Psicología, influencia y cambio social en México

Introducción

En la república mexicana se realizarán este año elecciones en varios estados para elegir Gobernador, Presidentes municipales, Senadores y Diputados, se pueden hacer dos observaciones. En el contexto de campañas electorales que se observan podrían hacerse algunas observaciones:

1.- Aparentemente se presenta un escenario provisto no solamente por los medios masivos de comunicación, sino también por una participación numerosa en actos de campaña, en el cual una buena parte de la tendencia de voto predominante se dirigirá hacia los partidos que nos han gobernado y cuya gestión se caracterizó por una gran corrupción e impunidad, esto es, hacia el PRI y hacia el PAN a pesar de que ambas instituciones políticas se han caracterizado por robar (es la palabra exacta) los recursos del pueblo para desviarlos y enriquecer las fortunas personales de los políticos de ambos partidos.

No en balde las campañas de los candidatos de estos dos partidos se han caracterizado por la ausencia de propuestas de trabajo o planes de acción y en su lugar ha predominado la denostación de los contrarios.

Esto no sorprende, lo que llama la atención es que buena parte de la población parece que padece amnesia colectiva, que no tiene memoria histórica y que manifiesten simpatía por la delincuencia organizada que representan quienes han prostituido la política apoyando las campañas de quienes sin duda alguna seguirán robando los recursos públicos afectando la economía regional, el desarrollo social y el bienestar de millones de personas sin recibir castigo alguno. Podría decirse que ante la urgencia de cambios sociales que se presentan en el contexto de la crisis económica, política y social que afecta a nuestro país, un buen sector de la población presenta una fuerte resistencia al cambio.

Segundo: por otro lado, la crisis de credibilidad que enfrentan los partidos políticos contendientes y la institución encargada de supervisar las elecciones, esto es el Instituto Nacional Electoral, las instituciones, permite predecir un alto grado de abstencionismo en esta contienda electoral.

Tratando de encontrar una explicación a estos tipos de comportamiento social quisiera retomar algunas aportaciones de la Psicología social, sobre todo en su vertiente experimental que nos ayudarían a comprender la dinámica social que estamos observando.

Podría decirse que la Psicología social es el estudio de la interacción e interdependencia que existe entre el individuo y la sociedad. Para ello, la Psicología social utiliza diversos niveles de análisis: el análisis del individuo, el análisis del grupo, el análisis de las organizaciones y el análisis de las comunidades.

Por ello podría decirse que la Psicología social es el estudio de la influencia social, es decir, ayuda a entender cómo y porqué la conducta de un individuo afecta a otro, como el individuo influye a los grupos, organizaciones y comunidades a las que pertenece y como la sociedad a través de los grupos, organizaciones y comunidades que la conforman influye al individuo.

La influencia de los grupos sociales

Un punto de partida para entender la dinámica social es el análisis psicosocial de los grupos sociales. ¿Por qué es importante la investigación científica y la intervención en los grupos sociales de nuestra sociedad?

Una primera respuesta puede ser en el sentido de que los grupos sociales se presentan como una parte importante en la vida de todo individuo ya que determinan el desarrollo de su personalidad psicosocial que podemos definirla como una determinada y única forma de pensar, sentir y actuar que nos hace diferentes a los demás y que es el resultado de la interacción e interinfluencia que hemos mantenido con las figuras significativas de los distintos grupos sociales a los que pertenecemos y hemos pertenecido.

La vida cotidiana de la gente común que somos todos está envuelta en actividades que realizamos junto a y compartidas con otras personas. Es francamente escasa la conducta social que permanece inmune a la influencia social. Por eso puede afirmarse que todo lo que acontece cuando las personas pasan a formar parte de un grupo cabe dentro de lo que entendemos como influencia social. El grupo es entonces el escenario primordial de la influencia social.

El mito de la existencia del ermitaño que vive solo sin contacto social, es tan solo eso, un mito, hoy en día es más evidente que somos lo que somos gracias a la existencia de los demás. No solo existe un proceso de interacción social, sino que además se presenta una interdependencia con las personas que forman parte de los grupos sociales a los que pertenecemos, tales como el grupo familiar, el grupo escolar, el grupo laboral, etc.

Esta interacción e interdependencia se da a lo largo del proceso de socialización que moldea nuestra personalidad psicosocial. Desde que nacemos hasta que fallecemos estamos inmersos en un permanente proceso de aprendizaje informal en el cual adquirimos actitudes, valores y pautas de comportamiento a través de las figuras significativas de los grupos a los que pertenecemos a quienes retomamos como modelos.

Las aportaciones de la Psicología social nos han dejado claro que el comportamiento de un individuo solo logra tener sentido si lo ubicamos más allá de la esfera individual, es decir, es decir, si lo ubicamos en la realidad grupal y social en que está inmerso el individuo.

Podría reconocerse el grado de esta influencia que tienen los grupos en nuestra vida personal si el lector hace un pequeño ejercicio. Pensemos por un momento en los grupos sociales a los que pertenecemos y hagamos una lista de todos ellos (por ejemplo grupo familiar, grupo escolar, grupo laboral, grupo religioso, grupo deportivo, grupo de amigos, grupo político, etc.).

Si se hace este ejercicio con seriedad, es posible que se sorprenda el lector por su pertenencia simultánea a diferentes tipos de grupos. La pertenencia a un grupo implica el desempeño de un rol determinado (papá, hijo, hermano, amigo, empleado, estudiante, etc.), como pertenecemos a diferentes grupos simultáneamente tenemos una gran cantidad de roles sobre nuestras espaldas.

Este llega a representar un problema en la medida de que no cumplimos las expectativas que los demás tienen sobre nosotros en los distintos grupos a los que pertenecemos. En forma inevitable descuidamos el desempeño de alguno de los roles y afectamos el funcionamiento de ese grupo al que descuidamos en su atención.

El planteamiento de la intervención en grupos sociales para la implementación de cambios individuales, organizacionales y sociales tiene un fuerte fundamento teórico ya que está apoyado en los descubrimientos de diversa investigaciones científicas.

En la investigación científica sobre los grupos sociales han predominado en gran medida intereses particulares en la medida de que los financiamientos para investigaciones de este tipo provienen de grandes empresas que buscan como aumentar la eficiencia y la productividad en las organizaciones.

Sin embargo este fundamento teórico puede ser aplicado con diversos fines tal como vemos en los distintos grupos de terapia que existen hoy en día, alcohólicos anónimos, adictos anónimos, sexoadictos anónimos, etc.

Pero ya es hora de ampliar el horizonte de la investigación e intervención grupal de tal forma que atendamos con estrategias de este tipo diversos problemas que enfrentamos en nuestra sociedad contemporánea tales como el crecimiento de los grupos de pandillas entre los jóvenes, su incorporación a grupos de delincuencia organizada y más allá de nuestras fronteras podría atenderse también el fenómeno del terrorismo que se observa en otros países.

El estudio de la conformidad de Solomon Asch

En el campo de la Psicología Social se han realizado diversos experimentos que demostraron sin lugar a dudas que existe un proceso de influencia social en las relaciones interpersonales que es importante retomar y socializar estos descubrimientos para entender el comportamiento individual, grupal y colectivo que presenciamos en pleno siglo XXI.

Los estudios realizados por Solomon Asch entre 1951 y 1955 han aportado relevantes datos sobre el comportamiento de los seres humanos ante la presión social. Estos estudios, hoy por hoy, son considerados clásicos en Psicología Social. El diseño experimental consistía básicamente en que Asch pedía a los participantes que respondiesen a unos problemas de percepción. Concretamente solicitaba de los sujetos que indicase en un conjunto de tres líneas de diferente tamaño cual de ellas se asemejaba más a una línea estándar o de prueba (la de la izquierda en el dibujo).

Esta sencilla tarea no debería resultar difícil para una persona de capacidades intelectuales medias, sin embargo los sujetos experimentales no siempre decían la respuesta correcta. Realmente el experimento no consistía en una prueba de percepción sino que trataba de ver como la presión de grupo fuerza a variar los juicios. Las pruebas del experimento se realizaban a un grupo de unas seis u ocho personas, de las cuales solo uno era verdaderamente un sujeto experimental ya que los demás (sin saberlo el sujeto experimental) eran cómplices de investigador.

Durante algunos de los ensayos de las pruebas (ensayos críticos) los cómplices daban respuestas claramente erróneas, es decir, elegían de forma unánime una línea equivocada como pareja de la línea de prueba (por ejemplo, en el dibujo la línea a en vez de la b, que sería la correcta). Además emitían sus respuestas antes de que el verdadero sujeto experimental respondiera.

En este contexto muchos de los sujetos experimentales optaron por decir lo mismo que los cómplices del experimentador, es decir, optaron por las respuestas falsas, de facto, estuvieron de acuerdo con la respuesta equivocada el 37% de las veces. Por el contrario, solo el 5% de sujetos que respondieron a las mismas preguntas sin cómplices (es decir, sin presión de grupo) cometieron errores. En diferentes estudios el 76% de los sujetos apoyaron las respuestas falsas del grupo al menos una vez, esto es, optaron por la conformidad.

Otro dato interesante que se desprenden de estos trabajos es que cerca de un 25% de los sujetos no cedieron nunca a la presión del grupo. También hemos de señalar que hubo sujetos que siguieron al grupo en casi todas sus respuestas.

En otra serie de experimentos Asch hacía intervenir a un sujeto que rompía la unanimidad de juicio existente y podía emitir: o bien la respuesta correcta antes de que emitiese la suya el auténtico participante, o elegía una respuesta entre la que daba el grupo y la correcta o en tercer lugar daba una respuesta más errónea que la de la mayoría. En los dos últimos casos este individuo rompía con la unanimidad del grupo pero seguía en desacuerdo con el sujeto experimental.

Los resultados obtenidos por Asch muestran que en estas tres condiciones la conformidad se reduce. De manera sorprendente, la reducción de la conformidad era mayor cuando el cómplice que discrepaba escogía una respuesta peor que la de la mayoría. Todo esto sugiere que la unanimidad del grupo es crucial. Es más fácil resistir a la presión de grupo cuando en él no existe unanimidad.

En estudios posteriores se constató que cuando los sujetos emitían sus juicios no en voz alta sino escribiéndolos en un papel, la conformidad se reducía drásticamente. Este resultado señala la relevancia de distinguir entre conformidad pública (hacer o decir lo que hacen o dicen los otros) y la aceptación privada (sentir realmente como los otros). En muchas situaciones de nuestra vida cotidiana seguimos normas sociales y nos conformamos (sucumbimos a la presión de grupo), pero no por ello mudamos nuestras opiniones personales (esto es, no hay aceptación privada).

Este experimento demostró que en el proceso de interinfluencia entre el individuo y la sociedad representada por los diferentes grupos que la conforman se corre el peligro de caer en una obediencia y sumisión irracional con tal de mantener la pertenencia al grupo.

Solomon Asch nos demostró como el grupo social puede ser utilizado como un instrumento de opresión para que el individuo acepte situaciones con las que no está de acuerdo, con tal de ser aceptado socialmente. La influencia de la mayoría termina por hacer que el individuo acepte conformarse con lo que inicialmente no estaba de acuerdo. El experimento sobre la conformidad demostró también que existen sujetos que pueden mantener su independencia aun cuando ésta vaya en contra del consenso de la mayoría. Pero estos individuos son aquellos que confían realmente en sí mismos, que tienen una gran seguridad en sus ideas y en sus planteamientos. Lamentablemente el proceso de socialización al que estamos sometidos en el sistema capitalista, lo primero que hace es acabar con la independencia y fomentar la obediencia y la sumisión.

De ahí que amplias capas de la población prefieran seguir aceptando ser robados por delincuentes disfrazados de políticos, porque "la mayoría parece aceptarlos" y por miedo a ser objeto de rechazo social.

"Sumisión e independencia: Cuando los individuos anulan su capacidad de pensar y juzgar a su modo, cuando dejan de relacionarse independientemente con las cosas y las personas, cuando renuncian a su iniciativa y la delegan en otros, alteran el proceso social e introducen en él una arbitrariedad radical.

El acto de independencia es productivo desde el punto de vista social, puesto que constituye la única forma de corregir errores y de guiar el proceso social de acuerdo con las exigencias experimentadas.Por otra parte, el acto de la sumisión es antisocial, porque siembra el error y la confusión. (Asch, 1962)."

Experimento de Milgram. Estudio del Comportamiento de la Obediencia a la Autoridad

El experimento de Milgram Stanley Milgramfue una serie de experimentos de psicología social llevada a cabo por Stanley Milgram, psicólogo en la Universidad de Yale, y descrita en un artículo publicado en 1963 en la revista Journal of Abnormaland Social Psychology bajo el título BehavioralStudy of Obedience (Estudio del comportamiento de la obediencia) y resumida en 1974 en su libro Obedience to authority. El fin de la prueba era medir la disposición de un participante para obedecer las órdenes de una autoridad aun cuando éstas pudieran entrar en conflicto con su conciencia personal.

http://news.psykia.com/content/experimento-de-milgram-estudio-del-comportamiento-de-la-obediencia-la-autoridad

Los experimentos comenzaron en julio de 1961, tres meses después de que Adolf Eichmann fuera juzgado y sentenciado a muerte en Jerusalén por crímenes contra la humanidad durante el régimen nazi en Alemania. Milgram ideó estos experimentos para responder a la pregunta: ¿Podría ser que Eichmann y su millón de cómplices en el Holocausto sólo estuvieran siguiendo órdenes? ¿Podríamos llamarlos a todos cómplices?

Milgram resumiría el experimento en su artículo "Los peligros de la obediencia" en 1974 escribiendo:

Los aspectos legales y filosóficos de la obediencia son de enorme importancia, pero dicen muy poco sobre cómo la mayoría de la gente se comporta en situaciones concretas. Monté un simple experimento en la Universidad de Yale para probar cuánto dolor infligiría un ciudadano corriente a otra persona simplemente porque se lo pedían para un experimento científico. La férrea autoridad se impuso a los fuertes imperativos morales de los sujetos (participantes) de lastimar a otros y, con los gritos de las víctimas sonando en los oídos de los sujetos (participantes), la autoridad subyugaba con mayor frecuencia. La extrema buena voluntad de los adultos de aceptar casi cualquier requerimiento ordenado por la autoridad constituye el principal descubrimiento del estudio.

Antes de llevar a cabo el experimento, el equipo de Milgram estimó cuáles podían ser los resultados en función de encuestas hechas a estudiantes, adultos de clase media y psicólogos. Consideraron que el promedio de descarga se situaría en 130 voltios con una obediencia al investigador del 0%. Todos ellos creyeron unánimemente que solamente algunos sádicos aplicarían el voltaje máximo.

El desconcierto fue grande cuando se comprobó que el 65% de los sujetos que participaron como "maestros" en el experimento administraron el voltaje límite de 450 a sus "alumnos", aunque a muchos el hacerlo les colocase en una situación absolutamente incómoda. Ningún participante paró en el nivel de 300 voltios, límite en el que el alumno dejaba de dar señales de vida. Otros psicólogos de todo el mundo llevaron a cabo variantes de la prueba con resultados similares, a veces con diversas variaciones en el experimento.

En 1999, Thomas Blass, profesor de la universidad de Maryland publicó un análisis de todos los experimentos de este tipo realizados hasta entonces y concluyó que el porcentaje de participantes que aplicaban voltajes notables se situaba entre el 61% y el 66% sin importar el año de realización ni la localización de los estudios

El profesor Milgram elaboró dos teorías que explicaban sus resultados:

• La primera es la teoría del conformismo, basada en el trabajo de Solomon Asch, que describe la relación fundamental entre el grupo de referencia y la persona individual. Un sujeto que no tiene la habilidad ni el conocimiento para tomar decisiones, particularmente en una crisis,a lo cual llevará la toma de decisiones al grupo y su jerarquía. El grupo es el modelo de comportamiento de la persona.

• La segunda es la teoría de la cosificación (agenticstate), donde, según Milgram, la esencia de la obediencia consiste en el hecho de que una persona se mira a sí misma como un instrumento que realiza los deseos de otra persona y por lo tanto no se considera a sí mismo responsable de sus actos. Una vez que esta transformación de la percepción personal ha ocurrido en el individuo, todas las características esenciales de la obediencia ocurren. Este es el fundamento del respeto militar a la autoridad: los soldados seguirán, obedecerán y ejecutarán órdenes e instrucciones dictadas por los superiores, con el entendimiento de que la responsabilidad de sus actos recae en el mando de sus superiores jerárquicos.

El experimento de Solomon Ash sobre la influencia social nos mostró una cara de la moneda que representa el fenómeno de los grupos, la imposición de los puntos de vista de la mayoría sobre una minoría que prefiere aceptar lo absurdo y fuera de sentido común con tal de tener aceptación social y no sufrir rechazo de los demás.

El modelo de cambio social de Kurt Lewin

El experimento de Milgram permitió analizar el fenómeno de la obediencia hacia una figura de autoridad se imponía determinando el comportamiento de un individuo más allá de los límites que él mismos a solas podría imponerse.

Pero Kurt Lewin nos mostró la otra faceta del grupo social, su potencial para lograr cambios individuales y sociales. El argumento de Lewin es precisamente el cambio social, la principal aportación de Kurt Lewin no es la mención de la norma como un patrón en el que convergen las percepciones de las personas como planteó Sherif, sino que más bien la norma es concebida como instrumento de cambio social. Es decir, la posibilidad de utilizar el grupo como un campo de fuerzas que se ponen en marcha para producir un cambio en las personas. Con esta aportación Lewin nos hereda una de las tradiciones experimentales más sólidas en el campo de la Psicología social.

¿Cómo funciona el cambio social desde la perspectiva Lewiniana?

Para responder a esta pregunta necesito mencionar algunos antecedentes por lo que pido paciencia al lector que ha llegado hasta este punto.

Después de la segunda guerra mundial surgió la necesidad de cambiar los hábitos alimenticios en la población norteamericana para paliar los efectos económicos y de reducción de la producción de alimentos diversos. Lewin se planteó la siguiente pregunta ¿cuál estrategia persuasiva sería más efectiva para lograr que el público consumidor norteamericano modificase sus hábitos alimenticios y aceptase incluir en su dieta productos alimenticios que no gozaban de aceptación popular?

En colaboración con la Secretaria Ejecutiva del Comité de Hábitos Alimenticios del Consejo Nacional de investigación, una mujer que posteriormente alcanzaría reconocimientos por su labor en el campo de la Antropología: Margaret Mead, diseñaron una estrategia para incrementar el consumo de productos como riñones, mollejas y corazones de vaca.

El procedimiento experimental diseñado consistió en formar seis grupos de amas de casa, grupo social elegido partiendo de la premisa de que los cambios de las actitudes y deseos de los niños y los maridos solamente afectan a los hábitos alimenticios reales en la medida que afectan al ama de casa.

Tres de los grupos asistieron a conferencias cuyo contenido realzaba el valor vitamínico y accesibilidad económica de estos productos alimenticios.

Los otros tres grupos se reunieron para hablar y discutir sobre el mismo tema bajo la supervisión de Alex Babelas, quien posteriormente destacaría en el campo de la Psicología de grupos. Durante un promedio de 45 minutos las mujeres debatían libremente sobre las inquietudes que les generaba incluir estos alimentos en su dieta, las ventajas e inconvenientes de consumirlos, etc. Antes de terminar la reunión el dinamizador del grupo pedía a las participantes que dijeran quienes de ellas estaban dispuestas a probar estos nuevos platillos y les pedía que lo dijeran públicamente.

Después de algún tiempo de las conferencias y reuniones grupales se midieron los resultados que demostraron que tan sólo un 3% de las amas de casa que asistieron a las conferencias dijeron haber comprado, cocinado y servido alguno de estos 3 productos, mientras que en el caso del grupo de amas de casa que participaron en reuniones de discusión el porcentaje se elevó a 32%.

Lewin explica esta diferencia comparando el grado de implicación de las amas de casa en la discusión grupal y en la conferencia "…la conferencia es un procedimiento en el que el auditorio está fundamentalmente pasivo. El debate (grupal), si se lleva correctamente, puede suscitar un grado mucho mayor de implicación personal.

Con ello se establece una relación entre debate, implicación y acción, con lo cual Lewin concluye que la implicación (participación) de las personas en las decisiones que se toman dentro del grupo facilita un comportamiento individual acorde con ellas y allana las diferencias individuales.

La acción dice Lewin, no se manifiesta como una consecuencia derivada de la motivación, sino como una consecuencia real de la decisión, para dejarlo más claro: entre motivación y acción es necesario introducir la decisión. "Un individuo decidido es algo más que un individuo motivado y lo que hace la discusión grupal es eliminar las indecisiones y allanar el camino hacia la tensión".

Queda claro que las conferencias no suelen conducir a las decisiones, la discusión grupal no da respuesta a todas las inquietudes, pero permite confrontar opiniones, compartir experiencias, sopesar argumentos, el individuo juega un papel activo, que sirve no solamente para contrastar sus opiniones sino para comprometer públicamente sus acciones.

El movimiento antiinstitucionalista

Otras aportaciones importantes d considerar fue el surgimiento de cuatro grandes movimientos teóricos que revolucionaron la teoría y la práctica de las ciencias sociales, me refiero a los siguientes:

1.- El movimiento del potencial humano que retomó las aportaciones de Elton Mayo para ubicar en el mismo nivel de importancia la satisfacción de las necesidades humanas en las organizaciones del trabajo y el logro de las metas principales de la organización (aumento de la productividad), poniendo énfasis en la necesidad de tomar en cuenta a las personas estimulando la participación de las mismas.

2.- La dinámica de grupos de Kurt Lewin que permitió comprender como funciona un grupo y que dio lugar a los grupos de entrenamiento en sensibilización (Grupos T), mismos que más adelante permitieron el surgimiento del Desarrollo Organizacional y de la Investigación-Acción, los cuales tienen su fundamento en el énfasis de la participación grupal auténtica (libre expresión de ideas y de sentimientos), como forma de lograr cambios individuales, grupales y en el conjunto de la organización que les permitirán alcanzar el mejoramiento continuo de sus procesos.

3.- El movimiento del Análisis institucional encabezado por René Lourau de Francia, que retomaron el modelo del Grupo T para implementar una Pedagogía no directiva que propicia un análisis colectivo de la situación grupal que exista, ya sea dentro de una escuela, organización laboral, política, etc.

La regla que el monitor recordaba sin cesar era la siguiente: "Nosotros estamos aquí solamente para analizar lo que pasa entre nosotros aquí y ahora".

Básicamente eran grupos que se autoanalizaban ellos mismos permanentemente con un fin didáctico.

El movimiento institucionalista se caracteriza por el desarrollo del análisis institucional generalizado y de las prácticas basadas en el uso de los analizadores construidos: psicoterapia, pedagogía y socioanálisis.

El socioanálisis es el trabajo de intervención en los grupos y las organizaciones sociales dentro de una relación de consulta. El análisis institucional busca liberar el habla social, dar voz a los integrantes de una institución para ser tomados en cuenta.

Al respecto puedo comentar que en la década de los setentas, cuando estudiaba Psicología en la Universidad Veracruzana, al ingresar al séptimo semestre en el área de Psicología social, después de seis semestres de polémicas con maestros conductistas, los psicólogos sociales que tuve como maestros implementaron la técnica del socioanálisis con el colectivo de estudiantes, reuniéndonos en asambleas grupales a alumnos de séptimo, y noveno semestre, durante las cuales revisamos todas las corrientes de la Psicología y al final decidimos romper con el conductismo por considerarlo un instrumento de penetración ideológico que buscaba fortalecer el control social y adoptamos (aquí va una palabra que asusta a más de un psicólogo conductual) una postura ecléctica en la enseñanza y aprendizaje de la Psicología.

Esta decisión nos provocó como resultado el que se nos prohibiera el acceso a la biblioteca de la Facultad, la negativa de apoyo para la realización de prácticas (nuestras prácticas implicaban pasar uno o dos meses conviviendo con comunidades indígenas) y el retraso en el pago de nuestros maestros extranjeros.

4.- El movimiento de la Antipsiquiatría encabezado por Franco Basaglia, David Cooper, Ronald Laing, Thomas Szasz, etc. El Psiquiatra Franco Basaglia (curiosamente su esposa se llamaba Franca Basaglia), al tomar la dirección del Hospital Psiquiátrico en Trieste, Italia, permitió la salida de los pacientes psiquiátricos que estaban encerrados en las instalaciones del hospital, los mandó a sus casas a pernoctar y les pidió que asistiera durante el día al nosocomio para participar en diversas actividades de psicoterapia grupal.

De ahí surgió el hospital de día que hoy esta institucionalizado en varios países. En su libro La Institución negada, Basaglia define a los pacientes psiquiátricos como parte de los excluídos, no sólo cuestiona el encierro de los mismos como actividad terapéutica en un claro acto de subversión institucional (Basaglia afirma que el encierro de los "locos" solo responde a la necesidad de proteger a los "sanos" de la locura de los "enfermos), sino que cuestiona el concepto de enfermedad mental o locura, en el contexto de una sociedad que presenta una sociopatología de la normalidad.

Otros representantes del movimiento de la antipsiquiatría fueron aparte de Franco Basaglia, David Cooper, Ronald Laing, Thomas Szasz, etc.

Los psicoterapeutas de los hospitales psiquiátricos vieron que con la psicoterapia individual no tenían buenos resultados, por lo que retomando los recientes descubrimientos de la Psicología sobre la importancia de los grupos sociales procedieron a dar un importante cambio cualitativo en el tratamiento de los pacientes psiquiátricos, de la psicoterapia individual a la psicoterapia grupal, con la que se obtuvieron excelentes resultados, precisamente por el fenómeno que décadas más tarde se estudiaría como la influencia social.

Esto es lo que descubrieron a finales de la segunda mitad del siglo pasado los psiquiatras que atendían pacientes mediante la psicoterapia individual que consideraron insuficiente y al tener conocimiento de la importancia del vínculo informal en los grupos sociales descubierta por Elton Mayo y sobre todo de las aportaciones de Kurt Lewin sobre la dinámica de grupos y de Jackob Moreno del Psicodrama y el Sociodrama, optaron por reunir en pequeños grupos a los pacientes con los mismos síntomas para generar una catarsis grupal, dando lugar a la Psicoterapia grupal, que posteriormente dio lugar a la Psicoterapia institucional al poner en el centro de la atención el funcionamiento de los hospitales psiquiátricos.

Nos dice en su texto Basaglia: "Las instituciones de la sociedad, son instituciones fundadas en un reparto de papeles, la división del trabajo: Amo-esclavo, Maestro-alumno, Psiquiatra-paciente, dirigente dirigido.

La característica principal de estas instituciones es una separación entre los que poseen el poder y los que no lo poseen…esta subdivisión de papeles traduce una relación de opresión y de violencia entre poder y no poder, relación que se transforma en exclusión del segundo por el primero…La violencia y la exclusión están en la base de todas las relaciones susceptibles de instaurarse en nuestra sociedad".

La Psicología social nos dice entonces que para estudiar al individuo antes de ver hacia adentro, hacia lo que piensa, hacia lo que siente, necesitamos primeramente ver hacia afuera para comprender el interior del individuo. Es decir, necesitamos ubicar el contexto social a través de su pertenencia a diferentes grupos para comprender la influencia social que determina el comportamiento individual.

Situación actual en Latinoamérica

A pesar de que el inicio de este nuevo milenio ha sido señalado como el siglo de los movimientos colectivos debido a la emergencia de varios movimientos de protesta y liberación social que se han presentado en varias partes del mundo, existe una amplia mayoría social que no se ha sumado a las protestas y acciones de liberación social.

No ha sido suficiente la participación de miles de personas en marchas, manifestaciones y actos de protestas para generar un cambio social. La oligarquía en el poder no sólo mantiene una tendencia autoritaria en la conducción de la política y de la economía, de diversos países en Latinoamérica, sino que ha dado muestras de avanzar en un tránsito de un autoritarismo político a un totalitarismo de Estado.

http://www.monografias.com/trabajos101/sociedad-contemporanea-transito-del-autoritarismo-al-totalitarismo/sociedad-contemporanea-transito-del-autoritarismo-al-totalitarismo

A pesar de multitudinarias manifestaciones en contra, se han implementado reformas a la constitución de varios países latinoamericanos, actuando la oligarquía política en complicidad con la oligarquía económica, que han dado como resultado un conjunto de agresiones a la clase trabajadora y pueblo en general que consisten básicamente en la eliminación de derechos laborales y sociales, la eliminación de la estabilidad en el empleo, la privatización de diversos servicios, entrega de los recursos naturales al capital privado nacional y extranjero, etc.

Todo esto en el marco de la globalización, a nombre de "favorecer el mercado y estimular la inversión privada y extranjera", que en última instancia es el apoyo económico y político a las grandes empresas transnacionales.

http://www.monografias.com/trabajos102/dios-mercado-religion-del-siglo-xxi/dios-mercado-religion-del-siglo-xxi

Todas estas acciones han dejado al descubierto y profundizado la enorme corrupción que caracteriza a la élite gobernante de varios países latinoamericanos, al grado tal de que una gran mayoría de ciudadanos latinoamericanos asocia de una manera espontánea la política con la corrupción.

Millones de ciudadanos latinoamericanos aceptan que hay corrupción en el manejo del presupuesto público por parte de sus gobernantes, pero por increíble que parezca, no hacen nada por cambiar esta situación, aún sabiendo que por los actos de corrupción no hay inversión en obra pública en las ciudades, que en las calles hay una mala pavimentación, que nos hay infraestructura vial, etc.

Solo un reducido porcentaje de ciudadanos se atreve a alzar su voz en protesta por esta situación y muchos menos son los que se atreven a salir a las calles a manifestarse exigiendo cárcel a los políticos ladrones, que devuelvan lo que se han robado.

La mayoría de la población parece aceptar como "algo normal" la existencia de unos cuantos individuos que nadan en sus riquezas personales producto de actos de corrupción rodeados de un ambiente de impunidad, mientras millones de ciudadanos sufren los efectos de la pobreza extrema, alza en precios de todo tipo de productos, bajos salarios, topes salariales, etc.

/trabajos101/sociopatologia-sociedad-contemporanea/sociopatologia-sociedad-contemporanea

A pesar del contexto descrito anteriormente, puede observarse que en períodos electorales buena parte de la población parece dispuesta e emitir su voto en favor de los partidos políticos y candidatos que los han estado robando descaradamente, a sabiendas de que lo volverán a hacer. Esto es lo que parece que en algunos Estados de la república mexicana donde se realizarán elecciones este próximo mes de junio.

Diversos analistas económicos y financieros han advertido de una inminente devaluación del peso mexicano en el corto plazo, lo único que detiene a las autoridades gubernamentales a proceder en tal sentido es su deseo de esperar a que pasen las elecciones para dejar que la economía mexicana se desplome y afecte a todos los mexicanos, incluidos aquellos que piensan votar por el PRI y por el PAN, partidos responsables de la crisis en la que se encuentra nuestro país.

¿Qué es lo que posibilita que prevalezca esta situación? Los estudios experimentales sobre la conformidad y la obediencia pueden servir de punto de partida para explicar las causas de la situación que prevalece en nuestra sociedad contemporánea.

El control social de la población

La oligarquía en el poder tiende a realizar diversas acciones para mantener el control social y seguir beneficiándose de la desigual distribución de los recursos económicos y naturales de los países que gobierna.

En nuestra sociedad capitalista coexisten en su interior diversas fuerzas, unas que tienden a generar un cambio social en el sentido de modificar el estado actual que prevalece otras fuerzas que pugnan por mantener el status quo y continuar con el proceso de reproducción de las relaciones sociales de producción.

Para entender los mecanismos de control social necesitamos utilizar el concepto de ideología y el proceso de ideologización.

Mantener el control social de millones de personas en situación de crisis social sería imposible si no se diera el control ideológico de las mismas. Remito al lector a la lectura del siguiente artículo para no repetir parte de su contenido.

/trabajos102/psicologia-ideologia-y-cambio-social/psicologia-ideologia-y-cambio-social

Los medios masivos aliados con políticos corruptos han creado una criminalización de la protesta social.

El papel de los medios masivos de difusión en el proceso de sujetación ideológica contemporánea no debe ser menospreciado por quienes ejercemos la crítica social y participamos en acciones de cambio social.

Asociado esta labor con el fenómeno de la conformidad social, buena parte de la población percibe a quien protesta como el desviado de la norma, como el anormal que no se comporta como la mayoría de la población y tiende a ver a quien protesta como "los otros", que son contrarios a "nosotros" y por la necesidad de pertenencia y aceptación social tiende a aceptar la conformidad social que promueven las instituciones autoridades corruptas.

Los seres humanos tenemos diversos tipos de necesidades psicológicas, una de ellas es la necesidad de pertenencia y de aceptación social, para satisfacer este tipo de necesidades muchas personas sacrifican sus pensamientos, sentimientos e ideales con tal de no experimentar el rechazo social.

Nuestra pertenencia a diferentes grupos, organizaciones e instituciones nos hace tomar parte del baño ideológico que se da en los mismos. Con este enfoque podríamos entender el comportamiento de los individuos que pertenecen a grupos que promueven el terrorismo, la supremacía blanca, la delincuencia organizada o los grupos de pandillas juveniles.

El individuo singular cede en su ideología "individual", en su percepción personal, en sus motivaciones e inclusive en sus valores, ante la presión social. Esto se profundiza si existe dentro de la estructura social una figura de autoridad que lo impele no solo a sumarse al grupo mayoritario, sino también a la realización de las acciones que los demás estén llevando a cabo, aun cuando en su interior no esté totalmente de acuerdo.

Me parece importante retomar literalmente la siguiente cita:

"La virtud de la obediencia: La obediencia es un elemento básico como el que más en la estructura de la vida social. La obediencia, como un determinante de la conducta, es algo de importancia particular para nuestra época. Ha podido confirmarse con razones bien probadas que entre los años 1933 y 1945 fueron sistemáticamente sacrificados bajo órdenes millones de personas inocentes. Se construyeron cámaras de gas dentro de los campos de muerte donde diariamente se producían cadáveres con la misma precisión y eficacia que en cualquier fábrica de herramientas. Esa política tan bárbara pudo tener cabida en la cabeza de una persona, pero no pudo haber sido llevada a cabo a escala tan masiva sin la participación de un gran contingente de gente obediente. La obediencia es el mecanismo psicológico que hace de eslabón entre el individuo y los fines políticos. Es la argamasa que une a las personas con los sistemas de autoridad. Tanto hechos de la historia más reciente como la experiencia de la vida de cada día, nos hacen pensar que para no pocas personas la obediencia puede ser una tendencia comportamental profundamente enraizada, más aún, un impulso poderosísimo que pasa por encima de las consideraciones éticas, de la simpatía y de la conducta moral. El exterminio de los judíos europeos por parte de los nazis constituye el ejemplo extremo de acciones detestables, inmorales, llevadas a cabo por miles de personas en nombre de la obediencia (Milgram, 1980).

¿Cómo se logra obtener el control social de millones de personas? La primera respuesta que podemos encontrar a esta pregunta es a través del desarrollo de una ideología individualista, competitiva, que hace pensar a millones de personas que son libres por el hecho de elegir determinada marca de ropa, de auto, o nivel de consumo.

Sin embargo los estudios en Psicología social experimental que demuestran cómo lo social influye en el comportamiento individual al grado de determinarlo, entra en aparente contradicción con la percepción que se tiene en la mente colectiva de que el individuo tiene un grado de independencia mucho mayor, a tal grado que se habla de libre albedrío y de que vivimos en "un país libre".

Esto es debido a que las diferentes instancias que participan en el proceso de socialización que moldea nuestra personalidad psicosocial contribuyen también a generar un proceso de ideologización que pretende y logra internalizar la ideología de la clase dominante en la mente de todo individuo, de tal forma que éste presente "comportamientos socialmente aceptables".

De esta manera podemos observar que la familia, la escuela, la Iglesia, el mundo del trabajo, los medios masivos de difusión, intentan (y en la mayoría de los casos lo logran) generar un consenso de aceptación hacia el status quo predominante de tal forma que se reproduzcan si problema las relaciones sociales de producción, es decir, que todo siga igual.

A pesar de que la familia es la institución primaria donde se asientan las bases del desarrollo de nuestra personalidad, ésta pierde terreno y grado de influencia por la presencia de las otras instancias socializantes en las cuales destaca peligrosamente los medios masivos de difusión.

Recordemos que vivimos en un sistema social en el cual existe la propiedad privada sobre los medios de producción, los medios masivos de difusión pertenecen a manos privadas y con su acción buscan favorecer intereses privados. La alianza de la élite política y económica (PRI, PAN, capital privado nacional y extranjero) con los propietarios de los medios masivos de difusión permite que exista un control de la información que difunden los medios a través del cual distorsionan la información para crear actitudes de aceptación hacia los gobernantes, mientras criminalizan la protesta social.