Historia de la Psicología
La psicología, que en un
comienzo es psicología humana,
empieza con observacionesque, por entonces, son secundarias con
respecto a las tareas superiores del intelecto. Es posible
encontrar en la filosofía a la psicología como
epistemología: en sus esfuerzos por
comprender el universo,
tarde o temprano los filósofos se encuentran detenidos por un
pensamiento:
¿ cómo podemos conocer?. Cuestión que da
origen a un exámen de las formas del conocimiento
humano.
También en la ética y en
la teoría
social y política, surge la
problemática psicológica: las cuestiones que
plantea la conducta del
hombre, en
relación con sus semejantes y con el Estado. En
lo que toca a la ciencia,
cabe decir que la psicología
surgió sobre todo de la filosofía, en especial de
la filosofía de los órganos sensoriales que
parecieron ser el vínculo de conexión entre el
mundo externo y el mundo de la experiencia íntima y
personal.
Si bien es cierto que la psicología surge ya
como disciplina
independiente, llega arrastrando tras de sí nubes de
filosofía, ética y
sentido común.
El fundador de la psicología científica es
el fisiólogo y filósofo Wilherm Wundt, quien
también, creó el primer laboratorio
experimental en el año 1859.
Para poder postular
a la psicología como científica, Wundt rechaza los
conceptos como alma y espíritu y propone como objeto de
estudio la conciencia.
¿Qué es la
Psicología?
Es una ciencia que
estudia la conducta y las
motivaciones de la conducta. El
porqué las personas piensan, siente o actúan de una
manera u otra.
Podemos decir que no hay psicología sin
filosofía. Pero la psicología no es
filosofía. La psicología es un campo particular que
no se esfuma dentro de la filosofía, aún con las
estrechas relaciones que guarda con ella.
La psicología aborda problemas
concretos con métodos
científicos y sus esquemas conceptuales, si bien deben ser
generalizados, no por ello deben diluir lo concreto en un
abstracto inexistente.
El Psicólogo
Ser psicólogo es ejercer el oficio de la
psicología. No se es psicólogo con la información teórica o la
versación bibliográfica, sino con la
aplicación del conocimiento a
una tarea. Con esto señalamos la necesidad de integrar no
solamente teoría
y práctica, sino que ésta integración, es la base de la tarea del
psicólogo, no puede realizarse sino se investiga siempre
lo que se hace y cómo selo hace, mientras se lo
está haciendo.
El psicólogo debe tender a una insensible
continuidad entre su quehacer como oficio y su experiencia como
humano, por el mero hecho de vivir. Esto, que es tan
difícil de conseguir, evita el disociar y separar la
psicología de la vida concreta de los seres humanos, que
es el objeto de estudio.
El psicólogo enfrenta problemas muy
peculiares en su tarea frente al objeto de estudio, el ser
humano, a quien tenemos que estudiar es muy semejante a nosotros,
y estudiando al otro nos estudiamos e investigamos, en cierta
medida, nosotros mismos. Este hecho hace más intensas y
agudas las ansiedades que crea todo campo de trabajo y toda
investigación. Por otra parte, el
instrumento con que trabaja el psicólogo es su propia
personalidad.
El contacto directo, personal, con el
objeto de estudio es condición impostergable de la tarea
psicológica.
Las ansiedades en el campo de trabajo del
psicólogo son mucho más intensas que en cualquier
otro campo específico.
El psicólogo debe trabajar con un cierto grado de
disociación: en parte identificado proyectivamente con el
objeto de estudio y en parte fuera, observando lo que ocurre.
Esta disociación debe a su vez ser dinámica y tiene que establecerse y ser
mantenida con una distancia óptima.
El trabajo en equipo
o el trabajo
grupal es una exigencia básica para el psicólogo,
porque resulta más fácil cualquier
distorsión de su tarea cuanto más trabaje en forma
individual y aislada.
Se sabe que el respeto, la
simpatía y la admiración de la comunidad
dependen no solo de lo que el psicólogo dice o hace, sino
de lo que la comunidad pone en
él como deseo y como esperanza. Cuando la comunidad habla
del médico, esa palabra lleva implícita la
prevención de las enfermedades y su
curación, cuando habla del psicólogo está
hablando de ser comprometida (que por otra parte es el primer
paso para cualquier curación). Aun cuando la comunidad se
refiere al investigador en psicología o al experimentado,
lo encierra en un aura de contornos mágicos,
otorgándole la dimensión de: el-que-comprende. Por
esto entre nosotros el psicólogo es un líder
descubierto, sostenido y exigido por la comunidad; y
ésa es su máxima excelencia.
La profesión del
psicólogo
En verdad no existe actividad humana en la que no
intervenga la
motivación, de modo que el psicólogo
está capacitado para participar en toda planificación que involucre la
acción de personas, individuales o en grupo a fin de
lograr metas deseadas. Pueden orientar en el mejor encauzamiento
de todos los problemas
personales públicos que se originen en causas
psicológicas.
Los campos a que se dedican actualmente son ya
relativamente numerosos, si bien la mayor proporción de
profesionales se consagran al psicodiagnóstico, la
psicoterapia y la psicología estudiantil, también
es importante el número de psicólogos laborales,
experimentales, orientadores vocacionales, especializados en
investigaciones de mercado o de
opinión pública, psicoestadísticos,
etólogos(cuyas investigaciones
sobre la psicología animal han ampliado las perspectivas
de la psicología comparativa), especialistas en ingeniería humana, psicólogos
sociales especializados en la dinámica de pequeños grupos,
etc.
A continuación algunos de los campos donde puede
desarrollarse la psicología.
La Psicología Forense
Se plantea como uno de sus problemas
capitales el de la responsabilidad en la comisión de delitos, problema
ligado con el de la
motivación, cuyas características varían según
condiciones de edad, de estado mental
o emocional. Varias de éstas circunstancias determinan el
grado de veracidad de los testimonios, permitiéndole
calificar los delitos
según sean intencionales o no.
Ingeniería humana
La industria y en
general el avance tecnológico plantean problemas
nuevos en los que deben colaborar tanto los ingenieros como los
psicólogos. Las máquinas, por perfectas que sean,
resultan inutilizables si no se contemplan en su diseño
las características fisiopsicológicas de
los que han de manipularlas, y de esto se encarga la ingeniería humana.
Psicología laboral
La labor del psicólogo, es hacer una
selección profesional, evaluando el mejor ajuste del
hombre al
trabajo, y el mejor ajuste del trabajo al hombre.
Evalúa también la interrelación de
los pequeños grupos que
realizan alguna tarea en común en fábricas o
empresas
comerciales, la relación del obrero y la dirección, el poder,
etc.
Psicología en la vida cotidiana
La vida cotidiana ofrece posiblemente el campo
más amplio y variado donde aplica todos los recursos de la
psicohigiene. Por ejemplo: en los momentos del desarrollo
normal que suponen cambios muy marcados, como la adolescencia,
el climatérico o la senectud, con sus respectivos
problemas de modificaciones biológicas y de
reubicación social; durante el embarazo; en
los casos de intervenciones quirúrgicas o de tratamientos
médicos especialmente intensos, en los momentos de duelo,
de cambios migratorios, de pérdidas empleo o de
cargos profesionales, en situaciones de divorcio, de
adopción
de niños, en el ingreso al servicio
militar…
El esclarecimiento de las emociones y
conflictos
suscitados por éstas circunstancias críticas ayuda
a salir de la confusión y desorganización,
disminuyendo la ansiedad y permitiendo el mejor empleo de
todos los recursos
psicológicos con que la persona cuenta.
Ello implica una importante labor psicoprifiláctica que
puede evitar futuros daño psicológicos.
Psicología en la comunidad
En cuestiones que concierne a la vida colectiva,
especialmente en una época de aceleración
histórica como la que estamos viviendo, con sus
rápidos cambios socioculturales y tecnológicos a
cuyos traumatizantes efectos es difícil de escapar. El
psicólogo puede actuar de asesor de los poderes
gubernamentales e diversos aspectos de la administración
pública, a fin de eliminar o al menos paliar los
efectos nocivos para la salud psíquica de la
comunidad. También puede participar como consultor en la
planificación urbana, en la planificación sanitaria, en la
legislación sobre propaganda y
publicidad en
general, en los programas
urbanísticos, en los momentos de reorganización
después de desastres públicos.
Los psicólogos deben establecer contacto directo
con todas aquellas personas que por índole de sus funciones ejercen
influencia sobre grupos de
población mas o menos numerosos: (personas
claves) maestros, personal de
policía, enfermeras, jueces, sacerdotes, médicos, a
través de una acción orientadora.
En lo que se refiere a los medios de
comunicación de masas, consideramos que se consagren
detenidos estudios a sus posibles efectos psicopatógenos y
se regule posteriormente su funcionamiento, para que éstos
recursos, que son
factores primordiales en la creación de la mentalidad
colectiva se pongan efectivamente al servicio de la
salud
psíquica del hombre en
lugar de constituir factores de deformación
(teve-adicción).
Lamentablemente, hoy, los frutos del pensamiento
científico y técnico del hombre no son
utilizados solamente al servicio de la
felicidad social e individual, además el hombre
está perturbado por la xenofobia, el racismo, los
prejuicios de clase y de religión, etc.
Sería insensato exigir a la psicología que
canalizara por si sola transformaciones que afectan a
circunstancias sociales, económicas y políticas,
pero sí le corresponden, seguir investigando por un lado y
por otro, actuar preventiva y terapéuticamente, para
despeja la vía que conduce a tale transformaciones de los
obstáculos que significan las frustraciones mal
elaboradas.
Psicología y la guerra
Sea dicho y repetido con frecuencia que la guerra irrumpe
ante todo en la mente del hombre, que es allí donde
debemos construir la paz. El psicólogo debe actuar
así mismo dentro de la comunidad como esclarecedor y
orientador si es que habrá de influir para que los modos
de vida de los pueblos se encauce en un sentido más acorde
con sus propios deseos y propensiones racionales y humanitarias
de lo que sido común hasta ahora.
El psicólogo debe influir en las expectativas y
emociones de
la gente para modificar sus actitudes y
procederes, es necesario que se le dé la ocasión de
trabajar como profesionales en favor de la paz, evitando que
ningún conflicto
entre naciones se transforme irracionalmente en un conflicto
bélico.
De lo expuesto se extrae la siguiente
conclusión:
En general, cuando uno piensa en su futuro como
psicólogo la primer imagen que se nos
presenta es el consultorio, los sillones o el diván, el
paciente; siendo esta una imagen del
pasado.
La psicología posee mucha riqueza, que nos
permite un desarrollo
profesional muy amplio, pudiendo estudiar y ayudar al ser humano
en todo rol, situación o momento en que éste se
encuentre.
BIBLIOGRAFÍA
a.. Psicología del siglo XX, Edna Heidbreder,
Editorial Paidós, 1971
b.. Psicología de la conducta,
José Bleger, Editorial Paidós, Diciembre de
1991.
c.. Escuela para
padres, tomo IV , Eva Giberti, Editorial Ecese, Marzo de
1975.
d.. El rol del psicólogo, A.A Kogan.
EUGENIA VEJRUP –UNIVERSIDAD DEL
SALVADOR-
Autor:
Eugenia Vejrup
Universidad del
Salvador
Enviado por:
Elina Amado
elina[arroba]cyh.com.ar