opinión
pública. Al menos la afirmación de Foucault
sobre la relación Bentham Rousseau, se
pondría en duda, lo mismo que el rastro seguido por el
propio Foucault, y que remite la idea del panóptico en un
parque zoológico.
El enigma histórico sobre el nacimiento del
panóptico ofrece un campo de investigación, lo mismo que su pertenencia
o no a los ideales ilustrados. Pero es innegable que esta
innovación en la "tecnología de poder",
tenga una vigencia importante.
Bentham, Jeremy
1979 El Panóptico, Ediciones de la Piqueta,
Madrid.
Bentham, Jeremy
1978 Escritos Económicos, Fondo de Cultura
Económica, México.
Foucault, Michel
1998 Vigilar y Castigar, SigloXXI Editores,
México.
Foucault, Michel
1986 El Nacimiento de la Clínica. SigloXXI Editores,
México.
Sartori, Giovani
1989 La Política. Lógica
y Método de
las Ciencias
Sociales. Fondo de Cultura
Económica, México.
Resumen
En este trabajo se expone de manera breve el invento
arquitectónico del filósofo inglés
Jeremy Bentham, pero tratando de apegarse a la concepción
original y alejándose de la mirada de M. Foucault. Esta
monografía hace incapié en los datos
que podrían atribuir el invento del "Panóptico", no
a Jeremy Bentham sino a su hermano Sir Samuel Bentham.
Autor:
Fernando Romero
23 años
Estudios: Décimo semestre de la licenciatura en
Filosofía
Fecha: Febrero de 2002