Monografias.com > Administración y Finanzas
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

LA GLOBALIZACION, LA COMPETENCIA Y EL SURGIMIENTO DE UN NUEVO PARADIGMA DE EFICIENCIA



Partes: 1, 2

     

    Indice
    1.
    Introducción

    2. El proceso de globalizacion:
    introducción al tema

    3. El incremento de la
    competencia y las formas de cooperacion en el mundo de la empresa
    transnacional

    4. La empresa transnacional y los procesos
    de globalizacion, especializacion y
    regionalizacion


    6. La globalizacion y la inversión
    directa

    7. Hacia la conformación de un nuevo
    paradigma de eficiencia

    8.
    Bibliografía

    1.
    Introducción

    A pesar de los innumerables trabajos dirigidos al
    estudio y análisis del fenómeno de la
    globalización no es fácil encontrar un intento
    de definición que vaya más allá del nivel
    descriptivo. En términos generales, por globalización se entiende el movimiento
    acelerado de bienes
    económicos a través de las barreras regionales y
    nacionales. Este intercambio incluye personas, productos y
    por sobre todo, las formas tangibles e intangibles de capital. El
    efecto inmediato de la globalización es la
    reducción de la "distancia económica" entre
    países y regiones, así como entre los actores
    económicos mismos, incrementando, de este modo, las
    dimensiones de los mercados y la
    interdependencia económica.
    En este tipo de definiciones análisis teórico queda
    de alguna manera relegado bajo la idea que la
    globalización se genera a partir de un proceso
    espontáneo del mercado, de por
    suyo evidente, derivado de los esfuerzos de los agentes
    económicos individuales (especialmente las empresas
    transnacionales) en búsqueda de mayores ganancias que les
    permitan disponer de los ingentes recursos
    financieros requeridos para asegurar la reproducción de un patrón de
    acumulación cada vez más dependiente de la innovación
    científico-tecnológica para la generación de
    bienes servicios.
    Esta peculiar situación que impera en el estudio de esta
    temática de la globalización genera una serie de
    dificultades en el campo de la interpretación
    teórica, particularmente cuando se trata de analizar las
    tendencias que originan y posibilitan el desarrollo de
    éste proceso; así mismo, cuando se procura
    distinguir las interrelaciones de las variables
    relevantes que determinan su dinámica.
    Sin embargo, las dificultades no se agotan en el campo
    teórico. También aparecen cuando se busca conocer
    el alcance y las probables configuraciones en las cuales
    sedimentarán estos procesos
    globalizadores, especialmente en relación a las profundas
    y radicales transformaciones que están provocando en el
    seno de las organizaciones
    económicas. De igual modo,cuando se procura distinguir las
    posibilidades que los miembros de dichas organizaciones tienen
    para dirigir estos procesos de cambio
    encontramos problemas.
    Aquí, prevalece la idea de una transformación
    impuesta a los productores a través de una férrea
    coacción económica, en donde los conocimientos y
    capacidades que los distintos agentes económicos necesitan
    poseer para modificar radicalmente sus estructuras,
    normas y
    procedimientos, surgirían de la noche a la
    mañana, en un proceso inmediato, casi espontáneo,
    de manera tal que les permita reinsertarse competitivamente en el
    mercado global. Aquellos productores que no saben, que no pueden
    realizar este "milagro" quedarán excluidos del sistema, y
    estarán irremediablemente condenados a desaparecer.
    En el ámbito de la gestión
    de las organizaciones económicas, que es el espacio en
    donde desarrollamos nuestro trabajo de investigación, consideramos necesaria una
    más precisa conceptualización teórica de
    este fenómeno de la globalización económica, intento que
    podría contribuir a una mayor y más profunda
    comprensión de los factores o variables relevantes
    (así como de sus interrelaciones) que originan y
    determinan las transformaciones en las estructuras y procesos
    productivos y organizacionales a escala planetaria
    y; al mismo tiempo, (de igual
    importancia) procurar un método
    analítico que permita un cierto control de estos
    procesos de cambio, mediante la elaboración de un marco
    conceptual que permita dirigir la acción a nivel
    operativo, a través del diseño
    de modelos que
    posibiliten tanto el estudio de casos, como la resolución
    de problemas prácticos de las organizaciones, en
    búsqueda de aquella eficiencia que les permita
    reinsertarse en la competencia global. En otras palabras,
    intentamos saber de que manera y en que medida las organizaciones
    deberían modificar sus estructuras, conocimientos y
    prácticas productivas con el fin de apropiarse de un nuevo
    paradigma de eficiencia, impuesto por la
    globalización económica.
    Esta búsqueda se ubica en un contexto muy
    específico, constituído por un aparato productivo
    heterogéneo entendiendo por ello, la persistencia y
    coexistencia de distintos lógicas y niveles de
    acumulación lo que genera una gran desvinculación
    entre los distintos agentes económicos, por lo que los
    eslabonamientos productivos entre empresas -incluso de una misma
    rama, son débiles y discontinuos como es el caso de
    México,
    situación agudizada en el ámbito de la crisis
    económica actual.
    Ahora bien, en este trabajo nos limitaremos a exponer una
    introducción muy general del problema y a
    la presentación de una posible interpretación
    teórica en torno a
    determinados procesos (así como a su necesaria
    interrelación) que posibiliten la comprensión
    acerca del origen y desarrollo de la globalización
    económica, así como de sus efectos en la empresa
    mexicana, tanto en el ámbito de la gestión como en
    el de su estructura
    organizacional. El esfuerzo de conceptualización se
    basa en dos categorías económicaS: el patrón
    de acumulación y el paradigma de eficiencia aunque estas
    categorías serán utilizadas hacia un conjunto
    específico de problemas: las formas de gestión y
    sus estructuras organizacionales.

    2. El proceso de
    globalizacion: introducción al tema

    En los últimos dos decenios del siglo veinte se
    han desencadenado una serie de procesos de gran trascendencia,
    tanto por la magnitud de los efectos generados como por la
    complejidad que estos asumen en su expresión
    fenoménica, en donde se advierte la inmediata y
    recíproca dependencia con la cual están
    concatenados. De estos procesos destacan dos: las formas en las
    cuales se desarrolla competencia en el mercado global y; la
    acelerada dinámica del desarrollo científico
    tecnológico ambos, responsables de las transformaciones
    que de manera dramática alteran la configuración
    tecno-económica, modificando el conjunto de premisas
    organizativas y científico-tecnológicas así
    como de las formas de comprensión que durante largo tiempo
    posibilitaron el despliegue de un cierto modelo de
    desarrollo (centro-periferia) y de una particular estructura
    bipolar del poder
    mundial.
    Por otra parte, estos proceso también han provocado el
    derrumbe de muchas de las certezas que guiaron gran parte de la
    actividad en la época moderna; certezas derivadas a
    partir de marcos teóricos de interpretación hoy
    bajo serios cuestionamientos, pues ellos no facilitaron una
    compresión ni mucho menos la previsión de la
    dinámica y magnitud que asumen las actuales
    transformaciones. Junto con ello, se desdibujan valores,
    ideologías y doctrinas políticas,
    sociales y económicas que impregnaron de sentido a los
    proyectos
    individuales y colectivos de una parte importante de la
    humanidad. Por ello, han sido abandonadas, o por lo menos no
    tienen el poder de convocatoria que antes tuvieron. Sin embargo,
    se advierte que, aunque en forma precaria, a finales del siglo se
    han impuesto una serie de consideraciones en torno a las
    determinaciones centrales de la política
    económica contemporánea.
    En el plano económico, por ejemplo, parece evidente que al
    mercado le fue otorgado un rol preponderante: se impone como el
    instrumento más apropiado para manejar los intereses
    competitivos. En el plano político, por su parte, la
    democracia
    representativa es considerada como el medio de mayor eficacia para
    elegir entre orientaciones políticas diferentes. En el
    plano social, las cosas no están muy claras. Sin embargo,
    una tendencia parece imponerse; los gobiernos abandonan la
    pretensión de una sociedad
    más equitativa que asegura el bienestar social para el
    conjunto de los ciudadanos, propiciando en cambio, el surgimiento
    entre los individuos, de atomizadas formas de autoayuda, mediadas
    por el mercado y no por formas colectivas de solidaridad.
    Estas consideraciones que dominan en la política
    económica contemporánea, de algún modo,
    configuran un sistema político, económico y social
    ligado en forma indisoluble a dos procesos -estrechamente
    relacionados, mismos que emergen como distintivos en este
    último cuarto de siglo: la competencia derivada de la
    economía
    global y; la dinámica del desarrollo tecnológico,
    que además de generar las condiciones para la
    consolidación de un cierto sistema, imponen a escala
    planetaria un nuevo paradigma del quehacer eficiente, entendiendo
    por ello la sustitución de un modelo rector del progreso
    tecnológico-comercial que las empresas utilizaban para
    identificar y desarrollar los procesos, productos y sistemas de
    gestión mas rentables a partir de las alternativas
    tecnológicas que estaban disponibles en el mercado.
    Las nuevas formas e intensidades que la competencia adquiere en
    el marco de una economía globalizada, manifiestan su
    significado e importancia por una parte, en las colosales
    dimensiones que adquieren las entidades económicas
    líderes del mercado global y; por otra, en las
    modificaciones que está experimentando la conducta
    empresarial.
    Las dimensiones y las complejas articulaciones y
    características que adoptan las estructuras
    tecnoeconómicas de los conglomerados productivos,
    financieros y comerciales contemporáneos, simbolizados por
    las empresas transnacionales, que aunque poseen elementos comunes
    son extremadamente diferenciadas. Se derivan de una misma
    lógica
    de acumulación, esto es corresponden a un mismo proceso de
    concentración y centralización del capital, pero se
    cristalizan en distintas formas y por ello, no existen modelos
    únicos susceptibles de ser aplicados en forma universal.
    Más aún, ni siquiera para un mismo sector de la
    actividad económica existen "recetas".
    Un ejemplo de lo anterior se visualiza en la industria de
    las telecomunicaciones. Por una parte se puede
    observar la constitución de la más grande
    compañía global en los negocios de
    las comunicaciones
    que se origina con la fusión de
    las empresas Time- Warner y Turner con ventas
    combinadas que superan los veinte mil millones de dólares
    anuales que busca en la centralización de las decisiones
    ubicar la forma más eficaz para incrementar la rentabilidad
    de sus negocios. Por el contrario, en el mismo sector la AT&T
    anuncia la división del conglomerado en tres estructuras
    separadas y autónomas de manera tal que las nuevas
    compañías sean más responsables frente a sus
    clientes, al
    mismo tiempo que permite aminorar los crecientes costos de
    gestión que generalmente acompañan a los procesos
    decisorios hipercentralizados.
    En lo que se refiere a la conducta empresarial -en el contexto de
    una competencia globalizada- se observa la adopción
    de una estrategia muy
    singular en la cual se combinan simultáneamente
    tácticas de competencia y colaboración inter y
    entre-empresas. Para ejemplificar lo anterior seguiremos con el
    ejemplo del sector de las telecomunicaciones que para muchos
    observadores se ha constituído en el núcleo del
    desarrollo industrial para finales de este siglo.
    La magnitud del mercado global de las comunicaciones puede ser
    visualizada conociendo la cifra de sus ventas anuales, mismas que
    giran en torno a los cuatrocientos mil millones de dólares
    anuales. Estas cifras tenderán a crecer en un futuro
    inmediato debido a dos factores:
    a) la liberalización de los mercados y la privatización de los servicios, procesos
    que se están llevando a cabo a escala mundial están
    modificando dramáticamente la configuración de los
    mercados exigiendo a las empresas del sector un cambio radical en
    sus estrategias antes
    basadas en la manutención de posiciones monopólicas
    derivadas de su naturaleza
    tecnológica. Estas mismas empresas por una parte ven
    multiplicadas sus oportunidades de negocios, pero al mismo tiempo
    deben afrontar una aguda competencia en el abastecimiento de
    equipos de telecomunicación como en el equipamiento y
    operación de las redes de servicios y;
    b) la incesante multiplicación de opciones
    tecnológicas que ofrecen a los usuarios las nuevas
    tecnologías de "multimedia" que
    hacen posible la combinación de imágenes
    virtuales, películas en movimiento, sonido, textos y
    datos que
    permiten la transmisión casi instantánea y un
    procesamiento oportuno y eficaz de enórmenes, variados y
    complejos volúmenes de información.
    Sin embargo, en relación a los efectos generados por la
    innovación en éste sector quizás de mayor
    importancia sean las asociaciones que están siendo
    forjadas entre las empresas de telecomunicación tales como
    aquellas dedicadas a la información de sistemas
    tecnológicos, las que proveen información, las
    compañías de publicidad,
    editoriales medios
    escritos y electrónicos, etc. La computación, las telecomunicaciones, la
    publicidad, la educación y el
    esparcimiento están generando no sólo productos y
    servicios complementarios sino más bien, mercancías
    de muy difícil diferenciación.
    Con el fin de asegurar la sobrevivencia y expansión de la
    empresas del sector telecomunicaciones en el mercado global,
    éstas han sido obligadas a establecer sofisticadas
    alianzas estratégicas. De entre las más importantes
    cabe mencionar la asociación entre la British Telecom y la
    MCI a través de la compra del 20% de las acciones de
    esta última empresa (cuatro
    mil trescientos millones de dólares) iniciando una nueva
    compañía Concert que ofrece desde servicios
    telefónicos hasta complejos sistemas de conexión ;
    la asociación denominada Unisource entre las empresas de
    telecomunicación de Holanda, Suecia, España y
    Suiza conjuntamente con la ATT; la Infonet, asociación
    entre la AT&T, la France Telecom, la KDD (Japon), Telstra
    (Australia) Telia (Suecia), Telefónica (España); la
    Transpacific asociación que cuenta entre sus miembros a la
    AT&T, la KDD, la Unitel (Canada), Korea
    Telecom, Telstra y la empresa de telecomunicaciones de Nueva
    Zelandia. En Japón
    la Nippon Telegraph and Telephone (NTT) la segunda empresa
    más importante a nivel mundial en el sector ha cerrado
    tratos con la AT&T, la General Magic, Microsoft,
    Silicon Graphics, Sony y un importante número de otras
    empresas ligadas a la generación de avanzados servicios
    interactivos que ofrece la tecnología de la
    multimedia, buscando aplicaciones en los campos
    científicos y tecnológicos, en los negocios, en los
    servicios de educación y de
    salud, así
    como en los servicios de bienestar social y recreación
    y esparcimiento.
    En estas alianzas se pueden observar que la estrategia se basa en
    el establecimiento de lazos de cooperación de distintos
    tipos y objetivos, ya
    sean de carácter
    permanente o temporal. La primera forma de alianza
    estratégica se establece a través de fusiones,
    proyectos conjuntos de
    inversión y/o la integración de redes y estructuras
    productivas para la generación de un insumo, producto o
    línea de productos. Por su parte, en las temporales las
    empresas buscan asociaciones delimitadas en el tiempo,
    diseñadas a partir de objetivos específicos, sean
    estos contribuir en la investigación y desarrollo de un
    producto o insumo principal o, con el fin de controlar
    importantes segmentos de los mercados nacionales, regionales y
    globales. Aquí cabe destacar la singularidad de estas
    formas de cooperación. Ellas a pesar de establecer una
    estructura oligopólica en los mercados globales más
    dinámicos sin embargo, no pueden eliminar la competencia,
    inclusive, ésta se estimula entre asociaciones en las que
    participa una misma empresa, ya que las alianzas cristalizan en
    unidades económicas autónomas que están
    obligadas a lograr un uso eficiente de los recursos y lograr la
    mayor rentabilidad posible.
    Existen otros aspectos de la competencia global que es preciso
    destacar. Decíamos anteriormente que la competencia es
    reforzada, intensificada y canalizada a través de
    mecanismos diseñados para incrementar aquella eficiencia
    empresarial que le permita la sobrevivencia y expansión a
    través de las alianzas estratégicas. Sin embargo,
    la competencia se desplaza también a otros ámbitos
    y se le agregan, por tanto, otros objetivos.
    Uno de ellos es reducir los conflictos
    sociales -al interior de la empresa- reemplazando las formas
    tradicionales de mediación y negociación de los sujetos colectivos
    (sindicatos)
    por formas competitivas, es decir, ubicando a los trabajadores en
    férreas formas de competencia en las cuales los individuos
    luchan entre sí para asegurarse una privilegiada
    inserción laboral
    ubicándose en los nichos productivos más
    dinámicos (aquellos de mayor expansión y
    rentabilidad) y con ello, reducir la incertidumbre del desempleo y/o la
    expulsión hacia ramas estancadas de la actividad
    económica. En este marco, la conducta estratégica
    de los trabajadores se dirige, entonces, hacia el drástico
    incremento de sus conocimientos, habilidades y destrezas,
    capacitándose para mostrar eficiencia ante un mercado
    laboral (especialmente el de las empresas transnacionales) cada
    vez más reducido y competitivo.
    Con el fin de profundizar esta línea de
    argumentación y el análisis de estos procesos
    tomando como hilo conductor la competencia que emerge de la
    economía globalizada se hace imprescindible, destacar un
    fenómeno de suma importancia que se ha hecho por si mismo
    evidente hacia el final del siglo veinte: la corporación
    transnacional y el rol central que ella asume en relación
    a los cambios que están ocurriendo.
    A través de esta peculiar forma de organización económica -la cual
    comúnmente ha sido comprendida y conceptualizada como
    proceso de transnacionalización de la economía
    mundial, se busca comprender el creciente rol de las empresas
    transnacionales globales y con ello, conocer la evolución de una parte significativa de las
    determinaciones más importantes de la política
    económica internacional contemporánea.
    Una cifra da cuenta de la importancia de la empresa transnacional
    global. Seiscientas de ella, ya en 1985, eran responsable de la
    generación de más del 20% del valor agregado
    total en la industria y la agricultura.
    Las líneas de negocios principales de estas empresas
    globales se concentran en la industria petrolera, en la producción de máquinas y
    equipos, en la industria petroquímica fina, la automotriz,
    aeroespacial, telemática, cibernética, microelectrónica,
    etc.(1)
    Para efecto de nuestro trabajo en relación a las empresas
    transnacionales globales y la competencia queremos destacar un
    aspecto específico de su actividad. Nos referimos no
    sólo al hecho por demás conocido de que las
    transnacionales están incesantemente incrementando los
    flujos del comercio y de
    la inversión sino más bien, nos interesa resaltar
    la estructura de este intercambio. Esto es, la importancia
    creciente que en estos flujos están adquiriendo las
    denominadas operaciones
    internas de una red global en
    expansión: el intercambio de insumos y de bienes
    tecnológicos (resultados de la investigación y
    desarrollo) al interior de la empresa transnacional global
    -entendiendo por ello no sólo una empresa o un
    conjunto de empresas ligadas por un centro de control financiero
    común- sino que más bien, con este concepto queremos
    enunciar una compleja y extendida red de relaciones de
    competencia y colaboración (alianzas estratégicas)
    y que progresivamente se van integrando en vastos conglomerados o
    sistemas complejos de interdependencia en donde las tareas de
    investigación y desarrollo, las de producción,
    mercadeo y
    financiamiento
    se van compartiendo y configurando entidades económicas y
    organizacionales de vastas proporciones y de singulares
    atributos.
    En este punto cabe la advertencia de que una cabal
    comprensión de este fenómeno no parece ser lograda
    cuando se le analiza mediante el concepto de
    empresa transnacional acuñado por la teoría
    económica de los setenta. (2) Aunque dicha
    conceptualización enuncia una forma que esta
    íntimamente relacionada con el fenómeno que nos
    preocupa (esto es, son resultado de un mismo proceso de
    internacionalización del capital) la evolución del
    proceso está generando entidades diferentes. Habría
    que preguntarse por el alcance de estas modificaciones o si se
    trata de una alteración cualitativa que cambiaría
    la naturaleza misma de la empresa transnacional. Esta es una
    pregunta que por ahora queda en suspenso pero que requiere una
    respuesta.
    Con estas consideraciones que esbozan las líneas generales
    de nuestra investigación damos término a esta
    introducción de carácter general al problema de la
    competencia global y el paradigma de eficiencia. A
    continuación profundizaremos sobre algunos tópicos
    de la globalización en relación a la competencia,
    las transnacionales, la globalización,
    especialización y regionalización y la
    adquisición de las ventajas competitivas.

    3. El incremento de la
    competencia y las formas de cooperacion en el mundo de la empresa
    transnacional

    Efectivamente, es fácil constatar que la
    última década fue marcada por el incremento de la
    interdependencia y la globalización de los mercados a
    través de una rápida aceleración de los
    flujos del comercio y de la inversión, la creación
    y difusión de nuevas tecnologías, el explosivo
    crecimiento de los mercados de capital y la integración de
    los mercados
    financieros, así como por la modificación de
    las conducta que guían las operaciones empresariales ahora
    ubicadas en un ámbito planetario. Los actores primarios de
    este proceso de globalización obviamente son las empresas
    transnacionales, a través de los flujos de
    inversión y del fortalecimiento de los lazos
    corporativos.
    Esta transformación empero, no transcurre sin conflictos.
    Estos procesos generan una creciente rivalidad entre las
    transnacionales, representadas política y comercialmente
    por los gobiernos nacionales de los países centrales y/o
    los bloques regionales. Por otra parte, el altísimo
    costo en el que
    se incurre para mantener a las empresas en situaciones
    tecnológicamente competitivas paradójicamente,
    está fomentando una singular forma de cooperación
    denominada alianza estratégica, o también definida
    bajo la conceptualización del llamado "tecnoglobalismo".
    En síntesis,
    nos encontramos con una nueva forma de vinculación inter-
    empresas, llevada a cabo a través del establecimiento de
    complejas redes internacionales, tejidas por las empresas
    transnacionales en su incesante búsqueda tendiente a
    reducir costos y disminuir las elevadas incertidumbres propias de
    procesos productivos que requieren elevados volúmenes de
    inversión, derivados del alto grado de contenido
    tecnológico que conllevan sus productos y servicios.
    Así, al conjuntar sus esfuerzos de investigación y
    desarrollo con sus empresas rivales – incluso con aquellas con
    las cuales se disputan los mismos mercados- disminuyen la
    magnitud de sus inversiones al
    compartirlas entre varias empresas pero, además, logran
    disminuir los niveles de incertidumbre, pues se están
    asociando con sus principales competidores tecnológicos y
    el riego de que aparezca un producto con mayor innovación
    incorporada en ese particular segmento de mercado disminuye
    notablemente.
    Postulamos como común denominador de todos estos cambios,
    esto es una de las determinaciones básicas de estos
    procesos de transformación, el reforzamiento de la
    competencia y como efecto inmediato para las empresas se impone
    la urgente necesidad de conocer y respetar las reglas de este
    nuevo juego: la
    competencia en una economía global.
    Esta nueva forma de competencia no ha afectado a todos los
    países y empresas por igual. En alguna manera
    extremadamente simplificada se podría decir que un
    puñado de innovaciones de empresas japonesas en los
    sectores automotriz, semiconductores,
    computadoras,
    microelectrónica, equipos de oficina,
    máquinas- herramientas
    sacudieron a las empresas norteamericanas y europeas pues
    ocuparon agresivamente importantes posiciones del mercado
    internacional y cubrieron importantes segmentos de sus mercados
    internos . Las empresas norteamericanas fueron las más
    perjudicadas pues fueron expulsadas de sus confortables
    posiciones oligopólicas conquistadas desde la postguerra.
    Por su parte en Europa, cuando
    incluso la asistencia gubernamental supranacional (Comunidad
    Económica Europea) fue incapaz de seguir protegiendo las
    empresas de esta competencia (mediante barreras y recursos de
    capital para el desarrollo de nuevos conocimientos y
    tecnologías) las empresas tuvieron que enfrentar la tarea
    de mejorar sus capacidad de competir internacionalmente. En este
    sentido, la nueva era de la competencia internacional está
    basada en un puñado de miles de grandes e innovativas
    empresas líderes que desarrollan sus actividades en un
    reducido número de ramas industriales; no más de
    una docena de industrias de
    alta tecnología e intensivas en uso de capital que tienen
    como objetivo
    servir a los tres mercados más importantes y
    dinámicos: Estados Unidos,
    Europa y Japon.
    Estos fenómenos han originado importantes procesos entre
    ellos, el de la reestructuración industrial lo cual
    constituye un aspecto central para este nuevo orden industrial
    internacional que genera la economía global.
    Uno de los trabajos más fructíferos en torno a la
    reestructuración industrial (Kaplinsky, R. 1990)
    señala que este fenómeno a lo menos ha sido
    comprendido mediante distintas interpretaciones de entre ellas
    podemos destacar las siguientes.
    De acuerdo a los regulacionistas franceses la
    reestructuración es el medio por el cual adviene un
    determinado patrón de acumulación sostenible basado
    en el régimen de acumulación (que equilibra
    consumo,
    ahorro e
    inversión) y el modo de regulación(formas
    institucionales y patrones sociales de conducta que determina el
    régimen de acumulación).
    Por su parte, los Schumpeterianos estructuralistas visualizan
    estos fenómenos como procesos generados por ciclos de onda
    larga de cincuenta años de rompimientos
    tecnológicos fundamentales que sostienen el crecimiento.
    Por ejemplo, los ciclos de crecimiento industrial previos, de
    acuerdo a este esquema estarían basados en la industrial
    textil, acero,
    ferrocarriles y maquinarias de combustión interna. Posteriormente irrumpe
    la industria química y
    siderúrgica y el recurso energético principal es la
    electricidad.
    Más tarde son otras las ramas dinámicas, destacando
    por sobre todo la industria automotriz, la explotación del
    petróleo y
    la industria petroquímica. Por último, aparecen
    ramas tales como la microelectrónica, la robótica,
    la generación de nuevos materiales, la
    telemática, informática, cibernética, los
    sistemas
    expertos, etc.
    Otra interpretación visualiza la presente
    transición en términos del agotamiento del
    paradigma de producción masiva, esto es, que la
    producción de mercancías estandarizadas mediante el
    uso de máquinas con propósitos especiales y una
    rígida división del trabajo es ahora reemplazada
    por un nuevo paradigma de especialización flexible basado
    en la producción de pequeños lotes de productos
    diferenciados, generados con maquinaria de uso múltiple
    integradas en cadenas productivas flexibles, autoreguladas y
    diseñadas por sistemas expertos y por la inteligencia
    artificial; modificaciones que necesariamente implican la
    adopción de nuevas formas de organización del
    trabajo. En otras palabras, se interpreta la
    reestructuración industrial en términos de una
    transición desde la maquina-factura a la
    sistemo-factura, esto es una nueva práctica organizacional
    en la cual la integración de las unidades productivas,
    vía la tecnología automizada, generan nuevas
    relaciones inter-firmas y prácticas integrales de
    trabajo supeditadas a orientaciones individuales.
    Cada una de estas interpretaciones contiene alguno de los
    elementos que conforman la esencia de este nuevo orden industrial
    internacional que se está configurando en este fin de
    siglo.
    Ahora bien, esta reestructuración industrial cuyas
    características más importantes acabamos de
    mencionar sin embargo, no explican, de manera inmediata el
    incremento de la competitividad
    internacional. Debemos, a continuación, dedicar a las
    formas que adopta la empresa transnacional en los procesos de
    globalización, especialización y
    regionalización.

    4. La empresa transnacional
    y los procesos de globalizacion,especializacion y
    regionalizacion

    El rol preponderante de las corporaciones
    transnacionales, en el campo de la reestructuración
    industrial, se visualiza especialmente en relación a las
    dos áreas principales, en las cuales se ha incrementado la
    competencia internacional, el comercio y la inversión
    directa. Justamente aquí, es donde se expresan las
    tendencias que impulsan la competencia internacional
    cuestión que desarrollaremos a continuación.
    Antes, con el objeto de una mejor comprensión del
    fenómeno del incremento de la competencia internacional
    parece pertinente referirse primero a la naturaleza de la
    evolución del capitalismo y
    la descripción de los más importantes
    rasgos que caracterizan a la empresa industrial moderna.
    La primera fase del capitalismo se caracteriza por la empresa
    familiar. A finales del siglo IX una nueva forma de capitalismo
    aparece en Europa y Estados Unidos: el capitalismo gerencial. El
    capitalismo gerencial estaba basado en el reclutamiento
    de ejecutivos profesionales los cuales emprendieron proyecto de
    inversión a largo plazo e implementaron
    prácticas organizacionales para asegurar cuotas del
    mercado. Sin embargo, en este capitalismo gerencial al menos se
    pueden observar dos formas distintas a saber; el gerencial
    competitivo y el gerencial cooperativo.El primero en EEUU y el
    segundo en Alemania.
    El gerencialismo competitivo que reguló la
    expansión de las actividades manufactureras en los Estados
    Unidos se constituyó en una de la más despiadadas
    formas de competencia entre las principales núcleos
    industriales. El nudo de las ventajas competitivas se
    manifestó en la innovación y en un proceso
    productivo basado en la explotación de economías de
    escala, a través de fuertes inversiones de capital que
    diseñaron inmensas líneas de producción de
    productos estandarizados, todo esto complementado con fuertes
    inversiones en marketing y en
    el desarrollo de estrategias de expansión en los mercados
    nacionales. El éxito
    de estas estrategias se puede simbolizar en el fordismo que
    posibilitó la producción masiva de
    automóviles, considerado como la realización del
    sueño americano.
    En Alemania, el capitalismo gerencial fue en grandes
    términos similar al desarrollo en los Estados Unidos sin
    embargo, es posible advertir tres diferencias:
    a) las empresas alemanas se concentraron más bien en
    bienes intermedios y de capital, logrando un significativo
    desarrollo en la industria química-farmacéutica, la
    producción de aceros y la industria de maquinaria
    pesada.
    b) las ventajas competitivas de las empresas alemanas se basaban
    tanto en las economías de escala como en las
    economías dirigidas.
    c) la relación interempresas (con abastecedores y
    competidores) y la intraempresa (con el trabajo)
    tienden a ser más bien cooperativas
    que competitivas. Empero, el estímulo principal para esta
    cooperacion fue el fenómeno de la concentración del
    capital industrial que posibilita la coordinación de las operaciones de negocios
    a través de la constitución de grupos
    financieros. En efecto, actualmente los diez bancos más
    importantes poseen un control accionario decisivo sobre las 100
    empresas más importantes del país. Esta forma de
    dirección de las empresas le permite a
    Alemania convertirse en una de las más fuertes
    economías industriales de Europa y en una de las
    economías más competitivas a nivel mundial.
    Sin embargo el ejemplo más pleno del capitalismo gerencial
    cooperativo es Japón. Este sistema le ha permitido
    colocarse en posiciones de control de importantes mercados
    globales en la mayor parte de las actividades industriales de
    mayor dinamismo. De entre las características más
    importantes de este modelo de capitalismo, destaca el compromiso
    estratégico de largo plazo para con la innovación y
    el continuo mejoramiento de los productos. Por otra parte, en lo
    que se refiere a la cooperación esta toma nuevas
    características que la refuerzan. En lo referente a las
    relaciones
    laborales introduce en los salarios el
    principio de que los trabajadores no son pagados tanto por la
    tarea productiva sino más bien por aquellas tareas que el
    trabajador es capaz de realizar. Por otra parte, y de mayor
    importancia aún, en término de las relaciones con
    otras empresas destaca la formación de los Keiretsu o
    alianza estratégica de negocios, configurando asociaciones
    permanentes entre diferentes empresas, de tal modo que el
    conjunto de compañías japonesas más
    competitivas internacionalmente están organizadas en
    sólo seis grupos de negocios, centralización que
    les posibilita además, operar bajo una estrecha
    colaboración con organismos gubernamentales,
    particularmente en la investigación y desarrollo de
    productos de tecnología de punta y para la
    detección y captura de nuevos mercados.
    De lo anterior, se podrían deducir algunas conclusiones
    preliminares. Parece indudable que la fuerza rectora
    de la competitividad internacional es el modo capitalista de
    producción que aunque se manifieste en alguna formas
    específicas o variantes nacionales -e incluso que estas
    variantes sean importantes, no impiden incluir a todas estas
    experiencias en un mismo modelo de economía de mercado.
    Las diferencias entre el capitalismo gerencial competitivo y el
    capitalismo gerencial cooperativo se encuentran entonces en tres
    puntos: en el rol del gobierno en la
    actividad económica; en los horizontes temporales
    considerados en los procesos de toma de
    decisiones y; en la naturaleza de las relaciones
    inter-empresas e intra
    empresas (las relaciones laborales).
    La teoría acerca de las etapas del desarrollo competitivo
    (Porter,M. 1990), reelaboradas más tarde por Ozawa
    (Ozawa,T.1992) es muy ilustrativa al respecto. Porter describe el
    desarrollo competitivo de las economías nacionales en
    términos de cuatro etapas, las cuales son sintetizadas a
    través de ciertas características competitivas
    secuenciales.
    Para la primera etapa, las actividades basadas en los recursos
    naturales y el las manufactura
    intensivas en uso de trabajo son centrales para la
    obtención de las ventajas competitivas. En la segunda
    etapa, en cambio, la actividad económica estaría
    basada en la fabricación de bienes intermedios y de
    capital (industria química y pesada), la tercera en la
    generación de la infraestructura (vivienda, transportes,
    comunicaciones). En la cuarta etapa, la actividad
    económica estaría impulsada por las inversiones; el
    éxito empresarial descansa en el investigación y
    desarrollo derivados de un pleno uso del capital
    humano.
    Por su parte, Ozawa ha mejorado el esquema demostrando como la
    experiencia japonesa configura un modelo en el cual resaltan las
    relaciones de interdependencia entre el mejoramiento estructural,
    las ventajas comparativas dinámicas y la inversión
    extranjera directa, conjuntamente con la unión de las
    estrategias de uso intensivo de capital y uso intensivo de
    recurso humano calificado para la generación de un
    constante progreso tecnológico. De esta manera, se puede
    comprender como un estadio particular del desarrollo competitivo
    es asociado con un patrón específico de exportación, basado en la
    adquisición y consolidación de niveles de
    competitividad. Así, el primer estadio estaría
    caracterizado por ventajas comerciales basadas en factores,
    produciendo mercancías primarias y bienes de uso intensivo
    de trabajo. Por su parte, el estadio guiado por la
    inversión basaría en cambio sus ventajas
    competitivas en la producción a escala de bienes
    intensivos en capital. Por último, el estadio de la
    innovación -que basa sus ventajas en la
    investigación y el desarrollo- se caracteriza por la
    exportación de productos cada vez más sofisticados
    tecnológicamente.
    En este sentido, el crecimiento
    económico y la transformación sería
    acompañada por un cambio en los patrones de las ventajas
    comparativas dinámicas. Debe ser mencionado además,
    que estos cambios no suceden a partir de transformaciones
    instantáneas, más bien son el resultado de
    progresivas transiciones caracterizadas por el surgimiento y
    caída de actividades económicas específicas
    y puede ser conceptualizado como un cambio en el centro de
    gravedad de la economía como una totalidad.
    Pero quizás el aporte más importante de Ozawa es
    destacar la relación tan importante que tiene la
    inversión extranjera directa en los cambios estructurales
    de la economía.
    Continuaremos el análisis de este problema a través
    de la presentación de las principales tendencias del
    comercio
    internacional: globalización y
    especialización.

    5. El comercio internacional: globalizacion y
    especialización

    La principal alteración del sistema de comercio
    internacional ha sido su notable expansión; el surgimiento
    de nuevos exportadores (Japón y los países
    asiáticos) la apertura de los mercados de Norte América
    mediante el Tratado de Libre
    Comercio y en una menor medida la apertura de los mercados
    europeos responsables y en general la liberalización de
    mercados propuesta e impuesta a los países en vías
    de desarrollo son responsables de este incremento en los flujos
    del comercio mundial.
    Sobre estos aspectos es posible contar con numerosos trabajos
    desarrollados para comprender la magnitud y naturaleza de los
    cambios, a partir de las modificaciones que se observan en los
    patrones de exportación de los países.
    En Japón y Estados Unidos durante el período
    1970-89 se puede observar una significativa
    especialización en su comercio
    internacional a diferencia de los países de la Comunidad
    Económica Europea. De los países más
    importantes Japón -en las dos últimas
    décadas- ha duplicado sus exportaciones en
    los sectores basados en la generación de conocimientos
    (química fina, componentes microelectrónicos y
    telecomunicaciones) que son áreas caracterizadas por
    actividades innovativas directamente ligadas a ingentes gastos en
    investigacion y desarrollo, lo que produce efectos para el
    conjunto del sistema económico, en tanto que sirven como
    insumos intermedios y de capital para un gran número de
    otros sectores industriales y de servicios.
    Por otra parte, es posible observar el crecimiento de la
    industria de bienes de capital especializada (instrumentos y
    máquinas de ingeniería tales como máquinas
    herramientas) actividades caracterizadas por una muy alta
    diversificación de la oferta,
    destinadas principalmente a ser insumos para actividades
    industriales que preferentemente utilizan economías de
    escala y procuran dominar la oferta mediante la captura de nichos
    de mercados. Este tipo de especialización comercial
    característico para Japón es particularmente
    evidente en los esfuerzos de investigación y desarrollo en
    los sectores industriales basados en la microelectrónica,
    tales como los sistemas de procesamiento de
    datos y el de componentes electrónicos y
    telecomunicaciones, retirándose paulatinamente de los
    sectores tradicionales. Sobre estos mismo fenómenos
    encontramos otras visiones una visión adicional de este
    fenómeno. Mandeng ( Mandeng, O. J. 1991) por ejemplo,
    postula que el crecimiento económico ha llegado a ser cada
    vez más independiente de la intensidad de los flujos del
    comercio internacional y que los elementos dinámicos
    estarían centrados en grandes empresas que producen
    manufacturas tecnológicamente complejas para mercados
    globales imperfectamente competitivos. Allí, es donde los
    nuevos actores estarían rápidamente mejorando sus
    resultados en el comercio internacional.
    Fajinzylber por su parte, (Fajinzylber, F. 1991) a partir del
    trabajo de Mandeng, ubica no solo a los países ganadores,
    aquellos que han incrementado su cuota de mercado, sino que
    también analiza estas ganancias de acuerdo a los
    principales productos involucrados. En este sentido distingue
    productos que están gozando de un incremento en la cuota
    de mercado de aquellos que la están perdiendo. Para ello
    acuña la figura de los productos "dinámicos" y los
    "descendentes". Los países ganadores incrementan sus
    cuotas de mercado a través de productos
    "dinámicos". Los países perdedores pueden perder
    sus cuotas de mercado con productos dinámicos (una
    situación definida como "pérdida de oportunidades")
    o con productos "descendentes" en una situación denominada
    "retirada". Naturalmente, la mezcla de productos para
    virtualmente todos los países contiene ejemplos de ambas
    clases.
    Entre los principales países de la OECD, Japón
    claramente es el que ha obtenido las mayores ganancias en cuotas
    de mercados y más importante aún, cerca del 80% de
    sus exportaciones están ubicado en una óptima
    situación y casi todas ellas son manufacturas que no
    están basadas en recursos naturales. Con pocas
    excepciones, los países de la Unidad Económica
    Europea, aunque es posible observar ganancias en sus cuotas de
    mercado, éstas son significativamente menores a las
    alcanzadas por los países asiáticos y, enfrentan
    muchas oportunidades perdidas en sus resultados de
    exportación. No obstante, se hace necesario destacar el
    hecho que a pesar de las pérdidas sus exportaciones (en
    gran parte) no son manufacturas basadas en la explotación
    de recursos naturales. La situación es crítica para
    países como Autralia y Nueva Zelandia que basan sus
    exportaciones en recursos naturales y manufacturas directamente
    relacionadas con actividades primarias. Bajo este mismo esquema
    propuesto por Fajinzyber los Estados Unidos estarían
    perdiendo importantes cuotas de mercado debido a que un
    número menor de sus productos se encuentran en la
    situación óptima y peor aún, muchos de sus
    productos se ubican en la zona de "las pérdidas de
    oportunidades". Una proporción similar de productos de
    exportación se encontrarían en la fase de
    retirada.
    Este esquema demuestra un dramático cambio en las
    relaciones comerciales de los países de la OECD generando
    diversos efectos el más importante es el apresuramiento de
    las iniciativas de integración de los bloques regionales,
    especialmente de aquellos países que están
    perdiendo cuotas en el mercado mundial, Estados Unidos con el
    TLC y los
    países europeos con la Unión Económica
    Europea.

    6. La globalizacion
    y la inversión directa

    Otro aspecto de suma importancia para la
    compresión de los procesos que originan la
    globalización es indudablemente la inversión
    directa. Desde los años 80s la dinámica que se
    observa en los flujos de la inversión directa
    internacional es notoriamente superior a la dinámica que
    se presenta en el comercio internacional y se convierte en un
    componente principal del crecimiento económico. Una de las
    medidas más eficaces tomadas por las empresas
    transnacionales para eliminar las restricciones al comercio
    internacional fueron indudablemente las inversiones
    condicionadas. Se negociaban inversiones en los distintos
    países a condición del levantamiento selectivo de
    barreras arancelarias. Por lo mismo, quizás es que el
    proceso de transnacionalización propicia,
    simultáneamente, el fortalecimiento de tendencias hacia la
    globalización y la regionalización.
    La regionalización podría ser explicada advirtiendo
    el significado e importancia del hecho de que cerca de la mitad
    de flujos comerciales de Japón y de los Estados Unidos
    están directamente relacionados con la inversión
    externa directa, esto es se trata de de operaciones entre
    compañías transnacionales. Es interesante observar,
    por otra parte, que alrededor del ochenta por ciento de los
    flujos de inversión externa directa se concentran en una
    triada conformada por Estados Unidos, los países de la
    Comunidad Económica Europea y Japón. Que los
    países donde se originan los flujos de inversión
    (fuentes) son
    los miembros de la Comunidad Económica (con un promedio
    anual de 39 mil millones de dólares en el período
    que transcurre entre 1985, y 1989 y Japón que para el
    mismo período incrementa seis veces sus inversiones
    alcanzando la suma de 111 mil millones. Lo anterior
    también podría explicar la concentración de
    los flujos comerciales en esta tríada pues el 67% del
    comercio mundual se efectúa entre estos tres grupos de
    países. (UNCTC, World Invstment Report, 1991).
    La importancia de las tendencias hacia la regionalización
    que acompañan al proceso de globalización se puede
    advertir en múltiples aspectos. En primer lugar las
    empresas transnacionales que actúan en el mercado global
    deben concebir e implementar estrategias específicas para
    cada uno de los tres más importantes mercados que componen
    la tríada, específicamente en relación al
    diseño de los productos, el mercadeo y distribución, la red de abastecimiento,
    finanzas,
    comercio e inversión externa. En este sentido, varios
    autores (Agosin, M. y Tussie, D. 1992)) han puesto en evidencia
    la importancia que tiene para los flujos del comercio
    internacional las diferencias existentes entre las distintas
    prácticas institucionales de los países que
    componen la Tríada pues afectan directamente a las
    ventajas competitivas.
    En segundo lugar, las industrias de alta tecnología que se
    convierten en las empresas líderes de la competencia
    global no estan igualmente distribuídas entre los
    países. Esto implica, muchas veces, que ante un incremento
    de la competencia los gobiernos se sienta impulsados a generar
    políticas diseñadas para alcanzar o mantener
    sectores económicos competitivos, al mismo tiempo que
    generan medidas que dificultan el desarrollo de los negocios de
    las empresas "extranjeras". Un ejemplo notorio de lo anterior lo
    constituye el MIT (el ministerio japonés para el comercio
    internacional y la industria) que toma medidas que incluyen desde
    la asignación dirigida del gasto
    público (compras
    gubernamentales hacia determinadas empresas) hasta la
    subvención de investigación y desarrollo para
    áreas específicas del desarrollo
    científico-tecnológico.
    En tercer lugar los países miembros de la Tríada
    influyen decididamente en la definición de las reglas del
    juego con respecto al sistema multilateral. Entre las parte
    más importantes del sistema cabe mencionar a la
    Organización Mundial de Comercio, la
    Organización para la cooperación económica y
    el desarrollo (OECD), el sistema que regula las finanzas
    internacionales (FMI, Banco Mundial,
    el Banco
    Internacional de Pagos (BIS) y el sistema de Naciones Unidas.
    A través de estos organismos los países
    desarrollados agrupados en el "grupo de los
    siete" (Estados Unidos, Canada, Alemania, Francia, Reino
    Unido, Italia y
    Japón) negocian las políticas globales en
    relación a las tasas de intercambio, las tasas de
    interés, al financiamiento externo, y de manera
    importante influyen sobre las tendencias hacia la
    globalización y regionalización.
    Para finalizar estos tópicos de la competencia global y la
    regionalización en seguida nos permitimos realizar algunas
    consideraciones en torno a la naturaleza de estos
    fenómenos.
    Parece que para una cabal comprensión de los
    fenómenos que nos preocupan los esfuerzos teóricos
    basados en la conceptualización de las ventajas
    comparativas de las naciones no son suficientes. Por ello,
    habría que acudir hacia aquellas investigaciones
    basadas en las ventajas competitivas de las empresas, mismas que
    colocan el énfasis en la decisiva importancia que adquiere
    la investigación y desarrollo, la innovación y la
    tecnología para la obtención de roles y
    jerarquías de privilegio en la nueva división
    internacional del trabajo y del comercio.

    Esta nueva situación se manifiesta claramente en
    dos áreas separadas que dependen tanto de la naturaleza de
    las actividades productivas como de su grado de "madurez"
    tecnológica. En las industrias estratégicas
    tecnológicamente sofisticadas tales como la
    microelectrónica, la biotecnología, el desarrollo de nuevos
    materiales, la robótica, el desarrollo de la
    computación, telecomunicaciones en donde las ventajas
    competitivas- en su mayor parte. son producto de costosas
    investigaciones y el establecimiento de alianzas
    estratégicas entre empresas transnacionales de alta
    tecnología.
    En lo que se refiere a aquellas industrias "maduras" basadas en
    economías de escala y producción masiva y
    estandarizada tales como la industria del automóvil, los
    artículos de consumo electrónico, las textiles,
    etc, el proceso de reestructuración para alcanzar niveles
    competitivos reside en una mezcla de avances
    tecnológicos e innovaciones organizacionales.
    Así surgen nuevas prácticas en los sistemas
    industriales, se impone un nuevo "sentido común" de la
    eficiencia que a lo menos posee tres importantes dimensiones.
    La primera está relacionada a los avances
    tecnológicos aplicados a los sistemas productivos que
    permiten la implantación de tecnologías
    automáticamente integradas en todos las fases de la
    actividad de las empresas. La segunda dimensión es la
    incorporación de una nueva forma de gestión y de
    organización de las tareas productivas que permiten la
    apropiación de estándares de calidad y
    eficiencia demandados por los mercados globales. La tercera
    dimensión subraya la importancia decisiva que tiene para
    la obtención de ventajas competitivas el establecimiento
    de una nueva forma de relación entre las empresas y sus
    proveedores,
    basadas en la cooperación y la confianza, así como
    en el reconocimiento de un recíproco interés
    para posibilitar el desarrollo de ambas partes de una
    asociación considerada como permanente.

    7. Hacia la
    conformación de un nuevo paradigma de
    eficiencia

    En lugar de una conclusión, que en el marco de
    este trabajo no es posible en tanto se limita a exponer las
    formas a través de las cuales se pretende abordar el
    objeto de estudio, procuraremos hacer explícitos el fin
    explicativo que sintetiza los propósitos de la
    investigación, así como la hipótesis general y las categorías
    analíticas principales que pensamos nos permitirían
    avanzar en la comprensión teórica del proceso de
    globalización económica y la instauración de
    un nuevo paradigma de eficiencia.
    El fenómeno que necesita explicación es la
    naturaleza de las determinaciones centrales que originan y
    consolidan los procesos de globalización y el surgimiento
    de un nuevo paradigma del quehacer eficiente. El aporte del
    trabajo descansa sobre un recurso explicativo fundado en el
    análisis de las formas que adopta, en el presente, la
    acumulación de capital. A partir de esta
    hipótesis ubicamos
    una hebra teórica, que permitiría desenredar la
    madeja de una serie de problemas, tanto de índole
    conceptual como práctica, que pensamos no han sido
    resueltos, y que se pueden enunciar en las siguientes
    preguntas:
    ¿Por qué la globalización impone a los
    países en desarrollo un mismo patrón de eficiencia
    que el utilizado por las economías post-industriales?
    ¿Por qué se modifica radicalmente aquella
    lógica de acumulación que anteriormente no
    sólo permitía la persistencia de formas
    heterogéneas de producción (y de distintos paradigmas de
    eficiencia) sino que, incluso la reproducción misma del
    patrón de acumulación exigía la coexistencia
    de estructuras productivas con distintas lógicas de
    acumulación?
    ¿Por qué hoy día no se le permite la
    sobrevivencia a aquellos productores incapaces de innovar y se
    les expulsa del mercado mundial en tanto no saben o no pueden
    reinsertarse competitivamente?
    Pensamos que estas preguntas no tienen aún respuestas
    suficientes y por lo mismo, nos dirigen nuevamente sobre la
    temática de la globalización y la eficiencia.
    Necesitamos una mejor comprensión de estos problemas ya
    que en la resolución de los problemas más concretos
    de una organización económica (en el ámbito
    de las finanzas, mercadeo, diseño de la estructura
    organizacional, selección
    de los recursos
    humanos,etc.) siempre chocamos con una muralla donde se
    estrellan, una y otra vez, nuestras iniciativas. Debemos ser
    eficientes, instuimos lo perentorio de esta exigencia más
    no nos es claro todavía porque debemos ser eficiente y que
    formas esta eficiencia debe adoptar.
    Por otra parte, si vemos los esfuerzos emprendidos por las
    empresas mexicanas para enfrentar la competencia global, notamos
    una multiplicidad en la búsqueda de métodos y
    concepciones para alcanzar la eficiencia y también, se
    evidencian resultados enormemente diferenciados.
    En México, en la búsqueda para incrementar la
    eficiencia al interior de las organizaciones, se está
    privilegiando una alternativa:la adopción de sistemas
    adquiridos a través de la compra de tecnología y/o
    la alianza estratégica con una empresa transnacional. El
    problema es para aquellas empresas que no pueden tomar estas
    opciones y que son la mayor parte. ¿Cuál
    sería la alternativa para estas organizaciones? Hacia ese
    sector de la actividad económica se dirige nuestra
    preocupación e interés. No son suficientes (aunque
    sí necesarias) aquellas explicaciones que están
    dirigidas a la descripción de los fenómenos y hacia
    la detección de formas organizacionales y
    tecnológicas con las cuales las empresas transnacionales
    enfrentan la competencia en una economía globalizada.
    Parece necesario además, conocer con mayor profundidad la
    naturaleza de las determinaciones que precipitan estos procesos.
    La respuesta a nuestras interrogantes residiría en una
    encadenación de dos expresiones del proceso de
    acumulación de capital: la lógica de
    acumulación y sus posibles cambios y; las modificaciones
    ocurridas en las formas de valorización del trabajo social
    (la teoría valor-conocimiento).
    En cuanto a los problemas de índole práctica
    relacionados con la articulación temática propuesta
    – que aunque no es un propósito inmediato en el
    ámbito de este trabajo- pensamos que el esclarecimiento de
    estos problemas podría ayudar en la tarea de definir
    conceptualmente, con rasgos más precisos, los problemas
    involucrados, de tal manera de permitir una
    operativización del nuevo "paradigma del quehacer
    eficiente" y de este modo configurar una visión más
    general, interdisciplinaria, para ubicar aquellos conocimientos,
    destrezas y habilidades que en los niveles ejecutivos de las
    organizaciones se requerirían para asegurar las
    condiciones de competitividad y eficiencia exigidas por los
    mercados globales.
    Un esfuerzo de comprensión teórico en torno a la
    problemática de la globalización y la
    modificación del paradigma de eficiencia debería
    por lo menos, iniciar una investigación que contemple los
    siguientes apartados temáticos:
    a) El incremento de la competencia internacional en el mundo de
    las transnacionales globales.
    – Las tendencias generales del incremento de la competencia,
    globalización, especialización y
    regionalización.
    – Tendencias de la inversión externa
    directa:globalización y regionalización.
    – La empresa transnacional global: competencia y
    colaboración estratégica
    b) La globalización y la nueva lógica de
    acumulación
    – El planteamiento del
    problema.
    – globalización y las nuevas formas de valorización
    del trabajo social
    – globalización y patrón de acumulación
    – consideraciones y propuesta
    c) La globalización, la competencia y el quehacer
    eficiente
    – La globalización y el cambio tecnológico
    – La globalización y el nuevo paradigma organizacional
    – La globalización y la empresas conocimiento
    En relación a las categorías analíticas
    principales que a nuestro juicio permitirían avanzar en la
    comprensión teórica de la globalización y el
    cambio de paradigma de eficiencia señalamos lo
    siguiente.
    La categoría de análisis principal para nuestra
    investigación la constituye el patrón de
    acumulación, que aunque originada como concepto
    teórico en el análisis marxista, su uso sin embargo
    no es exclusivo de esta doctrina económica. Por el
    contrario ha tenido un amplia difusión en otras doctrinas
    , especialmente la corriente estructuralista. A través de
    patrón de acumulación (en esta
    investigación) designaremos a una específica
    modalidad -históricamente determinada- de la
    acumulación capitalista. Aquí cabe destacar dos
    advertencias. Primero, no se refiere al fenómeno de la
    acumulación capitalista en general, sino más bien,
    se trata de destacar las formas que esta acumulación
    adquiere en un determinado período histórico y;
    segundo, cuando se habla de un modo específico no queremos
    limitarnos a la exposición
    de ciertos rasgos particulares sino que la identificación
    de un modo de acumulación implica una
    caracterización que permita la integración de una
    serie de atributos en un conjunto que posea una relativa
    coherencia interna.
    Para lo anterior, se hace preciso distinguir al capital como una
    singular manifestación de una relación de valor
    (destacando la dimensión social de esta relación)
    ubicándola en su proceso de incesante expansión y
    metamorfosis, donde es necesario distinguir tres momentos
    centrales: a) la generación del excedente; b) el de su
    realización; c) el de su acumulación.
    En nuestro caso se trata entonces de identificar los rasgos
    específicos que la fuerzas productivas asumen en tal modo
    que procuramos especificar. La especificación de un modo
    particular de acumulación se podría lograr si se
    puede determinar con certeza: el nivel y tipo del patrimonio
    productivo; la tecnología y los niveles de actividad; el
    nivel y composición del producto; las modalidades de la
    reproducción; el grado y tipo de cooperación.
    (Valenzuela, J. 1990).
    Otra categoría analítica principal en nuestra
    investigación es la heterogeneidad productiva. Es preciso
    recordar que debemos explicar las causas y factores que
    posibilitan el despliegue de una nueva lógica de
    acumulación que se impone (¿ desplaza o
    se superpone?) sobre aquel modelo de acumulación
    denominado centro-periferia, que aseguraba su reproducción
    en mantener estructuras productivas sustentadas por
    lógicas de acumulación distintas, donde
    coexistían distintos criterios de rentabilidad y
    eficiencia, que posibilitaban extraganancias a las empresas
    líderes de los países centrales y que en
    última instancia determinaban el acceso privilegiado a las
    jerarquías y roles productivos en el sistema capitalista
    mundial y por tanto a la distribución del excedente.
    La heterogeneidad puede abordarse desde dos ángulos
    (Valenzuela, J) primero como coexistencia articulada de formar
    precapitalista y capitalistas de producción y; segundo
    como coexistencia articulada de diversas submodalidades de
    acumulación capitalista. Para efectos de la
    investigación esto es de suma importancia pues la
    emergencia y consolidación de un nuevo tipo de
    articulación de dicha heterogeneidad estructural, o en el
    otro extremo la exclusión de dicha heterogeneidad
    intercambiada por una cierta homogeneidad en los procesos y
    estructuras productivas impuesta por un nuevo patrón de
    acumulación capitalista desplegado en los procesos de la
    globalización económica y que se manifiesta en un
    nuevo paradigma de eficiencia.
    La instauración de un nuevo paradigma
    tecnoeconómico es otra categoría analítica
    principal. En este caso se trata de analizar la "revolución"
    científico-tecnológica en relación a las
    nuevas formas y estructuras organizacionales, así como con
    los nuevos modelos de gestión que están imponiendo
    las empresas transnacionales que se desenvuelven en los mercados
    globales. Pareciera que nos encontramos frente a una
    modificación radical de la frontera de la práctica
    óptima y con ello, presenciamos radicales transformaciones
    en los modelos de gestión y estructuras organizacionales,
    modificando, al mismo tiempo, las reglas del "sentido
    común" usadas normalmente para el logro de la eficiencia
    máxima. Debemos averiguar con exactitud si nos encontramos
    en una etapa de transición , en la cual se estaría
    imponiendo un cambio de paradigma, esto es, un período
    donde se superponen paradigmas tecnoeconómicos uno en su
    fase de madurez (el predominante) y otro en su fase de
    gestación y desarrollo(el emergente). Si lo anterior es
    correcto, nos encontraríamos en una etapa de
    redefinición de las condiciones de la competitividad pues,
    por una parte, el desarrollo científico-tecnológico
    proporciona los medios para lograr una mayor productividad y
    por otra parte, otorgando un nuevo conjunto de criterios de
    eficiencia que configurarían, a su vez, un nuevo modelo de
    organización y de gestión, lo que implica una
    radical modificación de los conocimientos, habilidades y
    capacidades hasta ahora designadas para los niveles
    gerenciales.

    8. Bibliografía

    -Aglietta, M., "The Theory of Capitalist Regulation" New
    Left Review, 1979 and Lipietz, A., Mirages and Miracles: the
    Crisis of Global Fordism, Verso, London, 1987.
    -Agosin, M. and Diana Tussie, "Globalization, Regionalization and
    New Dilemmas in Trade Policy for Development", March, 1992,mimeo,
    p.11.
    -Benetti, Carlo, "La Acumulación en los Países
    Capitalistas Subdesarrollados", FCE/Economía
    Contemporanea, México, 1987.
    -Calderon, A. "Inversion
    extranjera directa en America Latina y el Caribe, 1970-90,
    Volumen I.
    Panorama Regional" CEPAL, DSC/1, octubre de 1992, cuadro 19, p.
    73.
    -CEPAL, "Reestructuracion de la industria automotriz mundial y
    perspectivas para America Latina", Estudios e Informes de la
    CEPAL, 67, LC/G. 1484-P, Santiago, diciembre de 1987,pp.27-8 y
    207-212.
    -Consult CEPAL/ONUDI, "Reestructuración de la industria
    automotriz mundial y perspectivas para America latina", Estudios
    e informes de la CEPAL, No. 67, LC/G. 1484-P, diciembre de
    1987.
    -Dobb, Maurice, "Teorías
    del Valor y de la Distribución desde Adam Smith"
    Ideologia y
    Teoría Económica. Siglo XXI, 1982.
    -Fajnzylber, Fernando, "International Competition: agreed goal,
    hard task", CEPAL Review, No.36, december, 1988, pp.11-2.
    -Fajnzylber, Fernando, "International Insertion and Institutional
    Renewal", CEPAL Review, No. 44, august, 1991.
    -ibid "Industrialización e internalización en la
    America Latina" El trimestre económico No.34, FCE,
    México, 1981.
    -Hoffman, K. and R. Kaplinsky, Driving Force: the global
    restruructing of thechnology, labor and investment in the
    automobile and components industries, Westview Press, Boulder,
    Co., 1988, pp. 48 and 61-2; OECD, New Forms…, op.
    cit.,pp.137-9; UNCTC, "New Approaches to Best-Practice
    Manufacturing: the role of trasnational corporations and
    implications for developing countries", UNCTC Current Studies,
    No.12, seriesA, ST/CTC/SER.A/12, New York, october, 1990, pp.5-6;
    and OECD, "Structural Adjustament in the Automobile Industry",
    op. cit.,pp.20-2
    -Kaplinsky, Raphael, "Industrial Restructuring in the Global
    Economy", IDS Bulletin, (20,4), 1989. -La Grassa, Gianfranco,
    "Valore e Formazione sociale" Editori Riuniti, Nuova Biblioteca di
    Cultura,
    Italy, 1975.
    -Mandeng, Ousmene Jacques, "International Competitiveness,
    Specialization and Market Growth", CEPAL Review, No. 46,
    december, 1991.
    -Mortimore, Michael, "A New International Industrial Order:
    increased international competition in a TNC- centric world",
    CEPAL Review, No.48, august, 1992.
    -Ostry, Sylvia, Governments & Corporations in a Shrinking
    World: Trade and Innovation Policies in the Unites States, Europe
    and Japan, Council on Foreing Relations Press, New York,
    1990.
    -Ohmae, K., Triad Power: the coming shape of global competition,
    Free Press, New York, 1985.
    -Ozawa, Terutomo, "Japan in a New Phase of Multinationalism and
    industrial Upgrading: Functional Integration of Trade, Growth and
    FDI" Journal of World Trade, (25-1), february, 1991.
    -Porter, Michael, "The Competitive Advantage of Nations", Harvard
    Business Review, (90,2), march-april, 1990.
    -ibid "Estrategia Competitiva" CECSA, México, 1994.
    -UNCTC, "Tripling of Global Investment Driven by Triad
    Competition", Trasnationals, (3,1), march, 1991, p.2.
    -United Nations Center on Trasnational Corporations (UNCTC),
    World Investment Report 1991, The Triad in Foreing Direct
    Investment, ST/CTC/118, New York, july,1991, pp.12 and 19.
    -Valenzuela, Jose "¿Que es un patron de
    acumulación?" UNAM, 1990. -ibid "La firma capitalista:
    Patrones de expansión, modos de centralización y
    Grupos supra- corporados" en "Empresa, Crisis y desarrollo" UAM,
    1991.

     

    Partes: 1, 2

    Página siguiente 

    Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

    Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

    Categorias
    Newsletter